Hace aproximadamente un mes, el atractivo Wally había comenzado una relación amorosa con Dick, el pequeño compañero de Batman de no mas de unos catorce años pero aseguraba tener mas experiencia que el mismo, la verdad es que no le creía pero tampoco le importaba mucho, el se encargaría de enseñarle todo lo que pudiera. 

Entendía porque es que Dick había mentido en ese pequeño detalle, siendo Robin no quería verse en desventaja o como principiante de ninguna manera posible, incluido el campo sexual, secuelas de vivir con Batman supuso. 

Y ahora lo tenia ahí, en la sala del Monte Justicia derribado sobre el sofá devorando esa pequeña y definitivamente indefensa boca sabor a cereza, enredaba su lengua con la del niño que con mucho esfuerzo intentaba seguir el ritmo, el delicado cuerpo temblaba ante cada mínimo roce. Robin tenia de experimentado lo que el tenia de moreno... nada, menos que nada.

A los pocos minutos se separaron dejando un delicado hilo de silaba que unía sus bocas dándole un aire muy erótico a la situación y si a eso le agregamos el angelical rostro de Richard totalmente sonrojado, sin su antifaz por lo que se podía apreciar mucho mejor aquellos esplendidos ojitos inocentes y azules totalmente cristalizados solo podía tener como resultado una notable erección en los pantalones del pecoso. 

A esas alturas sabia que su querido Richard era virgen, aunque este lo negara y no deseaba darle una mala primera experiencia a su amigo y definitivamente hacerlo en medio de un gran sofa monitoriado por las cámaras de Batman no era un buena idea. 

_Dick, quieres que subamos a mi habitación?_ El menor lo miro dudoso. Habia echo algo malo? Porque Wally quería subir?

_Ah... bueno si_ El mayor sonrió enternecido, beso la frente del pajarito confundiendolo aun mas. 

_Vamos_ Vio a su Robin como ido y creyó que estaba nervioso por lo que seguía. _Todo estará bien te lo prometo y te cuidare mucho_ Dick en cambio no entendía porque el ojiverde le decía aquello, estaban besándose no peleando contra el Joker.  _Por cierto trajiste protección?_  El menor lo vio horrorizado al escuchar semejante cosa .

_Protección? Porque? Que hay en tu habitación? No me digas que tienes un muestro aya arriba_ 

El pelirrojo al escuchar a su novio estallo en carcajadas no por la inocencia de su Robin, sino porque ni siquiera en pleno cachondeo podía dejar su lado heroico.