Querétaro tenía una visita muy importante, hoy tenía la visita de su compañero Alemania.

-entonces,¿estás emocionado sobre la presentación de piano?-preguntó Querétaro.

-claro, habías dicho que Cuba también vendría ¿no es así?-Alemania estaba sentado en el sofá disfrutando del café que Querétaro le había dado.

-¡por supuesto mi señor!-dijo Querétaro emocionada por el evento que se aproximaba, en el cual Alemania iba a estar ahí.

Todo era paz, hasta que el sonido de una puerta abriéndose bruscamente interrumpió ese momento de tranquilidad.

-!Querétaro, que te dije de robarme el café!-se escucho una voz afeminado.

Una jarocha reclamando su café perdido, el mismo que le dio Querétaro a Alemania.Fue una mala idea aceptar que la jarocha se quedará en su casa.Alemania miro seriamente a la joven, que al verla quedo impactado.

Su camisa blanca las rosas en su pelo, sus ojos, su figura, su voz.

Eran muy hermosas para el alemán.Además de su personalidad rebelde y dominante.

Era tan hermosa, que el alemán quedó embobado y no se dio cuenta que soltó unas palabras apenas audibles.

-ich liebe dich-dijo Alemania.

Veracruz después de reclamarle a su hermana.Miro la taza de café del tricolor y noto algo.

-wey, ese es mi café-menciono Veracruz sonrojada.-y ya le había dado un sorbo antes de que desapareciera-miro al otro lado.No Mamés que asco alguien más bebió del mismo vaso que ella.

Alemania quedó sorprendido y al igual que la chaparra se sonrojo y miro al otro lado.-yo, lo siento-pero, ¿en realidad lo sentía?.

Esa chica le gustaba y beber de su taza lo hacía ¿feliz?.Alemania no sabía que decir y Querétaro estaba tan nerviosa, en cuanto su hermana se fuera ¿Alemania le gritaria y se enojaria con ella? Querétaro le tiene mucho aprecio al alemán y si eso sucede todo se iría a la basura.

-y-yo lo siento mucho señor Alemania, le juro que no volverá a pasar-es lo único que pudo salir de la boca de la queretana con un tartamudo.

-no te preocupes, ¿y quien es ella?-preguntótratando de olvidar lo que acaba de suceder.

-¡ay si!, ella es mi hermana Veracruz Ignacio de la llave, señor Alemania-Que descuidada era Querétaro en estos momentos.

-un gusto conocerla señorita-dijo Alemania para proceder a agarrar la mano de la jarocha y besarla.

-el gusto es mío guapetón-dijo Veracruz sin miedo alguno.-aunque no se me olvida lo de mi taza-.

-es usted muy graciosa-dijo Alemania coqueto.

-¿neta wey? ¡Me chiveas!-para el alemán la jarocha tenía una exprecion demasiado hermosa y alegre y su acento algo gracioso.

Mientras Querétaro en su mente se decía una y otra vez.
"Maldita bruja ya me lo quitaste"

La jarocha era una auténtica "bruja".

=ay que bonito es volar, a las dos de la mañana=
=A las dos de la mañana, ay que bonito es volar=
=¡ay mamá!=