Continuación...

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La última competencia se desarrollaba con un claro empate entre Ildio y Tetsu. El público se encontraba muy indeciso entre por quien votarían y las opiniones estaban muy divididas.

Las personas que querían que tetsu ganara usaban de argumentos el hecho de que la presentación de tetsu era más cultural e histórica, además de que este era bello y atractivo por naturaleza, mientras quienes querían que Ildio ganará, simplemente estaban Hot.

Antes de que las discusiones llegarán a mayores guild finalmente dio luz verde para permitir las votaciones y estas sin esperar, tomaron un rumbo muy rápido, elevando los números por mucho en solo instantes.

—¿Qué esperas para votar?—preguntó Lily curioso al ver que Niccoló no tenía su celular en mano.

—Pues... para resumirlo podria decir que no tengo un celular.

—¿A estas alturas?

—Lo sentí innecesario.

—Bueno, acabo de votar así que puedes usar el mío—ofreció Lily amablemente mientras le extendía su celular.

—¿Eh? Gracias—respondió agradecido mientras tomaba su celular.

En lo que este ponía su correo, las votaciones se habían detenido con tiempo de sobra. Tanto Tetsu como Ildio estaban claramente empatados, sin un participante más que pudiera elevar a uno como el ganador.

—¿Esto es enserió?—Mencionaron indiferentes algunas votantes de Tetsu, sintiendo una ofensa muy grande al ver como es que Ildio sí había llegado al nivel de tetsu. Creían que aquello era una ofensa muy grande hacia su cultura y hacia la institución en sí. Básicamente eran personas que llevaban una ética extremista.

—¿Tienen algún problema?—preguntaron molestos el otro grupo de personas, quienes claramente se sentían ofendidos y atacados, al no ser respetados por sus votos.

La tensión crecía en aquel auditorio mientras ambos bandos empezaban a discutir en voz alta, atacando directamente a los gustos de cada persona.

Guild empezaba a preocuparse al notar que la situación salía de sus manos. Sus alumnos empezaban a gritarse entre ambos bandos de una manera nada constructiva y por un segundo creyó que en pocos segundos todos se lanzarían a pelear, cuando su salvación finalmente se dio.

La pantalla había hecho un sonido que aparecía al momento de votar, llamando la atención de cada alumno, quienes voltearon a ver la pantalla, notando que ya habia un ganador.

《 Ildio Servamp 》

Fue inevitable para los votantes de Ildio saltar de alegría y festeje al ver que habían ganado, burlándose por mucho del otro equipo; de cualquier manera, ellos habían empezado ese pleito.

Mientras tanto la persona responsable del voto no pudo evitar sentirse ligeramente confundido al ver como se había desarrollado la situación.

—¿Qué pasó?...—preguntó confundido Niccoló, viendo el resto del auditorio. Él sólo había alcanzado a oír discusiones pero no le había tomado gran importancia al asunto.

—Bueno... se podría decir que fuiste la persona que decidió el futuro de esta votación.

—¡¿Ha?!

—Felicidades, supongo.

Esa situación realmente lo habría dejado como el centro de atención si todos se hubieran dado cuenta. Agradecía profundamente el saber que Ildio no se enteraría de eso nunca, por que si no lo más seguro es que lo tomaría a su favor y lo molestaría con eso por el resto de su vida.

Ah, ¿Ya llegaba a considerar que lo vería por el resto de su vida? No le gustaba como se formaba la idea en su mente.

—¿Estas bien?—preguntó preocupado lily al verlo completamente rojo.

—S-Sí. No es nada.—trató de calmar a Lily para no levantar sospechas, aunque claramente eso ya no servía, después de todo Lily ya se había dado cuenta y a decir verdad, realmente no estaba en contra, solo un poco preocupado por Niccoló, pues este lucia muy dudoso. Deseaba que pudiera aclarar mejor esas ideas antes de terminar lastimando a Ildio y a sí mismo.

(...)

El día siguiente se desarrollo la competencia de básquetbol. Todos los salones daban muy buena batalla en esa competencia y las victorias a penas y se daban por 2 o 3 puntos de diferencia.

Por el 3-E competían Tsubaki, Belkia, Lawless y otros de sus compañeros.

Licht veía algo aburrido aquel partido, no era como si fuera un fanático del básquetbol después de todo, pero de alguna manera se sintió atraído al ver como sus compañeros y conocidos jugaban.

—¡Por aquí!—gritó Lawless levantando las manos como señal para que le pasaran el balón, cosa que había conseguido, lanzando la pelota directo al aro y encestando a la primera, recibiendo por ello una ovasión de sus compañeros hasta ser el centro de atención durante unos segundos.

Licht no era la excepción. También se le había quedado viendo en ese instante, al punto en el que luego, su mirada ya no podía despegarse de él.

Por su mente solo pasaban pensamientos de los últimos meses. Recuerdos entre ellos algo irritantes de las primeras veces que llegó a su salón de la nada para buscarlo, o cuando había noqueado a guild con una pelota y luego trato de hecharle la culpa a su hermano; pero también recuerdos más agradables como cuando lo ayudo eligiendo sonatas de su música para determinadas ocasiones de una escena teatral, o cuando lo jalo a una supuesta salida en la que fueron al zoológico.

Lawless era un 50/50 en actitud. A veces muy irritante u otras veces muy encantador.

Esa actitud le recordaba mucho a alguien, tal vez por eso de sentia confundido.

No era posible enamorarse de dos al mismo tiempo ¿verdad?. Él desconocía mucho esas posibilidades, así que solo descartaba aquella idea diciéndose que solo le llamaba la atención Lawless por que le recordaba a la persona de quien realmente estaba enamorado.

Era sorprendente seguir con ese sentimiento por tanto tiempo, pero no era como si solo pudiera eliminarlo de un día para otro.

Fue algo triste para él solo irse de esa manera, pero sabia que si le decía que también correspondía a esos sentimientos solo lo haría más complicado.

Una pregunta se fue creando mientras más lo recordaba. "¿Cómo estaría ahora?". Habían pasado años desde ese día. A lo mejor él ya lo había olvidado.

Le dolía un poco pensar en ello. Pero era una posibilidad que si sucedía solo debía aceptar.

—¡Otro punto para el salón E!—gritó de la nada guild interrumpiendo sus pensamientos y regresandolo a la realidad tras todos los gritos de celebración que siguieron.

Le molesto un poco esa abrupta interrupción de celebración, pero no había nada que hacer más que soportarlo o irse. Y en este punto lucia mejor idea solo irse, así que se levanto de su asiento y empezó a caminar a la salida.

—¡Estoy libre Tsubakyun!—gritó Belkia listo para continuar el juego.

Eso lo hizo detenerse de golpe. Una sensación de haber oído ese "apodo" antes lo hizo pensar mucho, fue como si un fuerte flashback le llegara de la nada.

Sí lo había oído antes.

Fue cuando aún estaba en la primaria. Y había ido a buscar a Hyde a su salón. Él normalmente no hablaba mucho con los demás pero era consciente de la existencia de los hermanos de este. Por lo que eran su primera opción para preguntar por él cuando no lo encontraba.

—¿Hyde esta enfermó?—había preguntado a su hermano aquella vez. Hermano del cual ni siquiera se tomó la molestia de conocer a fondo.

—Lo esta por tonto. Papá le dijo que no saliera en la nieve sin abrigo pero él insistía en que era más divertido—respondió casi sin interés este, mientras guardaba sus cosas para irse también.

—Realmente no tiene cura...—Suspiró recordando lo estúpido que solía comportarse Hyde a veces.

Antes de que pudiera despedirse, alguien había entrado al salón, un niño con lentes que en ese entonces tenía el cabello negro.

—¡Tsubakyun!—lo llamó animado para ver si se encontraba allí.

—¡Ah! Belky—respondió igualmente animado al verlo.

—Rápido vamos, Irigoto nos espera abajo. Tambien trajo algunos fuegos artificiales para jugar.

—¡Ya voy!—más animado aún lanzó las cosas que aún le faltaban guardar en su mochila y salió a toda prisa—¡Adiós!

Recordar eso era como una revelación. Por instinto no pudo evitar voltear impactado, fijando su vista atentamente en Tsubaki.

—¡¿Tsubaki Servamp?!—preguntó sorprendido en un tono de voz bastante alto a decir verdad, haciendo que este entrará en pánico y por accidente lanzará la pelota en otra dirección, pelota la cual cayó en la cara de un compañero del otro equipo.

—¡Hey!—reclamó indigno este tipo, pero tsubaki no le hizo casi pues su pensamiento se había centrado en Licht.

Esos escalofríos al saber que lo había descubierto eran inevitables, a pesar de que técnicamente no había perdido nada y por instinto al ver la mirada amenazadora amenazadora Licht tenía sobre él, fue imposible no voltear a ver a lawless con una expresión de cinismo. Lo cual bastava para delatardo.

—《No me mires idiota》—pensó preocupado Lawless al notar eso.

—P-Pues...—trató de justificarse tsubaki olvidando por completo que aún se encontraba en el campo—... Yo—pero un balón en la nuca fue suficiente para recordarte que aún estaban jugando.

—¡¿Tsubakyun?!—gritó preocupado Belkia mientras se acercaba a ayudarlo.

—¡Esto es por lo de antes!—gritó victorioso el tipo que había lanzado el balón, pues después del fuerte golpe que recibió como mínimo esperaba una disculpa, aunque ahora ya era el karma.

La situación en el campo se empezaba a salir de control cuando Belkia empezó empezó reclamar por lo que le hicieron a tsubaki, armando un alboroto en este, pero entre todo ese caos solo Lawless y Licht se encontraban pensativos.

Licht se cuestionaba sobre la actitud de lawless y cómo es que no lo había notado antes o por qué lawless no le había dicho nada.

Ahora que todo se veía más lucido, recordó claramente cómo es que lawless lo reconoció instantáneamente luego de que chocarán ya que técnicamente licht no había cambiado casi nada.

Y aún si en aquella ocasión no le dio la oportunidad para hablar, ¿Qué pasaba con el resto de las veces en las que pudo habérselo dicho? Ya hasta eran incontables para licht.

¿Acaso le gustaba burlarse de él? ¿Era por eso que no le había dicho nada?

Lawless en cambio ya podía sentir que se había metido en problemas. Licht solo lo miraba enojado. A este punto creyó que tal vez licht iría corriendo a tirarle una paliza por haberle mentido. Ya hasta podía sentir el dolor del golpe.

Curiosamente para él... Licht no hizo nada parecido. Simplemente lo miro enojado y sin siquiera decirle algo, se fue del lugar. Como si a pesar de todo lo importante que significaba saber aquello, ya nada de eso importará.

Quería seguirlo y conversar con él, pero con la solida actitud que le mostró en ese instante claramente no estaba de humor para ello. Fue como si con esa mirada le hubiera expresado lo decepcionado y enojado que se encontraba.

