.Capítulo 2.
¡Muy bien!, ¡encontrar a un nuevo compañero fue una completa perdida de tiempo!.
Nadie es lo completamente bueno para el trabajo, todos creyéndose investigadores porque chuparon cómo esponjas de cocina la información de una serie de detectives que vieron ayer por la tarde. Conclusión, una perdida de tiempo total.
Patton no fue brusco con ninguno de ellos y ellas, de echo, le dolió no poder contratarlos, siempre fue una persona abierta a nuevos amigos y trabajadores pero no demostraron ser dignos del puesto. Lo único que hizo fue disculparse, una sonrisa en el rostro y se marchó luego de darle a su acompañante las razones de porque no podría estar en el equipo.
Aquí estaba ahora, en un bar, rodeado de personas que lo saludaban y le preguntaban que demonios hacía aquí. Patton puede ser bueno, puede ser una estrella caída del cielo, pero si está cansado lo mejor que puede hacer es caer de rodillas en el bar cercano y beber aunque sea dos copas de cerveza.
- no le puse veneno a su bebida, por si le tiene miedo a eso, señor -. El bartender habló
- yo sabría si tiene veneno, no te preocupes por eso
Patton escuchó la conversación entre el bartender y otro hombre con cierto interés, así que miró disimuladamente a los dos personajes. Obvio estaba el bartender, el otro hombre traía puesto una camisa azul claro con las mangas remangadas, chaleco negro encima, pantalones y zapatos negros. Su cabello marrón oscuro estaba bien arreglado pero el sujeto parecía pasar su mano por éste repetidas veces, tal vez un mal hábito o tal vez estaba nervioso, uno nunca sabe.
La razón de la charla fue porque el desconocido no dejaba de mirar su copa de cerveza desde todos los ángulos posibles, acomodando sus anteojos al mismo tiempo. Desde que Patton comenzó a mirarlo parece que el sujeto no bebió ni una gota de su copa, esto llamó la atención de Patton que, siendo una persona muy sociable, no tuvo problemas en caminar hacia él y sentarse a su lado.
- una linda noche para beber, ¿cierto? -. Preguntó Patton, dejando su libreta a un lado y sonriendo de oreja a oreja
- perfecta para no entablar conversación alguna con gente que no me interesa, ¿correcto?
Auch, eso dolió. Patton rió entre dientes, ya viendo a varias personas mirando a su acompañante con odio por hablarle así a “la bolita de cristal”. Es la primera vez que Patton no sabe como seguir una conversación, sintiendo desde el momento que se sentó al lado de esta persona que no era querido o necesario para el momento.
A la mierda. No es el fin del mundo. Virgil también era así.
- ¿por qué miras tanto tu copa de cerveza?, ¿investigas el porqué de que nos ponga ebrios? -. Dijo casi susurrando, su risa adorable llamó la atención de los ojos del desconocido
Ahora que lo veía bien, su corbata azul oscuro con varias rayas celestes queda perfecta con el color de sus ojos, éstos son azules oscuros también. Parece que ambos se quedaron mirando un largo tiempo porque el bartender tosió para llamar la atención de ambos.
- ¿quieres algo de beber, Patton?
- ¡oh, claro!, una cerveza, por favor
Patton de verdad quería saber porque miraba tanto la maldita cerveza, tanto así que él mismo miró su copa esperando encontrar algo interesante.
- miro el reflejo de las personas en la cerveza, esa es la razón -. Rompió el silencio
- ¿por qué haces eso? -. Hubo un momento de confusión que luego se transformó en emoción -, ¿acaso te gusta una chica o un chico que se encuentra en el bar?
- no -. Patton dejó de brillar de emoción -, estoy mirando a mis enemigos
- ¿enemigos?
- enemigos -. Susurró, sus ojos se abrieron, viendo en el reflejo a cinco hombres mirando hacia su dirección. Los conocía perfectamente. Sonrió un poco y miró a Patton de arriba a bajo -. Nada importante, sé lidiar con ellos
¿En que tontería se metió Patton ahora?, él sólo quería hablar con el tipo misterioso, no participar en una especie de pelea fuera de su voluntad. Decidió ignorarlo y fingir que nada de lo que dijo pasó.
- soy Patton Anderson -. Cambió de tema -, ¿cuál es tu nombre?
