La cámara de los secretos a sido abierta...

Harry, Draco y Hermione caminaban por un largo pasillo para llegar al gran comedor, ya eran mediados de octubre y el frio comenzaba a notarse en todo el castillo lo que provocaba que Hermione se enfundara en grandes abrigos y muchas mantas.

Derek le había explicado que era debido a que su cuerpo se estaba adaptando poco a poco a las características de los dragones, y estos tienen la grandiosa habilidad de regular la temperatura de sus cuerpos y así aguantar temperaturas extremas, pero siendo ella aun tan joven y sin haberse transformado su cuerpo iba probando hasta encontrar el método exacto para que ella misma se encontrara a gusto en cualquier amiente.

Y de camino se toparon a Nick Casi-Decapitado, el fantasma de Gryffindor, y si os extrañáis por el nombre...bueno, es que literalmente es casi decapitado, intentaron matarlo por decapitación, pero extrañamente su cabeza se mantiene unida su cuerpo por una fina hebra de piel.

- Buenos días Sir Nicholas – Saludo Hermione al ver al fantasma pasar por su lado.

- Buenos días niños – Suspiro Nick con aire deprimente lo que causo que los chicos se miraran entre ellos con curiosidad – Pareces preocupada pequeña Granger – Comento el fantasma mirándola más atentamente, y es que Hermione estaba ligeramente pálida y se notaba que no había dormido mucho esa noche.

- Igual que usted – Dijo Hermione.

- ¡Bah! – Nick hizo un elegante gesto con la mano – Un asunto sin importancia...no es que realmente tuviera iteres...aunque lo solicitara, pero por lo visto "no cumplo con las características", pero cualquiera pensaría, ¡cualquiera!, que cuarenta y cinco hachazos en el cuello con un hacha mal afilada serían suficientes para permitirle a uno pertenecer al Club de Cazadores Sin Cabeza – Se quejó el fantasma con muchísima elegancia.

- Por supuesto – Dijo Draco, dándose cuenta de que Nick esperaba que le dieran la razón al instante.

- Por supuesto, nadie tenía más interés que yo en que todo resultase limpio y rápido, y habría preferido que mi cabeza se desprendiera adecuadamente, quiero decir que eso me habría ahorrado mucho dolor y ridículo, pero sin embargo... - El fantasma saco una carta de su bolsillo y se aclaró la garganta para leerla, mientras hacía esto Hermione no pudo reprimir una broma interna sobre cartas fantasmas.

Solo nos es posible admitir cazadores cuya cabeza este separada del correspondiente cuerpo. Comprenderá que, en caso contrario, a los miembros del club les resultaría imposible participar en actividades tales como los Juegos Malabares de Cabeza sobre el caballo o el Cabeza Polo. Lamentando profundamente, por tanto, es mi deber informarle que usted no cumple con los requisitos necesarios para pertenecer al club. Con mis mejores deseos,

Sir Patrick Delaney-Podmore

Con un suspiro Nick volvió a doblar la carta y se la metió en el bolsillo.

- Nos gustaría poder hacer algo para ayudarlo en el asunto del club – Dijo Harry, conmovido por el aspecto abatido del fantasma de su casa.

El fantasma pareció pensar algo durante un par de segundos.

- Si hay algo que podrías hacer por mi...muchachos ¿Sería mucho pedir...? No, no vais a querer...

- ¿Qué es? – Animo Hermione.

- Bueno, el próximo día de Todos los Santos se cumplen quinientos años de mi muerte. Voy a dar una fiesta en una de las mazmorras más amplias, vendrán amigos míos de todo el país y para mí sería un gran honor que ustedes pudieran asistir. Pero imagino que preferís ir a la fiesta del colegio – Dijo Nick, mirando a los chicos con profunda tristeza.

- ¡No! ¡Estaremos encantados de ir! Además, ya fuimos a la fiesta de Halloween el año pasado, y también podemos ir el año que viene, seguro que no cambia mucha cosa – Dijo Harry.

Nick les sonrió emocionado y después de agradecerles infinidad de veces se fue alegremente a, aparentemente, contárselo a la Dama Gris, fantasma de Ravenclaw.

- Yo no fui el año pasado – Comento Hermione como si tal cosa mientras reanudaban su andar hacia el comedor.

