Los primeros días eran difíciles, cada mañana recordaban su sonrisa y sus ojos. Las semanas comenzaron a pasar, convirtiendose en meses, justamente habían pasado cuatro meses, la azabache ha tenido malestares, mareos, nauseas y antojos, era un lindo día y la azabache había decidido ir al doctor para comprobar sus sospechas, ya que no tenia ninguna prueba físicamente, la atendieron rápidamente y el doctor la mando hacerse estudios los cuales estuvieron al instante.

-¿Y bien doctor que tengo?- dijo la azabache.

-La felicito señora, sera madre- dijo el doctor.

La azabache se quedo sorprendida, no sabía como reaccionar, tenia sus sospechas pero no pensó que fuera real.

-Tiene 4 meses de embarazo- dijo el doctor.

-¿Y como es que no tengo pancita?- preguntó la azabache.

-Tal vez sea un barón, con los niños no crece la pancita hasta casi los 5 meses- dijo el doctor- La felicitó.

-Gracias- dijo la azabache.

-Deberá tomar estas vitaminas, ya que salio un poco mal, debe reanimarse- dijo el doctor- La espero aquí en un mes para su chequeo.

La azabache solo asintió y se fue a su hogar al llegar Bankotsu la esperaba con una rica comida, en su bolso llevaba los resultados, esta lo abrazo, ya estaba mas alegre.

-¿Y esa sonrisa mi amor?- pregunto el pelinegro al notar la felicidad que esta tenia.

-Es una sorpresa que quiero darte esta noche- dijo la azabache- Se que te gustara tanto como a mi, mi vida.

Bankotsu solo la observo con curiosidad, después de un rato el timbre de la puerta se escucho, Aome corrió a abrir y se encontró con Shippo.

-Shippo, ¿como has estado?- dijo la azabache.

-Bien, aunque bueno, aun no me acostumbro- dijo el castaño.

-Te entiendo, pero pasa, ¿vienes a ver a Amelía?- pregunto la azabache.

-Si, pero tambien vengo verte a ti- dijo el castaño.

-¿Podemos hablar?- dijo el castaño- En privado.

Bankotsu entendió la indirecta y se retiro.

-¿Que pasa?- dijo la azabache.

-Inuyasha dejo esta nota- dijo el castaño mostrándole un pequeño pedazo de papel- La encontré hoy.

Aome la tomo en sus manos, y sus ojos se hicieron cristalinos, comenzó a leer la nota la cual le estrujaba su corazón con cada palabra, sin duda alguna era de Inuyasha.

-Gracias Shippo- dijo la azabache.

Acto seguido el castaño la abrazo fuerte y ambos lloraron un poco.

-Ve con Amelía, esta arriba con la bebe- dijo la azabache.

Aome se encontraba observando la nota.

"Querida Aome...

Quiero que sepas que estoy dispuesto a todo por ti, inclusive a dar mi vida, Kikyo aun esta suelta y se que en algún momento aparecerá, quiero que a pasar de que yo no este seas feliz, porque aunque no puedas verme siempre estaré ahí a tu lado.

Te amo...

Inuyasha ❤

La azabache guardo la nota y limpio sus lágrimas, ella muy en el fondo lo quería, pero amaba mucho mas al hombre con el que ahora esta casada y a quien le dará un segundo hijo.
La noche llego Shippo se encontraba aun ahí, h lo han invitado a cenar, Aome cocino el platillo favorito de su amado, al estar todo listo todos se fueron al comedor, sirvió el platillo y todos comieron tranquilamente, al haber terminado aome se puso de pie y tomo la copa con vino.

-Quiero hacer un brindis- dijo la azabache- Han pasado momento difíciles, pero a pesar de ello hay que mantener una sonrisa, faltan algunas personas pero se que pronto nos reuniremos con ellas, dejando eso de lado, Bankotsu mi amor, debo darte una gran noticia- todos la miraban- Estoy embarazada.

Bankotsu se levanto con una sonrisa en sus labios, la abrazo fuerte y le dio algunas vueltas, Shippo y Amelía los observaban con alegría.

-¡Felicidades Aome!- dijo el castaño emocionado.

Amelía también la felicito y Bankotsu la seguía abrazando estaba tan feliz.

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Los meses han pasado rápidamente, el bulto en su vientre crecía conforme pasaba el tiempo, hasta el día que llego el momento de dar a luz, era una tarde soleada, y Bankotsu y Aome caminaban por el jardín, hasta que comenzó a sentir fuertes dolores.

-¿Estas bien?- pregunto el pelinegro al ver las muecas de dolor en su esposa.

-El bebe, creo que ya viene- dijo la azabache.

Rápidamente Bankotsu la tomo en brazos, y la llevo al auto, después fue por la pequeña maleta donde tenia arreglado cosas para el bebé, rápidamente fueron al hospital e Ishida la atendió rápidamente, el parto se llevo a cabo y al pasar una hora un llanto se escucho, Bankotsu observo a Shippo y a Amelía quienes estaban ahí, al pasar unos minutos, Sesshomaru, Rin, Miroku y Sango llegaron observaban la alegría que Bankotsu tenia en su rostro.

-¿Ya nació?- preguntó el peliblanco.

-Si, ya nacio- dijo RL pelinegro con una enorme sonrisa.

-¿Familiares de la señorita Higurashi?- pregunto una enfermera.

-Soy su esposo- dijo el pelinegro.

-Sigame por favor- dijo la chica.

Bankotsu obedeció camino entre algunos pasillos hasta llegar a Maternidad, donde su esposa se encontraba, al llegar a su habitación la observo jugando con el pequeño.

-Su bebé es un baron- dijo la enfermera- Los dejare solos unos minutos.

Bankotsu camino hasta la camilla, los observo a ambos.

-Es hermoso- dijo el pelinegro.

La azabache lo observo con una sonrisa al verlo ahí.

-Toma cargalo- dijo la azabache.

Bankotsu lo tomo en sus brazos, lo observo, al abrir sus ojitos pudo ver esos ojos color chocolate de su amada.

-¿Cual sera su nombre?- preguntó el pelinegro.

-Quisiera que se llamará Okazaki- dijo la azabache.

-Me gusta su nombre- dijo el pelinegro.

Han pasado unos meses, Bankotsu y Aome piensan bautizar al pequeño Okazaki. Todos se levantaron temprano comenzaron a arreglarse, los padrinos del pequeño serian Amelía y Shippo, otras personas muy sercanas a la familia, todos acudieron a la ceremonia la cual se dio rápidamente, todos estaban felices, Aome se encontraba feliz y Bankotsu tambien, después de tanto sufrimiento al fin podían ser felices, era algo que esperaron hace mucho tiempo, toda la familia estaba reunida, incluyendo a alguien que ellos no podían ver, Inuyasha estaba a su lado observando cada momento, cada sonrisa y alegría, se sentía pleno al ver a su amada llena de vida y alegría a lado de Bankotsu, el la hará muy feliz.

Los corazones rotos pueden arreglarse, obviamente se necesita amor para curar las heridas, y poder dejar de ser un "Supuesto Amor".

Fin

Cherry34806