Reinaba una tranquilidad en la época feudal, las princesas mitad demonio por fin se reencontraron con sus padres y viven felices. Ya no había peligro.

Towa y Setsuna se fueron con sus padres Sesshomaru y Rin al palacio de Sesshumaru, mientras que Moroha se quedo con sus padres en las afueras de la aldea de la anciana Kaede.

Un día la familia estaba viendo el atardecer desde lo mas alto de la colina, Moroha por fin sintió esa sensación de estar con las personas que mas amaba, claro después de Towa y Setsuna. Al igual Inuyasha y Kagome estaban contentos de estar con su hija después de estar catorce años separados de ella.

-Nunca había visto un atardecer tan hermoso- Comento Moroha.

-Se lo que se siente no ver el atardecer con alguien- Esta vez hablo Inuyasha- Pero por fin estamos juntos, como una verdadera familia- Tomo de la mano a Kagome y con su brazo derecho abrazo a Moroha.

-Yo también lo extraño, aquellos días donde estábamos solos, hasta que llego nuestro pequeño fruto- Kagome le dedico una hermosa sonrisa a si esposo e hija.

Pero la felicidad de la familia no duro mucho, ya que el sol se oculto dando paso a la noche, Inuyasha empezó a palpitar haciendo que Moroha se espantara un poco.

-Papa.

Las garras y colmillos de Inuyasha desaparecieron, sus orejas de perro también desaparecieron y le salieron orejas humanas, sus ojos cambiaron de un color ámbar a un color gris, y su cabello plateado cambio de color a negro. Se había transformado en humano.

-Papa ¿Eres tu?- Pregunto Moroha sorprendida al ver la transformación de Inuyasha.

Era cierto, era la primeras vez que Moroha ve a Inuyasha en su estado humano.

-Moroha tranquila, es solo que tu padre...

-Mi padre se convirtió en humano por la luna nueva ¿verdad?- Inuyasha y Kagome se sorprendieron.

-Enana, tu como sabes que puedo transformarme en humano en las noches de luna nueva- Comento Inuyasha.

-El anciano Myoga me conto cuando Towa también se transformo en humana en la noche de luna nueva- Dijo Moroha al recordar cuando Towa se convirtió en humana cuando estaban enfrentándose a Nikosen.

-Así que ese viejo te conto.

-Si.

-Ahora que sabes eso, también tienes que saber que al convertirme en humano soy débil, por eso no me gusta que Kagome me proteja.

-Pero lo hago por que te amo, a mi también me proteges cuando estamos peleando con un demonio- Comento Kagome.

-No te preocupes papa, ahora que estamos juntos, mi mama y yo te protegeremos.

-Moroha no quiero que hagan eso, que tal si salen lastimadas.

-No pasara nada papa, ya se dominar perfectamente mi estado demoniaco- Moroha se quería lucir.

-Tranquilo Inuyasha, nuestra hija es fuerte.

-Y para que no te sientas débil- Desato su moño rojo dejando su cabello suelto- Cada vez que haya luna nueva voy a desatarme el cabello para así estar contigo.

Inuyasha y Kagome se sintieron orgullosos de su hija, en verdad se parecía mucho a ellos.

-Te pareces a tu padre con el cabello suelto- Comento Kagome.

-Yo digo que se parece mas a ti Kagome- Inuyasha se acerco a Kagome sin importarle que Moroha los estuviera viendo- Después de todo heredo tu cabello- Le dio un beso en los labios a su esposa.

-¡Que asco!- Moroha se tapo los ojos al ver a sus padres besándose.

Inuyasha y Kagome rieron por el comentario de su hija. Ahora la familia estaban recostados viendo las estrellas, se podría decir que Moroha con el cabello suelto es la perfecta combinación de sus padres...Sin duda lo era.

#MorohaWeek