- ¡Es cierto! ¡Lo siento mucho Herms! – Exclamo Harry dándose una palmada en la frente.

- No pasa nada, el año pasado fue un Troll, este una Fiesta de la Muerte...¿Me pregunto que pasara el año que viene...?

Draco soltó una carcajada y finalmente llegaron al Gran Comedor.

El día de Halloween no tardó en llegar y los chicos estaban bastante arrepentidos por haber aceptado ir a la fiesta, pero como Hermione les había dicho "Una promesa es una promesa"

Draco no tuvo problemas en escabullirse, pero Harry y Hermione no tuvieron tanta suerte como el rubio, Ronald se les había vuelto a pegárseles como una lapa y ambos amigos se vieron obligados a utilizar la Capa de Invisibilidad para pasar en frente del pelirrojo sin que este los notara, y no fue hasta que estuvieron en un pasillo vacío en que pudieron respirar tranquilos y quitarse la capa.

- ¡Lo siento mucho Harry! Pero estoy comenzando a pensar que Ronald solo está interesado en tu fama...creo que solo quiere presumir de ser el mejor amigo del "Gran y Poderoso Harry Potter" – Dijo Hermione, fastidiada.

Harry suspiro, él sabía muy bien que su amiga no soportaba al pelirrojo. Además, que Hermione podía ser muy gentil y cariñosa con las personas a las que quiere, pero también es cierto que la chica podía ser muy orgullosa además de desconfiada con la mayoría de las personas, era perceptiva y parecía ser capaz de ver a través de las personas. Harry no pudo evitar sonreír al darse cuenta de que la joven tenía un carácter parecido al de un dragón.

Pero al instante su rostro se volvió serio. Él también había pensado en que Ron solo quería ser su amigo por interés, pero parte de él no quería aceptarlo a pesar que otra parte de él sabía que era tal y como su amiga había dicho.

- Lo sé – Suspiro el moreno – Tal vez debería alejarme de él. En el fondo yo también he notado como me tratan, pero es que los demás Weasley me caen muy bien, solo son Ron y su madre los que actúan raro.

- ¿Raro? ¿Puedes ser más preciso? – Cuestiono Hermione.

- Bueno, ya ves que Ron se apega a mi como una garrapata y su madre me trataba con demasiada gentileza, me trataba como si fuera su hijo y me consentía más a mí que a sus propios hijos, eso no me parece típico de la madre amorosa y perfecta que trata de ser – Al decir esto Hermione asintió pensativa.

- Y al ser tu amiga y estar siempre cerca de ti, excepto cuando me voy al bosque o a ver a mi hermano, Ron tal vez piense que apegándose a mi puede llegar a ti más fácilmente, tal vez es por eso que me molesta tanto, es eso o es estúpido, la verdad es que esa es una opción muy posible – Susurro ella con un suave gruñido – Pero los gemelos son perfectamente amables con nosotros, ni más ni menos, como dos chicos normales y la hermana pequeña también es normal...

- ¿Crees que debería alejarme de Ron? – Pregunto Harry algo inquieto.

- No – Dijo la chica firmemente – De echo creo que está muy bien que él crea que sois amigos del alma – Comento con una sonrisa astuta.

- Muy bien...creo que me he perdido – Mascullo Harry, rascándose la nuca.

- ¿Recuerdas que cuando nos mandamos cartas durante el verano me dijiste que escuchaste a Ronald y a su madre hablar? – Cuando el chico asintió Hermione prosiguió – Dijiste que Molly Weasley quería que su familia ganara popularidad dentro de la sociedad de la comunidad mágica debido a sus problemas económicos, la mejor forma es casando a sus hijos con personas famosas o de poder dentro de la sociedad, el problema es que según dijo Derek las familias de poder, normalmente Sangre Pura, tienen un solo heredero y siempre suele ser varón, sospecho que tiene que ver con alguna magia antigua, y todos su hijos son varones excepto Ginny, tal vez, a pesar de que todos sus hijos excepto Ronald hayan rechazado el plan de su madre, Molly le haya pedido a Ronald que se hacer que a ti para intentar juntarte con Ginny mientras busca a alguna mujer de poder dentro de la sociedad para juntarla con Ronald, pues es seguro que él no se quejara en una vida acomodada...claro que esto solo son especulaciones, pero me gustaría saber si es verdad o solo me estoy imaginando cosas, y la mejor manera es mantenerte cerca de ellos, aunque me siento un poco mal el pedirte que te conviertas en mi espía... - Mientras Hermione decía esto Harry abría cada vez más los ojos a medida que su amiga hablaba.

