Conocía a Sanzu desde niños, sabia de su excéntrica personalidad, rayando en lo peligrosa, con ese deje de sadismo que siempre lo rodeaba, sabia de sus gustos por lo rudo, por el control, por todo lo contrario a lo que representaba su mejor amigo Chifuyu, un joven dulce e inocente, por lo que no puedo evitar preocuparse cuando ambos le notificaron sobre su noviazgo. 

_No creo que sea buena idea_ Les dijo a sus dos amigos quienes estaban tomados de la mano. Sanzu vestido con una corta y ajustada falda de cuerina rosa, crop top en forma de mariposa a juego,un arnés plateado surcando parte del pecho y caderas, medias negras de rejilla y largas botas con un peligroso tacón afilado. Un atuendo atrevido, sensual y femenino que contrastaba con el outfit preppy del rubio quien vestía una romántica camisa blanca con mangas de farol, un chaleco azul con estampado de cerezas, una corta faldita tipo A con cuadros escoceses azules,   unas largas calcetas y zapatos tipo escolar. _Son muy diferentes_ 

Sansu rodó los ojos fastidiado, miro al rededor como si buscara a alguien mas, cosa imposible pues los tres estaban en su propia casa. Senju salio con Takemichi y su hermano mayor con Benkei... Tenia el lugar solo por un largo tiempo y no lo pensaba desaprovechar solo porque Baji se autoinvito para darle un sermón de moralidad. _No es tu asunto Baji. Fuyu y yo ya tenemos pelos en las bolas y podemos elegir con quien queremos coger_ Le notifico tomando a su pequeño novio de la cintura besando su mejilla de forma tierna. 

_Deja de tener ese lenguaje tan vulgar delante de Chifuyu!_ Le grito el moreno visiblemente molesto, no le parecía justo que después de cuatro años de conocer a Fuyu, intentando conquistarlo, este huyera a los brazos posiblemente llenos de marcas de agujas de Sanzu. 

_Te gusto verdad Baji-San?_ Pregunto el rubio con una dulce sonrisa dirigida únicamente al ojimarron. Se acerco tomándolo suavemente de sus mejillas, elevando sus delgados brazos. _ Por eso estas tan molesto con nosotros?_ El mencionado trago saliva ruidosamente al verse descubierto, con algo de miedo por la posible reacción de Sanzu. 

_N-no, Fuyu_ 

El ahora pelirosa se burlo, tomando a su novio nuevamente por la cintura, levantandole suavemente el chaleco junto a la camisa, dejando su plano abdomen a la vista de Keisuke. _No tiene caso que nos mientas, ya se que te quieres tirar a mi novio_ Le notifico mientras acariciaba a Chifuyu, haciendo círculos y besandole la nuca sobre su cubrebocas rosado. _No te culpo, Fuyu tiene un culo precioso_ 

Keisuke so sabia donde mirar de la vergüenza que sentía, se sentía tan vulnerable y evidenciado ante la peluliar pareja. Aun con sus manos sudadas, pudo hablar para aclarar sus sentimientos. _No.. yo no me quiero tirar a Chifuyu_ Dijo con seguridad mientras delineaba suavemente los finos rasgos del nombrado. _Le quiero hacer el amor con fuerza_

El pelirosa sonrió con autosuficiencia, tomo la firme mano a su viejo amigo y la coloco debajo de la corta falda de su lindo novio rubio. _Y porque no lo haces?.. Yo no me opondré_ Le aseguro pasando su áspera lengua por el cuello del pequeño ojician, separados únicamente por la tela del cubrebocas . _Siempre y cuando me incluyas a mi también_ 

Baji se lo pensó por un momento, mirando al mas bajo de los tres. _Tu estas de acuerdo Fuyu?_ Le pregunto con las manos temblando de ansiedad en cuando sus largos dedos tocaron la cálida y suave piel de quien fue su objeto de deseo por tanto tiempo. Le gustaba Chifuyu, le gustaba mucho, le gustaba la forma en como se movían sus coquetas faldas cuando caminaba, le gustaba la forma en que su pomposa boquita siempre maquillada con brillitos devoraba los chupetes de fresa que le regalaba diariamente, le gustaba la forma en que sus hebras doradas se movían por la mañana, pero no quería dañarlo, haciendo algo que  él no quisiera. 

_Solo si tu lo quieres Baji-San_

Esa era la señal que necesitaba para soltarse de toda culpa y carga innecesaria. Tomo al menor del mentón juntando sus bocas como muchas veces soñó, saboreando la dulce cavidad bucal del rubio en un movimiento dulce pero demandante, mientras le apretaba con gula el muslo dentro de la faldita azul. Dios! Como amaba ver las atrayentes piernas del rubio debajo de sus cortas faldas!

