EMERY.

No sabía si los susurros que había escuchado eran reales, esta vez estaba dudando, los sucesos extraños que han ocurrido ahora son con más frecuencia.

Cierro mis ojos unos segundos, no entiendo que esta pasandome.

 Introduzco las manos en mi abrigo, observo unos segundos a lo largo de los árboles, esta sensación es conocida, volteo mi cabeza hacia los demás chicos, hablan, ríen, bailan nadie más lo nota.

Mi atención se centra nuevamente en los árboles, la luz de la fogata no alcanza iluminar entre ellos, en lugar de eso la luz de la luna es la que se filtra entre los árboles dando un aspecto de terror, incluso poca niebla comienza a nubla el lugar.

Aprieto mis manos en puños, doy un paso hacia adelante, por alguna extraña razón, quiero caminar hacia ahí. 

Aprieto mis labios y entre cierro mis ojos, salto en mi lugar cuando alguien se posiciona al lado mío, volteo mi mirada, Craig sonríe de forma brillante y eleva los dos vasos plásticos de color rojo en sus manos.

—Carrie me contó que no bebes alcohol, así que espero que te guste la gaseosa— Sonrío y tomo el vaso.

—Me gusta— Digo para luego dar un trago, Craig sonríe abiertamente de manera satisfecha.

—Que tal si nos sentamos por aquí— Dice mientras camina hacia un tronco, lo sigo y me siento a su lado.

—Carrie me comentó que te gusta leer— Elevo mis cejas y lo miro, noto con atención el brillo en su mirada.

—Lo sé, no culpes a Carrie fui yo quien pregunto sobre ti, siempre te he observado pero nunca me había animado a hablarte— un pequeño rubor se apodera de sus mejillas, muerdo el interior de mi labio y bajo mi mirada.

—Vaya, nunca pensé que podría resultar interesante— Murmuro un poco sorprendida.

Es extraño que un chico del equipo a parte de Carter se interese en mi, por que soy consiente de que solo lo hace para molestarme.

—Lo eres y mucho, sin embargo, Carter se ha encargado de hacerle saber al equipo de que no pueden ir hacia ti— Frunzo mi ceño, aprieto mis labios, suspiro y niego.

—Nada de lo que diga Carter es cierto— Susurro, Craig aclara su garganta, lo miro y sonríe.

Desvío mi mirada hacia los arboles al sentir de nuevo esa presencia, entrecierro mis ojos al solo notar la neblina cubrir el terreno de manera leve, frunzo mi ceño al notar un movimiento de una sombra detrás de uno de los arboles.

Trago con dificultad incapaz de quitar mi mirada, necesito saber que es, mi pulso se acelera.

Vete a casa. 

Otro susurro llega a mi a través de la música, abro mis ojos jadeo suavemente, volteo a mis lados, lo escuche, eso lo escuche claro, esa voz, esa voz se que la he escuchado.

—Emery— Al escuchar la voz de Craig vuelvo a la realidad, parpadeo un par de veces bajo mi mirada intentando disimular mi respiración irregular —¿Estas bien?— Aprieto mis puños en mis piernas, lo miro e intento sonreír. 

—Lo estoy, solo... tengo un poco de frio— Murmuro en un susurro, aclaro mi garganta y lo miro, el se queda en silencio unos minutos.

—Tienes razón, espérame aquí, iré por mi chaqueta al Jeep de Jay— Niego con mi cabeza, el sonríe y se levanta para alejarse de mi sin darme oportunidad de decir algo.

Dejo el vaso con refresco a un lado entre las hojas secas, paso mis manos por mi rostro, que esta ocurriendo conmigo.

Elevo mi mirada hacia las estrellas en el cielo nocturno, muerdo mi labio inferior, no debería actuar de esta forma frente a Craig, podría pensar que algo mal esta en mi, sin embargo, es verdad, algo mal debe estar conmigo.

Suspiro profundamente, apoyo mi barbilla en el dorso de mi mano, ladeo mi cabeza y mi mirada cae en donde estaba la extraña sombra.

Mi respiración se corta al observar a alguien con una capucha negra apoyado en uno de los arboles, su rostro oculto por la oscuridad,  sus brazos cruzados y su bota apoyada en el árbol.

Entre abro mis labios, y me enderezo para observarlo mejor, miro como se aparta del árbol su cabeza se dirige a mi dirección permaneciendo unos segundos de esa forma, mi cuerpo se tensa, tiene la misma figura de la persona que caminaba detrás mío en aquella noche.

Me levanto de golpe al ver que se dirige hacia los árboles el mismo sendero donde pude notar la sombra.

 Me quedo quieta mirando como camina entre la niebla hacia la profundidad del bosque, alarmada observo a los demás chicos en la fiesta, nadie más lo notó, solo yo.

Humedezco mis labios, dirijo mi mirada hacia el bosque, aun lo puedo ver, pero poco a poco la neblina hace que sea mas difícil distinguirlo.

