"¡John!" Sherlock gimoteó al sentir las caricias de la mano del mayor sobre su ropa, más específico sobre la tela de su camisa en sus pezones, John había apretado de más casi halando y retorciendo uno de los pequeños botones de Sherlock.

"Hey guarda silencio, lindo." John se acomodó como pudo posicionándose entre las piernas de Sherlock que este se había sentido bastante nervioso de abrir. "¿No tenías miedo que tus papis te escucharan hacía unos minutos?" 

Sherlock se había quedado boquiabierto tanto por las palabras de John como por el roce de una de las manos de este ahora en sus caderas. No duró mucho tiempo en ese estado porque John prontamente se dedicó a atacar su boca, chocando sus labios contra los de él, Sherlock aún solía ponerse muy nervioso entre tantos besos y caricias por parte del chico mayor y tardó un poco en sentirse lo suficientemente cómodo como para enredar sus dedos en la cabellera rubia de John mientras esté le besaba.

Esto se había vuelto lo habitual para el joven Holmes, treparse en el techo con la pequeña esperanza de que John estuviera ahí se había convertido en reuniones con el otro chico más planeadas, en roces mucho más pronunciados y ahora en muchos momentos estando gimiendo y quejándose en la habitación de John, la cual no estaba del todo lejos del oído de los padres de Sherlock, por ello le daba bastante temor que lo escucharan.

No sabría exactamente cómo definir su relación pero estaba bastante claro que John siempre había tenido interés en él y Sherlock sabía de sobra que a él John le parecía bastante atractivo e interesante. Lo suficiente como para subir como idiota al techo y obedecerlo en todos sus movimientos.

Su relación había avanzado en extremo, pero le alegraba que John continuara siendo bastante comprensivo y lindo con él, aún con toda esa pinta de chico malo que subía a masturbarse y fumar al techo.

"No tenemos que hacer nada hoy si tienes miedo." John le aseguró sosteniendo su barbilla pero aún con esas palabras rozó la entrepierna de Sherlock con su pierna, apretando un poco el pequeño miembro de Sherlock atrapado en sus elegantes pantalones. "Además…" Remarcó la palabra con un ligero beso. "Sé lo ruidoso que puedes ser a veces cuando te la estoy metiendo."

Si no fuera porque se habían estado besando hacía varios minutos y eso provocaba que Sherlock quedara con el rostro completamente teñido de rojo, el comentario de John hubiera logrado encender mucho más la ya sonrojada cara del menor.

"Yo-no…" Sherlock pensó mejor su contestación ya que sabía que negarse o titubear, solo alentaba más al mayor. "Sí quiero hacer algo hoy…"

John arqueó una ceja, su mano izquierda ya peligrosamente deslizándose por debajo de la camisa blanca de botones del chico debajo de él, el abdomen de Sherlock caliente y moviéndose rápido por la respiración entrecortada del chico.

"¿Sí?" John descendió soltando la barbilla del chico para comenzar a entregar algunos besos en la mejilla de este, luego su cuello y terminando casi en su clavícula, para luego intentar volver hasta el cuello de Sherlock, besando y succionando, tratando de no marcar aunque eso en verdad lo deseaba desde hacía tiempo. "¿Qué es?" Su lengua se deslizó por algunos centímetros del cuello del menor, el cuerpo de este soltando un espasmo por el escalofrío que le había recorrido y un gemido ahogado no se hizo esperar. Luego de estar algo de tiempo disfrutando de la piel del otro chico, John decidió que quería verlo a los ojos, volviendo a disfrutar de aquel sonrojo que se podía observar desde su cuello hasta la punta de sus orejas, pasando por toda su cara.

"Yo… quiero…" Comenzó Sherlock con vergüenza por el contacto visual y la sonrisa presuntuosa de John. Tragando la pena y su rostro tornándose más rojo, Sherlock alejó sus manos de dónde las tenía acomodadas, por un segundo las juntó debajo de su pecho y John bajó la mirada curioso, viendo las manos de Sherlock moverse de manera torpe pero no tardó mucho en regresar su mirada a los ojos del menor. Primero su mano derecha fue a dar en el borde del pantalón de John, que para fortuna de ambos estaba sin cinturón, mientras que su otra mano titubeante se posó por encima de la bragueta de este, sintiendo ya el bulto que ocultaba la tela.

