Mientras contemplaba el huevo de dragón, pensaba en las palabras que me había dicho Flynn resonaban en mí mente, resaltando muchas inseguridades que no estaban ahí anteriormente, pero en seguida las descarte. Suspiro para calmar mi ansiedad. A menudo, las personas quieren meterse en tu vida con el objetivo de intimidarte y causar problemas donde no los hay, aunque es difícil ignorar aquellas posibilidades. Desde que conozco a Jack, ha estado con Elsa, la reina de su pueblo. Ella es admirable, muy madura para su edad, incluso es mucho más inteligente que yo. Su personalidad fría, reservada y serena, su poder crea una base interesante. Incluso se perfectamente que es el equilibrio que el necesitaba en su vida. Ambos comparten aquel sentimiento de la soledad. Compagina muy bien con la personalidad de Jack, mejor que bien. Sin duda alguna, el reino de Arendelle sería muy poderoso, imponente casi impenetrable. Si esa relación se consumara por completo harían...maravillas. En cambio, conmigo no hay nada que la haga especial, somos muy diferentes. Jack es: una persona traviesa, impulsiva y rebelde. Él ha luchado por encontrar su lugar en el mundo, mientras yo suelo ser más reservada, que suelo caer muy rápido en las cosas negativas, pero aun así nunca he dejado de soñar a lo grande como conocer el mundo. Antes de que me enterara de que soy descendiente del sol <<aunque una parte de mí ya la sabia>> no teníamos nada en común. Yo soy fuego; él, hielo. Soy la primavera misma; él es el invierno. Soy el día; él, la noche.

Es tan lamentable mi situación y más porque lo amo. Llevo mi mano izquierda a mi pecho. El dolor que estoy sintiendo en mi corazón es muy fuerte que me duele tanto no sentirme digna de él. Tal vez estoy exagerando e incluso menospreciando. Él me ha demostrado que soy yo con quien quiere estar y sin saber nuestra historia. Me ha elegido a mí, siendo como soy y por lo que soy. Incluso yo antes de saber nuestro origen, lo había elegido a él, había elegido amarlo con todo mi corazón. Es algo que no espero que la mayoría lo entienda, pero lo que siento por el es una mezcla de amor y admiración, una admiración que se vuelve profunda y compleja. Es increíble que me haya hecho dudar incluso de mis capacidades. De repente, sentí una mano en mi hombro. Al girar, vi su hermoso rostro, radiante y con una mirada calidad que desafiaba incluso el espíritu del invierno. Jack sonrió y se sentó a mi lado, mientras Mérida e Hipo se acomodaban frente a nosotros. ¿Acaso esta era una intervención? ¿Me habían visto con Flynn? ¿Acaso piensan que soy igual a Elsa?

—¿Qué tal Zellie? — preguntó Hipo, sorprendiéndome. Me acomodé un mechón de cabello detrás de mi oreja y tomé él huevo con mis manos, tratando de ignorar mis pensamientos previos.

—Estoy...tratando de averiguar... —empecé a explicar, pero Jack me interrumpió.

—Hipo ya encontró la forma. — Volteé hacia él, sorprendida. —Tenemos que sumergirlos en agua para poder escuchar aquel mensaje, porque si lo abres... —miro a Hipo, quien giró la perilla del huevo, provocando un sonido aterrador que nos hizo taparnos los oídos. Rápidamente cerré el huevo y lo miré con seriedad, mientras Mérida le da un zape a Hipo.

—Gracias por la demostración tan innecesaria — expresa Jack, molesto. Mérida saca de su mochila dos trajes de baño

—Iremos al lago para poder escucharlo y ver que es lo que nos dirán las sirenas.

Tomé un traje y nos levantamos. Jack tomó mi huevo de oro e Hipo él de Jack. Salimos del comedor, caminando juntos por los pasillos. En el camino, Mérida e Hipo, venían discutían sobre el golpe que le había dado. Los observaba con mucha atención, me sentía más tranquila, sabiendo que Mérida ha mejorado mucho su amor propio, y eso ha dado pauta a que su amistad con Hipo mejore. Eso alivia un peso en mí corazón, pero eso me hace pensar que no he leído el libro plateado para saber más de mí. Realmente me he mantenido ocupada para poder olvidarme de ese tema o quisa realmente lo he estado postergando. Agacho mi mirada para ver mi mano entrelazada con la de Jack. Disfrutaba tanto su compañía que no quiero saber nada de nadie. Me recargo de su brazo y el me mira sorprendido.

—¿Que pasa mi solecito? — lo miro de una forma tierna e inocente. Quiero fluir...quiero que esta ves funcione.