Sansu ensancho su sonrisa, quitándose su fiel cubrebocas, presumiendo las cicatrices que obtuvo hace tantos años atrás y su labial rosa fuerte. Tomo fácilmente al menor de la cintura, cargándolo mientras le abría las piernas y le permitía a Baji situarse entre estas y acomodando a Chifuyu mejor, rodendo su cintura con las largas piernas de Fuyu.

El pelirrosa apretaba las sensacionales nalgas de su novio con hambre, fascinado al ver como la blanca piel se transformaba carmín por culpa de sus grandes manos, dejandole incluso marcas de sus uñas postizas. Baji seguía devorándole la boquita sabor vainilla sin darle tregua de recobrar el aliento, despeinandolo de su copetito, pasando sus expertos dedos sobre lo mas que podía de esa pequeña anatomía. Y Chifuyu... Chifuyu solo podía dejarse llevar sonriente por las atenciones de los mayores. 

De pronto Baji alejo a Chifuyu de Sanzu, arrojando al rubio a la cama de Haruchiyo con mas fuerza de la necesaria, lo miro desde arriba relamiéndose y remangando las mangas de su chaqueta desgastada de mezclilla negra. No podía pedir nada mas, que tener a su crush tirado en la cama, completamente a su merced. Ignorando a Sanzu se acerco a las tiernas piernas de Matsuno, tomándolas fuertemente de los tobillos separandolas por completo, aprovechando su magnifica flexibilidad. 

_Se mas cuidadoso con mi muñeca!_ Le grito el pelirrosa golpeándolo en el brazo con fuerza para que soltara a Chifuyu, quien en esos momentos tenia una mueca entre asombrada y preocupada en su bonito rostro. _No esta acostumbrado a que se le trate con brutalidad!_ 

Sanzu no pudo evitar preocuparse por su novio después de ver como Baji lo aventaba casi con salvajismo a la cama. Si bien por fuera, ante la sociedad parecía que su noviazgo con Chifuyu se basaba en una relación de poder, corrompiendo al rubio, la realidad era otra, donde a la fecha ambos tenían un sexo bastante rosa vainilla. Descubrió prontamente que Fuyu era sumamente delicado y fácil de lastimar, obligandolo a contenerse diariamente en sus encuentros. 

Chifuyu aun sobre la cama recogió sobre su propio cuerpo sus piernas con algo de temor en sus pupilas, rehuyendo de la mirada de Baji. _Hazlo con mas cuidado Baji-San, por favor._ Le pidió con voz suave. 

El pelinegro se arrepintió de seguir sus impulsos al ver la reacción de su pequeño amigo, no planeaba asustarle pero honestamente le sorprendía esa reacción, pues se imaginaba que Sanzu le hacia cosas mucho mas obscenas y pesadas en la cama, pero al parecer se equivoco. Se recompuso lo antes posible. _Lo siento, me deje llevar_ Se disculpo con sinceridad estirando su brazo con cuidado hasta alcanzar nuevamente las piernas del rubio. _Puedo separarlas?_ Le pregunto y solo cuando obtuvo una pequeña afirmación fue que las abrió con cuidado y lentitud, revelando las bonitas pantaletas de gatitos que portaba ese día. Le dio una cálida sonrisa y con lentitud empezó a estimular el pene dormido de su amigo, presionando con  cuidado la zona. 

Sanzu solo monitoreaba los movimientos de Baji, pero a juzgar por los pequeños y tiernos gemidos de su novio, todo iba por buen camino. Se subió a la cama para estar al lado de Chifuyu, acariciando su carita dulcemente y mordiendo con cuidado una de sus regordetas mejillas. Pocos lo sabían, pero una de sus cosas favoritas en la cama era el poder morder cuidadosamente a Chifuyu, lo mordía en sus cachetitos, en sus suaves muslos, en su atrayente trasero e incluso en parte de su espalda baja, siempre con cuidado de no dejarle marcas o Matsuno lo castigaría dejándolo sin sexo por días. 

El moreno por su parte se dedicaba a hacer pequeños círculos sobre la hombría del de Fuyu con una de sus manos, mientras que con la otra le preciaba levemente el cuello, impidiendo que respirara apropiadamente. El pelirrosa lo golpeo nuevamente en cuanto se dio cuenta de este hecho. 

_Que parte de: Se cuidadoso no entiendes Keisuke?_ Y de pronto la atmósfera de erotismo se esfumo. _Si te invite a cogerte a mi novio no era para que lo lastimaras, entiende que a   él no le gusta el sexo rudo, no esta acostumbrado y si no sigues las reglas mejor vete_ Hablo con seriad, conteniendo las ganas de volver a golpear a su viejo amigo. 