Un gemido por lo bajo se escuchó por parte de John, la mano izquierda de Sherlock comenzando su trabajo de frotar la erección del mayor por encima del pantalón y la derecha aferrándose al borde de este, John inconscientemente comenzaba a oscilar sus caderas.

"¿Quieres tocarla?" Cuestionó John sin romper el contacto visual, la sensación de la mano de Sherlock haciendo lo posible para complacerle le estaba maravillando, para calmar un tanto sus ansías mordía su labio inferior esperando una respuesta de Sherlock antes de actuar.

El chico menor tan solo negó con la cabeza sin detener sus aferrados movimientos, su lenguaje corporal fue notado por John, Sherlock algo inconsciente quizás pasó su lengua por sus labios, mojandolos por un segundo.

"Ya veo…" Ahora John enteramente restregaba su miembro contra la mano del otro chico, el calor entre ambos en aquella zona ya presentándose, sabía lo mucho que Sherlock se apenaba de mostrarse tan íntimo, le había costado un poco llegar a tanto en tan poco tiempo pero ahora podía disfrutar de su poca iniciativa, aunque la vergüenza lo inundada en ocasiones y no podía decir lo que deseaba. "¿Quieres chuparmela, encanto?" Su mano izquierda se dirigió de nuevo a la barbilla del otro chico y con prisa acarició el labio inferior de este con su pulgar, por todo lo largo notando los ojos de Sherlock dilatados aun más con deseo por la pregunta de John.

El pensamiento de la primera vez que aquellos labios se habían posado alrededor de su polla, cerrándose inocentemente, embriagó a John por completo; los dulces sonidos que soltaba Sherlock al intentar bajar y subir por toda su longitud, tratando de complacerlo, fueron los que más habían llevado a John al orgasmo. No había estado en sus planes y por ello había sido tan desastroso, pues sin querer había terminado viniéndose dentro de la boca del chico, ocasionando que éste al no poder soportar tal cantidad terminase retrocediendo. Aquello tuvo como resultado que los últimos finos listones de semen fueran a parar al sonrojado rostro de Sherlock, al igual que sus rizados cabellos que en todo momento se mantuvieron sujetos con fuerza bajo el firme agarre de los dedos de John. Sherlock se había visto más que perfecto y mucho más cuando John pudo notar la forma en que tragó el exceso de semen que había quedado en su boca. Sería la segunda vez que Sherlock estaría presentando aquellas actividades para John, tampoco era como que el chico rubio quisiera forzarlo, le fascinaba mucho más que el joven Holmes se lo pidiera.

Los ojos del chico de cabello rizado se entrecerraron ligeramente para dar paso a un pequeño asentimiento, se notaba la pena por culpa de las palabras de John.

"Puedes pedírmelo… con palabras." John arremetió contra la mano de Sherlock y este solo cerró un poco más la palma ahora sin duda notando la polla de John lo suficientemente dura. "Dime… 'Quiero chuparte la verga'."

El calor emanando del rostro de Sherlock continuó haciéndose presente y las sucias palabras de John llegaban al efecto deseado dejando perdido al joven Holmes, John por su parte estaba esperando con una sonrisa de lado en el rostro y su polla más dura de lo que estaba antes.

"Qu-quiero… quiero chuparte la verga, John…" El lenguaje sucio se sintió en extremo raro en sus propios labios, una vergüenza se apoderó de él por un momento pensando en sus padres y qué le dirían si continuaba practicando estas actividades con John Watson.

Pero sus padres no estaban enterados, por el momento.

"¿Sí?" Cuestionó John bajando hasta el rostro de Sherlock de nuevo. "A mí también me encantaría ver esos lindos labios alrededor de mí polla." Musitó sabiendo de sobra lo que sus palabras provocarían así que rió por lo bajo.

John de un brinco se enderezó en su propia cama, las manos de Sherlock siendo alejadas automáticamente del miembro de John por los movimientos de este. No pasaron muchos segundos hasta que John le tendió la mano a Sherlock para poder levantarse y así ambos quedaran unos momentos sentados en la cama, John a la orilla y Sherlock en el centro.