No sabía que más hacer, fue como si se hubiera paralizado, teniendo una horrible sensación de mareos producto del miedo a perderlo para siempre.

—¿Lawless?—lo llamó preocupado Niccoló al verlo en tan mal estado, casi parecía como si este estuviera sudando frío.

Lawless solo volteo a verlo algo confundido por la situación que sucedía en su entorno y solo decidió irse.

—L-Lo siento, creo que no me encuentro en condiciones para seguir jugando.—tras decir eso, salió del campo dejando atrás todo el pleito que estos seguían armando e ignorando el bullicio decidió meterse a su salón.

Niccoló no podía evitar sentir que algo andaba mal, y aprovechando lo mismo, dejo a su salón discutiendo con los de Hugh y a Guild tratando de calmar todo.

Lo vio entrar a su salón y al acompañarlo se sorprendió bastante al verlo sentado en el suelo con una expresión de dolor.

—Lawless... ¿Pasó algo?—volvió a preguntar aún más preocupado que antes. No era común ver a lawless actuar de esa forma.

—Yo...—Trataba de decir algo, pero las palabras no llegaban a salir del todo. Era como si se secaran completamente antes de salir de su boca.

—Niccoló presentía la sensación de dolor que lawless sentía con solo verlo, ya hasta parecía que estuviera por llorar—《Esto no es bueno...》—Pensó, y se sento a su lado para finalmente darle un abrazo de compasión que pidiera calmarlo—Ya, ya... respira con calma... No tienes que forzarte a decir todo ahora mismo.

Sus palabras salían con tanta suavidad que realmente conseguía hacer que lawless se calmara un poco. Era como si tuviera a su lado a su familia... una que realmente se tomara el tiempo de escuchar cada molestia que sentías. Lo cual bastaba para lawless.

Estuvo así durante unos minutos, regulando su respiración hasta finalmente calmarse.

—¿Quieres contarme que paso?—preguntó finalmente Niccoló, en cuanto noto que este ya estaba en condiciones para decircelo.

—Es que... lo arruine otra vez.—respondió lawless bastante decepcionado de sí mismo.

—¿Arruinar qué?

—Mis relación con Licht...

Eso desconcertó un poco a Niccoló.

—¿Tú estabas saliendo con Licht?

—No, no hablo de eso... aunque va casi por el mismo camino.

Niccoló escucho pacientemente lo que decía.

—Es solo que... la verdad yo conozco a Licht desde hace más tiempo del que vine...

—Sí, Ildio me lo comento.

—¡¿Ha?!

—¡Ah! ¿Era un secreto?—preguntó alterado.

—No, no... bueno... De hecho sí...

—¡Lo siento!

—Descuida... El que tú lo sepas no me preocupa... De cualquier manera estaba por comentartelo...

—《Nunca volveré a escuchar a Ildio cuando esta aburrido》—pensó estresado Niccoló, pues Ildio se lo había comentado solo por que Niccoló no le prestaba atención y dijo que se aburría de eso, por lo que mato el tiempo hablándole del tema.

—La cosa es que... con eso técnicamente cree una doble personalidad para Licht... y creo que cuando se entero, se molesto bastante... o tal vez sólo se decepcionó de mi... o de la persona que recuerda...—añadió lawless bastante triste por esa idea.

—Más que decepcionado, tal vez sólo este molesto por que no se lo comentaste.

—¿Eh?

—Tú conversabas mucho con Licht en los recesos, incluso cuando este te hechaba del lugar. Posiblemente el saber que a pesar de las diversas oportunidades que tuviste para decirle sobre ti y aún así no decirle nada; es lo que lo molesto.

—¿Tú crees?

—Bueno... no lo podría garantizar... pero, si algo aprendí en toda mi experiencia, es que nunca te quedes con solo una parte de la historia, especialmente cuando la hace uno mismo. Siempre es mejor preguntar antes de sacar conclusiones. Lo mejor sería hablar con Licht, pero deberías esperar a que su enojo se calme al menos un poquito... No me gustaría enterarme que te quebraron la mandíbula o algo parecido...

Aunque solo bromeaba con la idea, esta realmente no era muy lejana a una posible realidad si lawless se hubiera acercado en ese momento.

—Luego de unos segundos pensando en ello, lawless decidió seguir su consejo, sintiéndose agradecido por haberlo oído antes de llegar a un lío mental—Gracias profesor...

—Oírlos llamarme así me hace sentir muy viejo... solo dime Nicco. Me gusta más eso.—De todas las formas en las que lo llamaban, siempre le gustó oír a los maestros y a Ildio llamarlo Nicco, especialmente cuando Ildio lo decía. Era como una agradable sensación de aprecio.

—Bien, entonces gracias Nicco.—correspondió lawless con una sonrisa. Ese día pudo sobrellevar ese lío, decidido a arreglarlo cuando viera a Licht más calmado.

(...)

El día siguiente llego con más calma para todos. Pues se suponía que ese sería el último día de lo juegos y al dia siguiente todos celebrarian el cierre con un pequeño evento, anunciando a los ganadores y entregando un premio sorpresa. Pero era extraño para Niccoló. No había ninguna competencia más en la que participar ese día, pero curiosamente había una citación para que todos los alumnos fueran al campus 2 a eso de las 2pm. No tenia sentido.

Ahora ellos se encontraban en su salón por que guild les había pedido a todos los salones que se prepararán para entregarle algunas cosas. Creyó que a lejos estaban relacionados con lo de las 2pm, pero su expresión cambió al ver lo que Guild les había dado.

—D-Disculpa... ¿Qué es esto?—preguntó aterrorizado al ver como guild les entregaba lo que parecía ser armamento y algunos trajes de seguridad.

—Es para la competencia de las 2. Tengan cuidado con las balas de pintura, son muy sensibles cuando las aprietas—respondió tranquilamente guild mientras depositaba todo eso en una mesa sin ser consciente de que nadie en ese salón, a parte de él, sabía sobre lo que hablaba.—Buena suerte en la competencia—lo animó pues sería la primera vez que Nicco participaría.

—¿Suerte en qué?

—Pues en la competencia sorpresa. Este año eligieron Pint war. ¿Quiénes participarán en tu salón?

—¡Espera! ¡¿Cómo que competencia sorpresa?! ¡Nadie mencionó nada sobre esto!

Guild noto la genuina cara de confusión tanto de Niccoló como del resto de alumnos. Nadie sabía de la existencia de la dichosa competencia.

—P-Pero, estaba en el sobre dorado que les dieron.

—¡¿Cómo que un sobre dorado?! ¡A mi no me llego ningún sobre dorado!—reclamó Niccoló al enterarse. Era imposible algo así. Él revisaba muy bien los papeles que le daban y estaba 100% seguro de que eso nunca había llegado a sus manos siquiera.

—¡¿Cómo que no te llego?! ¡Yo la puse en cada uno de los casilleros de los profesores junto con el resto de actividades!

—¡No hubo ningún sobre dorado en mis papeles! ¡Juró que lo recordaría!

—¿Entonces qué pasó?

—Oiga profesor...—alzó la voz Tsubaki algo desanimado—... ¿De casualidad su casillero es el 133?...—preguntó preocupado al notar como es que todos los observaban entendiendo lo que había hecho.

—Tsubaki... ¿Tu tomaste el sobre?—cuestionó Niccoló con la pequeña esperanza de que Tsubaki lo negará y así demostrar que no era tan mala persona.

—¡Juró que no era mi intensión! ¡Creí que era el del profesor Touma!—y ahí es cuando sus esperanzas desaparecían.

Todos sus compañeros tenían unas inmensas ganas de matar a Tsubaki. Les había arruinado la única competencia que valía 100 puntos en comparación con los 40 o 60 que habían ofrecido el resto de las competencias. Y como uno de sus compañeros había hecho cuentas de todos los eventos ganados, estaban posicionados en segundo lugar atrás del salón de Touma por 40 puntos, esa competencia era su última oportunidad para ganar, pero lo habían arruinado.

—Calmense todos—Dijo Niccoló tratando de evitar un alboroto en ese momento, ya que era lo que menos necesitaban—Ya no importa ese detalle. Ya esta hecho. Solo debemos acoplarnos—Si debía ser sincero, lo que más le preocupara a Niccoló, era que Guild los descalificara en ese instante por que técnicamente Tsubaki había intentado sabotear a otro salón, lo cual era trampa; una parte de su interior agradecía que le haya salido mal, pues de lo contrario ni siquiera podrían llevarse el segundo lugar—¿Puede darme todas las indicaciones por favor?—pidió esperanzado a Guild.

—Pues... realmente no tengo todos los datos. Cada salón tenia información clasificada. Lo único que sé es que por salón deben participar 4 alumnos y-

—¿Alguien aquí ya a jugado pint war?—interrumpió Niccoló pues necesitaba rellenar datos cuanto antes.

—Yo y mis hermanos solíamos jugar con nuestro padre en vacaciones—respondió Ildio para apoyar a Niccoló en esa complicada situación.

—De acuerdo... entonces son Ildio, Kuro, Tsubaki y Lawless. Por suerte son 4. Tomen el equipo cuanto antes y prepárense. Veré que puedo hacer con el resto de detalles.

—Oh diablos...—maldijo kuro por lo bajo, odiaba las competencias donde debía moverse y para su mala suerte le habían tocado en sus tres chances.

—Lo siento Kuro, sé que no te gustan este tipo de cosas, pero son las únicas personas a las que puedo recurrir.

—Tranquilo, no te culpó. Todo es culpa de ese idiota que lamentablemente dice ser mi hermano.

—¡Fue sin querer! ¡De haber sabido que saboteaba a mi propio salón no lo habría hecho!—le reclamó Tsubaki indignado.

—¡Y-Ya olviden eso! ¡Solo alistense!—interfirio nuevamente Niccoló.

—¡Nicco!—lo llamó lawless sorprendiendo un poco a Ildio pues este no estaba acostumbrado a que alguien además de él mismo, llame a Niccoló de ese modo, además de que este había respondido al momento como si lo hubiera llamado así toda la vida—Aquí hay equipo para 5 personas. ¿Seguro que solo eran 4?

—¿Guild-san?—lo llamó igualmente confundido Niccoló, esperando alguna explicación.

—Es que no me dejaste terminar... dije que deben participar 4 alumnos... y su profesor.

Niccoló proceso la idea durante unos segundos, preocupándose mucho por ello. Él nunca había jugado algo parecido. No conocía las reglas o los detalles del juego, tampoco tenía la resistencia física para ello o siquiera pelear y a pesar de que sí sabía manejar armas, no le gustaba como se sentiría la situación de estar en constante peligro incluso cuando solo era una competencia. Incluso el resto de alumnos había notado ese terror por su expresión.

