Se muerde el labio nerviosa, como si quisiera provocarme. Veo como se le dilatan las pupilas y sonrío de lado porque en sus ojos me veo diferente, me veo mejor.
Trago saliva rozando nuestras narices porque sé que si la beso me estaré arriesgando a enamorarme de nuevo y no quiero.
O por lo menos no quería hasta que he empezado a conocerla.
Su respiración cocha contra la mía erizando mi piel y sonrío juntando nuestros labios.
Se le ruborizan las mejillas y se sonroja como hace siempre.
La beso despacio y tiernamente, como jamás había besado a nadie y joder, me asusta que me esté gustando tanto.
Me separo de ella sonriendo y junto nuestras frentes. Ha sido el mejor beso de mi vida y eso que he besado a una eternidad de chicas, pero ella, joder, ella es diferente.

-Eres...-susurro separándome para ver su nerviosa sonrisa.-Eres increíble.

Traga saliva y se aparta el pelo de la cara. Adoro cuando hace eso, pone cara de frustración y cansancio, aunque solo sea unos segundos, y me encanta.
Es tan bonita, joder.

-Bueno.-se muerde el labio.-¿Y ahora qué?

La miro fijamente a los ojos, haciendo que se mueva algo incomoda. ¿A hora qué? Si le dijera que ahora lo único que quiero es pasar mi vida con ella me tomaría como un loco. Pero quizás lo sea, y como bien dicen, las mejores personas lo están.

-Ahora vamos a intentarlo.-le agarro la mano.-Vamos a hacerlo bien.-asiente.-Nos vamos a conocer mejor  y vamos a estar juntos.-sonríe y jamás me cansaré de decir que tiene la sonrisa más bonita que se ha podido ver.-Y por eso quiero que te vengas conmigo a los conciertos que tengo.

-¿Enserio?-entreabre la boca y asiento sonriente.-Estoy soñando.-se da una palmada en la cabeza.-Acabo de besar al que era mi ídolo y ahora me voy de gira con él.-me mira.-Pellízcame.

-Ere tonta.-me río y me mira mal, intentando no sonreír.-Y no voy a pellizcarte, eso sería hacerte daño.

Se ríe y niega con la cabeza débilmente como si estuviera loco.
Y si sigue riendo de esa manera acabaré pero loco por ella.

-Bueno, ¿entonces nos vamos de gira?-aparecen Elena y Dani y sonrío asintiendo.-¿Y qué hacemos con mi hermana?-levanta las cejas obvia.-No podemos dejarla sola.

-De eso me encargo yo.-dice Kaila y todos la miramos sorprendidos.
Nos sonríe una vez más y sale de su habitación corriendo hacia el jardín.

Sonrío como un tonto viéndola marchar y es mi hermano quien me da una palmada para devolverme al mundo real.

-Te ha dado fuerte, eh.-se ríe y asiento siendo sincero por primera vez.
Si, me ha dado muy fuerte.

*******

-Hola.-me siento en la tumbona continúa a la de Miriam, que toma el sol tranquilamente.

-Hola.-contesta seca, apartando sus gafas de sol para mirarme.-¿Qué pasa?

-Los gemelos quieren que nos vallamos con ellos de gira.-le informo haciendo que vuelva a tumbarse despreocupada.-¿Te apuntas?

-No os lo toméis a mal, pero prefiero pasar.-dice desganada y sonrío sin que me vea.-Mi hermana con Dani, y tú seguro que acabarás con Jesús, no quiero estar molestando.-suspira.-Además, tener la casa solo para mí será un lujo.-sonríe montos después.-Sin nadie que me moleste.

-Bueno.-me levanto para mirarla desde arriba.-Pues usa protección.-le guiño el ojo divertida.-O tomate pastillas, no quiero tener un sobrino tan joven.

Logro que se ría aunque solo sea unos segundos y luego se incorpora para mirarme.

-Eres tonta.-sonríe.-Pero bueno, te haré caso.-hace que me ría divertida.-Bueno, disfruta.

-Y tu.-le guiño un ojo, dándome la vuelta y andando hacia la puerta.

-Kaila.-me llama y me giro para verla sonreír un poco.-Me estás empezando a caer bien.-asiento sonriéndole.-Bienvenida a la familia.

-A buenas horas.-bromeo abriendo la puerta.

-Mejor tarde que nunca.-alza la voz para que la oiga y sonrío satisfecha.

-¡Chicos!-grito subiendo de nuevo a mi habitación.-¿Qué haces?-me sorprendo, ya que Jesus está metiendo ropa en mi maleta.-Ese vestido no me gusta.

[....]

Noto como unos fuertes brazos me zarandean y abro los ojos algo adormilada.

-Ya hemos llegado.-susurra Jesús dándome la mano y ayudándome a salir de la gran furgoneta.-Ahora en el hotel puedes dormir.

-Vale.-sonrío desperezándome y agarrando mi maleta.-¿Cuándo es el concierto?

-Mañana por la noche.-sonríe tirando de su maleta hasta el interior del hotel.-¿Por?

-¿Por la mañana podemos ver Barcelona?-me intereso.-Siempre he querido ver esta ciudad.

-Claro.-contesta esta vez Dani, que lleva a Elena dormida a sus brazos.-Kaila, ¿puedes dormir con mi hermano?-sonríe y asiento sin problemas, creo que aún no sabe que Jesús y yo nos hemos besado.

-Claro.-suspiro.-Pero no violes a mi hermana.-bromeo abriendo la puerta de una de las habitaciones y lo oigo reír mientras Jesús le ayuda a abrir justo la de enfrente.

-Si mamá viene le dices que estoy en el baño, y tú te escondes.-dice Dani señalándome y asiento tirando de la maleta.

-Lo que tú digas, capitán.-le guiño un ojo, antes de que Jesús cierre la puerta y me mire con una sonrisa.-¿Qué pasa?

-Que voy a dormir contigo.-se ríe acercándose a mí para abrazarme muy fuerte.

-Si, a dormir.-sonrío.-Y gírate que voy a ponerme el pijama.

Me hace caso entre quejas y rápidamente me deshago de mi camiseta y de mi sujetador, para luego ponerme mi larga camiseta de Battman. Me quito los pantalones y me giro para ver a Jesús en calzoncillos y sin camiseta tumbado en la cama boca abajo.
Menudo culo tiene.

-Haré como que no he visto nada.-le sonrío tumbándome a su lado.

-Como si no te gustaran las vistas.-se ríe girando su cabeza para mirarme.-Eres preciosa.

Me tapo la cara con la almohada y el la quita de un movimiento, para luego tumbarse encima de mi chafándome por completo.

-Ogg, gordo.-me quejo.-No me violes.

-¿Cómo puedes pensar eso?-se ríe y ruedo los ojos.-¿Qué?

-Déjame dormir.-susurro cerrando los ojos con una sonrisa, intentando evitar los pensamientos que rondan mi cabeza.
Pensamientos como, por ejemplo, con cuantas chicas abra dormido Jesus.

-¿Sabes?-se separa para luego acariciarme la mejilla.-Eres la primera chica que tiene el privilegio de dormir conmigo.

-No me lo creo.-me río.-Eres un vividor follador.-se sorprende.-Sí Jesús, las gemeliers nos enteramos de todo.

-No de todo.-se acerca a mi.-Puede que haya estado con muchas chicas, pero jamás he dejado que ninguna duerma conmigo.-me besa la frente.-En eso puedo asegurarte que eres la primera.