Especial : La eternidad del mortal
-No! vete!-
Veía al pelinegro frente a él, llorando por primera vez. Alguna vez imagino que sus lagrimas podrían ser de sangre o de algún material maldito, pero no, eran solamente normales, a pesar de ser un ente demoníaco lloraba lagrimas casi humanas.
Una a una caían, mojando su rostro. Mantenía una mirada furiosa y desafiante, pero el ser notó que más bien, era una mirada de suplica, sus brazos tendidos de forma algo, protectora, como si quisiera proteger lo que tuviera atrás de él.
-Que te vayas!! no te dejare!-
EL otro ser lo veía con desdén, solía ser una reacción normal, pero le era interesante que justó el hijo de satanás le "obligase" o más bien, suplicase que no se llevase al anciano tras él, casi estaba por morir y él solo atrasaba su trabajo. Más parecía el único en no comprender, puesto que el otro parecía aceptar su destino su propia muerte.
-Conoces las reglas, Damien, él debe irse conmigo-
-No te lo permito! no ira a ningún puto lado!-
Era agobiante, cada que venia a realizar su trabajo algo lo complicaba, miro al antes rubio, el cuál a diferencia del mayor, no lloraba.
Veía como él tocaba la espalda del chico, llamando su atención mientras le hablaba para calmarlo, era raro, el hijo del diablo se enamoró de un mortal, este creció juntó a el chico, el envejecía frente a sus ojos, y este cada tanto el rogaba que le otorgase un año más de vida al joven, y justó ahora se viene a valentonear diciendo que no se lo va a llevar, algún día vendría
Aprovechó cuando el chico besaba al hombre con el que se casó, para rápidamente tomar la mano del otro, y arrastrar su alma.
Vio como el pelinegro lo notó fácilmente, desesperado abrazaba el ya difunto cuerpo del que alguna vez fue su amado
Sabia que el chico no podría volver a verle, pues no podría ir al cielo.
La muerte solo se fue, puesto que ya había terminado su trabajo.
(se que solo los mormones van al cielo, pero shhhhhhhhhhh)
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top