- Hermione...¿Desde cuando eres detective? – Pregunto Harry mirando sorprendido a su amiga mientras parpadeaba rápidamente en su intento de comprender lo dicho por Hermione.

- Bueno, desde siempre me han gustado las novelas de misterio, adoraba cuando mi padre me leía las novelas de Sherlock Holmes, competíamos para ver quién era capaz de descubrir al asesino primero – Dijo Hermione sonrojándose – Supongo que me he dejado llevar...

- ¿El asesino solía ser el mayordomo? – Pregunto Harry riéndose.

- A veces si – Rio ella.

Por el momento ambos olivaron el tema y se dedicaron a bromear y reír como dos simples niños de 12 y 13 años.

- Oye oye, ¿Ya os habéis olvidado de mí? – Dijo una voz a sus espaldas.

- ¡Draco! – Exclamaron Harry y Hermione.

- Vaya, ya veo que os alegráis de verme, no me extraña, es decir, soy yo – Bromeo - ¿De qué os reíais?

- De que Hermione ya tiene una profesión pensada – Dijo Harry.

- ¿A sí? – Dijo Draco.

- Detective Privada – Dijo con simpleza el de ojos verdes.

- Tonto – Mascullo Hermione, aunque con una sonrisa, la verdad es que no le sonaba mal.

Anduvieron hasta llegar a la Fiesta y Nick los recibió con entusiasmo.

- ¡Felicidades Sir Nicholas!...bueno ¿Está bien decir "Felicidades" en un Cumpleaños de Muerte? – Pregunto Hermione algo confusa.

- ¡Por supuesto que sí! ¡Pasad, pasad! – Dijo alegremente el fantasma.

Los chicos entraron en la sala y observaron a su alrededor con curiosidad.

Vieron las mesas de comida e hicieron una mueca al ver la comida podrida en descomposición, y a un fantasma comiendo con ganas la comida lo que le llamo la atención a Hermione, pues según Hogwarts: Una historia, los fantasmas no eran capaces de captar sentidos como el tacto, el olfato o el gusto, y estaba claro que no iba a quedarse con la duda.

- Disculpe buen señor, ¿Así puede sentir el gusto de la comida? – Pregunto mirando inquisitivamente la comida mientras Harry y Draco miraban la comida con asco.

- Casi –Respondió el fantasma con una expresión parecida a la decepción para después volver a comer con ganas.

Los chicos anduvieron un poco más y al toparse con otro fantasma Hermione murmuro algo entre dientes y luego sonrió amablemente a la fantasma que se acercaba hacia ellos.

- Buenas noches Myrtle ¿Estas disfrutando de la fiesta? – Dijo Hermione.

- ¡Acaso quieres burlarte de mí! ¡Te quieres reír de mí! – Ni siquiera era una pregunta, era una acusación en toda regla.

- N...No, por supuesto que no – Dijo Hermione levantando las manos en un intento de calmar a la furiosa fantasma.

- ¡Claro! ¡Y yo me lo creo! – Con estas palabras llenas de sarcasmo Myrtle se fue rápidamente entre lamentos de autocompasión.

- ¿Quién es ella? – Pregunto Draco, sorprendido por la mala reacción de la fantasma a pesar de las amables palabras de Hermione.

- Su nombre es Myrtle, es el fantasma de una antigua alumna que ronda los lavabos de niñas del segundo piso, siempre está llorando y quejándose de que los demás se burlan de ella, y no la culpo porque en verdad lo hacen, las chicas la han apodado como "Myrtle la Llorona" y creo que ese apodo ya lo lleva arrastrando desde hace mucho, según he oído, cuando vivía, hace unos cincuenta años, los demás alumnos se metían mucho con ella...creo que por eso ahora reacciona de esa manera, inconscientemente cree que todo el mundo está en su contra y reacciona de manera negativa a cualquier comentario a pesar de que sea bienintencionado – Murmuro Hermione mirando con algo de lastima a la trise fantasma y viendo como incluso los otros fantasmas se alejaban de ella lo más respetuosamente posible, al fin y al cabo ella era una chica y la mayoría de los fantasmas eran caballeros, su código de honor les obligaba a tratar con respeto a la pobre Myrtle.

