Bianca

En estos momentos estaba en las inmediaciones de Sony. Mi único objetivo era plantarme allí y ver a los gemelos, no quería intermediarios, eso de "después de salir de GH, no pretenderías que fueran tus amigos ¿no?" me lo tendrían que decir a la cara, me mirarán a los ojos y me confesarán el porqué, si tienen la valentía de decírmelo a la cara me iré, si me dicen que no quieren verme, daré marcha atrás, pero al menos que lo digan a la cara solo aspiro a eso, no creo que Deborah me haya mentido, eso no lo pienso, tampoco creo que eso sea decisión de ellos, seguramente será su manager, pero no, yo no estoy dispuesta, me niego a negarles, no, ¿cometí algún crimen al ganar el programa? ¿Por qué me ven como una apestada? No quiero fama, solo quiero verlos de cerca, saber cómo huelen, tener una conversación amigable mientras nos tomamos un café, y eso estaba decidida a conseguirlo hoy.

Con paso firme seguía andando por las calles de Madrid, me daba igual la gente de alrededor, el miedo a que me conocieran había desaparecido, la vez que fui al centro comercial me gané una gran bronca de mi representante, pero eso no minimizaba mi riesgo aventurero, "como vuelvas a salir sin previo aviso, te la ganarás, no te vuelvas a meter en ningún lío, he tenido que llamar expresamente al centro comercial para pedir perdón, y estos se han tenido que disculpar con los clientes" advirtió cuando me vio llegar al hotel mojada, ¿es mi padre? Ni él podía controlar a mi potro salvaje interior, contra más un viejo que solo quiere mi dinero, pero claro, sino lo tengo me engañaran, me lo impuso la productora del programa cuando salí, y yo no tuve más remedio que aceptar, pero es mi agente no mi padre, y si no quiero dar una entrevista no lo haré, y si quiero ir a Sony nadie cambiará mi decisión.

Como si fuese algo del destino en mi lista de música aleatoria empezaba a sonar, " renuncio" de Ruth Lorenzo, y como dice la canción "renuncio al olvido, prefiero sentir el dolor y saber que has existido" no iba a consentir perderlos, que ni se acerquen a mí, al menos no sin intentarlo, quedándome llorando en el hotel no consigo nada, quizás tenga que volver a mi ciudad de nuevo, a la vida anterior de GH, pero no quiero, " me niego, me niego a negarle, prefiero partirme en dos y saber que fuiste mío" desde pequeña soñé con conocerlos, cuando me hacían reír en Menuda Noche, me prometí a mi misma que nunca los dejaría, y si tenía alguna vez la oportunidad iría a por ellos, y aquí estoy, por ellos, por aquellos dos chicos que me sacaron de uno de los agujeros más oscuros, " con el tiempo me convertí en mujer, tú en mis ojos un superhéroe y no quisimos más crecer..." Me quité los cascos, crucé la puerta, y fui hasta el primer mostrador que vi, los nervios los debía dejar atrás, ahora mismo el único pensamiento que podía florecer en mi cuerpo eran las ganas de ver a los gemelos.

Allí se encontraba una chica rubia, tendría más o menos 28 o 29 años, seguramente sería una de esas enchufadas, parecía simpática, me acerqué lentamente, y cuando estaba a su lado, puse mi mano derecha en la mesa.

- Hola quisiera ver a Daniel y Jesús Oviedo – comencé a hablar nerviosa, pero segura, la chica levantó su cabeza y me miró.

- ¿Quién eres? – preguntó con desgana- las fans no pueden ver a los gemelos, lo primero porque no están aquí, no vendrán en todo el día, ayer tuvieron una cita tarde, y hoy le han dado el día libre, y lo segundo solo pueden pasar personas de la compañía – al terminar de hablar, siguió removiendo miles de papeles, no me iba a dar por vencida ¿no?

- Míreme, ¿no me reconoce? - rogué a todos los cielos que fuera seguidora del programa, y gracias a eso me pidiera un autógrafo, y me dejase pasar a verlos, o al menos me contara donde se encontraban, esta no hizo caso a mis suplicas, y empezó a teclear cosas en el ordenador- no soy una fan – susurré lo justo para que pudiese escucharme- Soy la ganadora de Gran Hermano – expliqué, esta me miró y produjo una sonrisa- de este año – había captado su atención, mi yo interior daba saltos de alegría, estaba un paso más cerca de verlos, creo.

