Ir a buscar un cuerpo al bosque, en mitad de la noche, no es por ni por asomo la peor cosa que ha hecho.
Enfrentarse a una criatura sobrenatural, de aspecto grotesco, y altamente mortal, no es la experiencia más aterradora que haya vivido, y eso que también contaba el que esta quiera hincarle los dientes. Que fuese consultado, si quería o no, eso definitivamente sí era lo nuevo.

¿Una criatura con paralizante? ¡Puff! Por favor en verdad conocía cosas peores, mucho peores, incluso más peligrosas, aterradoras y sobre todo muchísimo más asquerosas.

Por supuesto, como semidiós todo parecía quedarse corto. Ser el jodido hijo de un dios griego solo era la base de la pirámide de locuras, peligros, y sobre todo enfrentamientos a lo que en el campamento se denomina como monstruos. Es por eso que cuando supieron que la criatura parecida a una lagarto cría del cabello de Medusa, se llamaba Kanima, él lo llamo ¨Abominación, ¨ casi sorprendiendo a Derek, tal vez porque a él no lo consideraba en esa categoría, o porque lo dijo con tanta naturalidad.

Es un hijo de la Guerra, hermano menor de las personificaciones del Horror y el Temor, ha luchado desde que era muy joven, enfrentado cosas que estaba seguro que ni el mismo Gerard Argent ha visto, tal vez por eso es que no duda en hacerle frente al viejo demente mientras recibe una paliza. Lo cual hiere su orgullo como hijo de Ares, el luchar contra todo instinto de devolver cada golpe, con algo más que su sarcasmo natural, tiene ganas de desenvainar su espada y clavarla en lo profundo de su pecho, luego de haber sacudido sus viejos huesos a golpes.

¿Debería agradecer que Clarisse de la Rue está en la universidad y no la vera en el Campamento este verano? ¡Mierda su hermana mayor lo haría sentir en el Tártaro! Ella desaprobaría su estúpido plan de déjate usar de saco de boxeo para ocultar quién eres, puedes defenderte sin evidenciar que no eres exactamente humano.

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Nada mejora a lo largo de esa noche, para cuando todo termina y Jackson se levanta rugiendo como un lobo, el cansancio, y golpes empiezan a dar su acto de presencia, al bajar su adrenalina, por suerte había comido algo de ambrosia cuando Lydia llego a buscarlo.

Scott actuó por su cuenta. No corrección, actúo por cuenta de Deaton, sin decirle una palabra siquiera a él, sin mirarlo cuando llego lleno de golpes, y luego este se marcha en cuanto los Argent se dan la vuelta para salir del almacén, casi corriendo detrás de la nueva cazadora, y Stiles puede sentir la ira comenzar hacer hervir su sangre.

Su deseo de lucha, de pelear y derramar sangre ajena, es su naturaleza es su característica. Tiene su espada en su forma falsa bien guardada en su bolsillo, por lo que no duda en intentar caminar contra el Beta traidor; de no ser porque la mano de Derek choca contra su pecho empujándole hacía atrás, mirándole con ojos rojos como si buscara intimidarle, en verdad él Hale no quiere enfrentarle, gruñirle, amenazarle, o siquiera acorralarle cuando su deseo de pelea es más grande que su propio cuerpo.

¨ ¡Tú lo sabías! ¿No? ¡Sabías lo que Scott planeaba! ¨ Gruñe haciendo estremecer a su Betas, mientras Peter observa desde su lugar, como ni él, ni Lydia parecen una pizca intimidados, de hecho, parecen burlones. ¨¡Sabías que iba a traicionarme! ¨

¨ ¡Claro que sí Derek! ¡Por eso deje que el abuelo psicópata me usara de saco de boxeo, mientras tenía a Boyd y Erica colgados a la corriente electica como una jodida piñata! ¨ Grita histérico sacando una mirada de sorpresa en el contrario, y no le importa, no quiere calmarse, y si Derek no le dejaba ir contra Scott, pues su furia se volcaría en él. 

 O al menos podría hacerlo, si su cuerpo herido le punzara en distintas partes. ¡Mierda! Debería haber comido más ambrosía.

Siente uñas clavarse en su brazo, y se gira mirando con toda su furia al cuerpo considerablemente más bajo. ¨Debemos irnos. ¨ Declara Lydia con fiereza. ¨ Y no me mires así, porque no me das miedo. ¨ Por el Olimpo, más que una hija de Venus, Lydia en este momento podría pasar por la hija del Inframundo. ¨Dije que nos vamos. ¨ Sisea apretando los dientes guiándole hacía el Jeep, antes de empujarlo del lado del conductor y poder rodear el vehículo hacía el lado del acompañante. ¨Estás herido, necesitas ayuda no sabemos cuan graves son tus heridas. No quiero reclamos que por mi culpa en lugar de quedarte descansando, vinimos a salvar a Jackson. ¨

En otras palabras, — No quiero que Clarisse, o cualquiera de tus otras hermanas me fastidien. — Se burla en su propia cabeza, mientras enciende el Jeep bajo la mirada de los lobos. Simplemente quiere pensar que Derek y los demás lo mirar sorprendido por que imita la expresión indiferente de Lydia.

¨No puedo ir al hospital, entre la ambrosía y toda la mierda, van a sospechar. No quiero que Noah me fastidie porque su supuesto hijo apareció en el hospital hecho una mierda. ¨ No quiere más problemas con quien lo había criado, ante los ojos de todos Stiles amaba a su –padre. - y este a él. Pero puertas a dentro, todo era vil mentira. Que fue en declive desde que su madre murió,

¨Es para protegerte, lo hago para cuidarte. Algún día lo entenderás. ¨ Le dijo ellas cuando de niño, el Sheriff no hacía más que gritarle y pelear con su madre.

¨Nunca dije que iríamos a un hospital. ¨ Sonrió la pelirroja mientras tecleaba en su teléfono. ¨¿Qué mejor que un hijo de Apolo para curarte? ¡Ya le avisé a Danny que vamos en camino¨ Stiles rodo los ojos tanto que le fue doloroso en su cabeza.

Sí Percy tenía razón, ser un semidiós era una mierda.