°•Capitulo Seis•°

Pasaron demasiadas cosas al mismo tiempo y Lan Wangji estaba confundido, sabia que probablemente debería preocuparse por la espada que volaba directamente hacia su cuerpo cargada de intensión asesina, su instinto tendría que estarle advirtiendo que no apartara la mirada de el arma, pero en cambio su instinto seguía gritándole que el verdadero peligro estaba detrás.

A los cachorros se les enseña desde jóvenes que seguir a su instinto es sinónimo de sobrevivir y que este jamás debía ser desobedecido mientras fueran jóvenes, pero aquí estaba Lan Wangji con su instinto gritándole que la persona que lo había defendido con garras y dientes era el verdadero peligro en lugar de la espada que lo cazaba.

El asunto era que, por obvias razones, Lan Wangji no podía ver al zorro que lo cargaba en su hocico y por ende no pudo ver cómo los amistosos ojos color luna se tornaban en hostiles pozos color sangre. Muchas veces y en situaciones extremas el instinto toma el control para garantizar la seguridad del individuo o su grupo, y en este momento el instinto de Wei Wuxian estaba a flor de piel; el instinto de los Omegas va más allá de ser una buena pareja para un Alfa, el instinto más arraigo de los Omegas es de preteger a los cachorros sean o no del Omega y en este caso Lan Wangji entraba en la categoría de un cachorro en peligro.

El instinto de Wei wuxian empujó lejos cualquier pensamiento razonable, por lo cual el pelinegro era incapaz de recordar que eso era algo que nadie debía ver y mientras sus eponjadas colas se volvía delgadas como víboras la energía resentida se desprendió del suelo y detuvo el avance de la espada enroscandose a su alrededor hasta que el metal crujió rompiéndose a cientos de pedazos. Lan Wangji se quedó congelado en su lugar viendo como el metal caía hecho pedazos, la energía espiritual escapando como delgados hilos que desaparecían en el aire y entonces lo escucho desde la derecha; un jadeo se asombro aterrado y una figura que se ponía de pie, por supuesto que el zorro también lo escucho y ladeó ligeramente su cabeza en esa dirección.

La energía resentida salió disparada hacia la fuente del sonido, atravesó el cuerpo del atacante sin provocar ni una sola herida y aún así el cuerpo cayó como un peso muerto al piso, el talismán de teletransportación que el desconocido tenía en su mano se activo quemándose y arrastrando consigo el cuerpo sin vida borrando toda evidencia. Y allí quedaron ambas figuras en el bosque, Wei Wuxian aún perdido en sus instintos y Lan Wangji intentando procesar todo lo que había ocurrido; primero que nada alguien parecía estar intentando matarlo a como diera lugar y segundo al parecer su prometido era una de esas bestias viciosas de la que todos los libros hablaban:

Los zorros pueden ser criaturas veneradas o aborrecidas dependiendo su naturaleza innata, aquellos que nacen pudiendo controlar la energía espiritual y alcanzaban sus nueve colas serían venerados como una criatura sagrada, mientras aquellos que tenían afinidad con la energía resentida normalmente eran aborrecidas como criaturas de mal augurio que con el tiempo perdían el temperamento y se volvían hambrientas por el caos y la destrucción. Lan Qiren había advertido muchas veces a su querido sobrino que un zorro de nueve colas que controla la energía resentida debe ser sellado de inmediato, Lan Wangji sabía que tenía que reportarle a su tío que el prometido que había buscado para él era una de esas criaturas viciosas y potencialmente peligrosa, lo sabía tan bien como el reglamento de su hogar y aún así la idea se sentía tan amarga en su cabeza.

Wei Wuxian era ajeno a la pequeña batalla interna del tigre, su mente aún confusa y su cuerpo agotándose más rápido de lo que debería, así que con cuidado se inclino y dejó que el cachorro apoyará sus patas en el césped. El tigre se enderezó y tras algunos segundos de vacilación volteo justo a tiempo para ver como el zorro se desplomaba sobre su barriga con la cabeza apoyada en el piso, los ojos habían vuelto a ser dos brillantes lunas solo opacadas por cansancio. Wei Wuxian emitió un pequeño sonido de preocupación y Lan Wangji sintió su centro sacudirse: porque esos ojos lo observaban con genuina preocupación, con la preocupación natural de alguien que había usado garras y dientes para protegerlo, que había peleando con un cadáver feroz y con una espada estando en desventaja solo para protegerlo.