El latido de mi corazón comienza a sentirse contra mi pecho, aprieto mis labios y mis puños, la desesperación comienza a correr por mi sistema, cierro mis ojos con fuerza, los abro y corro hacia su dirección.

Al correr entre los arboles intento evitar caerme, respiro aceleradamente, volteo mi cabeza.

 Nadie me sigue eso quiere decir que nadie me vio entrar al bosque, volteo mi mirada hacia al frente, poco a poco voy disminuyendo hasta que paro, no esta.

Aparto algunos mechones de mi cabello, y volteo a los lado, la luz de la luna no es mucha, casi no logro ver a la distancia, respiro profundamente tomando aire, donde esta, necesito encontrarlo.

Rápidamente la realidad llega a mi, no era real, trago con dificultad un dolor fuerte atraviesa mi pecho, me inclino y jadeo, el aire no llega a mis pulmones, caigo de rodillas e intento tomar aire.

No era real, nunca lo fue.

Cierro mis ojos con fuerza, trato de respirar profundamente, coloco mi mano sobre mi pecho, poco a poco el dolor disminuye, dándome la oportunidad de respirar, abro mis ojos y miro a mi alrededor, solo árboles me rodea.

Con dificultad me coloco de pie, observo mis rodillas cubiertas de tierra, hago una mueca me inclino para sacudir la tierra pero escucho una explosión a lo lejos que me hace detener.

Abro mis ojos, volteo mi mirada por el sendero por el que vine, es cuestión de segundos para luego escuchar gritos.

Carrie, Jay y Craig están en ese lugar.

Sin pensarlo corro para llegar al lugar de la fogata nuevamente, miro a los lados confundida porque nada se ve igual, cubro con mi mano mi boca y lagrimas se escapan rápidamente, sacudo mi cabeza al escuchar los gritos de los chicos que se encontraban en la fiesta.

Observo con desesperación a través de los árboles, noto la luz a lo lejos, debe ser la fogata, corro a través de las hojas secas, aparto algunas ramas del camino, conforme me acerco la luz es más fuerte.

Jadeo al acercarme, es fuego, el lugar se esta incendiando, mis amigos están en ese lugar, al salir de los arboles veo como muchos corren, las llamas comienzan a consumir las hojas secas del suelo, intento distinguir el rostro de mis amigos.

Corro entre algunas personas, choco directamente con alguien y caigo de espalda, hago una mueca al sentir el impacto, me levanto de forma desesperada, muchos gritan y lloran, miro a mis lados, las llamas han rodeado gran parte del bosque y el claro en el que se encontraba la fogata.

Mi labio inferior comienza a temblar, las llamas consumen todo a mi alrededor de forma rápida, miro a mi lado como dos chicas se abrazan entre ellas y lagrimas corren por su rostro, el humo cubre todo el lugar, comienzo a toser.

Hago una mueca y mi cubro mi nariz con mi abrigo, intento ver alguna salida, pero lo único que veo como las llamas nos tiene rodeados.

 El humo se hace cada vez más pesado, tozo de forma desesperada, el humo se introduce a mis pulmones asfixiándome, miro a mi lado los demás, también comienzan a ahogarse con el espeso humo.

No quiero morir, las lagrimas y sollozos hace que se me dificulte respirar aun mas, poco a poco siento mis ojos pesados, mi piernas fallan de debilidad pero coloco mis manos al caer al suelo

 No puedo ver nada, el humo cubre todo el lugar, tozo nuevamente hasta que mi cuerpo va perdiendo la conciencia.

Con mi mirada perdida observo como las llamas se acercan a mi, el calor es insoportable intento seguir respirando.

Parpadeo de forma pesada, no quiero morir.

frunzo mi ceño con debilidad al ver como una figura se acerca, parpadeo nuevamente e intento que mis ojos no se cierren, esa persona puede abrir su camino a través de las llamas, como es posible.

Esa persona puede caminar en medio de las llamas y no le sucede nada, parpadeo nuevamente, no puedo mover mi cuerpo, solo puedo ver como se acerca lentamente hasta quedar frente a mi.

Al inclinarse puedo ver mejor su rostro, tozo y lo observo, abro mis ojos sorprendida con la poca energía que me queda.

Es el chico extraño.

 El me mira fijamente con su ceño fruncido, extiende su mano hasta mi rostro y desliza su pulgar en mi mejilla, al apartar su mano miro su pulgar, esta lleno de ceniza.

 Como el puede estar intacto, sin ninguna quemadura o con ceniza.

El extiende sus brazos y me toma en brazos, parpadeo pesadamente mientras lo miro de manera fija, tozo fuertemente el me mira y su ceño se profundiza.

Camina mientras me sostiene en brazos, las llamas... nos quemaremos si se acerca a ellas. 

Entre abro mis labios al ver como dejamos las llamas atrás, como fuimos capaz de salir a través de ellas, miro a sus espaldas como dejamos las llamas. Elevo mi mirada hasta la suya.

Es él, es real...sus ojos están encendidos en llamas.

Intento decir algo pero todo se torna borroso y mis ojos se cierra.

                                                               .....

Nuevo capítulo

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