Abril 2011

『Bani』

Ahora los juguetes no me entretenían; quizá barbie ya pasó de moda.
Les he cortado el cabello y me he deshecho de sus prendas, pronto también me desharé de ellas.

Estaba tan aburrida, así que decidí ir al cuarto de mi hermano mayor.
Entré a su habitación sin tocar la puerta, ya que teníamos mucha confianza.
Ví como sacaba ropa de su armario y la dejaba tendida sobre la cama.

-¿a dónde vas? -pregunte tocando la cama con un dedo, ya que se había hecho costumbre que saliera todas las noches.

-a una fiesta -entro al baño y yo lo seguí. No se sí era un reflejo mío o había una fuerza magnética en el aire que hacia que fuera hacia el.

-¿puedo ir? -en mi rostro se plasmó una sonrisa muy fingida y mis manos se juntaron en petición, sólo quería entretenerme por un momento.

-lo siento pequeña. Es fiesta para grandes -se puso sus Jeans azules y volvió a salir del baño.

-Sehun te voy a acusar si no me llevas -amenace. Realmente quería ir.

-no Bani, no voy a llevarte, en esas fiestas hacen cosas que jamás deberías ver tu, ya que serás una monja.

-¿qué es eso? -incline mi cabeza a un lado.

-pronto lo sabrás, ahora que he elegido tu futuro, ve a dormir ahora.

-no quiero. -hice un pucherito con mis labios y me cruce de brazos, enojada.

-lo que sea, vete sor Bani, déjame solo -me empujo fuera de su habitación, ¿qué es monja? ¿Por qué no puedo ir? ¿Qué debería hacer? Ah, estaba comenzando a frustrarme.
Lance patadas a todas partes de lo enojada que estaba sin percatarme de su prescencia.

Ahí estaba el. Tan lindo como siempre.
Chanyeol.
Acomode mi pijama y coloque mi cabello en su lugar.

-ho-hola -sonreí con las mejillas ardiendo, pero el no me saludo de vuelta, sólo me ignoro y entro a la habitación de Sehun.

¿Por qué me odia? ¿Yo que le he hecho? Yo sólo quiero ser linda con el.

『Chanyeol』

Hoy era la fiesta en casa de Sunny, todas las chicas sexys irán, y yo y Sehun no nos la podemos perder.

Llegue en mi coche nuevo que mi padre me había regalado por mi cumpleaños número 17 a casa de Sehun, ese chico aún no estaba listo, era más lento que un caracol.

Decidí entrar a su casa, ya que sus padres trabajaban hasta tarde pude entrar como sí fuera mi casa.

Llegue al segundo piso y escuche la voz de Sehun y su hermanita.

-...ya que serás monja.

-¿qué es eso?

Me burle de ellos en mi interior. A veces Sehun es infantil. Pero cuando está con ella sobrepasa los límites de la estupidez.

Ví como la empujo fuera de su habitación. Estaba enojada.

Comenzó a tirar golpes, era tan adorable, y tan linda... ¿Pero que estoy diciendo? ¡Tiene sólo 12 años!

Si Sehun escuchara mis pensamientos, ahora estuviera mil metros bajo tierra.

Acomode mi chaqueta roja y pase a su lado, me saludo con su dulce voz y sus mejillas rosaditas.

Sólo me límite a mirarla como siempre lo hacia.
A veces soy más estúpido que Sehun cuando estoy a su lado.

-¿que onda viejo? -pregunto con los brazos extendidos, hicimos nuestro saludo con las manos y despues de terminarlo salimos de la habitación. La pequeña Bani seguía afuera.

-Me voy pequeña -Sehun se acercó a darle un beso pero ella se alejó.

-no tocar -puso su manita como barrera y antes de que Sehun hablara se fue corriendo a su habitación.

-pero... Okay, si quieres jugar así, así será... -iba a salir corriendo en su búsqueda pero lo tome de su chaqueta y lo saque de su casa.

-si no dejas de jugar se nos va a hacer tarde.

-oh, es cierto.

Nos subimos a mi coche y emprendimos camino hacia la gran fiesta que se daría en casa de Sunny, sobrina del director de la escuela, y ahí estaría ella. Jessica.

Jessica es la persona de la que he estado enamorado desde la primaria, es tan linda, parece una muñeca de porcelana con sus facciones muy bien marcadas, y de su cuerpo ni se diga.

-hoy perderemos nuestra virginidad ¿no estas ansioso por eso? -
oh, había olvidado ese detalle, Jessica me había dicho que esa noche sería inolvidable para los dos, claro, por que Krystal, hermana de Jessica, estaba pretendiendo a Sehun.
Obviamente sabía de lo que se trataba. Tendríamos sexo desenfrenado toda la noche, cuerpos sudando, música de fondo y humo de cigarrillos, será la mejor noche de mi corta vida. Claro que estaba ansioso por llegar.

La lujosa casa de los Lee, estaba realmente llena de almas bailando, chicas con vestidos cortos y chicos disfrutando de la vista, de las bebidas y de la música.

Krystal llego a nuestro lado, a Sehun se le cortaba la respiración.

-Hola, Sehun, ¿quieres bailar? -Sehun acepto y tomó su mano, dejándome sólo.
Yo sólo estaba esperando a la chica que prometió darme la mejor noche de mi vida.

『Bani』

No sabía que hacer, llame a todas mis amigas pero ninguna pudo quitarme el aburrimiento.

Intente dormir y cuando estaba a punto de cerrar los ojos una imagen de Chanyeol se vino a mi cabeza.

Era tan alto, y muy guapo.

Lástima que no me toma en cuenta, cuando me ve sólo aparenta no hacerlo y me trata como si no existiera.

Es malo conmigo y yo también lo estoy siendo conmigo misma por que por más que intentó enojarme con el y sacarlo de mi mente no puedo, por que lo quiero.

Al parecer me estoy volviendo loca, es 5 años mayor que yo. Pero eso no importa, ¿cierto? A mis amigas les gustan chicos hasta 10 años más grandes que ellas.

Aún que si, ya se que estoy loca por enamorarme del mejor amigo de mi hermano.

『Chanyeol』

Ella se deshizo de mi camisa de botones y siguió besando mi cuello.
Tome su pequeño hombro con mi gran mano y comencé a darle besos como ella lo hacía con mi parte sensible. (Ósea, el cuello)

Comenzamos a sudar como lo había predicho.
Aunque me sentía incómodo por que estábamos recargados en una pared, y todo estaba obscuro, pero así es mucho mejor.

Con su pequeño dedo comenzó a dibujar círculos en mi pecho, realmente me gustaba en la manera que lo hacia.

Divise de lejos a Sehun y a Krystal entrando a una habitación, por lo menos tendrían privacidad.
Un Sehun ebrio grito victorioso y aunque la música estaba a todo volumen pude escucharlo.

Jessica se quitó el vestido frente a mi, dejándome verla en todo su esplendor. Mi torso desnudo subía y bajaba ya que la respiración se me escapaba.

-¿quieres ir a un lugar más privado?- deslumbrado, asenti. Así que tomó mi mano y me condujo a lo que comprendí, era su habitación.
Esta seria una noche muy larga.

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¿Que les parece?
Es horrible, lo se

Caquita de perro, annie