- Vaya Harry...tenías razón sobre lo de detective – Dijo Draco mirando a Harry con los ojos abiertos como platos y Harry asintió con una sonrisa divertida.

- Es posible, pero tenemos un misterio más importante que resolver ¿No os parece? – Dijo Hermione metiendo las manos en los bolsillos de su túnica.

- ¿A qué te refieres? – Pregunto Draco, confuso y algo inquieto por la repentina seriedad de la chica.

- Es cierto – Dijo Harry – Veras, hace unos días Hermione y yo oímos una voz, fue espeluznante...y pedía sangre y muerte.

- Después le preguntamos a diferentes alumnos, incluso a algún profesor, si habían oído algo raro, todos sacaron la misma conclusión: No – Dijo Hermione - ¿Tu oíste algo?

- No, lo siento – Dijo Draco, mirándolos algo confuso - ¿Por qué no me lo dijisteis antes?

- Yo...yo personalmente tenía miedo, no sabía si pensarías algo raro sobre mi...y se muy bien que oír voces no es normal, incluso en el mundo mágico está mal visto...pero estoy comenzando a pensar que debería decírselo a mi hermano y a Dumbledore – Susurro Hermione agachando la cabeza.

- Yo decidí esperar, sabía que si decía algo sería difícil no involucrara a Hermione a la larga – Explico Harry.

- Ya veo – Dijo Draco, entonces dirigió su mirada hacia Hermione y su mirada se suavizo hasta llegar a la ternura – Pero Hermione, sabes que puedes confiar en mi para lo que sea, no pensaría mal de ti, aunque me dijeras que te ha crecido otra cabeza – Dijo levantándole la cabeza, colocando una mano en su mentón.

Hermione le miro con los ojos cristalizados y se lanzó a abrazarle, el muchacho se sorprendió al principio, pero en seguida la estrecho entre sus brazos mientras Harry se rascaba la nuca incomodo, sintiéndose como un mal tercio.

- Chicos... - Mascullo Harry.

- Lo siento – Se disculpó Hermione, separándose del chico con las mejillas rojas al igual que el rubio.

Los chicos decidieron quedarse en la fiesta un poco más, estuvieron paseando por la sala, los chicos hablaban sobre los próximos partidos de Quidditch mientras Hermione se dedicaba a observar a su alrededor, dándose cuenta que tanto ella como sus amigos llamaban mucho la atención, suponía que era porque todos menos ellos eran fantasmas.

Estaban por irse y buscaron a Nick para despedirse de él, y encontraron a un fantasma bastante robusto que lo miraba con burla y Nick lo miraba con elegante frialdad.

- ¿Qué ocurre? – Pregunto Hermione mirando inquisitoriamente al fantasma desconocido.

- ¡Vivos! – Exclamo el fantasma, sacudiéndose y provocando que se le cayera la cabeza, revelando la causa de su muerte: Decapitación.

Harry y Draco sintieron un escalofrió recorrerles mientras apartaban la mirada durante unos segundos, Hermione, en cambio, siguió mirando al fantasma sin sorprenderse y finalmente levanto una ceja.

- Usted es Sir Patrick ¿O me equivoco? – Ante la mirada sorprendida del fantasma Hermione sonrió de medio lado – Oh vamos, ¿Quién más que usted tendría tan mal gusto para venir y fastidiar a un honorable caballero en su propia fiesta de muerte? Lo digo porque fueron ustedes los que no quisieron aceptar a Sir Nicholas en vuestro estúpido Club, cuando en realidad lo que buscan es esconder el hecho de no tener el conocimiento adecuado para crear nuevas actividades que incluyan a más personas en una situación similar a la de Sir Nicholas, si lo hicierais tendrías más miembros y por lo tanto más popularidad pero por lo que veo los fantasmas de vuestro selecto club no tienen ni idea sobre cómo llevar los negocios, una pena – Dijo la chica con voz serena y calmada pero con tal determinación que podría haber dicho que el fantasma estaba en realidad vivo y todos le habrían creído.

