Damian se quedó un rato más con Tim, pero pronto comenzaba a anochecer y sabía que pronto había que volver a casa

-Entonces, la leyenda de Atlantis es verdad? De verdad hay un ciudad entera en las profundidades?- preguntó Damian fascinado

Tim sonrió de manera casi imperceptible, y asintió- Si, Atlantis es real, pero no está cerca de aquí, hay más ciudades marinas- le explicó Tim

Damian tenía más preguntas, y quería saber la respuesta a ellas, pero al ver que el sol comenzaba a ocultarse y la promesa que le hizo a su padre de volver antes del anochecer, supo que tendrían que esperar, pero antes de poder empezar a remar, Tim lo llamó

-Damian...- Tim se acercó un poco más a él al ver que tenía su atención- se que ahora ya no sirve de mucho decir esto, pero podrías hacer lo mejor posible para mantener a las sirenas en general en secreto? Se que de tus amigos será imposible, pero al menos crees poder convencerlos de no decir nada más? - le pidió mirándolo fijamente con sus brillantes ojos

Damian asintió levemente- Haré lo que pueda, pero exactamente por qué?- preguntó con curiosidad

Tim se quedó en silencio un momento- Cuando las sirenas atacan, nadie nunca sobrevive, no se como fue que tus amigos lo lograron, pero la razón por la cual usualmente no dejamos a nadie vivir... Es porque no queremos llamar la atención, no queremos que los humanos sepan de nosotros- explicó y luego miro hacia la orilla- no quiero ofenderte, pero los humanos son seres terribles, destruyen el océano y a sus criaturas y no les importa, que crees que pase si se dan cuenta de nuestra existencia?

Damian lo consideró por un momento, si la gente se daba cuenta de que las sirenas de verdad existían, estarían en problemas, las palabras de Tim en cuanto los humanos, estaban justificadas, de verdad Damian podía creer que si la gente se enteraba de si existencia, ¿cuidaría y protegería a la especie? Claro que no! Y menos con lo sucedido a sus amigos, probablemente serían cazadas y asesinadas, no dudaba que pusieran altos precios a sus bellas escamas, o cosas peores, podían capturarlas, experimentar con ellos, y muchas más cosas terribles que sabía que los humanos eran capaces de, no podía permitir que algo así le pasará a Tim

-Prometo que haré todo lo que este en mi poder para protegerte a ti y a tu especie- aseguró Damian y nuevamente acercó su mano a Tim

Tim sonrió levemente y acero su mano a la de Damian, apenas juntando la punta de sus dedos antes de alejarse nuevamente

-Te ayudaré a volver a la orilla- fue lo último que le dijo antes de sumergirse

Damian llegó rápidamente a estar cerca de la orilla, donde tuvo que remar por su cuenta, pues Tim no podía arriesgarse a acercarse más y ser visto, solo vió el brillo de sus aletas en el mar desparecer en la lejanía

Damian ató el bote y se quedó viendo un momento al mar, pero pronto se apresuró a regresar, pues no quería arriesgarse a que su padre terminara llamando a alguno de sus amigos y se diera cuenta de que en realidad no estaba con ninguno de ellos.

Por suerte, la noche paso sin ningún problema, y Damian no recibió más preguntas de su padre que un simple, ¿como te fué?, así que sin más problema, se fue a su habitación a descansar, pero simplemente no pudo dormir, todo lo sucedido aún seguía repitiendose en su mente, y seguía sin poder creerlo, todo se había sentido tan extraño, como un sueño, pero había sido real, completamente real...

Damian sabía que no podría dormir, así que bajo a la cocina, donde se dispuso a tomar un vaso de agua, así que se apoyo contra la barra y comenzó a beber, hasta que lo vió, pasando "sigilosamente" Frente a él hasta que noto su presencia... Se miraron al uno al otro rodeados de un incómodo silencio

-. . . Jason?. . . Qué estas haciendo?- preguntó Damian arqueando una ceja mientras miraba a su hermano mayor frente a él cargando una hielera

-Uhm... Sacó la basura?- respondió, aunque ni siquiera el parecía estar seguro de eso

Damian lo miro sin creerle- Esa hielera que compramos hace 3 días es basura?- preguntó Damian acercándose más a el

Jason se tenso, y dió un par de pasos hacia atrás- Bueno, es muy fea! Ok? Por eso voy a tirarla!- se excusó alejando la hielera del menor

-Tu elegiste la hielera- le recordó Damian

-Y por qué me dejaron? Tengo un gusto horrible!- exclamó Jason mientras se iba acercando a la puerta

Damian arrugó la nariz al percibir el olor de pescado fresco desde el interior de la hielera.
En un rápido movimiento, Damian retiró la tapa de la hielera, notando que esta estaba llena de pescado y otros animales que habían sido pescados esa tarde por Jason y su padre

-Eso es bastante pescado, y todo está en buen estado, a donde lo estas llevando en verdad?- preguntó Damian mirándolo seriamente

Jason finalmente suspiro rendido- Bien, perdí una apuesta con Roy ok?- confesó mientras volvía a cerrar la hielera

-Ja! Cuál era la apuesta? - preguntó Damian cruzándose de brazos

-No quiero hablar de eso- respondió evitando mirarlo avergonzado

-Bien, ve a pagar, pero no vayas a afectar a padre con tus tonterías- le advirtió Damian

-Si, ya se, y con lo bien que ha estado yendo la pesca últimamente, esto no será nada- comentó y finalmente salió de la casa

Damian espero un momento, se puso zapatos, y salió de la casa, no es que no le creyera a Jason, es muy posible que fuera cierto, no era la primera vez que Jason hacía una tonta apuesta con Roy y salía perdiendo.

Damian salió de la casa, justo para ver a Jason recoger una mochila que estaba en el suelo, señalando que había sido tríada desde su ventana en anticipación.

Damian lo siguió a una buena distancia en silencio, Jason caminaba a pasó rápido pero a la vez relajado

-Soy malditamente buen actor...- murmuro Jason para si mismo sonriendo

Ahora Damian sabía que había sido buena idea seguir a Jason, últimamente era muy extraño su comportamiento, y esto solo se agregaba a la lista.

Damian comenzaba a cansarse y desesperarse, estaba seguro que llevaban al menos media hora caminando y ya empezaban a dejar al pueblo atrás y Jason no parecía tener intención de detenerse pronto.

Finalmente, después de una larga caminata, Jason se detuvo, el pueblo apenas visible en la lejanía, e ingreso a una cueva. Damian estuvo algo inseguro, pero finalmente se ánimo a entrar a la cueva, la cual estaba junto al mar, y al entrar pronto vió que había una pequeña piscina en una orilla de la cueva, la cual juraría que conectaba con el mar.

Damian se escondió detrás de unas piedras, y vió a Jason arrodillarse frente a la piscina, abrir la hielera y sacar un pescado y acercarlo al agua.
Hubo un momento de silencio, en el que solo se pudo escuchar el gotar del agua en la cueva, y pronto Jason comenzó a tararear una canción

Damian estuvo por pensar que su hermano se había vuelto loco, hasta que el agua se movió, y de el mar salió...

Jason sonrió ampliamente- Hey Dick...

----Hasta aquí el capítulo de hoy! Como siempre, yo actualizando en las noches xD una disculpa, pero espero les haya gustado mucho y nos leemos la próxima!----