Tranquila era la mañana cuando izuku salió de su hogar camino al muelle qué se encontraba enfrente, es un joven pescador qué vive enfrente del mar,

La razón de que ama este lugar, es la misma de porque se mudo allí, esta completamente vacías, pueden pasar semanas o incluso meses sin presencia de otras personas, dicen que en esas aguas salen monstruos marinos sedientos de sangre

El joven de 27 años, esta muy seguro que no son más que rumores, pero tampoco está interesado en desmentir el mito, eso significaría el fin de su paz, el es muy feliz con su rutina, pesca tres veces por semana, va al pueblo a venderlos y comprar suministros, y el resto del tiempo hace   cualquier cosa que desee, leer, pintar, nadar, escribir, esculpir en la arena

El ama su vida, aunque a veces se siente tan solo, solo en esa casa sobre la arena, pero en donde más solo se siente, ahora mismo en su bote pesquero,ya tiro la red, tras ajustar el mecanismo, sube la palanca y el brazo mecánico sube la red, qué se supone debe estar llena de peces

El pecoso quedo atónito al ver su red con una criatura qué claramente no era un pez ordinario , es una criatura semi humana, un torso masculino, poseía una escamosa cola anaranjada, orejas puntiagudas, cabellos rubio cenizo, ojos como rubís y  se está comiendo los peces o al menos los pocos que quedan, por que al parecer se comió al resto

Una persona un poco más comun en su lugar intentaría tomarle una foto,un video, obtener una prueba de de la mitológica criatura para alcanzar la fama , pero al hacerlo los camarografos, turistas, científicos arruinarían su paz al venir al área y no está dispuesto a correr tal riesgo

— escucha pequeño, no te haré daño, te voy a liberar, pero no vuelvas qué necesito pescar — comento, la criatura ladeo la cabeza y frunció el ceño, le dio la espalda, siguio devorando

— ey, no me ignores, estoy hablando enserio — gruñó, claramente el chico pez lo entendía, pero le daba igual, el pecoso suspiro rendido, y bajo la palanca, soltando la red, sorprendiendo al cenizo, el humano decidió cantinuar con su pesca otro día, de todas maneras había logrado pescar una buena cantida antes del encuentro con la "sirena"

(....)

Las semanas han pasado y ahora se volvió un problema la presencia de la "sirena" siempre llegaba a la misma hora, y se metía en la red a comer, hoy es uno de esos días

— esto no puede continuar — regaño al chico dentro de la red, tenía el estómago lleno y como siempre le resto importancia al pecoso

— deberías cazar tus propios peces, en un lugar lejos de aqui — le reprendió nuevamente , el otro solo levanto los hombros restándole importancia

Izuku suspiro cansado — hagamos un trato, yo te daré algunos peces cada vez que vengas y tu no te metes mas en la red ¿Que te parece? — el cenizo pareció pensarlo unos momentos antes de asentir

Un par de días después izuku vuelve nuevamente a la misma área, le está llendo de maravilla, incluso esta recuperando lo perdido en el estómago del rubio en las  últimas pescas, luego visualizo al chico pez, con solo media cabeza fuera del agua

— Bienvenido — saludo, el cenizo como es costumbre no respondió — una orden de peces en camino — bromeó, como prometió regreso con una cubeta llena de peces y carnada, la coloco dentro de un flotador y la bajo, el chico pez se acercó, la probó con desconfianza, cuando cayó sobre sus papilas gustativas, quedo fascinado, empezó a comer con desespero

—¿te gustó? Le agregue carnada — comenta arrescoatado en la bardoza del barco

El chico pez asiente y levantó la cubeta exigiendo más, pecoso suelta una pequeña risa, toma la cubeta, la rellana y se la vuelve entregar

— entonces... Tienes algún nombre?

El rubio asiente mientras come

— ¿cual es?

Soltó unos chillidos extraños, pero izuku logro entender una sola palabras

— ¿kats?, ¿Ketsu?,¿Suki?, mejor te llamaré... ¡¡Kacchan!! — dijo feliz — me llamo izuku.

