《~ XIII ~》

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Décimo Tercer
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Capítulo
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Los primeros rayos de sol que llegaron a su cama fueron los que le despertaron. Abrió los ojos mientras que le salía un pequeño gruñido. Miró al frente suyo, encontrándose con su niño, sonrió levemente y procuró levantarse mientras trataba no despertarlo. Esa noche, ambos habían dormido juntos después de que el menor llegara a su habitación diciéndole que había tenido una pesadilla. Así que solo le dijo que se acostara con él, y después de algunos mimos para calmar su llanto se quedó dormido a su lado.

Cuando logró levantarse sin despertar al menor, se apresuró a vestirse, lavarse y arreglarse rápidamente. Ese día era sábado, por lo que no tendría que trabajar, pero de igual manera quería salir a comprar algunas cosas aprovechando que Gradient aún dormía.

Y así, sin siquiera llegar a tomar un desayuno antes de salir de su casa, salió del departamento a hacer lo antes dicho. Quería hacer todo rápidamente, para volver lo antes posible a su casa para estar con su hijo. No le gustaba dejarlo solo mucho tiempo, ya que sabía que se asustaría al no verlo con él. Aunque últimamente se había estado acostumbrado, mayormente por su trabajo.

Los minutos pasaron,y en el camino empezó a sentirse mal por alguna extraña razón. Primero pensó que se había descompuesto por no haber desayunado nada y salir en ese estado, pero no era el caso, nunca le había pasado eso y no era la primera vez que salía con el estómago vacío. Entonces pensó en una segunda posibilidad… su Celo.

- Ugh… porque me pasa esto a mí… -

Aún no estaba del todo seguro que fuera eso, aún faltaba unas semanas según su calendario, y al darse cuenta que estaba en el medio de la calle se maldijo a sí mismo. "Ojalá solo sea que me descompuse", pensó. Terminó por apoyarse en una pared de una casa por la que pasó, mirando al frente dándose cuenta que había algo de gente por ese lugar, si en verdad era su celo, estaba en problemas. Aún pensaba en algunas palabras que le había dicho su amigo, sobre los Alfas, y tenía razón, ir por la calle en ese estado no era buena idea con todos los alfas que podrían sentir sus feromonas.

Después de pensar en eso, prefirió quedarse allí quieto, abrazándose a sí mismo. Tenía ganas de salir corriendo, y de ir hasta su casa, pero sus piernas flaqueaban, y sentía como su "fiebre" cada vez se intensificaba más. Si tan solo tuviera a mano un supresor, aunque tardaria en hacer efecto en él. ¿Por qué no se quedó en casa?

Subió la cabeza mirando hacia el frente, parecía que aun las personas no sentían su aroma, y eso hizo que respirara profundamente aliviado. Pero tendría que salir de ahí lo antes posible antes de que se lamentará.

Quiso separarse de la pared en la que estaba apoyado, y en ese momento escuchó como alguien se acercó, empezando a ponerse nervioso, pero después pronunció su nombre, entrandole curiosidad de quien era...

Pasó su mirada hacia donde provenía esa voz conocida, a pesar de que eso le hacía sentir como todo se movía por un repentino mareo que le había dado. En ese momento sintió como las feromonas de un alfa estaba a su lado, tal vez en el estado en el que se encontraba fuera el responsable de que su olfato estuviera sensible ante ese olor. Pero al ver quien estaba al frente suya se sintió un poco aliviado, solo un poco.

Error se encontraba al frente suya, con una expresión de confusión por lo que veía. Obviamente se había dado cuenta de lo que le sucedía al contrario.

- E-Eh.. señor Error, que haces…-

No pudo ni terminar su frase, se había quedado sin voz de manera repentina. No entendía el porque paso eso, e hizo que tragara en seco, ni siquiera sabía porqué el contrario estaba junto a él. Pero unas inmensas ganas de acercarse hasta el contrario y buscar refugio apareció. No entendía a su omega interior, pero claro, su omega solo quería estar con Su alfa y que este lo protegiera en esa ocasión. Su inconsciente aún reconocía lo que alguna vez fue su pareja. Y con esa intención de al menos acercarse un poco al contrario, lo hizo, pero al dar el primer paso terminó tropezando con sus propios pies. Con suerte, el contrario reaccionó acercándose a agarrarlo antes de que callera al piso. Al menos había logrado su cometido, acercarse.

- Ugh… l-lo siento -

Dijo el menor de ambos en un susurro, empujando levemente al contrario sintiendo como le estaba abrazando, y se le hacía raro. Sí, una parte de él quería que siguieran abrazados y la otra quería separarse. Después de todo, en un alfa que estaba demasiado cerca durante su celo, obviamente queria ahora separarse después de su imprudencia.

- Ink, ¿te encuentras bien? -

No, no se encontraba para nada bien, con una pelea interna con su omega, y con un claro nerviosismo por el que estuviera él ahí. Ahora que se daba cuenta, que hacia ahí?. Y prefirió no pensar en eso, ya que solo le venía una idea a su cabeza, un tanto tonta, pero con algo de sentido despues de lo que Dream le habia dicho.

Mientras tanto, el mayor no queria soltar a Ink, aunque sabia que lo que estaba haciendo estaba incomodando y poniendo nervioso al menor. Pero se había dado cuenta que el contrario cada vez soltaba mas fuerte sus feromonas, y eso podria llamar la antencion de cualquiera, la casta que fuera. El solo quería ayudar a ocultar ese olor de lo demas. Aunque el omega, terminó apoyandose en el pecho del mayor, soltando un pequeño gruñido que fue audible para el contrario.

- Estoy.. bien, solo… dejame estar asi un momento… -

Le respondió con un hilo de voz, no queria hacer eso, pero extrañamente se sentia bien, y hasta una extraña nostalgia apareció en su ser.

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