Capítulo tres.

|Isabel y Mauro Gómez en multimedia|

Valeria

Entro en el comedor bostezando muy tranquila ya que el verano, es verano y hay que disfrutarlo al máximo y que mejor cosa que hacerlo durmiendo.

— ¿Valeria todavía así? — mi madre entra en el comedor con una sonrisa y parece que va a salir por el hecho de que no va en pijama.

— ¿A dónde vas? — cuestiono aunque segundos después mi padre entra y se junta con mi madre con un par de maletas — ¿A dónde vais?

— De acampada a la montaña — responde mi padre caminando hacia mí — Ten — me da una pequeña bolsa de color gris — Aquí pondrás tu ropa, vamos ha estar una semana así que tráete lo necesario.

Espera...
¿Qué?
¿Montaña?
¿Yo?

— ¿Vamos? — pregunto tragando saliva esperando a que eso haya sido una broma de mal gusto.

Yo no sobrevivo en la montaña y menos con bichos.
Querida lo tenemos claro.

— Val estas castigada — me recuerda mi madre con un tono de retintín y yo dejo la bolsa en el suelo — Así que has de venir con nosotros.

Estoy castigada sin salir de mi casa, sin poder quedar con nadie y además, para meterle más leña al asunto, me voy una semana a vivir con bichos.
Qué bonita es mi vida.

— Pero odio los bichos — expongo una excusa que obviamente es ignorada por mis padres — Y el castigo era no poder salir de casa.

Mis padres se ríen entre ellos y luego me miran cómplices.

— ¿Quiénes son los padres? — cuestiona mi padre irónico y yo los señalo a los dos — Y ¿Quiénes mandan los castigos?

Suelto una carcajada al ver lo penosa que es esta conversación y recojo la bolsa gris en la que pondré mis cosas que esta en el suelo.

— Después de esto iré a la fiesta de Alicia — advierto antes de salir en dirección a mi habitación.

Entro en ella y empiezo a apilar ropa para llevarme. Odio ir de acampada por mil y una razones pero las voy a simplificar para que no os aburráis.
Los bichos, no hay baño, duermes en el suelo, no te puedes duchar.
Pero para mí hay muchas mas razones por las cuales odio ir de acampada como por ejemplo ¿Dónde me cambio?

Saco de mi armario tres pantalones de deporte largos por si hace frío por las noches ya que en la puta montaña como que no va ha hacer mucho calor, digo yo.
Saco cinco shorts tres de deporte y dos tejanos, ropa interior, dos jerséis y por último camisetas, tanto de tirantes como de manga corta y larga.
Luego cojo un bolso y meto cargadores aunque no sé donde podré cargar el móvil, gafas de sol y alguna otra cosa.

— Valeria — mi madre entra en la habitación mientras yo doblo la ropa encima de la cama antes de meterla en la bolsa — ¿Tanta ropa?

La miro alzando una ceja obvia y ella niega con la cabeza esbozando una sonrisa. Llevo mucha ropa porque nunca sabes lo que vas a necesitar en una montaña.
¿Puedes dejar de decir montaña?

— Tráete bañador y cosas para la playa — anuncia mi madre y yo la miro abriendo la boca emocionada.

— ¿Y eso? — cuestiono emocionada ya que de repente me he visto tomando el sol en una hermosa playa  sin bichos que me hagan desear un pequeño suicidio por mi parte — Vamos a ir a la playa ¿Cuántos días? ¿En qué hotel nos quedaremos? No me lo creo.

Mi madre se empieza a reír y yo hago una mueca haciendo ver que me ofende que se ría de mí aunque nos sirve de nada porque mi madre si se ríe de mí, se va a reír a gusto.

— Eva y JuanCarlos tienen una casa allí — mi cara cambia al instante después de oír lo que acaba de decir — Iremos dos como máximo.

¿Eva y JuanCarlos?
¿Me está tomando el pelo?

— ¿Eva? — pregunto incrédula y mi madre asiente obvia — Y ¿JuanCarlos?

— Vamos a ir con ellos — me informa sonriente — Y con los gemelos, ¿No te lo había dicho papá?

Niego rotundamente con la cabeza y ella se encoge de hombros indiferente.

— Pues ahora ya lo sabes — murmura contenta y yo esbozo una sonrisa más falsa que el culo de Nicki Minaj — Ahora seguro que te hace más ilusión.

Uy sí, una cosa.

— Date prisa que nos vamos en veinte minutos — me dice mi madre saliendo de la habitación.

No tenían bastante con los bichos, que no haya baño y todo lo enumerado anteriormente, no. Claro que no. Vamos a meter a los vecinos también ¿Por qué no?
En el fondo sé que mis padres no lo hacen para fastidiarme por la simple razón de que ellos no saben nada de que Jesús se metía conmigo y que me hizo el vacío dejándome sola durante años.
El problema es que Jesús ha como si nada. No lo veo arrepentido es más, lo veo que me tiene por debajo y que por eso podemos volver a ser amigos, como si yo fuese a perdonarlo.
Que rece que rece, porque no pienso olvidarme de lo que ha hecho.

Al menos irás a la playa.
Saquemos lados positivos al asunto.
Y verás a Jesús en bañador.
Y a Daniel.
Ya pero sabemos que Jesús te pone más guarrilla.
Dioses no me puedo creer que tú estés en mi cabeza.