Los zorros de nueve colas que controlan energía resentida son peligrosos y aún así aquí estaba Wei Wuxian echado sobre su barriga, observándolo con enormes ojos plateados y las orejas bajas; sacudiendo los cimientos de su vida y recordándole palabras de su madre qué tal vez preferiría olvidar:

Madam Lan era una mujer hermosa, Lan Wangji siempre tenía la impresión de que cuando ella reía tenía el mismo efecto que la primavera haciendo florecer todo a su alrededor, pero lan Wangji era demasiado joven para comprender que a pesar de que su madre podía traer con su risa la primavera ella misma era una flor marchitandose lentamente. Era demasiado joven para entender que ese lugar que tanto le gustaba visitar era la prisión de su madre; no fue hasta hace un año atrás que se enteró de los crimenes de su madre a causa de un discípulo que no respetó la regla de no chismes, Lan Qiren trato de ser suave al explicarlo, pero en su voz era claro el rechazo hacia ella.

Entonces cuando Lan Wangji visitó a su madre tras enterarse de la verdad y no camino rápidamente hacia ella como solía hacerlo para ser alzado, Madam Lan supo exactamente lo que había pasado.

—A-zhan—su nombre era pronunciado con tanto cariño. Tan suave y amorosamente como solo una madre podría hacerlo—¿Crees que soy una mala persona?—Lan Wangji se apresuró a negar, porque ningún niño en el mundo puede creer que su madre sea una mala persona. No cuando está a menudo lo sostiene en su regazo cantando suavemente para él, apretando sus mejillas y riendo alegremente; no podría creer que su madre fuese mala cuando era tan buena para hacerlo sentir seguro—Entonces ¿Crees que tú tío miente?—y era allí donde Lan Wangji entraba en conflicto, porque su tío jamás diría algo que no fuese cierto. Lan Wangji bajo la cabeza está vez sin respuesta y Madam Lan guardo silencio por unos segundos—A-zhan, este mundo está lleno de personas de toda clase y a lo largo de tu vida te encontrarás con muchas personas que piensan diferente a ti, y no por eso ellas son malas.

Lan Wangji fue tomado suavemente en los brazos de su madre y colocado sobre su regazo, ella olía a flores, olía como el té amargo que bebía todo el tiempo y que Lan Wangji no podía probar sin hacer muecas—Para ti robar es malo, pero para otro niño es la única forma de sobrevivir. El mundo es demasiado grande como para juzgarlo solo en blanco y negro, las personas son demasiado complejas como para solo juzgarlas de buenas o malas a la ligera, pero más importante aún... Las personas son demasiado complejas como para que las juzgues con frívolas reglas; juzga a las personas en base a las reglas de tu propio corazón, el siempre sabrá cuál es la respuesta correcta ¿Lo entiendes?

Cuando Lan Xichen llegó Madam Lan dejo la charla de lado en pos de mimar a sus dos hijos; dos semanas después a Lan Wangji se le informo que ya no debía regresar a ver su a madre.

En aquel entonces Lan Wangji nunca tuvo la oportunidad de decirle a su madre que no lo entendía y que ahora tampoco lo entiende, si el bien y el mal son tan difíciles de diferenciar ¿Cómo sabría cunado estaba haciendo lo correcto? Si las personas son tan complejas ¿Cómo sabría en quien confiar? Pero tal vez entendía un poco la última parte, porque aunque su cabeza le repitiera una y otra vez que debía "entregar" a Wei Wuxian, su corazón seguía gritándole que no era correcto hacerlo. Otro quejido de Wei Wuxian trajo a Lan Wangji de regreso a la tierra, sus ojos dorados observaron al zorro que intentaba ponerse de pie y acercarse al cachorro que no había respondido a su llamado, pero su cuerpo estaba al límite ya que la manipulación de la energía resentida resultaba desgastante y tras dar un paso sus patas delanteras se doblaron.

El golpe contra el piso jamás llego y en cambio su cabeza aterrizó sobre un suave regazo vestido de ropas blancas con aroma a sándalo, unas suaves manos se movieron titubeantes hasta tomar la cabeza del zorro y alzarla lo suficiente como para que viera el rostro del, ahora, niño.

