No se pierde lo que nunca se tuvo (TakeFuyu)
Miedo y culpa eran principales sentimientos que tenia Takemichi, podría aparentar catorce casi quince años físicamente, pero en el fondo sabia que era un hombre adulto de veintiséis años, un hombre adulto atraído por un puberto de solo trece años.
Por eso es que opto por evitar a toda costa a su autonombrado compañero, ignorando las constantes llamadas telefónicas, mensajes de texto e incluso lo dejo plantado por miedo a que esos sentimientos aumentaran.
Estaba en su habitación encerrado mirando con anhelo la fuerte lluvia atreves de su ventana, sumergido en sus pensamientos y sentimientos, aturdido por su situación actual, intentando que su moral fuera mas fuerte que sus impulsos impuros para con el amante del manga Shojo.
Una llamada a su celular lo saco, tomo el aparato con miedo, mirando el remitente... Mikey, sonrió, prefería mil veces conversar en esos momentos que escuchar la dulce voz de su compañero. _Hola_ Felizmente saludo a su infantil amigo.
_Solo llamo para decirte que morirás en un día_ Escucho atreves de la bocina, soltó una risa ante lo que creía una broma.
_Eran siete días Mikey_
_No creo que Baji tarde tanto en matarte_ Explico con calma, hace solo unos minutos recibió una violenta llamada por parte del moreno, el cual le explicaba paso a paso como mataría al héroe llorón por dejar plantado a Matsuno debajo de la lluvia. _No es tan paciente_
Takemichi se sobresalto olvidando al violento mejor amigo de su Fuyu, siendo sinceros jamás pensó en dejarlo plantado debajo de la lluvia, no sabia siquiera que el clima cambiaria drásticamente de un día para otro. Su plan era alejarse no lastimar al rubio del pendiente. _Pe-pero, no fue el a quien deje plantado_
_Entonces dejaste a Matsuno plantado apropósito?... a Baji no le gustara esa respuesta_ Takemichi trago grueso, sabia que hablar racionalmente con el pelilargo era algo imposible salvo algunas excepciones como Kazutora, Mikey o Fuyu. _Eso no se hace Take, el pobrecito Yuyu esta con fiebre en casa de Baji_ El aludido se entristeció al saber que Fuyu había enfermado por esperarlo.
_No sabia que iba a llover_
_Takemichi, te llame para advertirte que Baji esta furioso contigo, por mas excusas que me des a mi, no ayudara a calmar su ira, Fuyito esta enfermo y triste por tu culpa... Como pensabas que se lo tomaría Baji?_
Takemichi miro el suelo apenado, supuso que eran las consecuencias de sus actos. _Gracias por avisarme Mikey, tendré cuidado_
_Necesitas un milagro no tener cuidado... Espero descanses en paz_
_Yo también_
Esa noche el rubio de peinado extravagante no durmió, no porque temiera a los truenos de la lluvia, ni por su temor al pirómano de la Toman... Mas bien era porque hiciese lo que hiciese solo lastimaba a Fuyu, si se alejaba lo hería y si seguían juntos terminaría lastimándolo, su hormonal cuerpo le pedía fervientemente un contacto piel con piel con Yuyu, con un mocoso que jamás había dado su primer beso siquiera... No se perdonaría arruinar la inocencia de su compañero.
Al día siguiente se levanto mas temprano de lo normal rumbo a la reunió de LaToman, con la intención de no toparse con su compañero en el camino, aunque por las palabras de Mikey suponía que ni siquiera asistiría si seguía con fiebre.
Tan pronto como salió de su hogar maldijo su mala suerte pues justo fuera de este se encontraba aquel lindo rubio que tanto intentaba evitar, lucia visiblemente mas decaído de lo normal, envuelto en una enorme bufanda azul que juraba había visto en Baji anteriormente. _Podemos hablar Michi?_ La voz rasposa de Chifuyu le hizo recordar que seguramente había enfermado por estar horas debajo de la lluvia por su culpa. _Es importante_
Hanagaki en seguida intento salir de la situación, prefería mil veces tener que confrontar la furia de Baji que la curiosa y triste mirada de Chifuyu. _Mmmm... Lo siento Matsuno, tengo prisa_ Lo llamo por su apellido apropósito para marcar un distanciamiento emocional que esperaba entendiera.
Chifuyu estornudo antes de responder, aun tenia algo de fiebre y dolor de cabeza, pero ese dolor no se comparaba con el dolor de la indiferencia que últimamente Takemichi tenia con el. _Estas enojado conmigo verdad?_ Un estornudo lo interrumpió, incluso se sentía mareado, Baji le había sugerido tomarse el día para reponer su salud, pero su terquedad lo obligo a buscar a su compañero quien lucia totalmente desinteresado ante su presencia. _Si te hice algo que te desagradara, lo siento, no era mi intención molestarte_ Se inclino en muestra de respeto esperando la respuesta de su compañero. Paso la noche intentando recordar si había herido sin querer a Takemichi, su amigo no podía cambiar su actitud de un momento a otro de la nada.
_De verdad tengo prisa_ Intento irse del lugar, no soportaba ver a Chifuyu tan desarmado ante el, le daban unas ganas inmensas de abrasarle, pedirle mil disculpas, besarlo, tocarlo, morderlo... _Vete a tu casa, no luces bien_ Matsuno lo tomo del brazo con las pocas fuerzas que su resfriado le permitía tener, su intención era solucionar lo que sea que estuviese molestando a su compañero.
_Por favor Michi, me preocupa tu actitud_ Un estornudo acompañado de un ataque de tos no lo dejo continuar pero se reusaba a soltar el brazo de su amigo.