- No he visto ese programa, pero vamos, si tu eres la ganadora de Gran Hermano, yo soy la hermana secreta de Michael Jackson – ironizo y siguió mirando la pantalla- mira niña, desde que llevo aquí me he encontrado a miles como tú, no hay día que no venga una "soy la prima de los gemelos" "soy la novia" "soy hija del fontanero de Sony" – imitó las voces de las chicas- y aquí no tenemos fontanero, me han contado miles de trolas, que ni el más crédulo podría tragarse – intenté explicarle que yo no mentía, pero la voz no salía de mi cuerpo- vete, por tu bien, o si no, tendré que llamar a seguridad, y créeme, no serán tan amables como yo.

Me quede un rato impactada, en shock, no entendía nada, la única persona en Madrid que no me había reconocido era justamente la que lo tenía que hacer, quizás sea verdad y el destino no me los tiene que poner en el camino... quizás todo esto sea una señal, para que no los conozca porque no será bueno.

Recorrí apenada el camino de vuelta, no tenía ganas ni de escuchar música. Con la cabeza baja, y viendo como la lluvia volvía a caer por mi cara, seguí andando cabizbaja, solo tenía ganas de llegar al hotel y acostarme, ahora más que nunca lo tenía claro, volvería, la vida ha ganado esta batalla y no tengo fuerzas para luchar, quizás mi vida no sea esta, y a lo mejor tengo que volver a lo de antes... quizás ese sea mi no y lo que me tocaría sería volver atrás.

Casi sin pensar continué andando, veía como la gente feliz andorreaba con sus paraguas, algunas de la mano de niños felices, la vida sigue igual como aquella canción que algunas veces mi padre tarareaba cuando me veía triste, "unos que ríen y otros lloraran, unos que nacen otros que se van, siempre hay porque vivir, porque luchar, siempre hay por quien sufrir y a quien amar, las obras quedan la gente se van, otros que vienen las continuaran, la vida sigue igual"

- Bianca – una voz conocida sonó tras de mí, miré atrás y era Deborah, si antes pensé en ella ahora estaba aquí, me apoyé a esperarla en el escaparate de una tienda.

- Hola Deborah – dije casi sin ganas- ¿Qué tal? – cuestioné mientras ella sonreía.

- Bien, muy feliz – miró su móvil y se le iluminó su cara- ¿y tú? ¿Qué haces por aquí? – preguntó, y le echó un ojo de nuevo al móvil- te he visto salir antes de la sede de Sony, y te he seguido, pero chica, corres mucho – bromeó y suspiré.

- Sí, he ido a preguntar por los gemelos – confesé y su cara cambió.

- ¿No te dije que ellos no te querían ni ver? – pareció molestarse, me cortó, no pude seguir hablando- es por tu bien, cariño – al darse cuenta de cómo me trató intentó parecer más dulce.

- Ya pero necesito verlos – conté conteniendo mis lagrimas- da igual no tengo suerte – miré hacia el escaparate y vi como una señora colgaba algo- quizás tenga que volver, aquí no estoy a gusto... imaginaba que esto sería de otra forma – suspiré y mi llanto empezó a brotar.

- Ya verás que todo es diferente – dijo convencida- cuando vuelvas a Sevilla, todo será diferente lo verás de otro color, aquí los gemelos no quieren saber nada de ti, has salido de un reality, y no todas las personas ven eso bien... - puso su mano en mi hombro compadeciéndose de mí- bueno tengo que irme, me esperan en menos de diez minutos, un gusto verte, y si no nos vemos más, ha sido un encanto conocerte, cuando vaya a Sevilla, te aviso – se despidió de mí y miré atrás de nuevo.

Me quedé observando un cartel que antes no estaba "Firma de libros del nuevo éxito basado en el fenómeno del momento Gemeliers", miré la fecha y era solo en un par de días, "lo firmaran la autora y los protagonistas, no dejes de asistir" y ahí todo cambió... no me iba a ir, o no sin intentarlo una última vez...

Eeeehh otro capitulazo y esta vez escrito por fjrs12

La foto de la firma me encata, o sea es perfecta y parece tann real jajajjsjj, nis lo ha hecho la fabulosa StoriesftGemeliers muchisimas gracias, ere una artistaza y a ver cuando subes el próximo capítulo😉

Esperamos que os guste mucho mucho mucho, pronto, nuevos capítulo.

Att: fjrs12 & jdomsogni