—Estoy bien—aseguro Lan Wangji con sus ojos fijos en ese enorme par de lunas—Descansa.

Wei Wuxian quería negarse, descansar significaba dormir y dormir significaba dejar a Lan Wangji solo, pero estaba tan cansado que apenas emitió un bajo ronroneo antes de que sus ojos se cerrarse. Lan Wangji lo observó por algunos segundos más, sus pulgares acariciaron los pómulos del zorro y finalmente suspiró.

Jiang Cheng estaba perdiendo completamente la calma tras una hora buscando a su hermano, sin importar cuanto Lan Xichen intentará calmarlo Jiang Wanyi seguía soltando gruñidos molestos desde el fondo de su garganta y caminando firmemente. Su nariz se movía intentando desesperadamente encontrar algún rastro del aroma de su hermano ¡Pero no había ni siquiera una ligera línea que seguir! El aroma comenzó a volverse cada vez más débil hasta que simplemente desapareció y Jiang Cheng sintió cada nervio crisparse, porque eso solo sucedía en un escenario y eso era si el zorro entraba descuidadamente en una barrera. Tal vez huyendo de los cadáveres entro sin percatarse.

Lan Xichen no estaba en mejor condición mental aún si externamente se mostraba tan calmado, el pánico silencioso de perder a su hermano comenzaba a devorar sus nervios. Wangji era su pequeño hermano, además de su tío, era lo único que le quedaba y si lo perdía no sabría que hacer. Su vida se derrumbaria sobre su cabeza

—Joven maestro Jiang deber-...

Lan Xichen quería decirle que deberían buscar ayuda, volver con más discípulos y buscarlos. Avisarle tanto a Qiren como a Fengmian de la situación actual, pero Jiang Cheng se crispo como si sus nervios estuvieran en llamas y se volteo; ojos casi inyectados en sangre y el aroma a molestia picando en la nariz del alfa haciendo que casi quisiera agazaparse.

—¡No me digas lo que deberíamos hacer!—grito Jiang Cheng llegando al borde de su paciencia. No quería regresar, no iba a regresar sin su hermano—¡Llevamos un ahora buscando y lo único que sigues repitiendo es que deberíamos volver y buscar ayuda! ¡Vuelve y busca ayuda por ti mismo!

—P-pero...—Lan Xichen se sentia mal, jamás nadie le había gritado de esta forma y que el primerobfuera ese Omega de aroma embriagador por alguna razón lo hacia todo peor. La vergüenza de sentirse un cobarde y la preocupación por su hermano seguían arremolinandose en su estomago—No quiero dejarte...

—¡No necesito ni quiero tu estúpida protección!—jiang cheng se mostro aún más hostil, su espalda se enderezó luciendo un poco más alto mientras alzaba su rostro de dándole una mirada de desden. Y oh, Xichen se sintió de repente tan pequeño, tan miserable que por un segundo deseo poder cambiar lugar con una lombriz—¡Solo lárgate y déjame solo!

Lan Xichen casi pudo escuchar el claro Crack de algo rompiéndose en su interior; tal vez fue la acumulación de estrés de los meses anteriores, tal vez fue el miedo por su próximo puesto como líder de secta o el luto de su madre que aún dolía como el primer día a pesar de que ya había pasado un año desde entonces, pero Xichen fue simplemente incapaz de mantenerlo. Jiang Cheng se había volteado con la intención de marcharse y solo para asegurarse de que no sería seguido observó de reojo hacia atrás; el Jiang jamás pensó que la culpa podría golpearlo tan duro, pero lo estaba experimentando ahora viendo a Lan Xichen con su cabeza gacha. Las cristalinas lágrimas se deslizaban desde sus ojos y bajaban por sus mejillas, mientras mordía su labio inferior intentando contener seguramente lo que sería un sollozo angustiado.

Jiang Cheng siempre quiso hacer llorar a un Alfa, pero hacer llorar a este Alfa se sintió tan amargo como un trago se medicina y se asentó detrás de su consciencia como una piedra en el fondo del lago.

_Mierda..._

Mi pobre bebé Xichen, todo estresado y todo preocupado.

Insisto en que Lan Wangji está demasiado joven para cuestionar básicamente toda su educación, pero así es la vida (?) Denle ánimos para atravesar el proceso

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