Pov Noah.

Cuando el idiota de Luke se desmayó no pude hacer otra cosa que ir a buscar mi cuerpo y ayudarlo, ya que siendo un espíritu no podía hacer nada.

Lo cuide y él no me dio ni las gracias.

Y ahora era yo el mal agradecido.
Me acosté en su cama e intenté dormir, pero no pude.

¿Por qué me sentí tan nervioso cuando me sujetó de la mano?

¿Qué me estaba pasando? ¿Qué debía hacer?

Me acurruque en la cama.

Su habitación era ordenada y organizada, todo lo contrario a la mía.

En el centro del cuarto estaba la cama, al costado había un armario gigante que dudo este lleno de ropa, del otro costado estaba la puerta y una guitarra clásica y en frente de la cama un espejo de pies a cabeza.
Estaba lleno de estantes con libros. Me llamó la atención que siendo nuevo en la ciudad tuviera un cuarto tan completo.

Mi cuarto estaba repleto de pósters, no era tan grande como el suyo y no tenía lugar para un armario así. Mi casa era pequeña ya que solo vivía yo ahí, mis padres siempre estaban de viaje y yo me quedé para terminar mis estudios.

Miré al techo, estaba decorado con estrellas que brillaban. Era infantil, pero bello.

Me quedé dormido pero esta vez no salí de mi cuerpo, luego tendría tiempo para preocuparme por eso, y por primera vez hacía mucho soñé.

Mis sueños siempre habían sido inútiles, sin sentido común.

Y siempre comenzaban en la oscuridad...

Todo estaba oscuro y silencioso.

Mi pecho se apricionaba y me costaba respirar.

Escuche la voz de Sam a lo lejos llamandome.

-Noah... ayuda.

No podía moverme.

Intentaba caminar, pero mi cuerpo estaba rígido.

Intenté llamarla, pero no podía articular palabra.

-¡¡NOAH!! ¡¡AYUDA!!

Me desespere, no podía salvarla.

Sentí como miles de arañas subían por mi cuerpo.

No podía moverme; no podía hablar; no podía hacer nada. Estaba perdido.

Kate se iluminó entre la oscuridad. Amarraba a Sam con el brazo y la apuntaba con un cuchillo.

Sus ojos verdes irradiaban odio y desprecio. En esos ojos me perdí hasta darme cuenta de que el que agarraba a Sam era Luke.

Esos ojos tan parecidos...

De vuelta todo se torno en oscuridad y empecé a escuchar los gritos de agonía de Sam siendo asesinada.

-Ahora estaras solo.- Me dijieron ambos ojiverdes.

-¡NOOO!- Grité con todo el aire de mis pulmones.

NO QUERÍA ESTAR SOLO, NO PODÍA ESTAR SOLO.

Desperté sudoroso en una cama desconocida.

Me dolía la garganta, ¿Había gritado? ¿Había soñado?

La puerta de la habitación se abrió dejando entrar a Luke.

Vino corriendo a mí preocupado.
-¿Qué pasó? ¿Estas bien?¿Por qué gritaste? ¿Por qué me llamaste?

-Solo fue una pesadilla... estoy bien.

¿Por qué se preocupaba tanto?

-Ohh... deberías seguir durmiendo, es temprano.

Asentí con la cabeza e intenté seguir durmiendo.

Cerre los ojos y salí de mi cuerpo.
Era mejor ni pensar en el tema de la soledad.

Luke me miraba incrédulo.

-Si vas a estar así, no me molestes.

Le sonreí y me fui.

Fui hasta lo de Sam, sabía que no me vería, peto tenía que asegurarme de que estaba bien.

***

Cuando ya se hizo de día volví a lo de Luke.

Este estaba con el uniforme escolar y preparaba su desayuno.

-Al fín te dignaste en venir.- Dijo apenas me vio atravesar la pared de su casa.

No respondí, fui directo a mi cuerpo y desperté.

Fue como un choque sentir de la nada un tremendo dolor de cabeza.

Fui como pude hasta la cocina donde estaba Luke.

Sujetaba mi cabeza con una mano.

-Te gustan los huevos revueltos, ¿No?

No respondí y lo miré suplicante.
-¿Estas bien Noah?- Preguntó al ver que no contestaba.

Negué moviendo mi cabeza y aumentando mi dolor.

-¿Te duele la cabeza?- Deducio al verme sujetó de ella.

Asentí.

Buscó algo en una caja de la sala y me entregó una pastilla.

La tomé aun con dolor.

-Tengo que ir a mi casa.- Avisé mientras desayunaba.

-¿Pof?-Preguntó con la boca llena.

-Tengo que ir a la escuela.

-¿Vaz a if a la ezcuela?¿pof?

-¿Podrías tragar y después comer? No se te entiende nada.

Tragó lo que tenía en la boca me miró.

-Así que me voy Luke, gracias por todo.- Me levanté de la mesa y me dirigí a la puerta.

-¡Espera!- Gritó él.

Lo miré esperando a que me diera alguna razón para esperar, pero parecía que fue un impulso de él, ya que apenas se dio cuenta de lo que dijo se puso rojo de la vergüenza.

-No puedes ir a tu casa solo.

-¿Por?- ¿Me estaba reteniendo?

-eh... porque... te duele la cabeza y podría pasarte cualquier cosa afuera.

La excusa más patética que escuché en mi vida.

-Pero no me duele más...

Luke fue corriendo a su cuarto con las llaves de la casa.

Vino con la mochila y peinado.

El concepto de peinado para Luke era "Hoy me pelie con el peine".

-Te acompaño a tu casa, te cambias y vamos a la escuela.

Lo dudé... pero luego acepté.

Cuando entro a mi casa hizo una mueca.

Sabía que mi casa no era lo mejor, era un pequeño departamento de tres cuartos (La pieza, el baño, y la sala común.) Pero para mí era comoda y acogedora y estaba ordenada... bueno, admito que ordenada no, pero no era un Mal lugar.

Me cambié rápido y salimos a toda carrera hasta la escuela ya que se nos hacía tarde.

Llegamos tarde, tres minutos tarde son demasiado para el profesor de química. Gracias a mi fama de chico bueno y aplicado nos dejó entrar sin ausente ni tardanza.

Sam abrió los ojos como platos cuando me vio entrar junto a Luke.

Luego ya tendriamos de que hablar en el día.

Se me revolvió el estómago de solo pensar en lo que ella diría.

Podría hasta imaginar cosas que no pasaron y sangrar por la nariz con tan solo decir que me quede duermiendo en su casa.

Sería un infierno.

***

¿Que pensará Sam? 7.7

Bueno, aquí nuevo capítulo, debería haberlo subido más tarde.... pero......... que más da, lo subo ahora y listo!

Ufff...! Hay tantas cosas que decir que las olvido.

En primer lugar gracias por todos los lectores, me pone muy feliz compartir mi historia con ustedes ^^

Y... en segundo lugar... me olvide que era eso xD

Pero bueno, gracias a todos y nos vemos en el próximo capítulo :*

Chaitoooss ~~