Capítulo 56.- Almería.
Emily
Un bache en la carretera hizo que me moviera bruscamente, me diera un golpe en la ventana que estaba apoyada y me despertara.
Miro a mi alrededor, no se escuchan los reproches de los gemelos ni a Bianca renegar, todo se encuentra en silencio exceptuando el leve ruido de la radio.
Me giro para ver que mi amiga sigue dormida como un liron, a ésta le gusta dormir más que a un tonto un lápiz, en fin. Miro por la ventana y puedo reconocer perfectamente el lugar en el que nos encontramos, ¡Por fin hemos llegado a Almería! Que ganas de ver a mí familia, de llegar a mí casa y tumbarme en mí sofá, de ver a mis amigos...
Al mirar por la ventana veo un cartel pero no me da tiempo a leerlo así que me giro para ver si lo leo y veo a Dani apoyado en el hombro de Jesús, durmiendo y éste mirando su móvil, no lo suelta ni pa' cagar. Este se da cuenta y me mira, yo le dedico una sonrisa y creo que piensa que soy bipolar pero es lo que hay.
Antes estaba cabreada, enfadada con el mundo porque pensé que mi amiga estaba con él, con el chico que esta empezando a revolucionar mi mundo, pero cuando Bianca me aclaró todo, el caos que había en mi se recompuso y todo se estabilizó. ¿Cómo quiere que me ponga despues de haber tenido una noche movidita y despues haberlo pillado hablando con mi amiga? Pues no sé, pero yo me pongo celosa, sí, estaba celosa, pero jamás lo reconocere y menos a él.
Vuelvo a mi posicion de antes y Manolo nos avisa de que ya hemos llegado, solo falta entrar a la ciudad. Espero que no haya mucha gente en la calle porque cuando vean al par de dos se puede formar la marimorena. Menos mal que he conseguido traerlos a Almería a firmar, porque no venían ni aún que les propusiera hacer un tour por las playas.
Intento despertar a Bianca, muy ilusionada porque vea mi tierra, pero esta empieza a hacer aspavientos raros y a renegar.
—Dani, como no me dejes tranquila te meto una patada.- ¿Qué dice esta ahora?
—Bianca despierta, que ya hemos llegado- le digo moviendola otra vez.
—¡Que te he dicho que me dejes en paz!
Por los gritos Dani se despierta también y Jesús y yo miraros raros a Bianca.
—¿Qué le pasa a esta ahora?- pregunta Dani un poco desorientado.
—Que se piensa que eres tu el que la quiere despertar- le contesta Jesús.
Al final conseguimos que Bianca habriera los ojos y tras esto empezo a insultar a Dani como una cosaca.
Mientras yo miraba por las calles de mi ciudad hasta que vi la puerta de mi casa.
—¡Bianca cállate! ¡Hemos llegado a mi casa!- de un momento a otro me levanto y me pongo en la puerta para que cuando Manolo pare la furgoneta yo salga corriendo.
—Vaya loca está hecha- escucho decir a Jesús. Lo miro de reojo pero no le digo nada, en estos momentos solo quiero llegar a mi casa.
Manolo aparca y abre las puertas, inmediatamente salgo de la furgoneta y me dirijo al portal de mi casa. He salido lo más rápido posible y comienzo a tocar el timbre repetidas veces.
—Luego es nuestra madre la que tiene el cielo ganado por aguantarnos, pero la de Emily tiene el universo...- habla Jesús picandome.
—A mi me quieren no como a ti- le respondo entrecerrando los ojos.
—A ti te quiere todo el mundo... sobre todo con el humor con el que te despiertas- me dice alzando las cejas.
—Mejor me cayo...- tras decir esto la puerta se abre y veo a mi madre un poco impresionada.
—¡Emily!- se abalanza sobre mí- ¡Ay mi niña cuanto te he echado de menos!- me abraza y yo le correspondo el abrazo.
—Yo también- le digo aún entre sus brazos.
—¿¡Emily!?- escucho una voz masculina salir desde el interior de la casa- ¡Dónde está la niña de mis ojos!- grita mi padre desde la otra punta.
Sin sacar las maletas ni nada les digo a los chicos y a Bianca que pasen dentro y les presento a mi madre, tras esto aparece mi padre.
