Capítulo 48.- Despertar.

Jesús

-¡Cómo vuelvas a insultarla de tal manera te rompo la cara! A ver si te vas a creer que eres más que ella, que comparada contigo es una reina y tu un trozo de mierda que no vale nada por tratar a una persona que quieres así, pero tú que vas a querer si eso se llama tener sentimientos y no sabes ni su significado- le reprocho harto de que la trate de esa manera cuando el culpable de todo es él.

Giro mi rostro hacia ella y la veo con los ojos acuosos, se levanta de su silla y sale del restaurante como alma que se la lleva el diablo, tras esto, hago lo mismo y corro detrás.

La pierdo de vista durante unos instantes pero por casualidad la veo por entre la gente dirigirse hacia un pequeño lago, voy tras ella y se sienta en un banco. Una vez a su lado, la intento calmar y cuando parece que todo está mejor me doy cuenta de que nos encontramos bastante cerca, no aguanto las ganas y me lanzo hacia sus labios, pero un ruido algo molesto inunda mis oidos y me impide besarla.

Abro mis ojos con pesadez y cansancio.

-Jesús, me cago en toda tu estampa, ¡apaga eso hombre, que es muy temprano!- grita mi hermano desde su lado de la cama.

Busco aquello que suena, un poco desorientado, y al final acabo encontrando el dichoso móvil en los pantalones que anoche dejé sobre la cómoda. Lo miro con un ojo entre abierto y otro cerrado, por la luz blanca que desprende, y veo que me estan llamando pero antes de que lo coja se corta.

Que impaciente es la gente de verdad...

Una vez que estoy en llamadas perdidas, veo que de ese numero tengo varias llamadas y se trata de la discográfica, ¿Qué querran ahora? No son ni las nueve de la mañana y se supone que estamos en nuestroa días libres, que pesados.

Vuelven a llamar y esta vez si se lo cojo. Al cabo de unos minutos cuelgo y levanto a mi hermano de un empujón.

-Dani levántate, la discográfica quiere que estemos en Sevilla a las doce, nos han organizado una sesión de fotos para los nuevos proyectos y para que nos vean con las chicas. Venga, levanta el culo gandul, que tienes que ir a llamar a tu fiera, que estará durmienso como una morsa- tras mi comentario Dani se ríe sin control, si Bianca me llega a oir diciendo esto creo que estaria camino al cementerio.

-No, no, no, yo no voy a llamarla, que la última vez que la desperté me llevé de todo menos cosas bonitas, ve tu y despierta a Emily que parece más pacífica- me contesta.

Al final, doy mi brazo a torcer, me visto lo más rápido que puedo y salgo del cuarto con dirección al de las chicas.

Abro la puerta sigilosamente y asomo la cabeza para ver que siguen dormidas y efectivamente lo estan.
Entro raudo y veloz en el interior de la habitación y sigilosamente me dirijo hacia la ventana para subir la persiana un poco hasta que se pueda ver algo, una vez hecho esto observo a las dos para identificar a Emily.

Bianca se encuentra durmiendo boca arriba, con unos cuantos mechones en su rostro, la boca medio abierta y estirada por toda la cama, por el contrario Emily duerme boca abajo, abrazanda a la almohada y rodeandola con los pies, también ocupando casi toda la cama. Tal para cual.

Me acerco a esta última, poniendome en cuclillas e intento despertarla lo más suavemente posible.

-Emily- empiezo a susurar su nombre pero esta no me hace ni caso- Emily...- alzo un poco más la voz y consigo que se empiece a mover- despierta, tengo que decirte algo...- gira su cara en mi dirección y veo su rostro dormido, esto me hace gracia pero me intento contener.

-Jesús, dejame dormir, bastante tengo con aguantarte por el día- me dice con un ojo abierto y otro cerrado, tras esto deja caer su cabeza nuevamente a la almohada.

-Emily hazme caso y levantate, tenemos que ir a Sevilla a una sesión de fotos- le digo esta vez.

-Pues vas a llegar tarde- me contesta con voz de dormida.

Esta niña es de lo que no hay.

-Vamos a llegar tarde, porque tú y Bianca también venis.

-¿Qué hora es?- me pregunta cambiando de tema.

-Casi las nueve...- y antes de que pueda terminar me corta.