—Jack Frost, eres la persona más importante para mí. Eres el sol en mi vida, y yo giro alrededor a tu alrededor. Mi mundo no puede vivir sin ti; tú le das calma, vida y diversión. Cada momento contigo es asombroso. Te protegeré siempre, Jack —.

El me mira con mucho asombro, sus mejillas sonrojadas y brillo especial iluminó sus ojos. muy Después de unos segundos, acarició mi mejilla con delicadeza.

—Rapunzel Corona, eres el amor de mi vida. — Mi corazón latía con fuerza, tanto que me dio pena de que él lo llegara a sentir al darme aquel abrazo tan acogedor. —Tus palabras hacen que siempre de lo mejor de mí porque tengo una razón más para ser el mejor guardián que ha existido en el mundo.

Me da un beso en los labios, lleno de amor, pasión y alegría. Sonreí ampliamente y seguimos caminando para alcanzar a Hipo y a Mérida. Conforme avanzamos empezaba a escuchar una ligera melodía. Volteaba a los lados para ver si veía a alguien entre la niebla.

<<Cuidado>> Escuche de repente <<quien no conoce su historia...tiende a repetirla>>.

Me detuve en seco, mi corazón volvió acelerarse por el temor que había ocasionado aquella voz femenina. Jack toma mi mano y sonrió ligeramente, no pregunta y espero no lo haga porque no podría explicarle lo que ha pasado. Las piernas me temblaban, empecé a sudar y pude notarlo por mis manos. Estaba demasiado nerviosa, la melodía seguía el mismo tono hasta que llegamos al lago.

Ocupamos un hechizo para cambiarnos —Bididi Badidi Bu — exprese.

Ya teníamos los trajes de baño. Mérida entrara en lugar de Jack, ya que este congelaría el lago completo. Tomo la mano de Mérida y empezamos a meternos al agua con los huevos de dragón. El agua estaba demasiado helada, empecé a sentir como mi cuerpo empezaba a entumirse por la baja temperatura que tenía, Empecé a respirar con fuerza. Aquella melodía no cesaba, lo que me ponía aún más nerviosa. Caminamos hasta que ya no tocábamos el suelo, la mire con una sonrisa, para disimular el pánico que sentía. Algo no estaba bien, pero no quería preocupar a nadie. Nos sumergimos un poco, mire a Mérida y ella hace un gesto para poder abrirlos al mismo tiempo. Al hacerlo, escuchamos de forma atenta:

—Nos hemos llevado lo que más valoras, y para encontrarlo tienes una hora. Pasado ese tiempo ¡Negras perspectivas! Porque lo que se queda aquí siempre se pudre...

Nos miramos con seriedad ¿lo más preciado? ¿acaso eso es? ...abrí mis ojos al entender lo que pasaría. Sabía que era mala idea. Empezamos a nadar la superficie. Al salir sentí como me hacian cosquillas en los pies.

—¡Mérida! Deja de hacerme cosquillas no es gracioso— estaba demasiado tensa.

—¿Pero que dices? ¡E tú la que me hace cosquillas!

La mire con seriedad y preocupación. La caza había empezado. Ha sido mala idea meternos al lago; debimos de hacerlo en las bañeras de la escuela. De repente, algo nos ha tomado de los pies y nos ha arrastrado con fuerza. Intente nadar a la superficie, pero no podía, la criatura era demasiado fuerte. Mire hacia el fondo. Ya no había ningún rastro de Mérida había desaparecido. En ese momento, sentí una mano agarrar la mía, volteo rápidamente y es Hipo, con sus fuerzas trata de llevarnos a la criatura y a mí a la superficie. Vi como saca un mini arco y dispara. La criatura se a lastimado, haciendo que me soltara, empezamos a nadar a la superficie, pero otra criatura apareció y se lo ha llevado. No tuve tiempo de tomar su mano, ha sido demasiado rápido, que no he tenido tiempo para pensar en un hechizo. De seguro, Elsa, hubiera ayudado más.

—Princesa de un nuevo día—se escucha una voz angelical, ha sido de las criaturas del lago. Giraba para encontrarla, pero no podía ver nada—portadora del alma del dios Apolo: dios que todo lo ve, dios del sol, de las artes, de la poesía, de la belleza, de la música, de la luz...de la esperanza—. Expresa con mucha tranquilidad. Su voz hacía que mi cuerpo se relajara a un punto donde no podía moverme. No podía distinguir nada, estaba en una crisis de ansiedad; necesitaba salir a respirar aire, pero sentí otro tirón. Las criaturas empezaron a aparecer de las sombras, me estaban rodeando.