Sin ordenarselo Sherlock se había puesto de pie frente a John en cuestión de segundos, de forma voluntaria el chico de tatuajes había abierto un poco sus piernas, posando su mano izquierda en su entrepierna, masajeando su erección por encima de la ropa. Con un movimiento de cabeza, John señaló a Sherlock que se pusiera de rodillas frente a él y este mismo frotó una de sus manos en forma de puño nerviosamente para luego dejarse caer entre las piernas de John.

Esta vez John fue el que abrió su bragueta poco a poco con una sonrisa satisfactoria, la vista de Sherlock atenta y analítica ante cada movimiento de John. Su erección prontamente estuvo liberada mientras que alzaba un poco sus caderas para poder bajar su pantalón y boxer un tanto por sus muslos, dejando que su polla y testículos tuvieran mucho más espacio libre. La mirada de Sherlock era la misma, mientras que sus manos descansaban en forma de puño encima de su pantalón caro de vestir, la posición le hacía de por sí sentirse bastante sucio ya que el estar de rodillas solo era reservado para los rituales y las reuniones con sus padres, no debía arrodillarse para nadie más pero ahora era la segunda vez que lo hacía para John Watson.

Sherlock se acercó de rodillas hasta las piernas de John, tomando sus muslos colocando sus manos ansioso aproximando su rostro al miembro de este, la verdad estaba esperando otra señal por parte del mayor para poder acercar más su rostro y empezar con su tarea pero por el momento John solo acariciaba su polla, envolviendo su mano y arrastrándola arriba y hacia abajo, un ritmo lento que combinaba con la sonrisa de lado en su rostro y sus ojos observando al chico de rodillas entre sus piernas.

Las claras dilatadas pupilas del joven Holmes hacían ver a John el gran deseo que el chico menor tenía de comenzar con su tarea, esto era acompañado del sonrojado rostro del chico, probablemente esta vez por vergüenza o anticipación.

La mano que John mantenía en su miembro fue a dar a la cabellera de Sherlock, solamente posándose ahí, acariciando los rizos oscuros del otro chico y cuando pudo jurar que casi tenía a Sherlock ronroneando con las caricias, John incitó ligeramente con su mano a qué Sherlock acercara mucho más su rostro, en una clara seña para que Sherlock pudiera comenzar. Casi al instante de aquello, John dejó ir los rizos del menor, prontamente dejando descansar sus manos a sus costados, apoyándose en la cama e inclinándose un poco hacia atrás, mejorando el ángulo para Sherlock.

Sherlock se inclinó ligeramente hacia delante hasta que sus labios tocaron la punta de la polla de John. Frunciendo sus labios alrededor, casi depositando un pequeño beso en la punta al comenzar, el mayor tuvo que tratar de ocultar una pequeña risa que le provocó tal gesto, Sherlock siempre era así cuando se trataba de sus encuentros y actividades, aunque la ingenuidad de Sherlock en sus administraciones le estaba comenzando a gustar a John.

"Vamos, lindo, métela toda en esa linda boca." Soltó John y los ojos de Sherlock pasaron de mirar la longitud de John a mirarle directo a él.

Sherlock luego sacó su lengua para que la punta tocara lo largo de la polla del mayor, bajó y subió, saboreando de una vez el líquido pre-seminal gotear de la punta de la polla de John. El menor no esperó más e intentó hacer caso a las órdenes del rubio, engullendo lo más que podía la larga y gruesa polla delante de él, no era nada más que la mitad que Sherlock podía tomar en ese instante sin sentir arcadas y sus ojos llenarse de lágrimas, por lo tanto bastaron unos tantos movimientos para que de nuevo sacara el miembro de John y mejor procediera a lamerlo.