El rubio con un movimiento de su cola salpico a izuku, mojando lo bastante, pero este solo soltó carcajada, le hace feliz la presencia del chico marino, el cual también se ríe nadando alrededor del bote,

Los días fueron pasando y cada vez se volvía más cercano, hoy por ejemplo izuku esta en el agua junto a la "sirena"

— esta muy fria — refiendose al agua, el cenizo ladeo la cabeza, se undio y volvió a salir — oye ¿Que estas.. — el chico pez le escupió un gran chorro de agua en la cara, para después carcajearse en su cara

— jaja qué gracioso — dijo con sarcasmo — que malo eres, y justo había traído algo especial para ti  — mintió, al sireno le brillaron los ojos, extendió sus brazos abriendo y cerrando la manos, dándole a entender al humano que le entregará el objeto desconocido, este subió al barco, trajo un balde de algas y se las hecho al cenizo (en los últimos días aprendió qué el odia las algas), el cual se molesto dándole la espalda

Después de reírse del chico por un rato, izuku intenta llamarlo, pero este lo ignora

— no seas así, kacchan, tu comenzaste — se queja, pero el otro ni lo voltea a ver, suspira y vuelve a entrar en el agua, nada hasta el, lo abraza por atrás

— ¿me perdonas? — el otro niega con la cabeza — ¿y si te doy más peces? — titubeó un poco, pero vuelve a negar — ¿qué te parece si te doy un regalo humano especial ? — volteo a verlo, esa fue luz verde para izuku, su pequeño pez caprichoso, el pecoso sonrió, nado para quedar de frente a él, toma sus mejilla y corta la distancia entre ellos en su casto beso

— este es un regalo humano, pero solo yo puedo darte ese regalo — dice después de separarse viendo el brillo en los rubís del chico pez, el cenizo por su parte esta confundido, pero no insatisfecho, le gustó mucho, Quiere más regalos humanos especiales

(...)

Esta pasando algo raro en día de hoy, katsuki no ha aparecido en toda la mañana, el humano se está empezando a preocupar hasta que por fin lo ve,

— kacchan hoy tardaste más de lo normal — saludo, noto que el rostro esta casi pálido, claramente esta asustado ¿pero de que?, luego lo ve una sombra en el agua abajo del cenizo, qué cada vez se hace más grande — kacchan quítate de ahí! — grita, el sireno abodece y nada a un lado justo cuando sale una inmenso tiburón del agua

Por eso está asustado, un tiburón lo persigue, sin dudarlo izuku tira la red atrapando al sirena y echándolo en la cubierta del barco

El cenizo esta confundido y temeroso, izuku lo alza entre sus brazos y lo lleva a la cabina

— no te preocupes kacchan, todo estará bien, no dejaré que te coma.. — un golpe hace tambalear el barco, al parecer al tiburón no le gustó que le quitaran a su presa, el humano iba a salir a luchar contra el tiburón con un arpón, pero el pequeño sireno fuertemente aferrado a su torso lo complicó, combio el plan, tomo el control del barco y dio la vuelta de regreso a muelle, aun se sentía como el barco era golpeado por el gran depredador, cuando estuvieron  más cerca  de la playa el tiburón al parecer se rindió, más tranquilo el humano suelta todo el aire que estaba reteniendo cuando llegaron a la orilla, regreso la vista a su acompañante

— ¿como estas? — le examinó y noto que sus escamas de empezaron a secar y soltar de su cola, preocupado lo carga hasta su hogar, llena la tina y lo mete en el agua y se arrodilla a un lado — ¿te duele? — el cenizo nego con un movimiento de cabeza

Izuku sonríe por lograr su cometido — eso fue intenso ¿no? — bromeó, el otro asintió — bueno para tu suerte, tenemos mucho pescado — se iba a levantar a buscar alimento, pero nuevamente es jalado por el chico pez.

Kacchan por lo general soltaba chillidos en intento de hablar con el pecoso, es curioso que el pueda entender al humano pero no al revez, pero katsuki estuvo practicando  idioma humano

— De-ki, De..Ku quedar-sse aquí — intento decir que se quedara a su lado

El pecoso no pudo ocultar su felicidad al escuchar a kacchan hablar, bueno intentarlo, incluso intento decir su nombre

— si, me quedaré, pero dime más cosas — se estuciasma demasiado y se acerca al rostro del chico

— Deku, qui..ere regalo es-especiar humano? — pregunta por la cercanía

El humano se ruboriza un poco pero igual se ríe, le parece adorable qué katsuki intente hablar con ese ceño fruncido intentando lucir intimidante, como respuesta asiente y besa al cenizo quien no se niega, disfruta la sensación de los labios del humano sobre los suyos

— emparejarse conmigo humano, juntos siempre, huevos...Bebés — empezó a hablar muy rápido, el humano solo entendió "juntos siempre""

— claro kacchan, siempre juntos.