-No he dormido mis doce horas, y sí, duermo más que un bebé, pero eso para mi es vida, así que dejame tranquila que nosotras nos quedamos con tu prima, así no se aburre.- me contesta decidida.

-No, os teneis que venir por si dice de hecharnos alguna foto juntos.- digo esto por lo que me ha dicho la discográfica.

-Mira Jesús, no le des ideas al fotógrafo, que os la heche a vosotros dos y ya está.

-Bueno... ¿Te vas a levantar o me vas a hacer que me meta en la cama contigo y te haga cosquillas?- sin más, vuelve a girar la cara y levanta una ceja.- ¿No te piensas levantar no?- tras esto no obtengo respuesta así que decido llevar a cabo lo que he dicho anteriormente.

Me pongo en pie y ella cierra los ojos creyendo que me voy a ir, pero no es así. Me siento en el borde de la cama y la miro desafiante, esta al notar un peso más en la cama se mueve un poco pero sigue con los ojos cerrados, yo termino de tumbarme a su lado, me pongo de lado, mirando hacia Emily, con el codo apoyado en la almohada, y esperando a que esta haga algo. Poco a poco veo como entreabre los ojos para ver si sigo a su lado y al verme allí parado los vuelve a cerrar de golpe.

-Jesús, puedo asegurar que por las mañana ere más tonto aún de lo que lo eres habitualmente, el desayuno es importante para tus neuronas- me contesta sin ninguna expresión en su rostro y sin abrir los ojos.

-Bueno...- digo en un suspiro- o te levantas tu solita o me vas a hacer levantarte por las malas- le contesto con una pizca de diversión en mi tono de voz que intento disimular.

-Parece ser que a parte de fallarte las neuronas también lo hacen tus oidos, ¿no me has escuchado decirte que quiero dormir? De verdad que eres muy pesado...

-Vale, tu lo has querido- tras esto me incorporo, paso una pierna hacia el otro lado de su cuerpo y me siento sobre su vientre.

-¡¿Esque eres tonto?! ¡Quitaté de ahí ahora mismo!- me grita desesperada.

-Uno... dos... y...- empiezo a contar sin hacerle caso a sus palabras anteriores.

-No se te ocurra hacerme nada eehh- me dice abriendo los ojos de par en par mientras me ve mover mis dedos como si fuera un loco, pensando lo que le voy a hacer.

-¡Tres!- y tras terminar de contar me avalanzo a ella haciendole cosquillas.

Emily se mueve por toda la cama, riendo sin parar y contagiandome la risa, intento seguir haciendole cosquillas mientras patalea y me grita que pare, pero mientras ella reía yo me percato que estamos demasiado cerca y sinceramente, me sobran las ganas de terminar aquel casi beso que ayer mi querida prima interrumpio y del cual he soñado esta noche.

-¡Sois unos cerdos! ¡Iros a otro sitio ha hacer vuestras cochinadas pero no delante mía! ¡Marranos!- grita la recien levantada Bianca.

-La fiera durmiente se ha despertado- hablo para hacer la gracia y separarme de Emily. Esta sigue riendo como una foca.

Me siento encima de esta y rápidamente cesa su risa para hablar.

-No, de ahí te quitas que pesas lo tuyo...- me dice Emily queriendose hacer la seria pero aún sigue con su ataque de risa.

-¿Me estas llamando gordo? ¿Cómo te atreves?- me hago el ofendido y tras esto me tiro encima de ella.

-¡No Jesús, quitaté de encima que me asfixio!- grita Emily empezando a desesperarse.

-Madre mía, vaya despertar me estais dando, voy a vomitar arcoiris- se queja Bianco mirandonos con asombro. Yo decido levantarme de encima de Emily y esta vez me tumbo encima de Bianca.- ¡Jesús no! ¡Cuando te levantes recuerda que te vas a quedar sin descendencia!

-No, espera, que ahora voy yo- Dice Emily levantandose de su cama y tirandose encima de Bianca y mía.

-Me las vas a pagar, ¡ten amigas para esto!- vuelve a reprochar Bianca.

Emily

Ya llevamos un rato riendo sin parar y Bianca poco a poco está mas roja de lo furiosa que está.
De buenas a primeras, la puerta se entre abre y una cabeza morena asoma por esta.