- mi nombre es Logan Ramsey
¿Ramsey?, Patton escuchó ese apellido en algún lado. Estuvo recalculando unos segundos hasta que de la nada sonrió y largó un grito de su boca, un grito muy adorable que de seguro enamoró a la mayoría de los presentes. Logan dio un pequeño salto en su lugar, tirando un poco de cerveza al suelo gracias al brusco movimiento de sus brazos, de verdad que no esperaba escuchar eso.
- ¡¿eres el hijo de John Ramsey?! -. Preguntó, ocultando su sonrisa detrás de sus manos -, ¡¿el hijo del científico más famoso de la ciudad?!
- oh, am, sí -. Acomodó sus anteojos -. Soy el hijo de John Ramsey
- ¡oh, Dios, es un honor haberte conocido! -. Agarró una de las manos de Logan para sacudirla sin parar, se podían ver estrellas en los ojos de Patton -, me encanta el trabajo de tu padre, los libros que ha sacado contando su experiencia en la ciencia son increíbles
- me alegro te hayan gustado, Patton -. Logan no sabía donde meterse. Es gracias a estas reacciones innecesarias que no quiere decir su nombre
- ¿por qué nunca sales en los periódicos junto a tu padre? -. No le soltó la mano en ningún momento mientras hablaba -, estoy seguro de que ambos hacen un gran trabajo en equipo
- digamos que prefiero admirar nuestro trabajo en equipo desde lejos -. Por fin, en toda la maldita noche, bebió su copa de cerveza -. No soy fan de salir en periódicos y pretender ser alguien importante cuando no lo soy. Mi padre puede quedarse con todo el crédito, no me interesa
Ambos son tan diferentes. Mientras Logan se siente cómodo no siendo el centro de atención, Patton quiere que su equipo y él sean reconocidos aunque sea en una sola hoja de un periódico, la policía nunca hace nada y aún así son vistos cómo “la salvación”. Pura basura.
- ¿qué otra cosa te gusta hacer, Logan?
- bueno...
Varias personas se fueron del bar y Logan escuchó sillas moviéndose, pasos y armas siendo cargadas. Sonrió, mirando su copa ya vacía en su mano derecha.
- me gusta la acción, Patton -. Sacó un arma de uno de los bolsillos internos de su chaleco, asustando al de baja estatura -, y matar a quien se lo merece
Patton se fue a la mierda, literalmente, en el momento en el que Logan se dio la vuelta y los disparos comenzaron. El bartender le hizo señas para que se esconda junto a él detrás de la barra, ambos cubriéndose las orejas. Que mal que no haya traído su pistola antes de salir.
Se escucharon gritos, insultos, botellas rompiéndose y mesas cayendo al suelo. Patton mantuvo seguro al bartender por instinto, intentando escuchar la voz de Logan o algo por el estilo.
Silencio, puro y tenso silencio es todo lo que había. Patton se asomó lentamente para verificar que todo esté en orden, escontrando a Logan en medio del lugar con la respiración agitada, los hombres no estaban muertos pero si heridos, algunos de ellos quejándose por el dolor.
- nadie va a morir -. Le dijo a uno de los hombres heridos -, procuré disparar en lugares no tan dañinos. La próxima vez, por favor, no molesten a mi padre con sus tonterías y amenazas de que me van a asesinar, ¿está claro?
Patton salió de su escondite, corrió hacia Logan y lo agarró de la mano antes de que se vaya, Logan se volteó, mirando a Patton esperando que diga algo.
- ¿te gustaría unirte a mi grupo?
Otra vez silencio. Logan dejó de lado su seriedad para reír un poco, metiendo su mano libre en el bolsillo de su pantalón, esperando que sea una broma. No es una maldita broma. Volvió a su seriedad, confuso, no se conocían de nada y Patton lograba sorprenderlo cada vez más y más.
- no voy a unirme a un grupo de niños, voy a cumplir treinta y uno el próximo año y ustedes de seguro no superan los veinte, tengo una reputación que mantener
- ¡no seas malo, Logan! -. Suplicó. Si, son un par de niños -, además, encajas perfecto con la persona que estoy buscando. Necesito a otro investigador en mi equipo para futuras investigaciones
- no pienso formar parte de tu club de payasos
- ¡no somos payasos, trabajamos para la policía! -. Logan soltó su mano, dispuesto a irse -, ¡t-te llevarás todo el crédito!
Logan se detuvo, mirando la perilla de la casi rota puerta por los disparos. Mierda, lo estaba pensando, ¿de verdad lo estaba pensando?. Patton estaba de rodillas, sus manos entrelazadas, haciendo su mejor cara de perro bebé. Mierda.
- ¿todo el crédito dices?
Patton sonrió.
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