El menor sacó la lengua por completo y comenzó a lamer alrededor de la cabeza de la polla caliente y húmeda del otro chico, soltaba algunos gemidos que combinaban con los de John. Sherlock se apoyaba de su mano, sosteniendo la base del pene de John para poder lamer y succionar con mayor facilidad. Con rapidez comenzó a girar su lengua, ganándose gemidos del otro chico y más pre-semen escurriendo de la punta, arrastró su lengua desde la punta hasta que llegó a la base, removiendo su mano para dar acceso. Sherlock se tomó unos segundos repitiendo este proceso hasta quedar de nuevo en la base y dudoso de lo siguiente se inclinó más hacia abajo, comenzando a lamer uno de los testículos de John. La primera vez que le había dado una mamada no había tenido la oportunidad de hacer tantas cosas por la inexperiencia pero en verdad quería impresionar a John, quería hacerlo sentir bien, se había esforzado bastante en días anteriores buscando cosas en internet sin que sus padres se dieran cuenta.

El menor sintió la respiración de John volverse más pesada cuando colocó ambos testículos dentro de su boca, empezando a succionar y en ocasiones lamer, acompañando las acciones de su boca con su mano derecha bombeando la polla de John en un ritmo lento.

"Mierda, Sherlock…" En un acto reflejo su mano fue a dar de nuevo al cabello de Sherlock. "Lo estás haciendo muy bien… muy bien." Sus dedos se enredaron en los rizos acariciándolos ocasionalmente, Sherlock aún lamía ambos testículos pero ahora miraba hacia arriba encontrándose con los ojos de John. "La chupas excelente para ser tu segunda vez, lindo…"

Sin darle tiempo de procesar, Sherlock dejó ir los testículos de John para pasar su lengua de nuevo hasta llegar a la punta, tragando el poco pre-semen que había soltado la polla por el ritmo de su mano, frunciendo sus labios alrededor de la punta de nuevo.

"Mira…" John le acarició los rizos logrando que Sherlock se alejara de su erección unos milímetros con un pequeño sonido mojado y casi se derretía al ver tales labios tan rojos y humedecidos. "Quédate así… así… suelta mi polla y deja tus manos en mis piernas." John le guió, colocándole justo frente a su miembro y haciéndole abrir la boca, sabía que Sherlock se ahogaba fácilmente y quería que fuera capaz de tomar toda la longitud de su polla por primera vez y que él igual lo disfrutara.

"Iré empujando un poco tu cabeza hasta que llegues a la base ¿Está bien?" Comenzó a decir mientras que los labios de Sherlock ya chocaban con la cabeza de su polla y sintió a Sherlock asentir lentamente para luego cerrar sus ojos.

El agarre en los rizos del menor se hizo más fuerte y con la ayuda de John, Sherlock fue descendiendo poco a poco y sin tanta prisa para no provocar tantas arcadas. A medida que Sherlock llegó a tragar toda la polla del mayor, John notó las manos de este en sus piernas apretandolas conforme se le hacía más difícil tragar, conforme los segundos pasaban y Sherlock se mantenía ahí, al menos solo sus nudillos se tornaban blancos por el agarre y no porque Sherlock hiciera afán de apartarse de pronto como la vez anterior. John sabía que el menor estaba haciendo el mejor intento por no alejarse y satisfacerlo, John se tensó ante este último pensamiento.

Sherlock hacía lo que podía mientras que sus ojos se tornaban algo vidriosos cuando la polla de John estuvo por completo en su boca, el glande llegando hasta la garganta del menor. John se contuvo unos cuantos segundos manteniendo la cabeza de Sherlock en el lugar con un toque suave.

"Tranquilo… eso es… buen chico, Sherlock…" John profirió un gemido alto apartando de un tirón a Sherlock luego de llenarle de cumplidos, la habitación rápido se llenó del sonido de Sherlock tosiendo mientras que se sostenía de las piernas de John, cerrando los ojos vidriosos por momentos hasta recuperar la compostura. "Así, respira un poco…" A John le llenó de placer la mirada derrotada y rostro sonrojado del otro chico, rastros de saliva y quizás un poco de pre-semen en sus labios y por su mejilla derecha un rastro de una lágrima que llegó a soltar por las arcadas.

Se escuchó como Sherlock volvía a tomar aire, tratando de componerse lo más pronto posible y solo bastaron un par de segundos para que se volviera a colocar bastante cerca del miembro del mayor, con la boca bastante abierta y una mirada esta vez un poco más dócil que la anterior, al parecer más consciente de cómo debería verse su rostro en aquel instante.