—《Es mi fin...》—pensó estresado al recordar la sensación del constante miedo o la adrenalina de este. Más al notar como todos lo estaban viendo no le quedó de otra más que disimular—E-Esta bien, gracias por la información. Nos haremos cargo del resto.

Guild aún no sabía como se las arreglarian para resolverlo, pero el no podía apoyarlos más allá de eso, por lo que no había nada más que hacer.

—Esta bien, buena suerte chicos.—se despidió algo preocupado y salió del salón esperando a que estos lo resolvieran.

En cuanto lo hizo, Niccoló rápidamente tomó su laptop e hizo la mayor cantidad de búsquedas posibles sobre el juego.

Existan de varios tipos. Desde uno en el que iban por una bandera hasta otros donde era como una pista de obstáculos, pero a juzgar por los implementos que le dieron, ellos estaban en la de supervivencia, la cual consistía en competir contra varios equipos y el último jugador en pie hacia ganar a todo su equipo.

La mecánica lucia simple, pero a juzgar por los detalles y donde se desarrollaría el juego, tenían mucha información que no habían recibido, empezando por la más importante, la cual era la ubicación inicial.

—《Si no hago algo pronto no solo perderemos, sino que también quedaremos en ridículo.》—pensó estresado Niccoló al notar ese detalle. Sería muy humillante si desde que entraban mostraban mucha mediocridad.—《De este modo puedo averiguar cuales son nuestras ubicaciones o si deberíamos crear alguna estrategia para enfrentarlos... además ni siquiera sé que tan buena puntería tienen ellos...》—esa situación le recordó mucho a sus amigos. Por un segundo hasta llegó a visualizarlos como ellos. El juego además de estrategia, requería de mucha confianza en sus compañeros pues no podías pedirle a alguien que te cubra la espalda si no tenias el valor para salir por miedo a que el otro fallé. La situación era crítica.

A pesar de todo, una leve esperanza surgió con una idea que llegó a su mente. Centrando su mirada en él resto de sus alumnos quienes no sabían qué hacer.

—¿Profesor?...—Lo llamó una alumna al notar como este no les despegaba la mirada de encima.

—Oigan...—los llamo Niccoló—¿Alguien aquí es bueno espiando?

Esa pregunta genero una expresión sorpresa en todos para próximamente volverse una sonrisa de excitación. Parece que Niccoló finalmente iba a jugar sucio. Justo como a ellos les gustaba.

(...)

A diferencia del salón de Niccoló, en el salón de Touma todos se encontraban más organizados, tal vez demasiado. El ambiente era parecido al de la marina de guerra de los Estados Unidos. Poseían un ambiente muy serio como para tratarse de un juego.

Todos los participantes ya estaban vestidos con el equipo y recargaban sus armas, además de estar alistando algunos objetos que permitían en el juego pero que técnicamente eran salirse de las condiciones del juego original.

—¿Ya están listos?—preguntó Touma serio, esperando los detalles que solo sus alumnos eran capaces de conseguir.

—Sí. Ya tenemos una estrategia organizada con todos los posibles escondites de los rivales. La preparación fue un éxito.—respondió bastante firme Freya. La verdad es que esa situación le recordaba mucho al entrenamiento del ejército ejército había recibido. Era agradable para ella.

—Sin esperar más tiempo Licht pego el mapa que les habían dado, en la pizarra, teniendo esta nuevas señalizaciones de distintos colores para representar cada salón posible o peligro, además de otro gran papel con varios nombres anotados y resaltados en este—Pensamos que las ubicaciones más posibles que se les hayan asignado a los otros salones sean esos y nuestro líder consiguió averiguar quienes son la mayoría de participantes.

—La estrategia fue liderada por mi, obviamente.—Habló orgulloso mikuni, acercándose a la pizarra con una regla para señalar detalles—Me tomé la molestia de detallar cuales podrían ser las ubicaciones más precisas de cada integrante a la hora de empezar, basándome en sus personalidades y aptitudes. Intenten memorizarlo para antes de que empiece.

—¿Cuáles son los mayores peligros?—cuestionó Touma.

—Pues basándome en la manera de entrenar que tenían...—dijo Mikuni mientras señalaba la lista de nombres con ciertos nombres resaltados resaltados distintos colores—Podríamos señalar más de 5 personas con un nivel de peligro bajo, 4 con un peligro intermedio y 2 con peligro extremo. También me preocuparía por el salón E... ocurrieron ciertos inconvenientes con este.

—Detallalos.

—Bueno... Los dos peligros extremos que tenemos están en el salón B. Supongo que sabe de quienes hablo.

—Me lo imagino.

—Tsurugi es como un perro de combate... o un lobo si le gusta detallar esas cosas. Recomiendo mantenernos alejados de él y enfremtarlo con disparos a distancia para tener al menos un 20% de probabilidad de eliminarlo, pero tendrán que ser muy sigilosos, suele tener una percepción sorprendente. El más mínimo ruido sería capaz de llamar su atención.

—Creo que el ejercito le hizo bien—respondió orgulloso touma al enterarse de todo eso.

—¡No lo victoreé en este momento! ¡Recuerde que debemos pasar sobre él!

—Me distraje, continúa.

—Ahh... bien. Continuando también tienen a un experto en armas, bastante atractivo por cierto—añadió Mikuni ligeramente sonriente.

—Si te dejas ganar otra vez puedes irte olvidando de aprobar mi curso.—amenazó touma molesto recordando como es que habían perdido 50 puntos por culpa de este.

—Bueno, bueno... solo decía. Considero que primero tenemos que deshacernos de Jeje ya que su puntería es demasiado precisa, además puede usar dos armas a la vez, así que lo convierte en una doble amenaza.

—¿Estrategia?

—Propongo dos. La primera puede ser posicionar al que mejor puntería tiene, en la parte alta de un árbol y dar fe en que con los cálculos que hicimos conseguirá encontrar la posición de Jeje y dispararle en cuanto la competencia inicie. Y si en todo caso falla, entonces déjenmelo a mi. Me las ingeniare para sacarlo del campo. Tengo buenas estrategias para eso.

—¿Y qué hay del salón 2-E?

—Bueno... ahí tuve algunos problemas...—dijo ligeramente decepcionado de sí mismo—La verdad... no conseguí averiguar nada de ellos.

Todos en el salón lo vieron bastante impactados. ¿Era posible que mikuni fracasara con esas cosas?

—¡AHH! ¡No me miren así! ¡Es que son muy buenos escondiendo sus información! ¡Incluso fui a una cita con 5 de ellos y ninguno soltó ni una pizca de información de quienes iban a participar, qué estrategia tenían, o si quiera dónde estaban practicando! ¡Actuaban como si no supieran nada del tema!

—Deben ser muy buenos mintiendo...—halagó freya impresionada de eso. No podía creer que fueran capaces de esconder algo por tanto tiempo.

Ellos ya habían empezado a discutir la situación y de como lidiar Ian con eso, generando diversas ideas y finalmente eligiendo algunas para continuar con su preparación, pero más allá de eso, todos estaban concentrados en lo suyo. Tal vez más de lo que debieron, pues si no hubieran estado tan inmersos en eso, se hubieran dado cuenta de que tenían entre ellos a algunos alumnos que no pertenecían al salón y hubieran detectado que hasta estaban tomando fotos de los papeles y el mapa.

(...)

Nuevamente en el salón, Niccoló se amarraba el cabello como último detalle luego de haberse puesto todo el traje del juego y esperaba al resto de sus alumnos junto con Kuro, Tsubaki, Lawless e Ildio, quienes ya empezaban a recargar armas.

—¿Estas seguro de esto?—preguntó Ildio al notar a Niccoló preocupado por el resto de sus alumnos—No es normal que aceptes hacer cosas así. Parece ir en contra de tu ética.

—En realidad Niccoló no era tan puro como muchos creían, pero sabia que lo que más necesitaban ellos era un maestro que fuera una imagen de la disciplina, por lo que siempre debía mostrarse así, aunque claro, esta era una excepción—Sí, descuida. Esta es nuestra única opción para no quedar mal y comparando todas las cosas de las que ya fueron capaces sin que me de cuenta, sé que esto es algo minoritario en comparación con su potencial.

Ellos se sintieron ligeramente halagados por ello. Era reconfortante saber como es que Niccoló había tomado sus malas experiencias y las había convertido en algo de lo que ellos pudieran sentirse orgullosos.

—¡Todo listo!—anunció belkia animado, siendo seguido del resto de sus compañeros quienes traían un montón de materiales, algunos planos recién impresos y muchas otras cosas.

—Entramos y salimos sin ser detectados—añadió orgullosa otogiri, sosteniendo los planos impresos de las fotos que le habían tomado al pizarrón de Mikuni.

—Sabía que podia confiar en ustedes—Respondió igualmente orgulloso Niccoló, levantandole el ánimo a estos—¿Qué averiguaron?

—Pues ese tal Alicein es más astuto de lo que parece. Consiguió averiguar a la mayoría de miembros que participarán en la competencia, e incluso los ha visto entrenar.—respondió Belkia bastante impresionado.

—Así parece... pero él lado bueno es que gracias a eso ya tenemos nuestra ubicación y la del resto de estudiantes.—continuó otogiri pegando el material recién impreso en la pizarra.

—Niccoló lo analizó por unos instantes, encontrando puntos vacíos que podían servirles para ubicarse sin que el resto pueda detectarlos—Podríamos usar sus ubicaciones en su contra. Con esto ya se puede predecir la ubicación más exacta de cada alumno, podemos ubicar a los que mejor se desenvuelven con ese tipo de personas al lado. Así no será tan complicado. Y si se acercan sigilosamente no necesitarán tener una excelente puntería para acertarles.

—Suena bien por nosotros—Respondió entusiasmado Tsubaki. Le gustaba más cuando se enfrentaban de cerca.

—¿Y esa otra es la lista de los participantes?

—Sí. Señalaron con distintos colores su nivel de peligro. También mencionaron que ellos se encargarían de eliminar de la competencia al menos a uno de los más peligrosos... pero parece que sera difícil lidiar con Tsuguri... ni siquiera ellos estaban tan seguros de como sacarlo.

—Solo he visto a Tsurugi unas veces por Mahiru y su competencia con Kuro... pero debo admitir que lucía intimidante... aunque se ve que es más del tipo que le gusta luchar cuerpo a cuerpo.

—Ildio supuso que había una manera para sacarlo y estaba por ofrecerse a ello—Si quieres yo puedo encargarme d—pero Kuro acabo por interrumpirlo.

—Yo me encargaré de sacarlo de la competencia—dijo con total seguridad, recibiendo una mirada de asombro de todos.

—Oye... ¿Estas bien?—preguntó Tsubaki bastante preocupado, no era común que kuro se ofreciera en ese tipo de cosas.

Y en cierto modo tenía razón. Kuro realmente no era capaz de hacer ello por naturaleza, pero está vez era distinto. Desde que había perdido ese día, una incomoda sensación de humillación lo consumía, especialmente cuando estaba él junto a Mahiru. No sé sentiría en paz hasta que cobrara venganza por ello.