Patrick, al ver como la chica no se inmutaba por su presencia, se fastidio un poco, pero ese fastidio se convirtió en rabia e indignación ante el suave tono de la niña y sus ofensivas palabras que no dejaron de ser educadas en ningún momento.

- Tiene suerte de que mi código de honor no me permite golpear a una dama – Se enfadó el fantasma.

- Pero no sea tonto, aunque lo intentara no conseguiría tocarme, como mucho sentiría una sensación desagradable al ser tocada por usted pero no sería capaz de causarme daño físico, en todo caso debo darle la razón en ello, su código de honor no le permite hacerme daño, pero su honor tampoco debería permitirle molestar al caballero que festeja, esta fiesta es en honor de Sir Nicholas no de usted, y en todo caso, nosotros que con toda buena intención veníamos a despedirnos de Sir Nicholas y nos encontramos con usted que lo está molestando, eso no es muy educado ¿No lo cree usted así? – Dijo Hermione con un tono algo más frio por la acusación del fantasma – Y que sepa que el hecho de ser mujer no tiene nada que ver, si quisiera podría vencerle fácilmente ¿Me pregunto si los fantasmas puedes ser aspirados por una aspiradora portátil?

El fantasma siseo algo entre dientes y finalmente fulmino con la mirada a la pequeña y se alejó de ellos con la cabeza alta.

- Patético... - Susurro Hermione.

- ¡Muchas gracias joven Granger! ¡Estoy seguro que a partir de ahora tratara a los demás con más respeto! – Agradeció Nick.

- Nos alegra tato no ser tus enemigos Hermione – Dijo Harry mientras Draco asentía.

Después de esto los chicos se despidieron de un muy animado Nick Casi-Decapitado y decidieron ver si podían llegar al comedor para comer algo ya que definitivamente no tocaron nada de la comida en la fiesta.

Fue en los pasillos donde Harry Y Hermione volvieron a oír esa extraña y tenebrosa voz, se quedaron parados al instante.

- ...deseado...durante tanto tiempo...

- ¡Hey! ¿¡Que ocurre!? – Dijo Draco, sacudiendo a Harry y acariciando la espalda de Hermione, ambos se habían quedado pálidos y temblaban de pies a cabeza, Draco estaba seriamente preocupado.

- D...Draco...por favor, por favor dime que...que lo has oído – Susurro Hermione, y la súplica en su voz solo causo que Draco se asustara.

- ¿De qué hablas? No ha habido ningún sonido, solo os habéis quedado quietos de repente, y tan pálidos que me preocupaba que os desmayarais en mitad del pasillo.

- Hemos oído la voz, Draco – Dijo Harry.

- ...huelo sangre...¡HUELO SANGRE!

Hermione soltó un chillido y Harry jadeo con horror.

- ¡Va a matar a alguien! – Grito Hermione.

Al instante la chica arrancó a correr junto a Harry y ambos fueron seguidos de cerca por Draco, recorrieron rápidamente los diferentes pasillos hasta que Hermione, que encabezaba la carrera, se detuvo en seco, tropezándose con sus propios pies y abriendo los ojos con horror a la par que se llevaba las manos a la boca para ahogar un grito.

En la pared del enorme muro, situado en uno de los pasillos cerca de los lavabos de niñas y que curiosamente estaba totalmente inundado de agua, había una tétrica inscripción que parecía haber sido escrita con sangre, la inscripción rezaba:

LA CÁMARA DE LOS SECRETOS HA SIDO ABIERTA.

TEMED, ENEMIGOS DEL HEREDERO

Hermione gimió lastimeramente y señalo algo pegado a la pared, justo debajo de la pared.

Era la Señora Norris, la gata del conserje de la escuela, estaba totalmente quieta, y por un angustioso momento pensaron que estaba muerta.

- Deberíamos ir a buscar al director – Susurro Draco con voz temblorosa.

Pero no habían podido irse porque en ese momento un montón de alumnos que en seguida se agolparon donde estaban ellos, seguramente habían salido del banquete de Halloween y habían pasado por ese pasillo.