John al entender el lenguaje corporal de Sherlock, sin aviso como la primera vez, haló al menor hacia adelante y Sherlock fue tragando toda la longitud esta vez de una forma más rápida ya que John no había esperado tanto. Los labios de Sherlock se sintieron hasta la base de la caliente polla del mayor, su nariz casi tocando los vellos púbicos de este y las arcadas amenazando con volver.

Esta vez John dejó que Sherlock explorara sus límites por unos momentos, sintiendo la cabeza de este moverse hacia arriba y hacia abajo en cuestión de segundos, con un tortuoso ritmo lento John sentía la cabeza de su polla chocar con la parte de atrás de la garganta del joven Holmes. 

Sherlock intentó hacer lo que pudo tratando de meter lo más que podía toda la polla del mayor hasta que sentía que chocara con su garganta, hasta que su respiración se encontrara con el pubis del otro chico y sintiera que las arcadas no podían ser controladas, inevitablemente los sonidos comenzaron a producirse mientras que su ritmo continuaba.

"Okay así está bien…" La respiración entrecortada del mayor se hizo presente cuando esté habló, con el mismo agarre en los rizos del otro chico le indicó que se detuviera y de un jalón no tan brusco lo hizo hacia atrás, la saliva que se había recolectado en la boca de Sherlock ahora conectaba sus labios con el glande de la polla de John, dejando mostrar una escena bastante erótica acompañada del destrozado rostro del menor. "Quédate en esa misma posición, solo… voy a…" John fue veloz para ponerse de pie y dejar sus pantalones caer hasta sus rodillas, ahora la mirada de Sherlock alzándose un poco más para poder encontrarse con la de John.

Sherlock se compuso en su lugar e intentó quitar el exceso de saliva y lágrimas en su rostro con la manga de su camiseta. El hecho de que John había preferido estar parado solo significaba una cosa, y eso era que deseaba tener más control de los movimientos de Sherlock, cosa que a este último le parecía bastante excitante al igual que todo desde el comienzo. Se sentía excesivamente duro en sus pantalones y el solo pensar en tener la polla entera de John de nuevo en su boca hacía que su pollita se moviera ligeramente sin poder controlarla, buscando fricción que por el momento no sería otorgada.

"J-John…" John bajó la mirada un momento volviendo a acariciar el cabello de Sherlock.

"¿Qué pasa, encanto? ¿Estás bien?" Cuestionó bastante más suave de lo que quiso mostrar mientras que ahora con su otra mano masajeaba su miembro.

"Estoy bien." Sherlock comenzó. "Es solo que… quería pedirte algo." No pudo evitar el rehuir la vista y bajarla un tanto.

"Por supuesto, pues decirme." John le aseguró todavía proporcionando caricias ahora en sus mejillas.

"Yo… yo quiero…" El menor buscó lo que le quedaba de fuerza para volver a mirar a los ojos al otro chico. "Quiero que te vengas en mi rostro, John… ¿Por favor?" 

Justo cuando John pensaba que quizás lo que le diría Sherlock haría que su erección se fuera ocurrió todo lo contrario, pudo sentir la sangre fluir e incluso quizás se sonrojó un poco ante la petición de Sherlock. Por supuesto que le hacía excitarse el imaginar el rostro y esos bellos pómulos cubiertos de su semen, la vez anterior Sherlock había intentando tragar pero no se había puesto a pensar que quizás el ver a Sherlock de tal manera era mucho mejor o quizás igual de gratificante visualmente.

"Lo que gustes, lindo." Acto seguido terminó sus caricias pasando su mano por uno de los pómulos del chico.

Ahora con ambas manos posicionó el rostro de Sherlock completamente de frente a su polla, ya mucho más palpitante y caliente, sus testículos se sentían pesados y mucho más luego de las administraciones de Sherlock hacía unos momentos. Con la punta dibujó los labios ahora abiertos del menor por unos instantes y luego abandonó la acción para devolver su mano a aquellos rizos y empezar a arremeter contra la boca de Sherlock.

