Bianca

Colarme en el camerino dónde se encuentran la escritora y los gemelos ha sido el mayor reto de mi vida.... Bueno, no voy a mentir, no lo he hecho, más que nada porque no he tenido esa necesidad. Venía dispuesta a ello, es verdad, pero lo bueno de ser famosa es que con solo firmar un autógrafo se me abren muchas puertas, en este caso cinco.

El segurata muy amable me pilló infraganti mientras intentaba hacer mi tropelía, pero al ver que se trataba de mí, su cara cambió, por lo visto, su hija es muy fan del programa, e incluso votó varias veces para que yo ganara, tras hacerme una foto, y hacer un garabato en un papel, accedió sonriente a llevarme hasta mi objetivo, ni en mis sueños todo era tan bonito...

Estaba a unos segundos de encontrarme con ellos, los nervios se palpaban en mi cuerpo, las piernas me temblaban y mi corazón latía a ritmo de reguetton, ¿Cómo olerían? ¿Serian amables conmigo? Miles de preguntas visitaban mi cabeza cada milésima de segundo, casi no me daba tiempo para analizar todas ellas, estaba a punto de hacer realidad mis fantasías, ¿Quién decía que me tenía que quitar todos los pajaritos que tenía en mi cabeza?

El hombre se paró en mitad del pasillo, me miró sonriente y me señaló con su mano hasta una de las habitaciones del centro comercial, ahí adentro estaban mis ídolos, bueno ellos y una chica que había escrito una historia sobre ellos.

Que suerte, ella no tuvo que pasar por un reality show, vender su vida y todos los calvarios que he tenido que pasar por conocer a sus ídolos, es más, seguro que sabe secretos que muchas fans nunca sabrán ya que el libro algo de verdad tendrá, no lo he leído, me interesa, lo voy a leer en cuanto mi querido agente me deje unos segundos para respirar, bueno o yo no esté durmiendo o haciendo la vaga, pero lo veo un poco irreal, ¿Quién se iba a encontrar a sus ídolos en una gasolinera? Me pasa lo mismo con esos libros en los que los protagonistas son familiares, yo por ejemplo no me enamoraría de mis primos... bueno, si mi primo fuese Cody Christian haría una excepción, pero ¿qué dos primos o hermanos van a enamorarse? A saber lo que algunas autoras beben al hacer los libros...

-Señorita, aquí está su prima - habló mi amigo el segurata, ¿he hablado que para que me dejaran pasar tuve que decir que era prima de la autora del libro? Si me lo he saltado, quiero decir en mi defensa eso de ¿quién no dice una mentirijilla piadosa de vez en cuando?

El hombre me abandonó al segundo de decir aquella frase, por lo visto por el walki talkie le avisaron de que una fan había intentando saltar al escenario donde los gemelos y la escritora firmaban, poco a poco giré el pomo, y con cierto sigilo fui adentrándome en el habitáculo, divisé las paredes y parecía como si se hubiese rodado una película de terror aquí adentro.

-¿Hola? - saludó una chica, sin duda debe ser la autora- ¿Quién eres? - preguntó casi sin darse cuenta, pero al reconocerme puso sus manos en su boca- ¡eres la ganadora de Gran Hermano! estaba viendo tu final cuando me llegó el mensaje de la editorial - madre mía, esta chica es un poco dramática, es digna de una telenovela de estas de sobremesa- ¿Qué haces aquí? - menos mal, por fin una pregunta en condiciones, o sea, quiero decir, obviando me he colado en un sitio privado que es su camerino.

-Quería ver a los gemelos, ellos también son mis ídolos y bueno... - levanté los hombros y ella suspiró- conocía al hombre de seguridad y todo ha sido coser y cantar - afirmé mintiendo de nuevo.

No conocía yo estas dotes mías, bueno, excepto con mi manager y mis padres, pero eso no viene al caso.

-No son mis ídolos - sentenció firme- no después de lo que he oído, esos dos cerdos mugrosos, pestosos, que se creen que porque tienen un poco de fama, y miles de niñas detrás de esos cuerpazos y ese cu...- solo con esa descripción de los gemelos ya me ha ganado toda su confianza, creo que me haré amiga de esta chica- bueno que me voy del tema, son dos amargados, que me han fastidiado el día más importante de mi vida, y eso no se los perdonaré en la vida...

-Premio para la escritora bocazas - murmuré lo suficientemente alto como para que me pudiese oír, le señalé con la cabeza hacia detrás, y no es por ser aguafiestas, pero los gemelos lo acaban de oír todo, desde el primer insulto.

-¿Tú quien eres? - cuestionó Daniel con cara de no entender nada, en cambio, su hermano, si parecía un poco más jodido con el comentario.

-No digas que soy un cerdo - comentó Jesús a la chica a destiempo- te puedo permitir todos los insultos, menos que me digas que soy feo, que tengo el pelo mal arreglado o que soy un cerdo... bueno si analizamos un cerdo en otras acepciones podría ser -¿estaba diciendo lo que creo que esta insinuando? Definitivamente creo que soy la más normal de este cuarto, y eso es algo que me empieza a preocupar.