Entonces Hermione recordó, este pasillo era el que llevaba al cruce de las diferentes salas comunes, era obvio que todos pasarían por ahí, quien quiera que lo había hecho quería que ellos y todo el mundo lo viera.

- Temed, enemigos del heredero – Dijo Pansy, con una sonrisa que no esperaba nada bueno – Seréis los siguientes Sangre Sucia.

- Apreciaría si esa clase de vocabulario no se utilizara en este colegio, o si es mucho pedir, al menos en mi presencia. 20 puntos menos, Señorita Parkinson – La voz de Albus Dumbledore llamo la atención de todos los alumnos.

Albus había llegado junto a Minerva, Severus, Derek, Sprout y Lockhart. Hermione se fijó que tanto Albus como Derek estaban igual de pálidos que ellos y no pudo evitar preguntarse si ellos también habían oído la voz.

- Mi gata...¡Habéis asesinado a mi gata! – Exclamo Filch que acababa de aparecer y casi le da un paro cardiaco al ver a su pobre mascota totalmente paralizada.

- No está muerta Argus – Tranquilizo Albus – Solo esta petrificada, tengo entendido que se están cultivando unas mandrágoras, cuando estas estén maduras podremos crear la poción para devolverla a su estado normal, ¿No es cierto, Severus, Pomona? – Ambos profesores asintieron – Por el momento debo pedirles a los Perfectos que guíen a los alumnos de sus casas a sus respectivas salas comunes y Argus trata de limpiar esta horrible inscripción, pero antes lleva a la Señora Norris a la enfermería para que Madame Pomfrey la trate hasta que podamos realizar la poción. Mientras tanto, chicos venid con nosotros – Les indico a los tres amigos que al final fueron los únicos alumnos que quedaron en el pasillo.

- Podemos utilizar mi despacho – Ofreció Lockhart – Es el que está más cerca.

Se dirigieron al despacho del nuevo profesor de defensa en completo silencio y en un paso constante que solo se vio alterado cuando Hermione acelero el paso para colocarse al lado de Derek y cogerle de la mano con un suave temblor.

- Hey, tranquila, todo estará bien – Susurro Derek dándole un suave apretón en su mano.

- No puedes asegurar algo como eso – Murmuro ella.

- No, supongo que no – Suspiro él, Derek miro detenidamente a su hermana y noto como la pequeña apretaba su mano mientras miraba hacia el suelo y sintió como se le estrujaba el corazón, él ya había sufrido mucho al saber que su hermana pequeña, su única familia de sangre estaba lejos y no haber podido protegerla, ahora que estaban juntos no iba a dejar que nada ni nadie le hiciera daño – Aun así, ¿Qué clase de hermano seria si dejara que mi hermanita tuviera miedo de algo que aun ni siquiera sabemos que es? – Bromeo el joven con voz traviesa.

- ¿Sabes de que me he dado cuenta? – Comento Hermione mientras entraban en el despacho, en ese momento tanto los profesores como sus amigos la miraron atentamente, en verdad habían oído la pequeña conversación que habían compartido los hermanos, pero habían preferido no intervenir, cuando Derek le hizo un gesto con la cabeza para que continuara Hermione sonrió de lado – Todo pasa en Halloween...acabo de descubrir otro significado a lo de "Noche de Brujas" – Y con un encogimiento de hombros miro a los presentes con indiferencia fingida.

- Desde luego que si Señorita Granger – Suspiro McGonagall.

- Chicos, ¿Podéis decirnos que es lo que ha pasado? ¿Habéis notado algo raro? – Pidió Derek.

Los tres amigos se miraron y decididamente asintieron, Hermione dio un paso adelante y comenzó a hablar.

- Draco, Harry y yo hemos asistido al Cumpleaños de Muerte de Sir Nicholas, tenemos de testigo al propio Nicholas, Sir Patrick y Myrtle entre otros fantasmas, luego pensamos que sería buena idea ir al Gran Comedor, la comida de la fiesta no era, digamos...muy apetecible y nos moríamos de hambre, teníamos la esperanza que aun quedara algo de comida en el Gran Comedor y entonces... - Hermione se quedó callada, dudado que decir a continuación.

