Capítulo 17- Esto no es de tres
Jesús
Estamos en la discoteca, bailando, bebiendo, lo justo eehh, sí, sí, claro. Y pasándonoslo bien.
Dani me dijo que iba a buscar a su chochete o lo que Dios quiera que sea, vamos a María.
Lo veo venir desde lejos, no lo veo bien, pero por lo que puedo distinguir, no viene con cara de súper mega híper ilusionado por volver a ver a su love después de dos días, que para él parecían años.
Ella viene a su lado, camina observando todo a su alrededor con una sonrisa de oreja a oreja, que por cierto no me gusta nada de nada.
Al llegar los dos a donde estamos, empiezan a relacionarse con nuestros amigos, Dani más que María, pero parece que por lo menos lo intenta, hasta que llega nuestra gran amiga Carmen, como cual loca cabra posesa, se acerca a Dani para saludarlo y este parece decirle algo, tras esto, Carmen hace el ademán de acercarse a María. La muy simpática, al ver que va con intenciones de saludarla le sonríe falsamente y cuando están las dos a la misma altura, se saludan como personas civilizadas, menos mal.
Tras llevar un buen rato bailando, cantando como locos y pasándonoslo de puta madre todo parece ir de lujo, pero claro, nada es tan bonito como lo pintan y la muy zorra de María le tiro el cubata "sin querer" al blanco vestido de Carmen.
Cuando esta vio su precioso vestido de tal manera, creo yo que los Dioses de todo el universo se juntaron para tirar truenos y rayos. María, más vale que corras si no quieres morir antes de tiempo. Opino lo mismo.
Carmen comenzó a gritarle tan fuerte que su voz se sentía por encima de la música. Yo es que la cojo de los pelos y le arranco esas extensiones que lleva de pelo de rata.
Si en ese momento no la cojo y la separo, creo que hubiera sido capaz de hacer eso. Es muy impulsiva cuando quiere.
Tras toda esta movida y tras calmar las aguas bravas todo vuelve a su cauce y parece ser que estamos más relajados.
Veo a mi hermano mirar fijamente a María, llevan un rato un poco distante y eso me extraña, voy hacia él pero empieza a andar hacia María. La mira como un loco enamorado, como si estuviera poseído, como si lo hubiera embrujado. Ella pasa totalmente de él y se dirige hacia el baño, este va detrás como su perrito faldero.
Tengo un mal presentimiento y no sé por qué. Lo mismo te digo, esta noche va a ser muy pero que muy larga.
[...]
Celia
-¿Me vas a decir que te pasa o vas a seguir con el trompo de vieja cabreada?- Me dice mi madre tras el almuerzo.
-No me pasa nada, mamá de verdad, estoy bien.- Le digo con tranquilidad y me subo a mí habitación.
He comido súper poco comparado con los demás días que me lleno como los burros, a mí madre le ha extrañado y pues, cómo cualquier madre, se preocupa por su hija, creo yo.
El motivo de todo esto tiene nombre y apellidos, un cabron de los pies a la cabeza y que con tan solo cuatro palabras que suelte por ese piquito de oro ya me siento cómo las mierdas y no sé por qué, sí toda mi vida he pasado de lo que me diga la gente, y sí algún comentario me no me gustaba, me defendía, le reprochaba y todos tan felices, pero esta vez no, esta vez me he callado. ¡Te ha llamado guarra en toda tu cara y delante de tus amigos! Eso es algo que él no se puede permitir contigo.
Le tengo que cortar el rollo, me está haciendo daño y ni soy de su propiedad ni quiero serlo, soy libre y nadie, repito, nadie va a decidir sobre mis gustos y mucho menos me va a dar órdenes de a dónde ir o no, seas mí novio o San Pedro, solo mis padres y mucho es.
Mañana mismo le voy a plantar cara, no voy a permitir estos malos tratos de él, de la persona que supuestamente quiero, solo porque sea un celoso, y es que son celos sin sentido, que no entiendo.
[...]
Dani
Estoy destrozado, hecho polvo, nunca me hubiera imaginado esto de María, de la persona que quería y que aun quiero, porque aunque me haya hecho daño, en un rato no la puedo olvidar.
Me resulta increíble que todo el mundo se diera cuenta de cómo era María, de lo falsa y manipuladora que es, de que lo único que buscaba de mí era mi fama. ¿Cómo no me pude dar cuenta?
Intento secarme las lágrimas que caen por mi rostro tras la asquerosa imagen que acabo de ver y me dirijo hacia donde están todos.
-Jesús, vámonos...- Le digo en un susurro lo suficientemente alto como para que me escuche.
Se da la vuelta preocupado por mi voz ronca a causa del llanto, me mira con los ojos grandes como platos, parece que se le fueran a salir.
-Da...Dani... ¿qué te pasa? ¿Estás bien? ¿Por qué tienes los ojos llorosos?...- Me invade a preguntas pero no le puedo contestar a ninguna, no me siento capacitado en este momento cómo para hablar de esto.
Lo miro con tristeza y este parece haberme entendido perfectamente porque me da un fuerte abrazo, de esos que no pides pero necesitas profundamente, un abrazo de hermanos.
-Vámonos a casa, allí si te apetece me cuentas todo y si no, cuando prefieras, pero tu aquí no te quedas...- Alguien lo interrumpe.
-Dani... ¿Qué te pasa?- Dice una voz familiar que consigo identificar por la de Carmen. Me doy la vuelta y la veo ahí plantada.
Le doy un fuerte abrazo. Es una de mis mejores amigas y aunque no la conozca de toda la vida, en poco tiempo me ha demostrado mucho más que personas a las que sí.
-Vas a salir de esta, te lo prometo.- Me dice en un leve susurro.
-Eso espero.
Nos separamos de nuestro abrazo.
-Lo he visto todo desde el baño y cuando te he visto ahí plantado mirando todo, a punto de llorar se me ha caído el cielo encima.- Me dice y tras esto salimos de la discoteca.
Tras un largo camino de charlas, llantos, consejos, advertencias y sobretodo de escuchar la palabra "te lo dije", dejamos a Carmen en su casa y mi hermano y yo nos vamos a la nuestra.
-Dani...- Dice mi hermano y yo le hago un gesto pidiéndole que continúe.- A pesar de todo, quiero que sepas que te voy a estar apoyando, que a la mierda todo el mundo, ahora lo único que importa es que tú, mi hermano, estés bien, que no te dejes avasallar por nada ni por nadie, porque vales mucho más que toda esa gente que se aprovecha de nosotros, que quiere algo a cambio y que no les gusta vernos felices. No pienses que todo el mundo te quiere por lo que eres, ahí afuera hay alguien que te quiere por quien eres y estoy seguro de que la vas a encontrar, y sobre lo de María... que le den a ese parche poroso, que ese trozo de carne con ojos y patas no vale la pena. Te quiero tío. Buenas noches.- Me río levemente por los motes que le ha puesto a esa.
Tras decirme esto y darnos otro de los queridísimos abrazos de mí hermano, se pone el pijama y se tumba en la cama quedándose totalmente frito.
Qué harías sin tu hermano...
Pues nada, no haría nada... ni sería nada.
Mañana va a ser un día agotador y pasado ya ni te cuento.
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Hola hola flores de lotoo.
Aquí me tenéis de nuevo dando el coñazo.
Espero que os guste. Aunque creo que no está bien escrito y todas esas cosas, pero es lo que ha tocado hoy.
GRACIAS POR LOS VOTOS Y LOS COMENTS!!!
Besis😘😘
Att: C❤🙊
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