-ahora es mi turno, Genu~

-n-no... n-no lo hagas, R-Reaper... por favor... . -pide el menor con tono suplicante, mientras sentía como el miembro amenazaba con entrar de una estocada-.

-¿eres así de egoísta como para no querer complacerme a mi también, Geno?. -pregunta Death con una expresión dolida, pero eso solo molesta más al albino-.

-¡p-puedo complacerte de otra manera, idiota!.

-solo será una vez... ¿si?. -pregunta Reaper para después acercar su rostro al de Geno y besarlo con suavidad, durando solo unos pequeños instantes-. Si te duele, puedo parar en cualquier momento, ¿bien?.

-... juegas sucio...

-es un don.

-... bien, pero si me duele, te parto la madre pendejo >:v (ok no xdxd). Bien... pero si me duele, te golpeare hasta que mueras.

-trato hecho.

Dicho eso, Reaper empezó a entrar en el menor, con el mayor cuidado posible para no lastimar al contrario. Geno se aferraba a los hombros del azabache, sintiendo el miembro duro de Death entrando en él, suspirando y acercándose al oído de Reaper, haciéndolo inconscientemente, claro.

-D-Death... ah!~ mng~...

-si gimes en mi oído, no confíes mucho que pueda controlarme, Geno. -aclara Reaper con el ceño fruncido, sorprendiendo al albino por tal acusación-.

-n-no estoy gimi-- ah!~. -Reaper toma un poco de impulso y entra de una embestida, sacándole unas cuantas lágrimas al menor-. ¡I-idiota!... te dije que-- ah!.

-no hables con la boca llena, cariño~

Reaper empezó a moverse de una manera un poco lenta, con tal de acostumbrar al menor, pero no servía de nada, ya que entraba completo en el albino y eso solo hacía empeorar las cosas. Una porque Reaper quería ir más rápido, y otra, porque Geno se sentía raro teniendo un trozo de carne entrándole entero en el trasero, pero no le dolía, y ese era un punto a favor.

-Geno~... . -susurra el azabache para después morder no muy fuerte el hombro del contrario-.

-ngh~... ¿y... y ahora q-qué?.

-¿puedo ir más rápido?.

Geno abre los ojos como platos, a la vez que sentía un rubor extendiéndose en su rostro. Como respuesta, solo abraza con fuerza el cuello de Reaper y asiente lentamente.

-eres tan lindo~.

-¡c-callate!.

-ah! ngh~ ah! y-ya p-para~ ah!~. -pide el menor recargando su frente en la pared, sintiendo como en su espalda el contrario besaba y hacía chupetones múltiples, sin escuchar a Geno-. Y-ya no quiero correrme...

-¿por qué?, ya llevas 2 veces y yo solo una, ¿acaso solo tu te quieres sentir bien?. -pregunta Reaper embistiendo con fuerza mientras hablaba, haciendo que le sea imposible al menor de contestar-.

-¡R-Reaper, por favor!~ AH!~. -Death embiste por última vez haciendo que Geno se corra, después sale del menor y se corre en la espalda de este-.

Las piernas de Geno flaquean y cae al suelo con cansancio, pero antes de que roce el suelo, Reaper lo atrapa, cargándolo estilo princesa hasta la cama que ahí estaba. En ese momento Death se pregunta en su mente "¿por qué no lo hicimos en la cama?".

Reaper lo acuesta y lo tapa con la sábana, pensando que lo limpiaría después, ya que él también estaba cansado.

Se acomoda la ropa y limpia un poco con pañuelos, limpia a Geno y trata de no dejar evidencia. Después sale de la celda y deja la puerta abierta, para cuando Geno despierte, pueda ayudarlo a levantarse.

En eso, recibe una llamada en la radio de su traje.

-aquí Reaper, cambio. -dice Death contestando al llamado-.

-Reaper, necesito su presencia en la oficina central de inmediato, cambio.