- ¿Y entonces...? – Urgió Snape.

- Con calma Severus, los chicos están asustados – Pidió Pomona con su típico tono dulce y tratando de ser maternal con todos, lo que causo que el pocionista rodara los ojos fastidiado, pero sonrió internamente ate las siguientes palabras de la niña.

- ¡No estoy asustada! No traten de tomarme por una niñita asustada e indefensa, por favor... - Mascullo Hermione avergonzada – Y no es por eso por lo que me he callado...es solo que...

- Hermione...nadie está diciendo que tengas miedo, todos sabemos que puedes cuidarte sola, pero también debes saber que puedes decirnos lo que sea, estamos entre amigos y profesores, siempre querremos lo mejor para ti, pero si has visto algo que nos pueda ayudar a descubrir quién es el responsable del mensaje en la pared debes decírnoslo, esto es importante – Dijo Derek frotando la espalda de su hermana afectuosamente.

- Hace unos días que...puedo oír una voz muy tétrica, no para de decir que quiere sangre y muerte...sé que debería haberlo dicho antes pero...pero...¡Temía que pensarais que estaba loca! ¡Hemos preguntado a otros alumnos, pero ninguno de ellos había escuchado nada! ¡Nadie podía oírlo y comencé a pensar que si lo decía me tomarían por loca! Lo siento mucho... - Dijo Hermione mientras finalmente unas finas lagrimas se deslizaban por sus mejillas. Tenía miedo, y los demás en la sala lo sabían a pesar de lo que dijera ella.

Minerva la abrazo y dejo que ahogara unos sollozos antes de volver a enfrentar a los demás, mientras Dumbledore conjuraba unos sándwiches para los chicos.

- Es cierto, también me preguntaron a mi si había oído algo, pero en verdad no había nada raro en el castillo que yo notara – Dijo Sprout.

- Yo...yo también soy capaz de oírlo – Dijo Harry mientras aceptaba un sándwich que le pasaba Dumbledore a la par que Minerva le pasaba a Hermione a su hermano y este le daba otro bocadillo y Snape le daba otro a Draco.

- Vaya... - Susurro Derek, aparentemente sorprendido – Ya me imaginaba que Hermione podría oírlo, pero no pensé que Harry fuera capaz de oírlo, y además entenderlo.

- ¿A qué te refieres? ¿Tú puedes oírlo? – Dijo Draco.

- Si – Dijo sombríamente para luego girarse a Dumbledore con preocupación y cierto toque de pánico en los ojos – Albus, han abierto la cámara de los Secretos, ahora todos en el castillo corren peligro, hemos de encontrar esa maldita cámara de una vez por todas, descubrir y matar a lo que sea que se esconda ahí abajo – Su voz quería seguir siendo serena y tranquila, pero todos pudieron notar el gruñido deslizándose entre sus palabras a la vez que acercaba a Hermione más a él.

Dumbledore suspiro y Snape decidió que era hora de intervenir.

- Siguiendo con los chicos, creo que solo estaban en el lugar equivocado en el momento equivocado, está a resultado una noche muy larga y nosotros aun teneos cosas que discutir, los chicos no deben de meterse en este asunto, sugiero que alguno de nosotros los acompañe a sus Salas Comunes y seguir a partir de ahí – Dijo Snape, que parecía ser el único que se mantenía con la cabeza totalmente fría.

- Yo los llevare – Se ofreció Derek – Vamos muchachos, es hora de dormir – Y con esto los cuatro jóvenes se dirigieron hacia sus cálidas y protectoras camas.

El trayecto había sido silencioso y bastante tenso, ninguno había hablado aparte de la vez en que Derek les pidió que no se involucraran y ellos se lo habían prometido con los dedos cruzados detrás de la espalda, y el suspiro derrotado de Derek les hacía saber que él sabía bien que seguirían en este misterio por mucho que tratara de detenerlos.

- ¿Por qué fui capaz de oírlo? Dijiste que ya te esperabas que yo pudiera oírlo y afirmaste que tu también pudiste oírlo, pero te sorprendiste cuando Harry dijo que también podía – Cuestiono Hermione delante del retrato de La Dama Gorda.

