Recomendación:
Novela: Soñando el mismo sueño.
User: @oviedomorillatwens
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Increíble, leerosla, merece la pena.
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*Narra Amy*

Me quito las lagrimas frente al espejo, decidida.
En estos eternos tres minutos que han pasado desde que Jesús ha cruzado esa puerta, he estado recapacitando.
No lo puedo perder.
Otra vez no.
No puedo dejar que Teresa me lo quite.
Sonrío al espejo y abro la puerta, decidía a alejar a la morena de mi moreno.

Bajo las escaleras rápidamente y entro al salón, bajo la mirada atónita de los cuatro.

-Buenas.-sonrío un poco.

-¿Estas mejor?-pregunta Maria.

-Si.-sonrío.

Miro a Jesus, y a Teresa, que están sentados juntos en un sofá pequeño, voy hasta ellos y me hago un hueco en medio.

-Aquí cabe otra.-sonrío a Teresa, que me mira mal.

-Podrías haberte sentado con ellos.-señala a Maria y Dani, que están en el sofá grande.

-Podría.-levanto una ceja.-Pero no quiero estar de aguantavelas.

Teresa aparta la mirada, enfadada y la centra en la televisión.
Noto la mirada de Jesus fija en mi.
Me giro y lo miro.

-¿Quieres que me quite?-me muerdo el labio.

Teresa lo mira, me mira y lo vuelve a mirar.

-Claro que no.-sonríe un poco.

Sonrío satisfecha mientras me acomodo en el sofá, apoyando mi cabeza en el pecho de Jesus.
Teresa me mira con asco.

-Si las miradas mataran...-se ríe Dani.

-Estarías en mi funeral.-completo, riendo.

Y nos quedamos unos minutos centrados en la película que hay puesta.

Noto como Jesus juega con las pulseras de mi mano.
Como hace siempre.

Luego comienza a acariciarme el brazo, haciéndome suaves cosquillas.
De repente empieza a hacer letras.
Y puedo notar la palabra: "Te quiero"

Sonrío instintivamente y lo miro.

-Bipolar.-le susurro, intentando no sonreír.

Jesus se ríe un poco, y luego se muerde el labio.

-¿Puedo abrazarte o me vas a morder?-susurra, con una sonrisa.

-Ah.-me hago la inocente.-Tu prueba.

-Prefiero arriesgarme.-susurra, y me atrae hacia él.
Me abraza con fuerza,hundiendo su cabeza en mi hombro.

-Ohh.-se oye a Maria por detrás.

Aprovecho para darle un suave mordisco en el cuello.

A lo que el se aparta y me sonríe.

-¿Me has mordido?-levanta las cejas.

Suelto una carcajada.

-Yo no te había prometido nada.-suspiro.-Tengo hambre.

Maria y Dani se ríen.
Saben que cuando yo tengo hambre no tengo un carácter muy flexible, por así decirlo.

-Serás gorda.-se queja Teresa.

Me levando del sofá y me pongo delante de ella.

-Este tipín es gracias a lo gorda que soy.-me doy golpecitos en mi vientre plano, riendo.-Aparte de hacer ejercicio.

-Agg.-me vuelve a mirar mal Teresa por... ¿decimoquinta vez en los diez minutos que llevo aquí?

-Voy a merendar.-informo.-¿Queréis algo?

-Nah.-dice Jesus.-Yo ya te robo.

Ruedo los ojos mientras voy hasta la cocina y me preparo un sándwich de Nutella.

*Narrador en tercera persona*

Teresa se acerca a Jesus y lo mira, buscando las palabras.

-¿Podemos hablar?-suspira la china.

-Claro.-se acomoda este en el sofá.-Dime.

-Aquí no.

-Tere, sigo siendo igual de vago.-sonríe.-Di, venga.

-¿Enserio te has tragado el orgullo alguna vez por una chica?-dice, seria.

Maria se ríe por atrás.

-Una que fuera.-la mira.-Y lo mejor es que siempre es por la misma.-le guiña un ojos a Jesus.

La morena se muerde el labio y lo mira.

-¿Te lo tragarías por mi?-pregunta, acercándose peligrosamente a él.

-¿En qué sentido?-se aparta un poco el.

-Te quiero, Jesus.

*Narra Amy*

Salgo de la cocina y me quedo escuchando la conversación que están teniendo en el salón.

-Te quiero, Jesus.-oigo a Teresa.

Aparezco por la puerta y voy hasta el sofá.
Vuelvo a apartar a Teresa y me siento.

-Yo también lo quiero.-la miro.

Dani se ríe por atrás, mientras mira la cara de Teresa.

Jesus me sonríe, y le da un bocado a mi sándwich.

-¿No vas a decir nada?-dice Teresa.

-¿Que quieres que diga?-pregunta Jesus, relamiéndose los labios.

-Quiero que haya algo entre nosotros.-dice la chica, decidida.

Y ahí es cuando intervengo yo.

-Yo también.-admito.-Distancia.

Maria estalla a carcajadas mientras me acerco mas a Jesus para apartarlo de Teresa.

La morena se levanta enfadada y se va de el salón, dando un portazo.

-Un problema menos.-me separo de golpe de Jesus y me pongo en la otra punta del sofá.-¿Vemos una peli?