Recojo toda la ropa y arreglo la cama antes de abrir la ventana para ventilar. Ahora es todo un reto abrirla sin que alguno de ellos me vea o yo los vea a ellos.

Por suerte cuando la abro su habitación esta desierta y no hay nadie que me pueda molestar al abrirla. Después de eso cojo la bolsa que me ha dado mi padre mi móvil y bajo al salón.

Pues muy bien Valeria, dile adiós a la buena vida, te vas a vivir con los bichos.
Adiós.

___

Jesús

De acampada con los Gómez que emoción. En verdad pasar más tiempo con Valeria me mola pero sé que a ella no y me ignorará la semana entera como hizo el otro día en la cena.

— Ya estamos — nos informa mi padre apagando el coche.

Bajamos del coche y nos encontramos en una carretera de cemento en medio del bosque. No entiendo porque mis padres han decidido venir al campo cuando podríamos haber ido la semana entera a la casa que tenemos en Marbella.
Cosas de adultos.

— ¿Crees que Valeria vendrá? — le pregunto a Daniel y él me mira negando con la cabeza como avergonzado de que haya preguntado eso.

— Está castigada así que seguro que la obligan a venir — responde encogiéndose de hombros — Pero no creo que te vaya hacer el mínimo caso, si eso te pega y te insulta.

Ruedo los ojos pero sé que es verdad. Conozco a la Valeria antigua y aunque haya adelgazado y este mas buena no creo que su espíritu haya cambiado mucho. No me perdonará y si quiero que lo haga me lo tendré que currar muchísimo y no es plan.
Pero de todas formas no creo ni que me hable, ignorará mis comentarios y me hará el vacío.
O zascas a ella se le dan muy bien.
Demasiado bien diría yo.
Seguro que aplica lo que yo le hice.
Pero vamos que porque esté buena no me voy a currar eso de ser su amigo. Tiene novio así que paso.
¿Así que si no tuviese novio le harías caso?
Esta buena y me mola que sea segura de si misma.
Que pena que te odie y tenga novio.
Ya ves.

— Hablando de la reina de Roma — un coche color plateado para junto al nuestro.

En cuanto el motor se apaga las puertas se abren dejando ver a la familia al completo salir del coche.

— Se te van los ojos brother — se burla mi hermano y yo lo empujo hacia un lado molesto.

Valeria va con unos pantalones tejanos y una camiseta blanca corta. ¿Por qué va tan simple pero sigue estando potente?

Sale del coche con el móvil en la mano y coge un bolso de color marrón café. Se acerca con una sonrisa y saluda a mis padres y a Daniel con dos besos.
Ya estas acostumbrado a que no te salude.

— Hola — la saludo y ella me mira y me hace una señal con la cabeza y teclea algo en el movil para después llevárselo a la oreja.

Mis padres y los de Valeria y Oscar se saludan entre ellos. Oscar empieza ha hablar con Daniel y yo sigo con la mirada a la morena que se esta apartando del grupo y me parece que habla por teléfono.

— ¿Qué te pasa con mi hermana? — cuestiona Oscar mirándome con una ceja alzada — ¿Por qué no os saludáis nunca?

Daniel se ríe y yo le miro esbozando una sonrisa. Oscar tiene un año menos que Valeria y siempre nos hemos llevado muy bien con él. Mi hermano más ya que en ese entonces yo era el amigo de Val.

— No nos caemos bien — confieso y este suelta una carcajada muy sonora — Así que preferimos no acercarnos ni hablarnos.

— Ya — contesta sarcástico y mira a Dani que esta partiéndose el culo de la risa.

Vuelvo la mirada a la morena que sigue hablando por teléfono muy animada.

— Pues si os caséis tan mal deja de mirarla tío que es mi hermana — murmura avergonzado y yo suelto una carcajada — Seguro que está hablando con Alicia, esta potentorra.

Mi hermano alza una ceja y este se ríe.

— Vamos — pronuncia la madre de Valeria — Val deja de hablar por teléfono.

Valeria asiente y parece que empieza a despedirse de quien la ha llamado. Cuando lo hace se acerca a nosotros y empezamos a caminar hacia el lugar donde acamparemos.
Camina junto a mí tecleando en su móvil algún mensaje.

— ¿Con quién hablas? — pregunto y ella me mira frunciendo el ceño sin entender — ¿Qué?

— ¿A ti que te importa? — me espeta interrogante mientras se pasa una mano por el pelo — Pregunto.

Empezamos bien Jesús.

— A ver Valeria, solo era curiosidad — murmuro inocente y esta niega con la cabeza.

— Piérdete — farfulla caminando mas rápido y juntándose a su padre.

Cada vez quedas peor así como dato.
Cállate.

***
¡Hey Laddiess!
Dioses hacía bastante que no subía capítulo upssss JAJAJA
Al igual tengo excusa y es que estoy preparando todo para irme a Texas de intercambio JAJAJA así que perdonarme por favorr.
BUAAA el 3 fui a ver a los gemelos a la firma de Barcelona y madre del amor hermoso🤤
Estaban OGGGGGG
Y super cariñosos y animados JAJAJA
Er Danielo se puso a pronunciar mi nombre y al pobresico no le salió muy bien pero le amo igual. Y Yisus dioses estaba ajsknelyaiosns😍

¿Vosotras habéis ido alguna?
Contarme jejejejejej

¡NADA MÁSSSS!
«VOTAR Y COMENTAR»
¿30 votos?

¡Pleaseee decirme que os parece la historia!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top