El moreno miro el suelo apenado, nuevamente no pensó en sus actos, solo se dejo llevar por el calor del momento,  él tampoco deseaba lastimar a Yuyu pero no sabia coger de otra forma. _Lo siento, creo que solo se tener sexo rudo, es la forma en que me gusta... Pense que como Fuyu es tu novio, a  él también le gustaba_

El rubio se recompuso desabrochando un par de botones de su camisa blanca para respirar mejor. Miro a los mayores con ternura, para evitar que se pelearan. _No me gusta rudo, Baji-San... Pero a Sanzu si le gusta lo rudo... lo muy rudo, muy sucio y muy peligroso de echo_ Notifico con una mirada que pretendía ser dulce. _La idea de invitarte fue de  él... Le pareces un tipo sexy y caliente_

 El lugar se quedo en silencio por un breve momento, la atmósfera se lleno de un ambiente de incertidumbre y el rostro del pelirrosa de un tono carmín al verse expuesto por su pequeño novio. _Chifuyu!_ Chillo con molestia, provocando que el aludido sonriera con aparente ternura.Sin embargo no le pudo decir mas, pues Baji lo jalo con fuerza de su largo y sedoso cabello rosado, uniendo ambas bocas en un beso rudo y sucio... Tal y como le gustaban.  

Las manos de Baji pronto se colocaron en el cuello largo y perfumado de Haruchiyo  impidiéndole el respirar correctamente... Sanzu no pudo estar mas agradecido. 

...

Shinichiro y Benkei sujetaban con fuerza a Takeomi para impedir que golpeara a Baji y a Sanzu quienes seguían intentando colocarse la ropa con torpeza. _Idiotas! que le hicieron!?_ Pregunto el dios de la guerra rechinando sus dientes. Mientras Wakasa ayudaba a Chifuyu a abotonar su camisa blanca sobre la cama de Takeomi. _Es un niño!_ 

_Donde te tocaron pequeño?_ Pregunto Wakasa con ternura al rubio. _Te obligaron a hacer algo que no querías?_  El rubio se burlo internamente, pues si los mayores los miraban con atención, se darían cuenta de que los únicos con feas y grandes marcas sobre el cuerpo eran Baji-San y Sanzu, él estaba limpio... Bueno no tan limpio exactamente. 

_Basta ancianos! que ustedes ya no puedan follar no significa que se desquiten con nosotros!_ Les grito el pelirrosa con su falda mal colocada y la blusa sin abrochar. _Nadie obligo a nadie a hacer nada que no quisiera... Y Chifuyu solo es un año menor que Baji y yo!_ Les recordó. _Que tenga cara de niño de kinder no es mi problema!_

_No quiero que mi casa se convierta en un burdel Sanzu! Si querías hacer tus cosas con Baji, bien pero no en mi casa y menos con un niño!_ Le respondió su hermano mayor aun retenido por sus amigos quienes parecían optar por mantenerse al margen. _Como se te ocurre hacerlo aquí! en mi cuarto, en mi cama!_ 

_También lo hicimos en tu baño, tu cocina y en tu sillón_ Le respondió Keisuke con burla acomodando su sudado cabello en una coleta alta, disfrutando del momento, después de meter su pene en el apretado culo de Sanzu y follarlo con salvajismo, nada lo podía poner de mal humor. _Y escucha lo que se te dice, Fuyu solo es un año mas joven que nosotros, ya es todo un hombrecito_ Recalco extasiado, recordando la manera tan morbosa en que la rosada entrada del rubio absorbía con hambre su verga en una lenta y dulce danza... Si! Fue una bue día para  él... el mejor día de hecho.

_En la cocina también!? Donde comemos mientras vemos el noticiero!_ Pregunto Benkei sin poder evitarlo. _Los niños de hoy en día son todo una caso_ Shin le dio la razón con una incomoda sonrisa. 

_Somos niños malos_ Dijo Chifuyu aun sentado en la cama, colocando una de sus piernas  sobre el hombro de  Wakasa. _Nos van a castigar?_ Pregunto haciendo que su novio y Baji tensaran su musculo risorio, en una mueca de satisfacción que no pudieron ocultar... Sin duda a Fuyu le gustaba que se lo hicieran lo mas vainilla posible, pero el maldito mocoso hormonal tenia un fetiche con ver, observar y apreciar en terceros tener el sexo mas duro, sucio y morboso posible. _Pido que me castigue el moreno de fuertes brazos_