-de acuerdo, me dirijo hacia ahí, cambio y fuera. -dice por último para después cerrar la celda de Geno y salir por la puerta de la sala, con dirección hacia la oficina-.

-Reaper, tenemos un problema. -dice Cherry con un tono serio, mirando antipaticamente los papeles en su escritorio-.

-¿qué sucede?.

-Dust... ha escapado...

-¡¿qué?!, ¡¿por qué?!. -pregunta Death abriendo los ojos como platos, no creía que Dust en serio lo haría-.

-al parecer, se enteró de que lo íbamos a cambiar de guardia, y escapó en menos de una hora, en este momento están interrogando a Berry, pero no dice nada. -Fell se levanta de su lugar y camina hacia Reaper cargando con él unos papeles-. Quiero que tú le preguntes.

Cherry le extiende los papeles a Death, y este los agarra sin vacilar.

-pregúntale a dónde fue Dust, o si no, me veré obligado a tomar medidas más fuertes.

Fell no estaba bromeando, en serio se veía molesto por esto, y más porque Berry estaba involucrado en el asunto.

-entiendo, haré lo que pueda, señor. -responde el azabache, para después despedirse y dirigirse a la sala de interrogatorio-. ¿Ahora qué hiciste Berry?. -se pregunta en voz baja, esperando que nada malo estuviera pasando-.

-¡¿dónde mierda está ese lunático, Berry?!, ¡¿acaso no sabes lo peligroso que es Dust?!, ¡él puede llegar a matar a muchas personas solo porque no sabemos su paradero!. -grita un policía, dirigiéndose al oji azul que estaba sentado, sin mirar a los que estaban alrededor-.

-¡¿comprendes lo grave de esta situación?!.

-¡lo sé, claro que lo sé!, yo mejor que nadie lo conoce, y sé de lo que puede ser capaz, ¡pero en serio no sé dónde está!. -grita el menor con los ojos llorosos, levantándose de su lugar con brusquedad-.

-cálmense un poco. -dice alguien entrando a la sala, todos voltean hacia aquella dirección y ven a Reaper de pie, con un aspecto serio-.

Los demás comprenden la indirecta y salen de la sala, dejando a Death con el oji azul.

-Reaper... ¿tú también vienes a preguntarme sobre Dust?. -pregunta el menor, esperando una respuesta negativa por parte del contrario-.

-no te mentiré, también vengo a preguntarte sobre él. -dice Death con el ceño fruncido, estremeciendo un poco al contrario-. Es raro que Dust decida escapar, y más si se trata de ti, Berry... ¿acaso pasó algo con el jefe?.

-... tu eres el que más conoce a Dust, ¿no?... lo estuviste cuidando por mucho tiempo... . -dice Berry con la mirada baja, sabiendo que no podía seguir ocultando la verdad-. Cherry... el jefe, nos vio cuando estábamos haciéndolo...

-. . . . . . ¿qué?.... ¡¿lo haces con Dust?!.

-¡callate idiota!. -grita el menor con la cara sonrojada, esperando que nadie lo haya escuchado-.

(Los de la otra sala)

-s-sólo unas cuantas veces... al día... . -dice Berry con un sonrojo enorme en la cara, avergonzado a más no poder-. ¡P-pero ese no es el problema!, el problema es que el jefe nos cachó la última vez, y como dijo que lo cambiaría de nuevo contigo, él de repente decidió irse.

-... ¿y sabes a dónde?. -pregunta Reaper tratando de procesar todo lo que le había dicho hasta el momento-.

-yo... lo sé pero... tampoco es como si la policía pudiera hacer algo en estos momentos...

-no importa, con que sepas en dónde, es más que suficiente, aparte al jefe no le podría importar menos aquel sujeto. -dice Reaper sacando los papeles que traía con él y anota algo en ella-.

-¿por qué?...