—Sí... Solo dejen que me encargue... ustedes lidien con los demás—sugirió Kuro.

—Bueno, en todo caso solo queda el resto...—trató de seguir Niccoló—Ya que solo hay información de los otros salones, pueden decirme algo del 2-A.

—Pues a parte del profesor Touma están participando otros cuatro, pero solo reconozco a tres. Está la hermana de Tsubakyun, el complejo de ángel y Mikuni.

—En todo caso la que más nos preocupa es Freya. Era la mejor de todos en este juego. De alguna manera siempre conseguía humillarnos...—recordó Lawless algo preocupado.

—¿Qué hay de Mikuni y Licht?

—Por mikuni la verdad no estoy seguro. No hay muchas cosas en las que se lo haya visto fracasar. Eso es preocupante... en cuanto a Licht-tan... pues... De niños solía golpear muy fuerte especialmente cuando estaba enojado, pero no creo que sea gran problema siempre y cuando no nos acerquemos, aunque tiene una gran habilidad para aprender rápido, así que no sé qué tan bueno sea disparando.

—Tal vez podríamos usar trampas. En el reglamento no se impide siempre que solo se usen pinturas y objetos no letales.

—Soy buena con los nudos y muchos aquí saben construir trampas con materiales básicos. Solo tendríamos que armarlos y ustedes deberán colocarlos en puntos clave para que quienes pasen sobre ellos, caigan.—sugirió otogiri.

—Buena idea. Ya pueden ir preparándolos entonces, veré donde podemos ubicarlos.

—Solo una consulta. ¿Quiere trampas que exploten al contacto o cuando se muevan?—preguntó curioso un alumno, como si fuera su pan de cada día.

—Preferentemente cuando lo pisen o lo jalen, así no podrán evitarlos, pero no pongan mucha pintura o podría caernos si estamos cerca.

De ese modo todos ellos empezaron a prepararse para el último juego. Le sorprendía como a pesar de todo sí habían conseguido ponerse al corriente y hasta posiblemente superar a otros salones. Por lo que se veía Niccoló sí encajaba perfectamente en ese salón.

(...)

Luego de varios minutos de preparación la competencia finalmente empezó a aperturarse, permitiendo solo a los participantes entrar al espacio del juego en el campus 2, mientras que el resto de alumnos se encontraban alrededor de este, sentados en unas bancas que se habían puesto solo para ese momento y las cuales rodeaban varias pantallas que mostraban un en vivo de las cámaras que estaban puestas por todo el campus, inclusive dentro de los jardines y los bosques.

—Vaya... así que ellos participaran.—llamó Touma al encontrarse a Niccoló con sus alumnos.

—Touma-san... bueno... S-Sí.—Respondió algo preocupado por habérselo encontrado antes de iniciar la competencia, pues este tipo en una competencia como la que iban a participar, claramente representaba un gran peligro.

—Debiste tomarte tu tiempo para elegirlos.—Halago Touma al notar que ellos destacaban en cuanto a aptitudes físicas.

—A-Algo así...

Las ubicaciones casi al azar que les habían tocado no sólo los había unido a ellos, sino que el salón 2-B también estaba cerca.

—¡Ah! ¿También vas a participar?—llamó Tsurugi a Freya sorprendido por verla en ese lugar.

—Sí. Esta era mi chance libre.—Respondió nada sorprendida, después de todo ya lo habían mencionado.

—Bueno, supongo que debí imaginarlo. El traje te queda increíble. Me recuerda las practicas.

—¿Me veía bien cubierta de lodo?—preguntó algo confundida pues la mayoría de prácticas del ejército acababan con todos completamente sucios.

—Tú te ves bien sí importar lo que pase—la halago este hablando con total sinceridad y expresándose con una tierna sonrisa.

Esa sensación expresada realmente conmovía a Freya. Y como un ligero gesto de ternura, tomo las manos del contrario y las apretó con suavidad.

—Esfuérzate—dijo suavemente mientras depositaba un beso en sus manos. Creando un ambiente más amoroso.

—Igualmente tú—respondió Tsurugi bastante embobado por las acciones de Freya.

Si algo destacaba en ambos era que en su relación no existía el miedo de actuar como lo haría una pareja normal. Sencillamente cada uno se daba libertades de actuar como quería y lo que pensaba el resto entraba en un plano inexistente. Lo cual servía en situaciones como las que kuro expresaba en ese instante.

—Me quema los ojos solo verlo...—comentó Kuro ligeramente asqueado al notar la escena. Las actitudes cursis nunca fueron lo suyo.

—¿Kuro?—lo saco de sus pensamientos una voz muy familiar.

—¿Mahiru?...—llamó sorprendido Kuro, encontrándose tras él a Mahiru, quien parecía bastante sorprendido de verlo allí.

—No me imaginé que participarías aquí... ¿Esto también es por quedarte dormido?

—Bueno... De hecho no, pero no creo que debas saberlo... es mejor así—Claramente no quería contarle como su propio salón se había saboteado, era demasiado humillante—¿También participas?—asi que cambio de tema rápidamente antes de que preguntara más.

—Sí, me ofrecí en cuanto pidieron voluntarios por que no muchos querían participar... y pensandolo simple, debía ser yo quien entrará.

Era lógico para Mahiru pensar así. Kuro nunca entendió su filosofía pero sabia que eso era lo que hacía a Mahiru tan especial.

También entendía un poco el por qué no lo habían señalado en la lista de participantes que habían averiguado, pues si bien mahiru era bueno físicamente hablando, no era alguien que representaba un peligro en el ámbito, a diferencia de su hermano o su mejor amigo, el cual estaba ayudando a Tetsu a armar algo.

—¿Y la lechuga?—preguntó curioso. No era como si no pudiera lidiar con él si llegaba a tocarle enfrentarlo, pero hasta donde había visto, él no se encontraba en condiciones para participar y hasta daba fe en que ni siquiera llegaría.

—¡Oí eso! ¡No soy una lechuga!—gritó molesto Sakuya volteandose a verlo en cuanto lo escucho llamarlo con ese apodo.

No era un secreto que no se llevaban bien, pero tampoco se llevaban tan mal si Mahiru estaba de por medio, por lo que para evitar una discusión Kuro solo lo ignoró.

—Creí que se encontraba mal.—añadió a lo que iba diciendo.

—Sakuya ya se encuentra mejor—respondió confiado Mahiru—Por suerte no fue tan grave. Y ya le permitieron participar en la última competencia a la que se inscribió.

—¡Yo no me inscribí! ¡Tú me ofreciste a esto mientras iba al baño!—Volvió a gritar ofendido Sakuya. A él no le gustaba la idea de jugar con más de 20 personas. Sencillamente se volvía fastidioso.

—Ajaja... Solo ignoralo.—añadió Mahiru.

Una parte de Kuro maldijo el momento en el que Mahiru ofreció a ese tipo para participar, pues según la lista de Mikuni, este clasificaba como un potencial peligro. Pero bueno, tal vez eso les serviría para eliminar a algunos sin interferir y en cuanto se lo topará sí daba fe en que podría dispararle sin perder.

Por otro lado también estaban Licht con Lawless.

Lawless sabía de la presencia de licht desde antes de que iniciará la competencia y licht ya se había percatado de la presencia de lawless, pero prefería solo ignorarlo por ese momento, a pesar de que sus ánimos se decían cada vez que hacían contacto visual, solo intentaba no pensar mucho en ello y concentrarse en ganar, pues de ese modo no afectaría mucho en su desempeño.

—《Purifica a los demonios》—era lo único que podía pensar para animarse. Si conseguía al menos darle un golpe en pleno juego, tal vez eso bastaría para desquitarse un poco.

—¡Atención por favor!—Sé oyó de la nada un anuncio por los altavoces. Anuncio que provenía de Guild, como encargado de los juegos—El juego empieza cuando la vocina suene. Creo que ya todos los participantes leyeron el reglamento, pero lo repetiré para que no hayan huecos de por medio.

Afinando un poco su voz Guild procedió a leer el reglamento.

1. Durante el juego queda totalmente prohibido el uso de cualquier tipo de arma que no se les haya entregado.

2. Se permite poner trampas de pintura siempre y cuando no se usen materiales inflamables, fuego o armas punzantes.

3. El equipo que mantenga al menos un integrante "vivo", es el que gana.

4. El jugador pierde en cuanto el disparó llegue como mínimo en el pecho, la cabeza o el rostro, pero si llega a la pierna o el brazo, aún tiene una chance de seguir, hasta que reciba un segundo disparo en cualquier lugar.

5. En cuanto el jugador pierda, debe reportarse en la entrada y salir del lugar.

—Dicho esto los participantes ya pueden ingresar a sus posiciones. Tienen 5 minutos para instalarse.

Tras el anuncio, rápidamente todos los equipos fueron rápidamente a sus posiciones en el campus, buscando donde colocar sus trampas.

—Me da escalofríos de solo ver este lugar...—mencionó preocupado Niccoló al saber que su posición había caído en uno de los bosques.

—Tu tranquilo, yo te protejo—le dijo Ildio con total confianza. Estaba dispuesto a llegar con Niccoló hasta la última etapa del juego y ganar. Aunque en el transcurso eso se decidiría.

(...)

Todos los estudiantes se encontraban alistando el lugar lo mejor que podían, colocando trampas en puntos estratégicos, encontrando escondites o ubicaciones para dispara. La tensión se sentía en el ambiente, mientras los observadores disfrutaban del espectáculo a través de las cámaras.

Uno de los integrantes de 2-A, el cual tenía mejor puntería había ido al punto designado en el que podría encontrarse Jeje, subiéndose subiéndose un árbol para tener una mejor vista y disparar.

Al llegar se dio cuenta de que Mikuni habia acertado en su predicción. Jeje estaba justo donde lo querían, sin ser consciente de lo que pasaba a su alrededor y aprovechando esa oportunidad se acomodo mejor y le apunto a Jeje, listo para disparar en cuanto iniciará el juego.

—¡Que el juego comience!—se oyó a través de las bocinas, seguido por el abrumante ruido de una sirena, que resonó por todo el lugar llenándolos de un sentimiento de nervios. Mismo sentimiento que afecto al jugador y al momento de disparar, este se desvío un poco de su objetivo, pasando cerca de la cabeza de Jeje, pero sin llegar a atinarle.

—《¡Maldición! ¡Fallé!》—pensó preocupado al ver a Jeje sentir la sensación que casi le llegó junto con la bala.

Aquel chico tal vez no tenia la puntería digna de un francotirador, pero vaya que Jeje sí la tenía y sin dudarlo rápidamente ubico el origen del disparo, encontrando a su objetivo y disparándole justo en la cabeza, haciendo que el susodicho pierda el equilibrio y caiga del árbol, siendo todo observado a través de las cámaras.