Fue bastante diferente porque en verdad esta vez John sabía que no se resistiría tanto como cuando estaba instruyendo a Sherlock, entró con rapidez y algo de fuerza, sus testículos chocando con la barbilla del otro chico y sus dedos enredándose en el precioso cabello.  Soltando un gemido que sonó muy parecido aún gruñido áspero, John cerró los ojos un segundo disfrutando del calor de la boca de Sherlock y prosiguió a encontrarse con la mirada de este, haciendo su mejor esfuerzo como tantas veces.

El mayor comenzó un ritmo que embestía contra la boca de Sherlock erráticamente al poco instante, John había tomado aquellos rizos en ambas manos y movía bruscamente la cabeza de Sherlock contra su polla, una y otra vez, deleitándose con los sonidos que producía la boca de Sherlock al ser usada de tal manera.

La vista era igual de placentera, los preciosos ojos del joven Holmes ahora vidriosos en su totalidad mientras que algo de saliva combinada con pre-semen salía de la comisura de sus labios, todo un espectáculo que John estaba amando presenciar. Los gemidos ahogados de Sherlock se escuchaban más y más, apretaba sus manos con fuerza al perder el aliento por completo y las abría cuando John salía de golpe. Al cabo de un minuto las manos de Sherlock fueron a parar a las piernas de John, intentando sostenerse del fuerte movimiento.

Fueron varias estocadas después, John jadeando y Sherlock tratando de componerse del ritmo sin detenimiento, que John dejó de sostener a Sherlock con su mano izquierda y buscó su miembro para tomarlo. 

Sherlock sintió su rostro ser apartado y la polla de John salir de su boca, algo de saliva cayendo al suelo y parte de sus pantalones. Observó desde su lugar a John bombear su erección con bastante rapidez y casi como acto reflejo abrió la boca sacando la lengua, sus ojos atentos a la polla de John.

Al sentir las primeras gotas y escuchar el largo gruñido que profirió John, Sherlock cerró los ojos y su rostro comenzó a mancharse poco a poco, sintiéndolo mojado y el sabor amargo también en la punta de su lengua por lo poco que había caído ahí. Era bastante, Sherlock estaba seguro de aquello, porque sentía parte de sus mejillas y pómulos mojarse al igual que gran parte de su lengua y frente, John aún gimiendo por lo bajo y el menor alcanzando a escuchar algunas palabras.

"Mierda… Sherlock…" La mano de John todavía acariciando su polla bastante lento, retrayendo el prepucio con la punta bastante húmeda, restregando parte de está en la mejilla de Sherlock en el proceso. "Te ves precioso…" 

Sherlock tragó lo que había en su lengua y sus ojos se abrieron al fin, encontrando la mirada y sonrisa satisfecha del mayor aún restregando su miembro contra su rostro, Sherlock no podía sentirse más caliente en aquel momento. Algo dentro de él se excitaba mientras que veía que ahora sus pantalones caros y su camisa también habían sido algo manchadas con el semen de John, se veía bastante desaliñado y se sentía sucio, el estar arrodillado también ayudaba con ello.

"Vamos, encanto, tengo que limpiarte o mami y papi me van a dar una paliza." John tomó a Sherlock de la mano y lo obligó a pararse, prontamente fallando y teniendo que sostenerse de los brazos de John.

El joven Holmes entre todo ese proceso y un par de risas de John, buscó en su bolsillo trasero y sacó algo. Era el pañuelo que John le había otorgado en su primer encuentro y como pudo intentó limpiarse un poco el semen que había en su rostro, John mirando expectante.

"¿Es mi pañuelo?" Una sonrisa se dibujó en la cara de John, tomando el pañuelo y ahora limpiando él el rostro de Sherlock. El menor solo asintió mientras John le limpiaba. 

"Oye…" Al terminar John se acercó al oído del menor a susurrar. "Ahora yo quiero pedirte que me dejes cogerte un día de estos con tu lindo rostro cubierto de mi semen." John dijo sin tapujos y al haber terminado la frase dejando un pequeño beso en la mejilla de Sherlock.

El rubor volvió a todo el rostro del joven Holmes, el cual se quedó paralizado e imaginativo, su cabeza pronto llenándose de escenarios donde John le ponía en cuatro mientras que su rostro aún estuviera cubierto de su semen. En definitiva Sherlock amaba esa idea.