El de grandes ojos azules miro a Fuyu, el cual lucia tan frágil, tan delicado, tan fácil de romper, tan tentador... No! no se permitiría jamás romper ni corromper al menor, no era normal sentir ese tipo de atracción por un niño de trece años... se sentía tan sucio y enfermo. _Ya déjame en paz Matsuno!_ Sin medir fuerza se libero del agarre del menor. Quien solo le miro con esos decaídos ojitos con asombro, no se esperaba esa reacción de su amigo.
_Si ya no quieres ser mi amigo solo debes decirlo_ Matsuno intento reprimir sus lagrimas y contener la tos que amenazaba con llegar. _Si me dices que ya no quieres ser mi amigo prometo no molestarme mas_ Hablo cada vez mas bajo, cada ves mas triste ante la sola idea de alejarse del viajero del tiempo, Takemichi era su compañero, su amigo, fuera de Baji era su mejor amigo!
Hanagaki supo que era ahora o nunca, para mantener a salvo a Fuyu debía alejarlo desde la raíz. _Tu y yo nunca fuimos amigos y no quiero serlo_ Tan pronto hablo, sintió su lengua quemarle y su corazón contraerse al ver las lagrimas acumuladas en los claros ojitos de Fuyu. _No eres tan genial como Mikey o tan imponente como Draken... No quiero un amigo como tu cerca_ Desvió la mirada mientras hablaba, sabia que si seguía mirando el llanto del menor caería y tiraria todo su plan a la basura. _No soy Baji quien si soporta que le hables de tus estúpidos mangas_ En medio de la adrenalina del momento empujo a Fuyu quien por su condición medica callo en medio del frio y duro asfalto. _Déjame en paz y vete a acariciar un gato callejero como acostumbras, por eso siempre apestas a mugre mojada!_ Le costaba un infierno decir cada una de esas palabras pero no se detendría, la integridad sexual de Fuyu estaba en juego. _Dedícate a chuparle las bolas a Baji_ Miro al menor quien seguía en el suelo llorando, trago grueso y se alejo sin decir nada mas, pensó que eso seria suficiente para alejarlo, probablemente Baji lo molería a golpes cuando se enterara pero eso ya no le importaba.
...
La reunión de La Toman culmino, todos los miembros se retiraban de apoco, fue ahí cuando Takemichi visualizo a Chifuyu el cual de la misma forma le miro pero enseguida desvió la mirada con la cabeza gacha, segundos después se acerco Baji quien se lo llevo en su propia motocicleta.
Suspiro creyendo que su vida seria mucho mas fácil a partir de ahora, ya no tendría distractores que le impidieran salvar a Hina, el cual era su principal misión...
Si estaba seguro que Fuyu ya no lo atormentaría con su delicada presencia Porque se sentía tan vacío?
...
Lo logro! Pudo salvar a Hina y de paso también a Mikey!! Estaba orgullosos de el mismo, supero sus propias expectativas pero... No tenia con quien celebrar su victoria, al menos nadie que supiera por todo lo que tuvo que pasar.
Ahora se encontraba en el taller de sastrería de Mitsuya, quien con felicidad se encargaba de confeccionar su traje de bodas... Se casaría con Hinna en dos semanas y aun no se convencía de amarla genuinamente...
Salió del taller con la cabeza gacha, aun por las noches soñaba con la tierna y dulce carita de lo que creía era solo atracción física y sexual... Ahora suponía que era mas una obsesión por Chifuyu del cual se encargo de no solo alejarlo si no también de no tener ningún tipo de contacto con el.
Después de aquella fatídica pelea fuera de su propia casa, fue Matsuno quien se alejo silenciosamente, cumpliendo su promesa de no molestarlo mas, no se atrevía no solo a no hablarle si no tampoco a mirarlo, se veía nervioso, angustiado y decepcionado cuando, contadas ocasiones, sus miradas se conectaban... Eso le dolía mucho mas que la tremenda paliza que le propino Baji tan pronto pudo, ni siquiera Mikey y Draken lo pudieron detener... Ese día perdió dos dientes, tres dedos y salió con las costillas rotas y un brazo enyesado... Creyó genuinamente que Baji se quedo corto en su castigo por herir tanto a Yuyu..
Seguía su camino a casa de Hinna sumergido en sus pensamientos cuando una melodiosa risa lo distrajo, conocía esa cantarina risa, a pesar de no haberla escuchado por años, sabia que no la podía confundir, por instinto busco con la vista al dueño de dicha risa topándose con un Chifuyu mucho mas lindo de lo que recordaba con su ahora cabello negro... De la mano con un imponente y varonil Keisuke Baji...
_Te amo Baji-San_ Pudo escuchar como esas palabras salían con tanta dulzura y romanticismo de los sonrojados y tentadores labios de Yuyu el cuan dejo de hablar cuando se topo con la azulina mirada de Takemichi... Le regalo una dulce y sincera sonrisa y continuo con su camino de la mano de su esposo quien ni siquiera noto su presencia.
Takemichi se quedo en blanco en medio de la calle, jamás sintió un dolor tan abrumador como el que sentía en esos momentos alojado en su pecho... Chifuyu Matsuno no lo sabia pero su sonrisa siempre fue el detonante de muchas cosas, de dolor específicamente en esos momentos.
Esa sonrisa que un día fue para el... ahora lucia mucho mas candorosa y radiante, pero tristemente estaba dirigida única y exclusivamente a Baji Keisuke, su amigo de la adolescencia que siempre estuvo ahí y el cual jamás tubo miedo se afrontar sus sentimientos...
Se puede perder algo o a alguien que jamás se tuvo?
Era lo que se preguntaba al ver aquellas estilizadas figuras alejándose con calma tomadas de la mano, con los dedos entrelazados.
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