—Saben nuestra ubicación...—mencionó lo suficientemente alto Jeje, como para que sus compañeros lo escucharán y rapidamente se alertaran.

—¡Todos dispérsense ahora mismo!—ordenó Mahiru rápidamente. Seguido de sus compañeros que acabaron su orden y se dispersaron junto con Jeje.

Los minutos pasaban dentro del campus, y cada vez más personas perdían por algún disparó o al haber caído en una trampa. Ya empezaban a eliminarse algunos salones también, pero habían otros que aún conseguían resistir pese a las adversidades que les surgían. Como le sucedía a Mikuni, quien conseguía safarse de situaciones en las que ya estaba cerca de perder.

En un instante uno de los participantes lo había empujado accidentalmente al no verlo en su camino, pero al reaccionar primero, este tenia el tiempo suficiente para dispararle a Mikuni, más este se las ingenio para que no sucediera.

—Disculpa, creo que tus manos están tocando donde no deberían—dijo rápidamente, sin permitirle razonar del todo al otro participante, pues aquello no era del todo mentira.

—¡Lo siento!—reaccionó avergonzado aquel tipo, alejándose audazmente por el nerviosismo que mikuni le había causado, hasta quedar completamente indefenso.

—«Pobre crédulo»—pensó victorioso al verlo vulnerable y sin dudar ni un segundo este rápidamente tomo su arma y le disparó en el pecho.

El pobre chico no tuvo tiempo de entender siquiera que había pasado y acabo perdiendo el juego en conjunto con su salón.

—Buena suerte para la próxima—lo animo Mikuni, dedicándole un pequeño guiño antes de irse del lugar.

Las actitudes de mikuni solían basarse en molestar al resto a su manera. A veces solía ser más amable, mientras que en otras ocasiones solo hacía maldades con una sonrisa en el rostro y saliendo invicto de todas estas.

En su mayoría parecía como si coqueteara con su víctimas, aunque para él y para quienes ya lo conocían bien, sabían que eso solo era un gesto de superioridad que ponía en su momento. Incluso Jeje conocía ese hábito, pero de algún modo, nunca se acostumbraba a este y por eso es que prefería no involucrarse tanto con él.

°

Mikuni se habría camino hasta adentrarse en una zona profunda, donde su pequeño bosque de árboles de robles era lo que más destacaba. Normalmente el ambiente allí solía ser muy relajante, pero ahora por alguna razón mikuni se sentía inquieto.

—《Este ambiente se siente muy frío...》—pensó algo preocupado, sentía como si alguien lo observará y esa sensación fue la que le hizo entender por qué se sentía así—《Oh diablos...》—pensó preocupado al sentir como algo frío se posaba en si cabeza—Hola Jeje...—Lo llamó algo desanimado.

—Date la vuelta...—dijo en un tono de voz bastante frío, eso era inusual hasta para él.

—Es una petición algo extraña para venir de ti. ¿No hubiera sido lo más lógico solo dispararme? ¿O es que tienes algo más en mente?

—Solo hazlo...

—Curioso por la petición este solo accedió y volteo a verlo, comprobando que efectivamente le estaba apuntando a la cabeza con el arma del juego y esta claramente estaba cargada.—Muy bien. Debo suponer que si me pediste esto es por que piensas negociar de algún modo mi supervivencia en este juego ¿verdad?

—Algo así...

—Te escuchó.

—Te canceló mi oferta del juego pasado a cambio de perder por mi cuenta ahora.

—¡¿Ha?!—reaccionó mikuni bastante sorprendido—¡No puedes hacer eso! ¡Lo prometiste! ¡Y yo no perdí aproposito para eso! ¡Hasta ahora sigo soportando la indiferencia de Misono! ¡¿Sabes lo horrible que es eso?!

—¿Y de que sirve en este punto?...

—¡¿Cómo qué de que sirve?! ¡Acepte por que estoy interesado claramente!

—No luces muy interesado que digamos... más bien creo que es tu actitud común la que confundes. Luces interesado en todo el mundo.

—¿Yo interesado en todo el mundo?...—cuestionó algo confundido, agraciado con la idea hasta estallar en risa—¿De dónde sacas eso? Si me interesará en todo entonces ya nada sería igual. No tendría ni una pizca de gracia.

—Tus actitudes reflejan lo contrario...

—¿Mis actitudes?...—Trató de pensarlo por un momento, entendiendo que lo más seguro era que jeje lo había visto—Ahh... ya veo—Y Jeje no era muy bueno entendiendo las cosas—Creo que simplemente estas confundiéndote. No negare que eso me hace sentir un ligero aire de superioridad al verte celoso, pero en esta situación ya te considero un idiota.

—¿Ha?

—Veras Jeje. Yo necesito mantener mi buen perfil ante todo el mundo, por lo que nunca dejaré mis actitudes divertidas con todos, incluso si en algún momento llegara a salir con alguien. Pero no te pongas celoso por eso. Nunca lo he tomado enserio cuando actuó así con personas que ni conozco. Sería extraño incluso para mi.

La fluidez y seguridad con la que lo decía claramente reflejaba su sinceridad. Jeje por un segundo hasta llegó llegó sentirse mal por sí mismo.

—Además...—añadió sutilmente mientras se le acercaba aún más—Tú eres la única persona que me gusta

Esa clase de gestos realmente podían poner a Jeje en un aprieto. Mikuni había conseguido ponerlo nervioso. Justo lo que quería.

—¿Crees qué si cualquier otra persona me hubiera pedido una cita a cambio de dejarlo ganar, habría accedido?—lentamente fue colocando sus manos entre las de jeje, haciendo que baje el arma hasta su altura—Lo hice solo por que eras tú.

El solo roce de sus manos mientras permanecía mirándolo a los ojos, conseguían acelerar el corazón de Jeje.

—Jeje...—susurró suavemente mientras parecía ir levantado una de sus bolsas muy lentamente, generando aún más tensión en él. Y para cuando parecía que este lo besaría, se detuvo sutilmente y con una sonrisa en el rostro le susurró—Eres muy ingenuo.

Sin darle tiempo a reaccionar, escucho el sonido de un arma siendo disparada y en menos de un instante un leve dolor en el estómago al sentir como es que un fluido viscoso rojo se resbalaba del mismo.

Mikuni le había disparado sin que se diera cuenta y al final solo se alejó con ganas de reír.

Jeje lo razonó por unos segundos. ¿Cuando había tomado su arma si sus manos estaban a su vista? ¿Llevaba un arma oculta? No, no tenía algo parecido, pero al ver su mano se percato de que ni siquiera había tomado un arma.

El arma con el que Mikuni le había disparado era la misma que tenía en mano. Simplemente lo había distraído lo suficiente como para no percatarse de donde la ubicaba o siquiera el hecho de que sus dedos estaban posicionándose en el gatillo mientras se acercaba.

—Sin aguantar más al verlo tan confundido Mikuni finalmente comenzó a reír sin pena—Hahaha, lo siento, lo siento. Pero una competencia es una competencia. Y no doy mi piedad dos veces. Al menos deberías sentirte agradecido por haberlo hecho una vez. Nadie goza de esa oportunidad.

Aquella confusión pasó a ser enojó en menos de 5 segundos y este solo se incrementaba más mientras mikuni reía, por lo que sin esperar empezó a disparar hacia los pies de mikuni aprovechando que no habían cámaras cerca y si alguna le caía nadie sabría que fue lanzada por alguien que ya había perdido.

—Aunque en la realidad Mikuni los esquivaba sin problemas, burlándose más de él incluso—Vamos, no te enojes, ¿Qué esperabas de una competencia? claramente iba a darlo todo. Además no soy alguien que besa en la primera cita. Aunque admito que la idea suena tentadora, pero ni siquiera he dado mi primer beso ¿Sabes? ¿Tú realmente crees que lo desperdiciaría con cualquiera?

A pesar de la situación Mikuni realmente parecía estar divirtiéndose, aunque en parte amaba esa actitud de Jeje.

Solo deseaba que este también le dijera de una vez que también le gustaba.

Tan inmerso estaba en ese pensamiento que con suerte se dio cuenta de que alguien más se había acercado.

—¡Haaaaaaa!—gritó un alumno que aún participaba mientras salía de su escondite listo para disparar, pero por suerte Jeje había sido más rápido que este, disparándole directamente en la cabeza y en un reflejo de Mikuni por haberlo salvado, le disparo rápidamente en el pecho a Jeje para que el otro no se diera cuenta de que Jeje ya había perdido.

Mientras el alumno trataba de reponerse del disparo que le había llegado en la cabeza, Mikuni le había lanzado una sonrisa cómplice a Jeje, mientras que el otro solo desviaba la mirada.

—Ahh... que mal conmigo el C pierde...—Pronunció decepcionado aquel alumno.

—Ou descuida, lo hiciste muy bien—trató de animar Mikuni para mantener su perfil.

—Aquel joven solo levantó la mirada desanimado, más al ver de quien se trataba no pudo evitar ponerse nervioso—¡A-Ah! ¡Mikuni-san!

—Este solo le guiño el ojo—Buen trabajo. ¿Qué te parece si vas a reportar ahora?

—¡S-Sí! ¡V—Ni siquiera termino de hablar cuando otra bola de pintura acabo cayendole en la cara—¡Eso dolió! ¡Ya me dispararon! ¡¿Por qué si—nuevamente otra llego con fuerza' y asi seguido hasta que toda una horda de disparos por parte de Jeje caían sobre él—¡Espera! ¡Ya! ¡Para!

Al final solo pudo salir corriendo fuera del lugar sin siquiera despedirse de Jeje.

—Mmh... tentador—susurró Mikuni ligeramente satisfecho por ver la reacción de Jeje—Bien,supongo que debo seguir.

Jeje solo le abrió paso dejando que este comenzará a irse, pero no pasó mucho antes de que se detuviera, llamando la atención del mismo.

—Por cierto, tal vez debeeria dejarlo en claro antes de que lo olvides.

Jeje realmente no entendia muy bien a que se refería hasta que Mikuni volteo a verlo una uktima vez con un leve sonrojo.

—Lo que dije hace unos segundos era enserio. Mis sentimientos hacia ti, son honestos, así que trata de pensar un poco en ellos. No hay ninguna trampa en ello.

Jeje acabo por sentirse nervioso, era como su la mirada que Mikuni le dedicaba, le transmitiera una combinación de alegría y amor

—Te veo en nuestra cita.

Fue lo último que dijo antes de por fin seguir su camino, dejando atrás a Jeje, quien se quedo mirando al vacío durante unos minutos, intentando procesar lo que había pasado en tan poco tiempo.

No le gustaba mucho como había quedado... pero tampoco le disgustaba la idea. Parece que al final su trato sería un momento de gocé no solo para Mikuni, sino también para él.

《Si me dejas ganar te llevare a una cita》

(...)

