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Mientras tanto, en otro lado del castillo, aun se encontraban Hate y Love en la misma habitación, el mayor aún intentando sacarle información a su hermana. O bueno, no era su hermana. 

-Vas a seguir sin hablar?- La voz del demonio se sentía resonar en toda la habitación, el eco era mucho, dándole tal vez un ambiente tétrico a lo que sucedía.

-Y-Ya te dije que no diré nada, pierdes tu tiempo- AHH!!-

Hate la estaba torturando para que hablara, pero a pesar de todo eso, ella no había dicho nada, seguía firmemente en lo que se había propuesto.

-Te voy a romper todos los huesos que tienes si es necesario, pero se que en cualquier momento hablarás-

-Intentalo…-

El contrario solo la miro indiferente por unos segundos, antes de apuñalar en la pierna a la chica, oyendo nuevamente otro giro de su parte.

-Te vas a morir así, pero yo conseguiré lo que quiero, linda, es mejor que empieces a hablar. Que intenta hacer Dream-

El lugar se quedó en silencio por un tiempo largo, hasta que el mayor se hartó y empezó a hacer presión en la daga que tenía incrustada en la pierna de la contraria. Volvió a escucharse un grito, mientras que ella solo cerró los ojos y empezó a moverse en la misma cama desesperada en respuesta. -N-No lo s-se-

-Como que no sabes?-

-No s-se lo que ella quiere ha-hacer-

-Mientes- Fue lo único que dijo el contrario, pero ella solo decía la verdad, ella no sabía que iba a hacer ahora Dream, porque nunca le dijo nada. Además de que el plan era encontrarse con esa bruja.

-No miento, y lo sabes… Maldito demonio...-

Al final, solo logró que el contrario sacara su daga de su pierna de manera rápida y obviamente dolorosa. Pero después solo se fue de ese cuarto, dejándola sola, con una herida abierta en su pierna, y otras tantas en el resto de su cuerpo.

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Después de unos minutos vivieron algunas enfermeras para sanarles las heridas. Apenas terminaron se fueron, dejándola sola nuevamente.

Estuvo todo en silencio por mucho tiempo, mientras intentaba conciliar el sueño, pero un sonido la sacó de ese pensamiento. Un siseo muy bajo pudo captar al lado de donde estaba. Y al girar la mirada, noto que el responsable era una serpiente que se estaba subiendo a la cama.

A pesar de ello, no reaccionó como cualquiera lo haría, más bien acercó una de sus manos, la menos lastimada, hasta el animal. Una serpiente color negra, con escamas rojas y sus ojos escarlata se empezaba a deslizar por la piel de la mano, quedando enrollada en ella. Luego, acercó su mano hasta adelante de su pecho, para mirar más de cerca a la serpiente. Con una sonrisa pronunció.

-Si él se da cuenta que tu estas aquí, creo que te matará, no deberías de estar aquí…- Lo había dicho en un susurro, pero sorprendentemente, le había entendido, y solo se bajó de la mano para quedarse encima del pecho de Love. -Tardaste un poco en llegar, Hate…-

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