- Porque eres un dragón, me sorprendí porque Harry no es un dragón y no debería ser capaz de oírlo ni entenderlo, y con eso ya es pista más que suficiente para que comencéis a investigar porque sé que lo vais a hacer, solo os pido que tengáis cuidado, con suerte esa voz no os volverá a molestar. Buenas noches chicos, voy a acompañar a Draco y luego tratare de dormir yo un poco.

Después de eso la noche paso relativamente tranquila, Hermione estuvo un poco inquieta, pero en general todo el castillo lo estaba, la pintada en la pared fue más que suficiente para poner a un montón de adolescentes nerviosos y creando teorías cada una más macabra que la anterior.

Fue en la mañana siguiente que, en una clase de Historia de la Magia, famosas por ser mortalmente aburridas e impartidas por un fantasma que apenas sabía que era un fantasma, pues el Profesor Binns, una mañana simplemente se despertó siendo fantasma y se dirigió a dar clases dejando su cuerpo atrás.

Estas clases eran tan aburridas que todos los alumnos acababan durmiéndose y solo Hermione solía prestar atención, pero ese día, ese día toda la clase de segundo año, clase en la que estaban Gryffindor y Hufflepuff, prestaron toda su atención al profesor por una simple petición de Hermione.

- Profesor, ¿Podría hablarnos sobre la cámara de los Secretos? – Pidió la castaña levantando brevemente la mano.

- ¿Para qué queréis saber eso? Son solo mentiras, solo una leyenda – Explico Binns, pero al ver que por primera vez todos le prestaban atención decidió esperara a ver que contestaban los alumnos, fue Hermione la que volvió a hablar.

- Pero profesor, ¿No tiene una leyenda una base de realidad?

- Visto así...está bien – Cedió el fantasma – La Cámara de los Secretos se remonta a la época de los fundadores, la enemistad de Godric Gryffindor y Salazar Slytherin era y es conocida por todos, eso era debido a muchos factores diferentes pero el principal era debido a la diferencia de opiniones en relación a la pureza de sangre. Salazar creía que solo los magos Sangre Pura eran merecedores de la magia mientras que Godric creía que todos los que la poseían, fueran de Sangre Pura o no, merecían tener la oportunidad de aprender. A raíz de esto y de que su enemistad se fue volviendo más peligrosa a pesar de los intentos de Rowena Ravenclaw y Helga Hufflepuff por calmarlos, lo que llevo a Salazar a crear una cámara de la cual nadie sabía la ubicación y esconder un terrible monstruo en su interior, diciendo firmemente que solo su heredero, el heredero de Salazar Slytherin, sería capaz de abrir de nuevo la cámara y "purificar" por decirlo de alguna manera, el castillo – Explico el fantasma, pero rápidamente bufo – Pero es solo un mito, el castillo ha sido revisado infinidades de veces y nunca se han encontrado indicios de que esa supuesta "Cámara de los Secretos" exista de verdad, ahora sigamos con la guerra de los duendes... - La clase siguió su ritmo y sorprendentemente la clase pareció volver a dormirse e ignorar la leyenda, todos menos Hermione y Harry que se miraron con preocupación.

Esa tarde Harry, Hermione y Draco hablaban mientras paseaban por los terrenos del castillo.

- Draco, ¿Has podido averiguar si alguien es el heredero de Slytherin? – Pregunto Hermione.

- No – Suspiro él – Seria genial que hubiera alguna manera de meteros en Slytherin sin que los demás se den cuenta.

- Creo que hay un método, pero será largo de realizar, mientras tanto tal vez podamos pedirle ayuda a Theo y Blaise ¿Qué os parece? – Dijo Hermione.

- Perfecto – Dijeron los dos chicos.

- ¿Y lo del plan largo de realizar? – Pregunto Draco.

- Bueno, para hacerlo debería entrar a la Sección Prohibida, coger un libro especifico de pociones, copiar la receta, asaltar los armarios de Snape sin que se dé cuenta y me asesine por entrar en sus aposentos, y encontrar un lugar privado para hacer una poción ilegal, esa sería la base del plan ¿Qué os parece? – Dijo Hermione.

- Que este año será igual de emocionante que el anterior – Dijo Draco con una sonrisa astuta.

- Y que lo digas – Dijo Harry.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top