Al contrario de esa situación, y por los dominios de salón 2-E un grupo de estudiantes del salón 2-B se colaban de a poco en territorio enemigo tras haber arrasado con gran parte de la competencia.

Buscaban eliminar a ese salón pues hasta el momento se sabía que todos sus miembros aún seguían en el juego, no obstante se le hacia complicado debido a lo difícil que era ubicarlos.

—¿Dónde crees que se hayan metido?—preguntó preocupado Mahiru.

—No tengo ni idea, pero es emocionante ¿No crees?—respondió Tsurugi totalmente despreocupado.

—No sé cómo puedes no sentir adrenalina en esta situación.

—Sí la siento, es solo que a diferencia tuya, la adrenalina no hace que me sienta asustado, solo me da más entusiasmo.

—Bueno, eso explicaria mucho.

Caminaban por la zona que había sido la inicial del salón 2-A con un poco de tranquilidad extra puesto que era imposible que alguien se quedará allí por tanto tiempo...

¿Verdad?

—Mahiru...—llamó Tsurugi algo preocupado.

—¿Qué pas¡...!—preguntó sin darle tiempo a reaccionar cuando una bala de pintura paso justo al lado de su mejilla, bala que originalmente estaba destinado para tsurugi.

—¡¿Mahiru?!—gritó preocupado este, jalandolo a una zona segura justo antes de que una orda de disparos comenzará a llover sobre ellos.

—Tsch...—se oyó un chasquido desde un árbol mientras la orda de disparos se detenía —Fallé...—De aquel árbol acabo bajando Kuro, soltando el arma al no tener más balas cargadas—Bueno, aún tengo esto—Soltó mientras sacaba una bomba de pintura—Podría lanzartelo antes de que me dispares, pero prefiero que sea justo—añadió mientras se acercaba—¿Aceptas?

—Tsurugi solo lo miro con una sonrisa—Creo que hablamos el mismo idioma—acto seguido tiro su arma y empujó un poco a mahiru—Quédate atrás, terminaré rápido—Susurró confiado para por fin acercarse—¿Entonces al final si viniste por la revancha?

—Algo así...

La desición era clara. La bomba solo detonaba con un fuerte impacto y se esparcia en todos lados, sin embargo si se usaba la fuerza solo presionandolo en un área, esta explotaría en ese pequeño rango, dejando solo salpicaduras leves, por lo que la mejor manera para hacer que detone del otro modo, era en una pelea cuerpo a cuerpo.

Justo como en el combate que Kuro había perdido.

—No te sientas mal cuando vuelvas a perder, ¿Okey?

Sin dar más tiempo, Kuro salto rápidamente hacia este tratando de presionar la bomba en su pecho, más fue esquivado por Tsurugi a duras cuestas.

Ese combate definitivamente no sería como el anterior, por lo que se tomó las cosas un poco más en serio.

Ambos se centraron tanto en acabar con el contrario que casi olvidaban donde estaban, recibiendo en cada acción, golpes adicionales ya sea por el duro suelo, los árboles o las piedras.

Era demasiado parejo. Pero por un segundo Tsurugi vio cometer el mismo error a Kuro por lo que al primer descuido alcanzó a quitarle la bomba.

Tomando su turno trato de no darle tantas vueltas y tumbarlo al piso para al fin inmovilizado, lo cual era su especialidad en el cuartel.

Tras arduos segundos de estrategia, consiguió tabear a Kuro y todo parecía indicar que había ganado, pero casi como instinto de supervivencia Kuro empujó y apretó la mano contraria en el aire, haciendo que esta le explote justo en la cara, cosa que le dio la victoria.

—Rayos...—susurró algo adolorido, pues él sonido y el empujón de la bomba había sido como un golpe en la cara.

—¡Hermano!—gritó preocupado mahiru al verlo derrotado.

Y Kuro quien había ganado solo se levanto y tomo su arma victorioso, por un segundo Mahiru retrocedió preocupado al pensar que seguía él.

—Tranquilo, de cualquie manera no tienen balas. Además no tenia pensado hacerte nada a ti.

—¿Eh?

—¿Qué tiene?

—Bueno... es solo que no lo esperaba en este punto. Pero... De igual manera... lo siento.

—¿Por qu-¡...!—sin tiempo a reaccionar, solo sintió un ligero golpe en el pecho, viendo un líquido verde esparcido a en él.

Mahiru le había disparado justo en el corazón.

—Sigue siendo una competencia después de todo.—rápidamente tomo su arma y salió a toda prisa del lugar—¡Te veo afuera!

A pesar de la manera en la que se disculpó y se despidió, eso no evitó que se sintiera traicionado.

—¡Buen trabajo!—Halagó Tsurugi orgulloso mientras lo veía irse.

—¡Ahahahahaha!—se oyó la burlona voz de tsubaki tras él, quien claramente habia visto todo eso y no hizo nada para evitarlo.—Vaya. Creo que al final realmente no eres su favorito.

Tsubaki creyó que seria divertido mas al ver la cara que le dedicó kuro comprendió que se meteria en problemas si no hacia algo en ese mismo instante.

—Llenalo de pintura...—susurró Kuro algo molesto.

—S-Sí... ya voy.

(...)

Tras aquel atentado Mahiru había conseguido salir de aquella zona, consiguiendo alcanzar a Sakuya y Tetsu, quienes se adentraba al territorio enemigo.

—¡Sakuya! ¡Testsu!—los llamo aliviado al verlos aún en el juego.

—¡Mahiru! ¿Qué pasó? ¿Y Tsurugi?—preguntó Sakuya confundido al no verlo con él.

—Malas noticias, le acaban de dar. Solo yo salí de ese lugar, pero seguramente el resto sigue por aquí.

—Rayos... sabía que era mejor no adentrarnos aquí...

—Es mejor tener cuidado, nunca se sabe cuando podrían estar vigilandonos.

—Sí. Además creo que aún quedan otros tres salones, es mejor si nos cuidamos, así tal vez daremos lo suficiente para obtener el 3er puesto.

—Tal vez si vamos al centro podamos posicionarnos mejor—sugirió Tetsu.

—De hecho no es mala idea. Andando.—mencionó animado Mahiru, caminando a la par con Tetsu—Apresúrate Sakuya.

Sakuya por su parte sintió leves escalofríos, sentía que alguien los 9bservaba.

—C-Chicos.

—¿Qué p-¡...!—Sin darse cuenta mahiru había jalado un pequeño hilo al momento de caminar, lo cual desencadenó toda una gran explosión de pintura que se esparció en gran área, cubriéndolo a él y a Tetsu casi completamente.

De no ser por que Sakuya estaba lo suficientemente lejos y se oculto tras un árbol por impulso, esta también pudo haberle caído a él.

—¡¿Pero que?!—preguntó Sakuya impactado por ver tales niveles de pintura.

—¡¿Cómo hicieron para meter tanta pintura en esas cosas?! ¡Ni siquiera los árboles se salvaron de pintarse!—gritó mahiru frustrado mientras se quitaba la pintura del rostro junto con Tetsu.

—Colocaron buenas trampas—Halagó Tetsu.

—¡No los halages!—regaño Sakuya.

—Ahhh... Todo depende de ti Sakuya.—trato de animar Mahiru

—¿Ha? ¿Te parece que podre salir de esta zona? Este lugar debe estar lleno de trampas y no quiero llenarme de esa cantidad descomunal de pintura yo también

—¡Solo hazlo! ¡Por el salón!

—¡¿Enserió crees que tengo oportunidad contra los que quedan?!

—¡Al menos intenta resistir un poco más. Así al menos quedaremos en el tercer puesto. No debe pasar mucho para que eliminen a los salones restantes. Solo mantente seguro.

Sakuya no estaba de acuerdo, pero aún así...

—Ahhh... esta bien.

○

—"Tranquilo, no te llegaras de mucha pintura" dijo—repetía Sakuya cuál niño frustrado mientras caminaba lentamente buscando la salida de aquel área—"Será divertido" dijo... ahh... ¿Por qué siempre me jala a los deberes que acepta. Algunos están bien pero otros realmente son demasiado... ¿Ah?

Se detuvo al notar un brillo colgante justo frente a él. Era un hilo transparente bastante difícil de detectar.

—Eso estuvo cerca...—se agacho para cruzarse pero al pasar nuevamente comenzó a percibir otro hilo cerca—¿Otro más?

Trato de pasar a través de ellos sin accionar alguno, pero mientras tras más se adentraba, más y más hilos acaban siendo descubiertos, preocupándose aún más hasta finalmente notar que había quedado completamente atrapado.

—Oh no...

Lo peor no era solo el hecho de que no había salida, sino que si movía uno, eso acabaría activando el resto. Llenándose de más pintura que Mahiru y Tetsu.

—Sabía que era mala idea...

—¿Enserio?—se oyó una conocida voz tras él.—Entonces ¿Por qué lo haces más complicado? Solo acepta tu destino, es imposible que te liberes de eso.

—Tsubaki...—mencionó bastante irritado por su presencia.

—Puedo ponértela aún más fácil si te disparo, pero eso no evitara que te caiga aún más pintura de la trampa.

—Atrévete a llenarme de pintura y te juro que cuando salgamos de aquí te pondré una trampa para osos en los pies.

-—De cualquier manera no es necesario que intervenga. Conozco a la perfección la ubicación de mis trampas. Solo veré como caes.

—Ahh...

Tsubaki era la presencia que menos quería ver en ese momento. Sentía que el universo lo torturaba solo por placer.

Trato de liberarse  de a poco pero cada movimiento acababa sacando un nuevo hilo y se complicaba aún más.

—Waoo... realmente te tomas muy enserió lo de seguir el mayor tiempo que puedas... aunque claramente no eres tan bueno en eso.

—Me gustaría verte intentarlo.

—Oh vamos, es solo cuestión de técnica y rapidez claro. Además de fuerza claro. Y yo tengo más fuerza de la que parece.

—¡Sí! ¡Lo noté hace tres días!—se quejó enojado al recordar ese suceso.

De cierto modo oírlo tan enojado a la vez que recordaba aquel suceso lo hizo sentirse algo nervioso.

—V-Vamos... solo olvidemos eso...

—¡¿Es enserió?!—regañó Sakuya mientras volteaba a verlo— ¡¿De verdad vas a obviar tus problemas como siempre?! ¡¿Es que no puedes solo enfrentarlos como lo hacemos todos?!

—Yo no soy como ustedes—Trató de defenderse Tsubaki—Además no puedes quejarte de ello. En comparación con mi yo anterior, lo que te hice es por mucho más suave que cualquier cosa que le haya hecho a alguien más.

—¡No me jodas! ¡Llevas diciendo lo mismo desde hace años! ¡Dices que cambiaste pero yo sigo viendo al mismo imbécil de secundaria! ¡El mismo que quiso obviar todo y acercarse como si nada a mi, pensando que olvidaría todo lo que me hizo! ¡Por supuesto que no has cambiado nada!