-porque al jefe solo le importas tu, y te aseguro que ese tipo es en lo que menos piensa en este momento. Ahora, anota. - dice Reaper entregando la hoja-. Es ahora o nunca, Berry.

-¡despierta, basura!. -grita alguien golpeando con la porra las rejas de la celda-.

Geno abre los ojos lentamente, pero despierta de golpe al escuchar el golpe contra las rejas.

-es momento de cambiarte. Crayon...

-¿qué?...

Un policía entra a la celda y lo levanta a la fuerza, para después empezar a jalarlo hacia la salida.

-¿q-qué pasa?, ¡suéltenme!. -grita el menor y trata de soltarse, pero las fuerzas no le funcionaban, y más por el momento que había tenido recién con el azabache-. ¡¿A dónde me llevan?!.

-ya lo verás dentro de poco, Geno... . -dice uno de ellos, sonriendo perturbadoramente mientras apretaban su agarre-.

En eso, el albino recuerda haber visto esos rostros y esa horrible sonrisa antes, haciendo que Geno se espante y quede en shock, sin creer lo que estaba pasando.

-son los hombres de mi hermano... . -dice el menor como un susurro, para paso seguido abrir los ojos como platos e intentar huir de nuevo-. ¡Suéltenme!, ¡por favor déjenme i-- mmnh!.

-tápale la boca hasta que salgamos de aquí, nadie sospechará con estos trajes.

Geno trata de morder aquella mano que le tapaba la boca, pero él tenía guantes y fue imposible hacer algo. Sigue tratando, pero solo logra que lo golpeen mientras más iban avanzando.

La puerta de salida se iba acercando cada vez más, y las esperanzas se alejaban con cada paso que se daba. En momentos como esos, Geno sólo podía pensar en alguien, que tal vez nunca llegaría a salvarlo...

O tal vez si...

-disculpen, ¿puedo preguntar a dónde lo llevan?. -dice un azabache cargando consigo un arma, mientras apuntaba a los sujetos que sostenían a Geno-.

El albino mira a su salvador con sorpresa y consuelo, al saber que vino por él.

-él es mi prisionero. -replica Reaper con el ceño fruncido, haciendo que los dos secuestradores retrocedan-.

-nos pidieron que nos lo lleváramos, hay un mejor lugar para--

-me vale menos que una mierda, entreguenlo o me veré obligado a dispararles... . -al ver que ambos sujetos no hacían nada, Death disparó al suelo, muy cerca de los pies de ambos-. Ahora.

-mierda... larguémonos de aquí. -dice uno de ellos empujando a Geno hacia Reaper, para después salir corriendo de ahí junto al otro-.

Reaper guarda el arma y corre hacia Geno, el cual no podía pararse del suelo.

-Geno... ¿estás bien?...

Reaper ve las puertas por donde habían salido aquellos tipos, estaba solitario y sin guardias... ¿por qué?...

-e-eres un idiota... . -dice el albino con los ojos llorosos, mirando al contrario con dolor-. ¡¿Por qué me abandonaste a mi suerte?!, ¡se supone que eres mi guardia, ¿por qué--?!.

-estás bien... me alegro. -dice Reaper interrumpiendo a Geno, dándole un fuerte abrazo, el cual el albino no dudó en corresponder-. Escucha, Geno...

-¿qué?...

-escucha con atención... ¿ok?.

-¿entendiste?, sé que no puedes correr mucho, pero es para poder sacarte de aquí...

-e-esto es muy peligroso... yo--

-cuando yo te diga, corres todo lo que puedas, ¿bien?.

-p-pero Reaper... . -vacila al tener la duda en su pecho, no quería irse solo-.

-bien, en cuatro minutos correrás a la salida, y no lo olvides, en cualquier momento pueden agarrarte, así que no dejes de correr.

-Reaper... ¿qué hay de ti?. -pregunta el menor preocupado, ya que sabía las consecuencias de desobedecer la ley-.

-iré detrás de ti... ahora, ¡corre!.

~choco~