ALINA.

Miro con terror a los hombres que bloquean nuestro camino, los latidos de mi corazón se aceleran, el camino que transitamos se encuentra sin personas, no hay manera de que podamos pedir ayuda, ningún guardaespaldas nos acompaña, se suponía que solo iríamos a la cita de nuestro bebé y volveríamos a casa.

-Tim, código rojo, rastrea mi móvil, fuimos emboscados- Habla Alec por su móvil, grito y llevo mis manos a mis oídos cuando los hombres disparan hacia las llantas de nuestro auto, las lágrimas se acumulan en mis ojos sin entender.

-¡Salgan del auto o disparamos!-grita uno de ellos, miro a Alec con miedo, el desliza su móvil en la bolsa de su pantalón, su mandíbula tensa, me mira, noto el miedo en sus ojos.

-Vamos a salir de esto cariño- Dice Alec tratando de mantener la calma, las lágrimas se escapan de mis ojos y comienzo a negar.

-Nos harán daño, no quiero que nada le pase a mi bebé- Sollozo, llevo mis manos a mi vientre, Alec trago con dificultad, grito cuando escucho otro disparo, dirijo mi mirada a los hombres, uno de ellos disparo al cielo.

-¡Salgan ya!- Grita uno de ellos, sollozo y miro a Alec, el me mira, noto la tensión en su rostro, traga con dificultad y toma mi mano dando una caricia.

-Debemos salir, Tim y el equipo de seguridad nos encontraran- Dice suavemente, humedezco mis labios y asiento –estaremos bien, lo prometo- Susurra.

Comenzamos a salir del auto, miro a los hombres armados con terror, no sé quiénes son y no que quieren, llevo mis manos a mi vientre, Alec llega a mi lado de inmediato y me coloca atrás suyo protegiéndonos.

-¡Queremos a la chica!- Vuelve a gritar el hombre, me alarmo al escuchar sus palabras, los latidos de mi corazón se aceleran -¡Aléjate de la chica!- Grita, sostengo con fuerza la mano de Alec asustada.

-¡Se quien los envió!- Grita Alec a los hombres, frunzo mi ceño pero no digo nada -¿Cuánto les pago?, ¡puedo pagarles el doble!, ¡lo que quieran!-

-¡Aléjate de la chica!- Grita con enojo el hombre, sin escuchar las palabras de Alec, sollozo.

-¡Esta embarazada!, no hagan esto-

Jadeo al escuchar un disparo, alarmada miro a Alec, me coloco a su lado, llevo mis manos a mi boca al ver que le han disparado en su abdomen, Alec me mira con miedo, parpadeo un par de veces mí labio inferior comienza a temblar, Alec cae de rodillas mientras coloca su mano sobre el disparo.

-Alec, oh Dios- Digo con voz quebrada, coloco mi mano sobre la suya, está saliendo mucha sangre, miro a mi alrededor, no hay más personas, Alec necesita ir a un hospital.

Unas manos toman mis brazos, miro alarmada a la persona que me levanta separándome de Alec, Alec gime e intenta ponerse de pie para separar al hombre que me levanta para llevarme, pero otro llega y lo patea en su costilla, sollozo al ver como el hombre lo golpea, Alec está mal por el disparo y no se puede defender.

El hombre que sostiene mi brazo con fuerza me arrastra obligándome a caminar hasta la camioneta de ellos, no dejo mi mirada de Alec, quien ni siquiera se puede mover se encuentra tirado en el suelo, sollozo con terror, no quiere que nada le pase a Alec ni a mi bebé.

El hombre me hace subir a los asientos traseros, dos más están dentro de este, ambos sostienen armas, no dejo de envolver mi vientre con mis manos asustada.

Cuando el auto arranca sé que no hay vuelta atrás, no sé si Alec está bien, si recibirá ayuda pronto, no sé a dónde me llevan estos hombres.

Luego de varios minutos el auto aún no se detiene, trato de mirar por la ventana, los hombres dentro del auto no dejan su mirada de mis movimientos, tengo miedo de lo que vaya a pasar, lo único que logro divisar son muchos árboles a ambos lados del camino.

Sollozo, bajo mi mirada, Alec tiene que estar bien, sé que él es fuerte, solo espero que pueda recibir ayuda a tiempo.

-Silencio, deja de llorar de una maldita vez- Dice uno de los hombres, este me mira con enfado, aprieto mis labios, tiemblo y trato de evitar mis sollozos.

El auto se detiene, el miedo me invade, los hombres comienzan a bajar, uno de ellos abre la puerta a mi lado y me hace bajar, me tambaleo y trato de mantener el equilibrio ante su agarre brusco, este me empuja y me hace caminar, no puedo evitar no sollozar.

Nos dirigimos a una cabaña, el hombre toma mi brazo, la puerta de la cabaña se abre y todo dentro de mí se derrumba, entre abro mis labios y jadeo, es Ben.

Este mira con seriedad a los hombres, su mandíbula se tensa y posa sus ojos en los míos, le hace una señal a los hombres y se gira para volver a entrar, miro como Ben camina al interior, el hombre me hace entrar.

-Padre, han traído a la chica- Dice Ben, parpadeo, Ben se gira y adopta una posición recta, frunzo mi ceño.

Observo como un hombre comienza a salir de la oscuridad de una habitación, un enorme mareo me golpe al ver de quien se trata, de pronto me siento débil, siento como si mi alma abandonara mi cuerpo.

Es Lucas Cooper, mi mayor pesadilla se encuentra viva, y viene a mí. Un último respiro es lo único que doy cuando mi cuerpo se desvanece.

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Nuevo capítulo mis amores❤️

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