—¡Bien! ¡Lo admito! ¡Tal vez no haya cambiado mucho! Pero si comparas mi comportamiento actual-

—¡Es el mismo! ¡Solo intentas expresarte un poco menos que antes, pero no hay un cambio real!

—¡Eso ya es algo!

—¡No! ¡No lo es!

—¡Rayos! ¡¿Entonces qué quieres?! ¡¿Qué se supone que esperas de mi?!

—¡Pídeme disculpas!—soltó Sakuya finalmente, sorprendiendo un poco a Tsubaki con la petición.

Estaba seguro que su relación con  Sakuya estaba completamente distorsionada y que la única manera de siquiera acercarse a hablarle, era volviendo a nacer. Pero al escuchar su petición, realmente no esperaba que pidiera tan poco.

—Luego de 6 años jodiendome la vida y lo que pasó en la enfermería, es lo mínimo que merezco—susurró Sakuya bastante agotado por toda esa discusión.

Tsubaki aún no terminaba de procesarlo pero parecía que sakuya quería llorar, más al final solo se contenía. No entendía como es que había creado ese impacto tan grande en una discusión.

—Sakuya al contrario, al ver la cara de Tsubaki creyó que no lo habia comprendido por lo que algo decepcionado prefirio evitarlo—Ahh... no, olvídalo...

—Lo siento.—soltó de la nada Tsubaki antes de que este añadiera algo más.

—Ya no es necesario.

—No.—lo freno—Tienes razón. —añadió, hablando con total sinceridad—Fui un idiota desde ese entonces... te hice daño y nunca me disculpe por ello... ni siquiera al volverte a ver aquí.

Sakuya se quedó callado al verlo expresándose de esa manera tan sincera.

—Quería llevar las cosas con calma, es por eso que al verte aquí fue imposible para mí no reaccionar como antes ya que realmente no sabía como actuar. Sólo supuse que no había manera de conseguir que me perdones y creí que si hablaba del tema solo lo empeoraria. Ahora veo lo estúpido que fue.

Sakuya estaba de cierto modo conmovido al notar su sinceridad y parecía entender parte de su posición. Incluso él no sabía como actuar en ese momento. Las palabras que había esperado toda su vida por fin habían aparecido. Y ya no sabía que decir. Pero algo era claro. Sí habia una respuesta a sus palabras.

—Ahhh...—Suspiró cansado, bajando la mirada y finalmente, dándose por vencido ante tsubaki.

Sin darle tiempo a reaccionar, jalo las cuerdas que lo rodeaban, accionando todas las trampas a la vez, provocando una gran explosión de pintura que los cubrió a ambos.

—¿Lo hiciste aproposito? ¿Verdad?—preguntó Tsubaki mientras se quitaba la pintura de encima

—Sí. Valía la pena el intento. Salió mejor de lo que esperaba.

—Supongo que me lo merecía...

《Salón 2-B: Lose》

Puesto: 3ro

—Me sorprende la calma con la que te lo tomas.—preguntó Tsubaki al notarlo tan tranquilo mientras se limpiaba.

—Realmente me da igual. No tenia ganas de participar.

—Ya veo...

Ambos permanecieron solos en silencio mientras quitaban parte de la pintura de su cuerpo. Pero Sakuya aún tenía una duda en su mente.

—Por cierto.—llamó su atención algo sonrojado—¿Eso fue un... "Acepto tus disculpas"?

Al oírlo decir eso sakuya solo desvío la mirada y trato de no hacer contacto visual pata evitar que viera sus expresiones.

—No pienso repetirlo.

(...)

Por otra parte, cerca de la zona del salón A, lawless se encontraba preocupado puesto que ya no sabía el paradero del resto. Lo que significaba que estaba solo ante el peligro.

—Rayos... ¿Dónde se metieron los demás?

Se sentía al acecho en ese lugar, parecía como si al más mínimo descuido sería el fin de todo.

Llevaba el arma en mano preparándose para disparar al más mínimo movimiento que sintiera. Cosa que no tardo mucho en llegar.

Su impulso al oír el tiro de un gatillo habia hecho que levante el arma y lo use de escudo puesto que no había tiempo para huir. Se había vuelto en blanco fácil para quien sea que lo acechaba. Aunque parecía que no era sólo uno. Y un nuevo disparo proveniente de otra dirección lo alerto justo a tiempo, permitiendole reaccionar con anticipación y evitarlo.

Uno de los disparos provenía de los arbustos mientras que otro de un árbol, por lo que en un instinto de temor acabo corriendo hacia los arbustos, evitando las balas en el trayecto hasta al fin conseguir llegar al punto contrario.

Freya, quien se encontraba sobre el árbol, lucia algo confundida al ver la acción de lawless, creía que a lo mejor ya había eliminado a Mikuni puesto que no veía movimiento alguno. Lo que significaba que sin pensarlo debía disparar a lo primero que se moviera. Cosa que no tardo mucho en suceder.

—¡Allí esta!—Rápidamente apunto y jalo del gatillo hacia una zona de los arbustos, llegando a dispararle a alguien, aunque no era el objetivo esperado.

—¡Auch!—gritó Mikuni al sentir el disparó en la frente.

—¿Qué?—susurró confundida Freya y antes de poder ubicar bien a lawless, un disparo en el pecho acabó llegandole, sacándola del juego definitivamente.

—Lo logré...—susurró Lawless orgullodo mientras salia de su escondite.

Sabia que si se enfrentaba a freya cuerpo a cuerpo definivamente no tendria oportunidad puesto que siempre los derrotaba de ese modo, pero freya habia cometido el error de atacar a distancia, cosa que fue su perdición pues a lo mejor si ubiera estaso en el lugar de Mikuni, definitivamente  o habria podido salvarse.

—¡Lo logré!—volvio a gritar orgulloso mientras daba pequeños saltos—¡Finalmente lo log‐¡...!—Sy celebración duro demasiado poco al sentir un fuerte golpe estamparse contra su espalda, haciendolo caer al suelo con fuerza y soltando el arma en el trayecto.

Rapidamente trato de tomar su arma otra vez pero recibió un peso extra en su espalda, seguido de una patada en la mano, que le impidió sujetar el arma y por si fuera poco, recibió otra más en la cabeza, quedando completamente inmovilizado.

Al tenerlo conpletamente inmóvilizado Licht no dudó ni un segundo y le disparó directamente en la cabeza, sacándolo del juego.

—El demonio ha sido purificado.—Habló victorioso al por fin haberlo sacado del juego.

Finalistas:

2-A: Touma y Licht

2-E: Niccoló e Ildio

—Buen trabajo Licht, ve a reunirte con el profesor—halagó orgullosa Freya.

—De acuerdo.

Sin siquiera pedir disculpas por el uso de violencia, solo se levanto de sobre lawless sin darle importancia a como se encontraba este. Después de todo seguía resentido.

—B-Bien hecho Licht-tan.—trató de halagar lawless intentando darle la mano pero licht realmente no quería lidiar con él en ese momento, por lo que simplemente lo ignoró y se va, dejando a lawless con la mano extendida.—Supongo que aún no quiere hablar conmigo...

—No, es solo que no sabe como enfrentarte aún.—Respondió frwya tras él.

—¿Qué?

—¿Intestaste pedirle disculpas por mentirle todo este tiempo?

—B-Bueno... no, aún no.

—¿Entonces acaso esperas que solo ignore todo?

—¡Por supuesto que no! ¡Quería pedirle disculpas, pero aún no lo veo lo suficientemente calmado como para querer escucharme.

—No necesariamente debes esperas eso. Solo crea el ambiente. Sé claro con él y háblale del tema.

A lo mejor freya tenia razón, ya lo había pospuesto demasiado.

—O si no podrías solo dejar que alguien más te lo quité—sugirió Mikuni con algo de burlá.

—¡Eso jamás!

(...)

En el borde del campo y casi cerca de la salida, Ildio y Niccoló aún habían conseguido mantenerse con vida dentro del juego, para su suerte Niccoló tenía una puntería bastante precisa e Ildio poseía una gran fuerza y una percepción espectacular, por lo que era rápido identificar la ubicación de los otros jugadores.

Sumado a las trampas que ya estaban en el lugar y las estrategias de Niccoló, habían tenido una gran ventaja sobre el resto... Al menos hasta ahora.

—Alguien se acerca—susurró Ildio al percatarse de pasos acercándose cada vez más.

—¿Cuantos crees que sean?

—Tal vez dos.

Al observar fuera del bosque se pudo apreciar un tablero, señalando a los participantes que aún seguían en juego. De entre ellos dos representantes del salón A.

—Son Touma y Licht.

—Rayos...

No había que ser tan listo para saber que Touma era un experto en armas y sumando a la fuerza de licht, se trataban de rivales difíciles de tratar. Ni siquiera había tiempo para buscar alguna trampa que usar a su favor. Tenían que enfrentarlos de frente o se acababa.

—Tenemos que ocultarnos, eso tal vez nos de ventaja.

—No, creo que puedo encargarme.

—¿Eh? ¿Estas loco?

—Quedate atrás y dejamelo a mi—añadió finalmente, corriendo hacia ellos.

—¡Espera!—al final mo había podido detenerlo.

○

Del otro lado, touma también parecía haber detectado la presencia de Ildio, ocurriendosele un plan.

—Todoroki-kun.

—¿Si?

—Alguien se acerca  asi que tú ve por el lado derecho y yo iré por el izquierdo y juntos los acorralaremos en el centro.

—Licht sentia que habia algo mal con ese plan pero no había tiempo para cuestionar—De acuerdo.

Acato sus ordenes y fue escondido por el lado derecho tratando de hacer el menor ruido posible. Mas en un determinado punto todo se fue cuesta abajo pues sintió el frío tacto de un arma posándose en su cabeza y en instinto uso su mano para bloquearlo, recibiendo el primer disparo.

Bastaba uno más para sacarlo del juego, por lo que intento alejarse del lugar, esperando que touma lo ayudará, pero al llegar al centro no recibió ninguna ayuda.

Touma no estaba en el área que le dijo por lo que acabo siendo blanco fácil para Ildio, quien añadió otro disparo más en su brazo y con ello lo sacó del juego.

—Rayos—De cierto modo se sentía estafado.

—Bien. Ahora solo deb¡¡...!!—Ildio ni siquiera pudo terminar pues un disparo en la espalda basto para sacarlo del juego sin que siquiera lo notará.  Se había centrado tanto en Liche que olvidó a Touma.

—Buen trabajo Todoroki-kun. Yo me encargo del que falta.—Habló Touma saliendo del mismo lado del que él había estado justo antes de que saliera al centro. Dirigiéndose finalmente a la salida  en busca de Niccoló.

—¿Me usó de carnada?—pensó licht algo enojado.

