19.
Dani.
Le tiendo una Coca-Cola a mi "amiga" y me siento en el sofá de enfrente dando un suspiro. Se suponía que quería estar solo, pero parece que eso no va a poder ser.
-Bueno, ¿y qué haces aquí?-dudo y su sonrisa sale a la luz enseguida.
-Cath me dijo que estabais por aquí y quería saludar, pero parece que estás solo.-habla apartando su rubia melena de la cara.-¿Ha ocurrido algo?
-No te recuerdo tan cotilla.-sonrío de lado haciendo que se sonroje al instante.-No, no ha pasado nada, simplemente es que esta noche no me apetecía salir.
-Pues ya tienes acompañante.-se levanta para sentarse a mi lado.-No sabes las ganas que tenía de volver a verte.
-¿A qué has venido, Elisa?-la miro serio debido ha su peligroso acercamiento.-No creo que quieras que venir desde Sevilla solo para saludar.
-Bueno, tampoco eso.-vuelve a sonreír y ruedo los ojos.-Me apetecía verte a ti, ya sabes.
-Elisa, estoy con Paula.-me aparto un poco.-No quiero nada contigo.
-Pues yo no veo que ella te quiera mucho si se larga.-ironiza.-Venga Dani, sabes que te mereces a alguien mejor.
-No, ese es el problema.-cojo aire intentando calmarme.-No hay nadie mejor que ella.
-Yo soy mucho más guapa.-se echa flores.-Y estoy demasiado buena.-me guiña el ojo desabrochándose los dos primeros botones de la fina camisa que lleva.-Yo soy mejor.
-En eso te equivocas.-me chupo los labios bastante incomodo.-Ella es preciosa pero aun así yo tampoco quiero un físico de diez, a mí lo que me importa es que me llene, que me haga feliz.-veo como me mira bastante sarcástica.-Y ella me hace muy feliz.
-Cath tenía razón, los Oviedo no son los que erais.
-Los Oviedo hemos madurado, cosa que tendríais que haber echo vosotras, que ya tenéis una edad.-le contesto vacilante, siendo interrumpido por el ruido del timbre.
Me levanto sin ni siquiera avisarla y me acerco a la puerta para abrirla sin más. Cuando veo ahí a Paula se me para el corazón y no sé si es por volver a verla, o porque si encuentra ahí a Elisa se va a liar.
-Pau...-susurro abrazándola con fuerza como si no la hubiera visto desde hace años.-¿Qué...haces aquí?
-Anna me dijo que...-sonríe agarrando mis manos.-Que eligiera lo que de verdad me hacía feliz.-asiento viendo cómo vuelve a sonreír despertando algo en mi.-Y te he elegido a ti.
Entreabro la boca ante sus palabras, enserio creía que lo había descubierto todo de ella pero cada vez que abre la boca me sorprende más. Joder, tiene ese no sé qué que me tiene incluso cuando todo esta roto en mi, aun cuando creo no sentir nada, me tiene, me sostiene así, de golpe.
-Dios...-susurro abrazándola con mucha fuerza de nuevo.-Te quiero tantísimo, mi vida.-digo quizá por primera vez en voz alta, alto y claro para que el mundo lo oiga porque me he dado cuenta de que es real.
-Dani...-canturrea Elisa desde dentro y noto como algo se rompe en mí cuando aparece en la puerta con unos cuantos botones más de la camisa desabrochados.-Uy, Paula.-le sonríe falsamente y la miro incrédulo.-Que casualidad.
Trago saliva cuando Paula me mira, quiero explicarle esto pero no soy capaz de hablar, su mirada me penetra y veo como cierra los ojos con fuerza, me duele que no confía en mí como yo lo hago en ella.
-Paula, puedo...-intento hablar pero alza la mano para que me calle.
-Vete a la mierda Daniel.-dice volviendo a coger sus maletas y dándose la vuelta de mala leche.
-No quiero.-digo agarrándola de brazo y girándome para mirar con asco a Elisa.-Y tu, ¿estás contenta?-le pregunto sarcástico.-Porque si ya la has liado demasiado será mejor que te vallas.
-Daniel, suéltame.-me exige Paula tirando de mi brazo para intentar soltarse.
-Que no, que me vas a escuchar.-la miro sincero.-No puedo dejar que esto se valla a la mierda por un malentendido.
******
Anna.
Camino por el paseo de la playa tiritando, son las once y acaba de despertar una brisa que me ha dejado helada, por eso he decidido acercarme a él apartamento para coger una chaqueta.
Veo como una cara conocida pasa por mi lado con una sonrisa satisfecha y me quedo mirándola hasta que logro saber quién es. ¿Qué hace Elisa aquí?
La respuesta la obtengo cuando escucho al voz de Paula chillándole a Dani. Un momento, ¿Paula?
No puedo evitar echar a correr para ver qué pasa y cuando llego veo como Paula intenta soltarse del agarre de Dani pero él no le deja.
-¡Qué me sueltes coño!-le grita intentando evitar llorar.
-¡Escúchame!-le dice él ya con un río de lagrimas resbalando por sus mejillas.-¡No es lo que piensas, te lo juro!
Me acerco a paso rápido y cuando me ven ambos clavan su mirada en mí, supongo que buscando un apoyo que no van a encontrar, aún no.
-¿Qué os pasa a vosotros dos?-dudo cruzándome de brazos.
-Oh, pues que tu querido amiguito ha aprovechado que me iba, para follarse a la otra.-lo mira con desprecio.-Es que es increíble.
-Cálmate.-me acerco para abrazarla durante unos segundos.-¿Dani?
-No...no es cierto.-solloza sentándose en el bordillo con la cabeza entre las piernas.-Elisa vino porque se lo dijo Cath y quiso entrar, la dejé porque la recordaba cómo una amiga...
-Una amiga a la que te follaste durante un puto verano.-lo amenaza Paula ya llorando.
-Le he dado una Coca-Cola y se ha sentado a mi lado, no te voy a negar que ella venía para lo que venía pero yo no le he dejado.-susurra.-Le he dicho que te quería a ti y que nadie podría cambiar eso Paula, tienes que creerme.-solloza.-Luego has tocado y...y lo ha echo para joderme por rechazarla, se ha desabrochado los botones para que pensaras lo que estás pensando.-la mira a los ojos con sinceridad.-No quiero que por esta mierda toda nuestra historia se valla a la mierda, me niego.
Miro a Paula unos segundos, sé que se lo está pensando muy detenidamente y no entiendo porque ya que Dani está diciendo la verdad, se le nota, se le ve.
-No es fácil creerte cuando esto ya ha pasado más veces.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top