Hace ya un mes y medio el empresario Bruce había adoptado a otro huérfano, Jason era su nombre, con un pasado turbio y violento tenia una personalidad mas agresiva e impulsiva que Dick y mucho mas pervertida sobretodo con el mencionado. Para Jason el primer Robin era la encarnación de la palabra sensualidad, unas piernas fuertes y sensuales y un rostro delicado, era la combinación digna de deleitar.

Pero en definitiva lo que mas le gustaba era la ingenuidad del mayor, por eso le gustaba jugarle una que otra broma y lanzarle uno que otro piropo mal disimulado.

_Dick tu crees que los sueños se hagan realidad?_ Ambos estaban en lo alto del tejado de un edificio debido a una misión que involucraba al acertijo. El viento les soplaba en el rostro y Jason juro que no podía existir una imagen mas celestial que el rostro de Dick con sus cabellos revueltos.

_Claro que si Jay todo lo que tu desees se puede lograr_ Richard sonrió con paternidad frotando amistosamente la espalda del mas joven. 

_Me alegra oír que pienses así porque soñe contigo_

_Que?_ 

_Soñe que estábamos los dos juntos, en tu cama, desnudos, tu gritabas y gemías mi nombre_ Explico alegre acercando su cuerpo al de Dick quien lo callo poniendo ambas manos en su boca negando rojo asta las orejas.

_Callate! ese tipo de sueños JAMAS pasaran!_