—Era verdad, has venido a visitarme. Ya iba a ir yo a verte- me dice dandome un abrazo y muchos besos demasiados sonoros que hacen que los presentes se empiecen a reir.
—Papá sueltame ya- le digo intentando despegarme- mira estos son mis amigos- tras esto empiezo a señalarlos- ella es Bianca, mi amiga- mi padre la saluda animado- y ellos son Jesús y Dani- en este momento mí padre cambió la expresión de su cara.
—¿Tu eres el que está con mi niña?- dice dirigiendose a Dani.
—Eehh...- Este se queda sin habla, vaya dos.
—¡No! Papá, ese es Dani.
—¿Y quie está contigo? ¿Jesús?- yo muevo la cabeza en señal de que sí y un tanto avergonzada, la que va a liar. Mi padre se acerca al otro gemelo y este traga saliva.- así que eres tú el que esta con mi hija...- le dice mirandolo de arriba a abajo- más te vale tratarla como una princesa porque si no, tu amigo tendra un accidente- tras esto le da leves toquecitos en el hombro, Dani lo mira con respeto y Jesús un tanto temeroso.
—Bueno, dejalo ya que tengo muchas cosas que contaros- digo intentando acabar con este momento.
Mientras tanto Bianca, que es una cabroncilla, no hacia otra cosa que reirse de los dos hermanos y decirles que tenía que haber grabado sus caras cuando mi padres los ha cogido y la verdad que tiene razón, sus caras han sido míticas.
Cuando ya está todo más tranquilo entramos al salón y nos sentamos en los sofás, Jesús a mi lado y Dani al lado de Bianca, parecemos hasta una pareja de verdad. Al lado de Bianca, en un sillón individual, se encontraba mi padre, que quedaba justo enfrente de Jesús y de mí.
De repente veo como Bianca se hacerca a mi padre y le dice algo que alcanzo a oir, más que nada porque lo dice en alto a posta.
—Quien necesita un buen escarmiento también es Dani, puedes amenazar a dos bandas- ¿Que dice la loca esta?
Dani la mira con los ojos muy abiertos y mi padre se prepara para bombardearlo.
—¿Te ha hecho algo? Las amigas de mi hija son comos mis hijas así que...
—Cariño, deja a los chiquillos en paz, no los pongas nerviosos que no van a venir más a visitarnos- habla esta vez mi madre, sentandose junto a mi padre, en el reposabrazos.- sois más guapos en persona, Emily tenia razón cuando decía que erais bellísimos- ¿Qué? ¿A qué viene eso?
—¿Qué?- digo en un hilo de voz y Jesús me mira con una media sonrisa.
—Sí, antes no paraba de hablar de vosotros y cada vez que saliais en la televisión nos mandaba callar y nos decía que iban a salir sus novios.
—¿Eso es verdad?- dice Jesús con tono divertido mientras Bianca y Dani estan con la lagrimilla aguantandose la risa.
—¡No!- digo dirigiéndome a Jesús- ¡Mamá mejor cállate!- mi reputación se va a la mierda.- a Dani y Jesús no les importan esas cosas...
—Si, si... que esto está interesante- dice Dani.
—Tú mejor cállate eehh, que aquí podemos hablar todos- digo indignada.- mejor me voy a dejar la maleta porque como me quede mucho más reviento- tras esto, me levanto del sofá, cojo mi maleta y subo las escaleras hasta mi cuarto, pero antes de eso escucho que ellos también se vienen para instalarse.
—No os penséis que vais a dormir juntos, en esta casa cada uno duerme en un colchón- escucho decir a mi padre.- vuestra habitación es la tercera a la derecha- supongo que ellos asienten y después le dicen la habitación a mi amiga.
Una vez que yo estoy en mi cuarto colocando la ropa en el armario, la puerta se abre.
—Uy ¡Que cuarto más mono!- dice el inútil de Dani.
Yo me giro y veo a los dos pesados inspeccionando mi habitación.
—¿Qué haceis aquí?- les pregunto sin para de mirarlos.
—Nos hemos equivocado de habitación, pero ya nos quedamos aquí- dice Dani- la cama tiene pinta de ser comoda. ¡Bianca ven y mira esto!- grita el cavernicola tirandose a la cama. Bianca aparece y Dani se dispone a hablar- mira que camita más comoda para dos- dice levantando las cejas seguidas veces.