El chico pez con un rubor lo abrazo

(...)

Ha pasado una semana que el chico pez esta en su hogar, se supone que lo devolvería al mar, pero tiene miedo que ese tiburón regrese por el, además tener su compañia en la casa le hace muy feliz

Esta preocupado por  kacchan, ha soltado muchas escamas últimamente, intenta mantenerlo mojado para evitarlo pero nada

Hoy debe ir al pueblo por probiciones, no sabe si es buena idea dejarlo solo, se queda sin otra opción, fue al pueblo lo más rápido que sus piernas pudieron llevarlo, compro todo lo necesario y regreso, se le escapó el aire de los pulmones cuando llego a su casa y mira una cantidad exagerada de escamas anaranjadas, sin pensarlo dejo caer sus comprar y fue en busca de kacchan

Busco en el tina, no estaba ahí, busco cocina, tampoco estaba, busco en el comedor, tampoco tuvo suerte y finalmente busco en su habitación, lo encontró, quedo atónito al ver al cenizo con un par de piernas humanas parado al lado de su cama completamente desnudo

Katsuki al notar su presencia intento correr a él, al ser su primera vez con piernas, no lo logro hacer y cayó al dar tres pasos, el pescador rápidamente lo aucilio, sentandolo en la cama

— agua de mar :aleta, secar :piernas — intento lo mejor que pudo la situación, el otro al parecer entendio, al menos eso explica la sonrisa

— pareces una cajita de sorpresas ¿eh? — sus dedos pasean por las blanquecinas piernas del más bajo

— t..u, bebés.. Nos-nosotros bebés — exigió  lo mejor que pudo mientras fruncia el ceño, ahora tiene piernas ya puede aparearse, quería que el humano lo tocase más

— ¿bebés? — pregunta sorprendido, chico asiente frenéticamente, izuku bajo la mirada triste, cree que kacchan quiere regresar al mar a aparearse — no sabía que tenías pareja — el otro ladea la cabeza confundido — como tendrás bebés si no tienes pareja?

— con.. Tigo, tu mi compañero, bebés! Bebés! — exigió más fuerte, mostrando su entrada rosada

El humano se ruborizo cuando entendió lo que quería kacchan, su corazón latió con intencida, el sireno había desarrollado sentimientos por el e igual izuku

Con los nervios inundando su sistema lo beso dejandose llevar, sus manos se pasearon por el cuerpo del chico, sus besos bajaron hasta el cuello, katsuki gemia en voz baja pero claramente audible para el humano

— eres tan hermoso, kacchan — susurro en su cuello, las manos del cenizo fueron a parar en el cuero cabelludo de más alto, aferrándose a él — y esto de aquí es tan bonito, tan pequeño y rosado —menciono refiriéndose al pené del chico pez mientras lo acaricia — pero lo que más me gusta es aquí — metió un dedo en la entrada

— Aahaa~ bebés, bebés

— muy pronto, mi amor, muy pronto te daré muchos bebés — paso la lengua por su oreja provocando pequeños gemidos

Después de abrirlo adecuadamente, alineo la Punta de la cabeza de su polla con la entrada

— estas listo? — pregunta mirando directamente a esos rubís qué brillan con gran intencidad, katsuki asiente

— si, quiero estar contigo — contesta, siente la primera embestida, —mmm ahaa~ deku —  se sintió maravilloso, esta tan feliz, cada embestida en su interior, es el aviso que muy pronto tendra una familia con el humano que ama — Aaah aah aa~ se siente bien, Deku

Esas palabras ensendieron un fuego en su interior, comenzó una seria de salvajes embestidas, jura que puede sentí como la punta de su polla golpea el cuello uterino de katsuki

— si~si te voy a dejar embarazado, te vas a ver tan lindo con tu vientre hinchado — decia entre gruñidos de placer, esas palabras solo calentaron más al sireno

— por favor deku, por favor ~correte dentro — y como si fuera una orden, izuku expulsó todas su semilla dentro de katsuki — Aaah, lleno ~muy llenó.

Con la respiración ajitada izuku sale de su amado chico, viendo que tenia razón, su semen saia a montones de la maltratada entrada

— Buenas noticias, kacchan, es casi imposible que no tengas bebés después de esto — beso su ruborizada mejilla — tendremos una familia.

— yo quiero a deku

— yo también te amo