○

Por la salida varios alumnos veían entusiasmados a Touma acercándose, pues sabian que como solo quedaban dos, eso definiría todo y por si fuera poco también estaba el hecho de que ambos eran profesores, lo cual lo hacía aún más emocionante.

—¡Vamos Niccoló! ¡Sé que estas por ahí, sal de una vez!—llamó en voz alta intentando atraer su atención.

Niccoló trataba de escabullirse entre los pocos árboles cerca de la salida para así poder disparar a distancia pero el más mínimo ruido le costó toso, pues touma rápidamente lo detecto y empezó a disparar hacia el origen del sonido sin parar.

Ante el temor Niccoló solo pudo correr tratando evitar que alguna le llegara, siendo perseguido por los disparos consecutivos de Touma hasta por fin llegar a ocultarse tras un gran árbol.

—¡¿Pero qué?! ¡¿Por qué tienes un arma que dispara tan seguido?!

—Solo tuve que pedirlo con anticipación. Es técnicamente legal.

—¡¿Eso se podía?!

—Sí, lo dice en las letras pequeñas.

Otro momento más en el que se sentía ligeramente molesto con Tsubaki y Belkia.

—Ya rindete Niccoló. Estas acorralado y no tienes otra salida. Sin importar a donde te muevas disparar ante de que siquiera puedas levantar tu arma.—anunció Touma mientras se acercaba de a poco sin dejar de apuntar.

—No puedo rendirme.

—Pero tampoco es como si fueras a ganar. Solo acepta tu destino.

—Pienso seguir hasta el final.

—Vaya, que noble. Espero que tus alumnos realmente lo valgan. Aunque parece que no.

—Dije que dejaras de insultarnos... ellos podrán no ser los mejores alumnos... pero, ahora son lo único que hace que quiera seguir aquí...

Era sincero al decir aquello pero un disparo al lado izquierdo de su pie acabó asustandolo, interrumpiendo su tranquilidad.

—La confianza en tus alumnos no te llevará a nada. Como tutor tú deber es solo líderarlos. No establecer conexiones emocionales. Mira nada más como acabaste quedando solo por dejar que uno de ellos hiciera lo que quiera en lugar de escucharte. No llegaras a nada si sigues así.

En cierto punto tenia razón. Si Ildio le hubiera obedecido tal vez habrían creado una estrategia para salir de ese apuro, pero ahora estaba solo.

No... había algo más.

—No... Si llegue hasta aquí es por que de algún modo ellos confiaron en mi. Dijeron que su prioridad era mantenerme en el juego hasta el final. Ellos me encargaron esa responsabilidad... Y no pienso decepcionarlos.

—Los profesores no obedecemos órdenes. Las damos, deja de ser ridículo. Y acabemos esto.

A toda prisa corrió tras el árbol y disparo al lugar donde debía estar Niccoló, pero se sorprendió mucho al no ver a nadie tras el árbol.

—¿Dónde?...—Niccoló no estába en ningún lugar cerca del árbol.—¡Ahh!

Levanto la vista al sentir una rama crujir, solo para ver a Niccoló en una de las puntas más altas del árbol apuntándole a la cabeza y disparandole sin darle tiempo a escapar.

El juego había terminado.

《Ganadores: Salón 2-E》

Al ver aquello en la pantalla fue inevitable para todos los estudiantes del salón 2-E no ponerse a gritar de felicidad, mientras una música los celebraba y daba por finalizado el juego.

○

—Me usaron de carnada... y por si fuera poco ni siquiera ganaron...—dijo licht bastante molesto, dejando caer su arma al suelo y yendo a lavarse.

○

Por otro lado los alumnos de Niccoló corrían por el para poder celebrar juntos, aunque se quedaron igualmente sorprendidos al verlo en lo alto del árbol.

—¿Cómo es que logró subir allí?—preguntó Otogiri.

—No la menor tengo idea.—respondió Niccoló algo asustado por la altura en la que se encontraba.

—¡¿Qué espera para bajar?! ¡Debemos ir a celebrar!—anunció Tsubaki bastante feliz.

—No. Ustedes vayan a celebrar... yo... me quedaré aquí... por el resto de mi vida.—dijo bastante aterrado mientras se aferraba al árbol.

—Tranquilo, si caes voy a atraparte—prometió Ildio bastante seguro. Pero Niccoló no lucia muy convencido.

—Ahh... Pediré una escalera.—dijo Otogiri, saliendo hacia los almacenes a buscar una.

Todos esperaban tranquilos a Otogiri, pero lawless pudo notar a Licht en los lavaderos y al verlo ya más calmado, se armó de valor y decidió ir por él.

Licht pudo oír sus pasos acercarse, por lo que volteo a ver de quien se trataba, quedando algo molesto al ver de quien se trataba.

—¿Qué quieres ahora?

Lawless en respuesta solo le extendió su mano, dejando ver un pequeño envase de jugo de melón

—Buen trabajo. Creo que lo hiciste increíble a pesar de lo que hizo el profesor Touma.

Eso había sido tierno... incluso para él...

Se había sentido ligeramente usado por Touma pero al menos alguien había reconocido su esfuerzo, aunque de igual modo se encontraba algo frustrado con él.

—Vamos, sé que es tu favorito.—volvió a insistir.

—Ha... Al fin parecer recordar algo.—Suspiró licht algo molesto mientras aceptaba aquella bebida.

—S-Sí... supongo que mereces una explicación por eso.

—No parece haber necesidad. Claramente solo querías burlarte de mi.

—¡No es verdad!—interrumpió—Yo nunca quise burlarme de ti... es solo... que cuando vi que solo me reconociste por el historial que tengo aquí, sentí pánico... No quería que me odiadas, así que creí que tal vez si arreglaba a mi yo actual, tal vez podrías amarme esta vez.

—¿De qué hablas?

—Ya sabes... Hablo de lo que te dije el último día que nos vimos.

—¿Hablas de tu declaración?

—S-Sí...—respondió algo apenado recordando el suceso—Es que como me rechazaste aquella vez-

—¿Cuándo te rechacé?—preguntó Licht claramente confundido.

—¿Eh? Dijiste que te irías del país.

—Sí, pero no dije que te rechazaba.

—¡¿Ha?!

—Siendo sincero me sentí algo decepcionado al verte salir corriendo de ese modo, creí que a lo mejor tenias un espíritu más fuerte y por lo menos me pedirías acompañarme a casa para poder conseguir el número de mis tutores o mi ubicación hasta que pudiera conseguir un celular. Supongo que no eres tan listo.

—¡¿Eh?! ¡¿Podía hacer eso?! ¡¿Entonces por qué no Intentaste detenerme?!

—Saliste a toda velocidad sin siquiera explicarme, creí que fuiste por algo, pero al no verte regresar entendí que solo te rendiste.

—¡No me rendí! ¡Todo este tiempo... No he podido sacarte de mi mente! ¡Y cuando te volví a ver pensé que tenia una nueva oportunidad que no quería desaprovechar! ¡Por eso lo hice!

—¿Eh? Pero si tu actitud es casi similar a la de la escuela, solo se intensificó un poco pero quise creer que solo te dejaste influenciar ya que no había nadie para ponerte un alto, o tal vez sólo era tu ego...

—¡Licht-tan!

—De cualquier manera. No esperaba que fueras tan estúpido como para meterte con Niccoló. Realmente no entiendo como es que pudiste deformarse tanto el tiempo que no estuve presente.

—¡Me disculpe! ¡Lo juro! ¡Estoy arreglando todos mis errores!

—Sí, sí...

El ambiente se calmaba de a poco, lawless pudo sentirse aliviado y su corazón no dejaba de latir por lo que se había enterado.

—E-Entonces... si no me rechazarse aquella vez... ahora es posible...

La situación lucia vergonzosa hasta para licht.

—Lo pensare si me traes otra de estas—mencionó mostrando la bebida que lawless le había dado, intentando ocultar su sonrojo de ese modo, cosa que también acabo enterneciendo a Lawless.

°

Nuevamente en donde se encontraba Niccoló, los alumnos espectantes y el resto de jugadores ya empezaban a irse por su cuenta después de la agradable experiencia, pero en el centro del campo, los ganadores aún no se movían, debido a que Niccoló aún se negaba a bajar y ogotiri no traía muy buenas noticias.

—No está la escalera. Parece que alguien la uso y se le olvidó regresarla.

Los chicos ya no sabían que más hacer para bajar a Niccoló. Este era muy terco como para animarse a bajar del mismo modo en el que subio. Se aferraba al árbol con su vida.

—¿Qué hacemos?—preguntó preocupada una de las alumnas. El árbol era demasiado alto como para pedirle que salté y aterrice bien.

—Tengo una idea—Sugirió Tsubaki, haciendo un gesto para que todos se acercaran a escucharlo.

Mientras tanto Niccoló seguía aterrado en lo alto del árbol. Recordaba que en un impulso de miedo había saltado de rama en rama hasta un lugar factible, pero si era sincero, no tenia idea de como es que lo había conseguido sin siquiera temblar o como sus manos y piernas habían tenido la fuerza para ello. Era demasiado fascinante hasta para él, mas ahora se arrepentía profundamente de ello pues no tenía idea de cómo bajar.

Sus pensamientos se nublaban con el temor constante de caerse al intentar bajar, pero mientras más segundos pasaban, más se animaba a ello, pues estaba demasiado alto como para quedarse allí por más tiempo. Estaba a sólo 3 segundos de intentarlo cuando de repente el árbol empezó a crujir, asustandolo bastante por el repentino sonido, y al sentir como este comenzaba a temblar se paniqueo aún más.

—¡¿Q-Qué pasa?!

—¡Esta funcionando!—gritó desde abajo Tsubaki, animando al resto de sus compañaeros a sacudir el árbol con más fuerza aún.

El árbol comenzaba a tambalearse mucho. Casi parecía como si un terremoto lo estuviera azotando, haciendo que niccoló empezará empezará resbalar sus manos del tronco y poco a poco fuera perdiendo el equilibrio.

—¡E-Esperen! ¡Chicos!—gritaba alarmado mientras más se desestabilizaba. Hasta que finalmente perdió el equilibrio y su agarre y acabo cayendo hacia el suelo.

Niccoló casi podia sentir el duro golpe que se llevaría al chocar contra el suelo. Ya hasta se imaginaba a sí mismo en la enfermería con las piernas o la cabeza fracturada. Pero sorprendentemente no paso.

A solo unos metros del suelo sintió un agarre que lo salvo. Y al abrir los ojos acabo sorprendido al ver lo que pasó.

Había caído justo en los brazos de Ildio.

—Te dije que te atraparía—dijo orgulloso mientras lo miraba con una tierna sonrisa que hizo que su corazón latiera.

Ildio realmente lo ponía en nervioso.

Continuará...

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Gracias por ser pacientes pese a todo, trate de terminarlo rápido para terminar las otras que también están en espera. Nos vemos.

Hasta la próxima...