—Oh, no, ni loca, esta cama es mía- respondo esta vez yo.
—Bueno, entonces nos la quedamos nosotros ¿No?- habla esta vez Jesús mirandome pícaro.
Le hago caso omiso y sigo guardando ropa en el armario.
—¡Madre mía! ¿¡Pero que tenemos aquí!? Los libros, la trilogia Forever, tres discos y sus reediciones... ¿También tienes ropa del merch?- Jesus empieza a toquetearlo todo y me está poniendo de los nervios.
— Al final resulta que va a ser verdad que eres fan y todo- dice Dani.
— Pues claro que soy fan, tonto- le respondo- fuera de mi templo, ¡Ya!- les grito.
Lo están registrando todo y siendo sincera tengo cosas de cuando empecé a ser fan que si las ven podía morirme más de la vergüenza y prefiero que se quede sin saber.
—¿Qué hacéis en el cuarto de Emily?- de repente entra mi padre y eso hace que Jesús se de la vuelta y Dani se levante de la cama.- vuestra habitación es la tercera, así que vamos- tras esto salen de mi cuarto dejándome tranquila de una puñetera vez.
Tras intalarnos mi madre nos llamo para comer y cuando bajamos todos al salón ya teníamos la mesa preparada con tres pizzas en el centro de la mesa.
—Os he preparado unas pizzas para que no me renegyeis con la comida- dice mi madre con una sonrisa de oreja a oreja.
Tras esto nos sentamos y empezamos a engullir como cosacos.
Una vez listos nos sentamos y nos quedamos aburridos perdidos.
—Creo que el centro ya esta decorado para la feria, podemos ir a verlo y así os enseño la ciudad si quereis.- les digo animada y todos menos Bianca se levantaron de golpe.
—Uf que pereza, no me ha dado tiempo ni de hacer la digestión.- dice la muy vaga.
—¡Venga y mueve ese cuerpo nena!- le dice Dani tirando de ella y consiguiendo levantarla.
Al poco rato ya estabanos en la calle andando hacia el centro. Este año han puesto guitarras gigantes y mantones de manila.
Cuando llegamos a la zona de la feria del medio día empezamos a ver a mucha gente. Bianca y yo vamos juntas y los gemelos lo miran todo y en un momento de despiste dejo de ver a Jesús y Dani.
—¿Bianca donde estan los gemelos?- le pregunto nerviosa.
Estos en un momento forman una estampida de fans. Miedo me dan.
Miro a todas parte, creo que he dado tres vueltas sobre mi para mirar mi alrededor pero no los veo, hay tanta gente que no distingo nada.
De un momento a otro alguien coge mi mado.
—No me vuelvas a dejar solo- dice Jesús- que miedo he pasado, no te veia por ningún lado.
—Que miedo he pasado por ahí perdido, no me separo más de ti- le dice Dani a Bianca cogiendole la mano.
—¿Qué haces Dani? ¡Sueltame mono salido!
—No, que me pierdo y la hemos liado.
—Si os encanta ir cogidas de nuestras manos- dice esta vez Jesús- a demás, si hay prensa ya vamos preparados- me dice esta vez a mi giñandome el ojo.
—Sin comentarios...- digo yo rodando los ojos.
Tras esto seguimos andando por las calles llenas de música de feria, algún que otro carruajes de caballos y la gente vestida de flamencas y muy floridas.
Desde algunas calles del centro se ve la Alcazaba y les explico un poco su historia y todo lo relacionado con ella y ellos no paran de mirarlo todo, aún con nuestras manos cogidas, parecen dos niños pequeños. En verdad, y aunque no lo admitamos, nos gusta estar así.
Cuando ya es un poco tarde y hemos cenado unas cuantas tapas en un bar, nos volvemos a casa, estamos muertos, entre el viaje y la pasá de andar que nos hemos pegado es normal.
Mañana les presentaré a algunos amigos y saldremos al recinto ferial, necesito una buena fiesta con todos juntos.
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Bueno, el maratón termina aquí, darle las gracias a lidiia_om que tuvo esta maravillosa idea del maratón.
Esperamos que os guste mucho.
Att: jdcuore & jdomsogni
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