—Mañana te mostraremos parte de tu futuro —expresaron, y una de ellas me tomo del cuello enterrándome un poco un cuchillo—absorbiendo la sangre que salía —pero solo requerimos un poco de la sangre de tu amado

Estaba a punto de desmayarme; mi oxigeno era nulo. Tenía que salir de ahí. Si no lo hacía, no podría seguir. <<Piensa Rapunzel, y rápido>>.

—¡Tormenta...solar! —exclame con dificultad, con mi última fuerza haciendo que mi cuerpo emergiera una gran energía. Empecé a brillar con intensidad y de un momento a otro surge una gran explosión. Sentí como me soltaron y mi cuerpo se iba hacia arriba, siendo lanzada al aire.

Pov Jack.

—¡Mierda! ¿por qué no salen? - exclame enojado.

—Me parece que algo las a jalado—mire a Hipo rápidamente. Él empieza a correr para adentrarse al agua. Mierda, me siento tan impotente de no poder entrar. Tenía que confiar en él, en que las salvará a las chicas. Si tan solo supiera un hechizo para poder ayudarlo. Mi cuerpo temblaba, por lo que preferí flotar para ver si los veía salir a los tres por otra parte, pero nada, no había ninguna señal de que los tres estuvieran bien. En estos momentos, como envidio a los mortales. Mi corazón empezó a latir con fuerza, mis ojos buscaban con fuerza, pero no veían nada. Se ha tardado demasiado en encontrarlas. Mi corazón se aceleró mucho. Regresó al suelo y aviento mi cayado a un lado para correr al lago, pero al momento que mis pies tocaron el agua empezó a congelarse. Floté nuevamente para evitar que el lago se congelara en su totalidad. Mierda, debimos hacerlo en las bañeras de la escuela; esto fue muy mala idea. Hay demasiadas criaturas que se ocultan en este lago, todas sumamente peligrosas y si... ¡no! ¡Jackson no pinces en lo peor!

En eso una gran explosión ha emergido del lago. Me cubro el rostro, ya que se había producido una ligera brisa. Vi como el cuerpo de Rapunzel era expulsado del agua, estaba inconsciente. Me lance hacia ella para poder atraparla antes de que sufriera una fuerte caída. Cuando vi que su cuerpo empezaba a descender me impulsé más rápido provocando una fuerte briza. << ¡No la dejes caer!>> grite en mi interior y estire mis brazos. Al tenerla entre mis brazos, acaricie su rostro, intentando tranquilizarme. Un fuerte corriente continuo, provocando que una fuerte barrera. Mi respiración era rápida y no podía alejarme de ella, la abrazaba con tanta fuerza que sentí que la estaba lastimando. La lleve a la orilla. Comencé a hacerle RCP hasta que empezara a respirar. Cuando exhalo escupió toda el agua. La pongo de lado para evitar otra catástrofe.

—¡Rapunzel! ¿Qué pasó? ¿Dónde está Hipo y Mérida? —. La mire con preocupación, mientras ella ha empezado a llorar. La abracé con fuerza, tratando de tranquilizarla. La cargue para llevarla lejos de la orilla.

—Se los han llevado— respondió entre sollozos. No volteaba a verme. Volví a mirar el lago, apretando los dientes. Me siento tan impotente con esta declaración. La tomé en mis brazos y la lleve a su habitación, en el camino ya no sollozaba, pero no menciono nada más.

Al llegar, la deje con cuidad con cuidado en el suelo, y ella seguía sin mirarme.

—Es parte de nuestro reto de mañana—mencionó tristemente—. El mensaje del huevo...fue: "Nos hemos llevado lo que más valoras, y para encontrarlo tienes una hora. Pasado ese tiempo ¡Negras perspectivas! Porque lo que se queda aquí siempre se pudre...- —. Voltea por fin a verme—. Tenemos que encontrarlos.

—¿Cómo...yo no puedo entrar al agua? — ella me mira sorprendida— tu mínimo trataste de ayudarlos, de detener lo que paso...yo no, no pude entrar— ella toma la toalla con fuerza y mira su cama.

—Buscare un hechizo, con el que puedas entrar...no te preocupes—suspire con fuerza— pero por ahora hay que descansar—asiento con delicadeza. Ella se levanta y se acerca con mucho cuidado. Toma mi mejilla con delicadeza, beso su mano —todo estará bien amor...te lo prometo—me abraza con fuerza.

No puedo dejar que Rapunzel siga investigando y solucionando todo lo que pasa. No puedo permitir que alguien más libre las batallas por mí. Se supone que yo tengo que protegerla a ella y a los que quiero, hoy no fui un guardián, solo fui una decepción a mi título.