-¿Estais montando una fiesta sin mi? ¿Qué clase de amor es el que me teneis?- Dice Dani entrando a la habitación y tirandose encima de todos formando un bocadillo humano como cuando eramos pequeños.

Bianca se empieza a mover y esto hace que perdamos el equilibrio y aterrizaramos de golpe en la cama. Mi amiga se levanta de golpe y se pone la mano en el pecho dramatizando el momento.

-Sabía que estos dos simios no tenían remedio, pero tú, mi amiga, me has fallado, que decepción más grande...- me dice haciendose la ofendida.

-Venga que no es para tanto...- habla Dani, pero se calla de inmediato, cosa que me extraña demasiado. Miro a Bianca, que está demasiado rara desde que ha hablado.

-Bueno, no tardeis mucho, os esperamos abajo, a las doce hay que estar en Sevilla- dice esta vez Jesús saliendo por la puerta con su hermano.

{…}

Acabamos de terminar de desayunar y ahora vamos hacia la furgoneta de siempre, en la que nos espera nuestro fiel chofer Manolo. La verdad que el desayuno ha sido un poco tenso, yo por lo menos no me he sentido a gusto, veía a Bianca y a Dani muy distantes pero que a la vez se hechaban unas miradas que no eran normales y se intentaban esquivar constantemente, a ver como sale el día hoy.

Ya estamos montados en el vehículo y hemos recorrido casi la mitad del camino. Hace un rato Bianca me ha pedido que le cambiara el sitio y yo he cedido, algo le pasa y me lo va a contar como que me llamo Emily.
Justo al llegar a la gran ciudad andaluza cojo a mi amiga del brazo y la aparto un poco de los chicos.

-Mientras que los monos estos se hechan las fotos me vas a contar lo que te pasa, estas rara, muy rara...- tras esto seguimos nuestro camino hasta las instalaciones donde Jesús y Daniel se van a hacer ese pequeño reportaje.

Una vez allí, saludamos al fotógrafo que se va a encargar de las fotos y a todo el equipo de iluminacion y todas estas historias.
Los chicos se cambian de ropa y comienza el espectaculo, el fotógrafo les va indicando, más o menos, como se tienen que poner y hace unas fotos alucinantes. Este para un momento la sesión y sin esperarnoslo, nos llama a Bianca y a mi.

-Chicas, esto no lo suelo hacer, me gusta ser un profesilnal en mi trabajo, pero esta vez voy a hacer una excepción por ser vosotras- nos suelta sin más.

—Os voy a enseñar las fotos y me decis cual os gusta más- tras enseñarnos las fotos no podemos eleguir cual porque los muy jodios en todas salen bien.- muy bien Emily vas a ser la primera, ponte al lado de Jesús.- dice el hombre muy convencido.

-¿Qué? No, no, yo no me hecho fotos...- pero al decir esto el hombre me empuja hacia el centro de la sala donde me espera Jesús con media sonrisa- yo te mato- consigo susurrar al final y tras esto el fotografo nos coloca como quiere y dispara para hacer las fotos.

Despues de nosotros cogió por banda a Bianca y Dani e hizo lo mismo.

-Emily, cariño, coje aquellos trípodes del final, que los necesito- me dice el fotógrafo con cara de loco, así que decido ir por si mi vida corre algún peligro. Cojo los trípodes que estan justo al lado de la pareja.

-Dani, alejate un poco anda, que corra el aire...-escucho decir a Bianca.

-¿Qué pasa? ¿Te pongo nerviosa?...- habla esta vez Dani- no te preocupes por lo de anoche, es normar, al fin y al cabo somos amigos con derecho ¿no?- madre mía, lo que acabo de escuchar, normal que estubieran raros... luego va y se queja de mi como esta mañana, Dios los cría y ellos se juntan.

Vuelvo junto al fotógrafo para darle los tripodes  y tras esto me posiciono al lado de Jesús.

-¿Qué te pasa? ¿Te encuentras mal? Estas muy pálida Emily- me dice Jesús bombardeandome con preguntas.

-No, no es nada. Acabo de escuchar algo muy fuerte...

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Aquí otro capítulo!!

La cosa se pone intensa ¿No? JAJAJAJJAJA

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