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Se había levantado extrañamente animado. Sus ojos no ardían como antes. Su garganta no se sentía seca, ni su cabeza dolía como antes. De nuevo, después de días, se sentía realmente bien, feliz incluso. Casi salta fuera de la cama de no ser por el dolor que atacó su espalda, sacándolo el aire de los pulmones y obligandolo a toser. Demonios, había olvidado por completo el "encuentro" con flash.

De nuevo se levantó, pero esta vez con más cuidado, mientras pensaba en lo que había pasado la noche anterior. Realmente se la había pasado bastante bien con deadpool, a pesar de que el hombre era bastante extraño, no había pensado en su tía toda la noche gracias a que el mayor no lo dejaba en paz ni cinco minutos, incluso hablaba mientras comía causando que Peter estallara en carcajadas.

Al principio no se había sentido cómodo del todo, pues era la primera vez que hablaba o veía a tal personaje, pero le había salvado la vida y había ayudado a detener a los maleantes un rato antes, así que se decidió ir a su cita a pesar de no saber en donde estaba o en donde podría encontrarlo. Fue pura suerte el que tuvo la idea de ir al edificio más alto de la ciudad y ahí lo encontrará. No cabía en su alegría, era justo lo que necesitaba en esos momentos, una distracción.

Camino fuera de la habitación hacia la sala, encontrando una nota sobre la lujosa mesa de centro.

<<iré a arreglar algunos asuntos, volveremos para la cena. No te metas en problemas. - T. S. >>

Revisó el reloj digital sobre la mesa, eran ya las doce del mediodía, había perdido la mayor parte del sábado. No tenía hambre, ni tampoco se sentía cansado, de hecho no sentía nada. Pensó un momento que hacer, así que regresó a la habitación. Tomó el celular de la cómoda y noto que este se encontraba descargado. No lo había tocado siquiera desde el funeral. Lo llevó a conectar.

Siguió buscando algo que hacer, hasta que noto que algo sobresalía de su mochila. Un cuaderno de ned. ¡Ned! Pensó. Corrió hasta la sala y tomó el teléfono fijo marcando a su mejor amigo. Por fin tendría algo que hacer.

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-¿cuanto tiempo más necesitas Wilson? - el hombre al otro lado de la línea suspiraba pesadamente, obviamente cansado de el
-una... O dos.... Quizá tres..... - jugo un momento con la línea del teléfono, era muy viejo, suficiente para que el color antes blanco pasara a ser amarillo y tuviese pedazos de pintura callendose y colgando a su alrededor
-bien, como sea... Solo asegúrate de que llegue vivo- y entonces colgó. Wade dejo el teléfono donde estaba y regresó a sentarse al viejo sillón.

-bonito lugar vine a conseguir - bufo molesto, se había apresurado a conseguir lo primero que se le atravesara con tal de terminar pronto su trabajo, y lo único que logró fue llegar a un pequeño pedazo de mierda, como él le llamaba. No había televisión, o Internet, muy a penas había una cama vieja, un sillón y un armario pequeño, además de la pequeña cocina integral y un baño. El techo parecía quererse caer a pedazos con tantas grietas y manchas de humedad. Las paredes no estaban mejor, la pintura caía como escarcha y se notaba que había animales viviendo a su alrededor.

Suspiró cansado, por lo menos ya tenía un poco de información sobre su objetivo:

-hombre
-entre dieciocho y veintiún años.
-seguramente un estudiante
-entre 1.63 y 1.72 de altura
-complexión delgada

Por ahora eso era suficiente, poco a poco iría sacando más información, así hasta que logrará su meta.

Revisó el reloj en la pared, de pura suerte era de las pocas cosas que servían como debían en ese lugar.
-1:15..... ¿Que debería de hacer? -

[¡Uy Uy Uy! Vamos a comer, que muero de hambre]
<si si si si, apoyo la moción >
{no no no, mejor hay que ir a buscar al spidey, mientras más sepamos más rápido nos iremos de aquí}
<ay tu cállate, ¿que no ves que morimos de hambre? >

Un gruñido se escucho desde su estómago
-bien, parece que eso responde la pregunta. Entonces, ¿qué comemos? -
[¡pizza!]
{! Tacos!}
<¡comida! >

-....... -
[¿acaso eres imbécil?]
{no le preguntes, es obvio que si}
-ay ya callense -

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-¿entonces.... Como has estado? - le preguntó su amigo tomando un sorbo de su malteada
-pues... No muy bien, pero supongo que algún día tendrá que pasar ¿no? - el muchacho miró el piso algo triste, mientras que su amigo palmeo su espalda en signo de apoyo
-ánimo Peter, verás que todo irá bien -
-gracias ned- contestó sonriendo - ahora vallamos por ese set-
-mira, ahí es- dijo señalando una puerta a lo lejos. Ambos caminaron hacia ella, pero Peter paró en seco, su sentido arácnido estaba sentelleando
-¡ned cuidado! -

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