-Pues lo eres - intenté contestar a Daniel, pero la chica que decía ser la autora del libro cortó el relato que tantas veces he repetido- eres un cerdo unireunal. A ti en el zoológico te meten en las jaulas de los monos, y no se notaría la diferencia, eres el ser más chulo y prepotente que he conocido en la vida, y ¡ojala nunca hubiese escrito ese maldito libro sobre ti! - madre mía, esta chica cada vez me cae mejor- ¡gentuza, mamarracho! - chilló ¿Emily? Y digo este nombre porque me acabo de fijar en el libro que lleva en su mano.

-Me dices todo esto porque te gusto, porque deseas estar en mi cama y nunca estarás - retó con la mirada- más quisieras tú o tu novio tener este pelazo, este cutis de dios griego, este culazo bien repartido - por cada palabra que decía se iba señalando la parte de cuerpo de la que hablaba, se ve que de pequeñito jugaba al juego ese de operación - eso por no hablar de mí p... - Daniel lo frenó afortunadamente, o no- soy más guapo que todos los chicos de este mundo juntos, e incluso que mi gemelo - ¿Qué se ha fumado este? O sea, pregunta seria, no creo lo que estoy viendo, esto debe ser un sueño, o no sé... nunca me imaginaria que iba a vivir una historia tan irreal con mis ídolos, y algunas dicen que son aburridos.

Pero afortunadamente alguien del stague abrió la puerta por la que hace unos segundos entré. Si me dicen esto antes, dirían que me han puesto una cámara oculta, pero la tensión que se respira en el ambiente es muy real, y tan real...

-Chicos - una señorita rubia de muy buen ver, por cierto, entró en el cuarto captando la atención de todos, bueno de dos más que de mí y la chica que insulta a sus ídolos con más razón que un bendito, dicho sea de paso, no me llevo una experiencia muy buena con ellos- os están esperando, y las fans se empiezan a impacientar, y como eso pase empezarán a gritar y yo os chillaré más, e incluso os daré patadas en el culo para que os mováis, no las soporto más, ojalá me hubiese quedado vendiendo bicicletas en la tienda de mis padres, mierda de profesión y mierda de vida - cerró la puerta de un portazo.

-Yo a esta le quitaba el estrés de un polvazo ¿has visto que delantera me lleva? Macho, ni la del Real Madrid- murmuró Daniel al oído de su hermano, pero yo, lamentablemente, lo escuché, ¿ha dicho lo que he oído? ¿realmente esto no es un engaño del amable segurata?

-Obviando tu comentario tan desagradable y a la vez machista, déjame decirte que es verdad lo que mi nueva mejor amiga te decía, era cierto - la aludida abrió sus ojos al nombrarla- ¿te crees que todas van a caer a tus pies por ser uno de los "Gemeliers"? Ojalá le hubiese hecho caso a Deborah, no tenía que haber venido, las fans están equivocadas con vosotros, y recuerda, el físico cuenta, pero así solo conseguiréis polvos de una noche y chicas interesadas que solo os quieran por vuestro dinero y os aguanten por la fama, nadie en condiciones se acercará a vosotros con esa actitud que tenéis, os arrepentiréis, y será tarde, porque ya no tendréis nada - lancé el discurso y después suspiré, esto se lo he debido escuchar a mi padre o algo.

-No será para tanto - dijeron al unísono para seguir su camino, como si hubiesen oído llover.

Emily se paró, me miró y me hizo una mueca de pena y cansancio, se acercó a mí, me abrazó, y por primera vez sentí un abrazo real, desde mis padres nadie había conectado así conmigo como lo hizo ella.

-Gracias por defenderme, hoy están para darles escobillazos en la cabeza hasta dejarlos tontos - declaró suspirando- desde que me vieron, no hacen otra cosa que hacerme sentir inferior, en la firma han sido dos muebles, solo querían irse, esto no es como yo lo esperaba, y lo peor es que no me atrevo a decir que los que me rodeaban llevaban razón, estoy sola, vivo en un hotel sin mis padres - por sus ojos cayó una lágrima, me gustaba que esos dos no estuviesen aquí para verlo- no tengo amigos, excepto a Unai...

-Si quieres podemos quedar - ideé. Al decir esta frase ella sonrió- a tomarnos un café, a hablar más detalladamente... yo tampoco tengo a nadie aquí, y vivo en el piso que me consiguió mi agente, sola y aburrida, pero bueno, alegra esa cara, que tienes que irte -dije con pena y ella suspiró.

Se sacó de su bolso una tarjeta y me apuntó su dirección de correo electrónico.

-Escríbeme aquí - miré el papel y asentí- si quieres quedamos mañana, o mejor después... quedamos para cenar después - me dio un beso en la mejilla y se fue un poco más contenta.

Nuevo capítulo bellas flores. Este capítulo lo ha hecho fjrs12

Esperamos que os este gustando, nos alegra que cada día seáis más. Vamos subiendo poco a poco, intentamos hacerlo lo más rápido posible... y pues muchas gracias por vuestro apoyo.

¿Qué pensáis que pasara en el siguiente capítulo?

¿Se seguiran llevanso mal Emily y los gemelos? ¿YBianca con ellos?

Nos leemos

Att: fjrs12 & jdomsogni