Ando para casa junto a los gemelos, ya que son mis vecinos.
Estoy recapacitando.
Lucía esta jodida.

-El camino del amor no es una discusión sutil, la puerta a la que lleva es la devastación. Uno no se deja la cabeza, por amor la pierde.-dice Dani, rompiendo el silencio.

Suelto una carcajada.

-¿Cuanto tiempo te ha llevado buscar esa frase?- levanto una ceja.

-Es que esta mañana me has dejado rayado, ¿no crees en el amor?
Quiero que creas, porque el amor, es lo mas sincero que hay en este mundo.

Resoplo.

-Nunca voy a creer, osea, el amor de amistad si, pero eso de enamorarse, no creo, siempre he pensado que es atracción física, que la chica se enamora de las mentiras que dice el chico, y el chico de los quilos de maquillaje que lleva la chica encima.
Puede que antes existiera el amor, pero ¿ahora?
Ahora ya no hay nada de eso.
Antes a las chicas se les enamoraba con hechos, y a los chicos con la forma de ser que tenias.
Ahora solo queda una simple atracción.

Dani se queda callado, mirándome con los ojos abiertos.

-Yo creo que aún queda ese amor que crees extinguido.
¿Apostamos algo?.- me susurra.

Levanto una ceja.

-¿El qué?-.susurro.

-Quien se enamore pierde.-me dice.-pero enamorarse como tu dices.

Me lo pienso y le tiendo la mano.

-Quien se enamore pierde.

Jesus se ríe por atrás.

-Prepararos para perder los dos.-susurra Jesus.

Pero los dos lo hemos oído, y tiene razón.

¿Y si perdemos los dos?

[...]

Llego a casa, esta mi madre en la cocina, poniendo rosas en un jarrón.

-Hola.-le sonrío.

-Ui UI UI, me has sonreído!

Suelto una carcajada.

-Hija.. la tumba de tu hermana esta aquí,y..

-Si mama...

Se lo que me quería decir, quiere que valla.

-¿Puedo llevarle una rosa?

[...]
Acabo de encontrar la lapida de mi hermana.

Me sienta enfrente y la observo.

-Hola hermanita, ¿Como estas?
Espero que mejor que yo.
Siento que no haya venido mucho... pero ya sabes que odio este sitio.
Me dijiste que viviera por las dos, pero no puedo.
Me faltas tu.
Me acabo de mudar a Mairena, el primo Marcos esta igual, y sus amigos son geniales.
Nunca adivinarías una cosa.
He echo una apuesta con Dani, uno de los gemelos.
Quien se enamore pierde.
Pero que se enamore de verdad.
¿A que no te lo crees?
Supongo que estoy cambiando, por mi, por ti, por ser alguien mejor.
¿Porque coño te tuviste que enamorara de ese chico?
Y lo peor es que si que lo vuestro era amor, como el que digo yo.
Por mucho que me cueste admitirlo, ese chico te quería.
Aunque me llevara fatal con el, me gustaba verte feliz.
¿Pero era necesario que te montaras en la moto?-suspiro, no puedo controlar las lagrimas.- Sara, tengo miedo.
Tengo miedo a que Dani consiga enamorarme.
Mucho miedo.
El y su hermano han sido los únicos capaces de sacarme una sonrisa desde que moriste, y ya sabes que yo nunca me he enamorado.
Ahora tendrías que estar aquí, diciéndome mil veces que tengo que ser atrevida, que debo ser feliz.
Pero tengo que asimilar que esas palabras ya no te las voy a oír.
Tengo que asimilarlo.
¿Tu crees que superare esto?
¿Que podré vivir si ti?-me quito las lagrimas.- Yo solo quiero ser feliz, Sara.
Quiero vivir la vida como tu la vivías, a lo loco, sin importar nada.
Pero sabemos las dos muy bien que tu eras la gemela guapa, con mejor cuerpo, la simpática, la graciosa, la que caía bien a todo el mundo, en cambio yo era la borde, la que no sabia hacer amigos.
La niña rara, la insegura y la que le teme a todo.
Dime, ¿Como lo hago?
¿Como se te hacia tan fácil?
Sara, quiero que vuelvas.
No aguanto mas, no puedo vivir.
Eres mi otra mitad...
Te quiero muchísimo Sara.-susurro dejando la rosa aun lado de la tumba.- Supongo que de ahora en adelante vendré todos los días a verte, me gusta desahogarme contigo, aunque no me escuches.
Adiós Sara...

Me levanto y paseo por el cementerio.
Tumbas y mas timbas.
Que asco de sitio.

Aunque no tengamos el poder de elegir de dónde venimos, todavía podemos elegir a dónde vamos desde ahí. Sé que no es la respuesta a todo, pero es suficiente para encajar todas las piezas.