Cumpliéndose cuatro meses desde que se conocieron, SeHun logro que Lay aceptara ir con él durante las vacaciones de Octubre-Noviembre que organizaría con sus amigos, mismo viaje que se llevaría a cabo en el bosque TWO MOONS, donde había conocido a su lobo. El rubio se emocionó muchísimo cuando sugirieron el bosque para pasarla y no dudo en alzar hasta la pierna derecha para opinar.

Lay se mostró algo reacio pero acepto con la condición de que SeHun no se separara de él. ChangKyun había torcido los labios cuando lo hablaron frente a ellos pero no se metió en la decisión de su hermano. Recordar cómo se puso de celoso cuando ChangKyun beso la mejilla de Lay y después el muy malvado hyung le soltó que eran hermanos, le sigue dando muchísima vergüenza.

—Vaya, tu novio es lindo. — hablo JongDae, uno de sus amigos.

— ¿Solo lindo? ¡Es adorable! — exclamo LuHan, tomando las mejillas del mencionado. —Dime como ese cara de palo te conquisto para conseguirme uno como tú o... ¡Ya se! ¡Te robare de él!

—Olvídalo, saldrá corriendo cuando intentes que haga cosplay contigo. — comenzó a reírse un alto pelinegro de orejas grandes.

— "Por favor, se el Kaneki de mi Tsukishima" — apoyo un castaño más bajo de rasgos delicados.

— ¡Con mi tuerto no se metan! — bramo el cobrizo, pellizcando a los que se reían.

—Bueno, basta. Lo van a asustar y dejara a nuestro SeHun. —hablo un chico de mejillas abultadas y cabello corto.

SeHun solo miraba el suelo, rojo de la vergüenza mientras el ojigris reía como si nada. Los amigos de SeHun eran extraños pero agradables.

Llegaron a la cabaña vacacional de SeHun, chuleándola como cada que iban, dispersándose como si fuera su propia casa y arrojando las maletas para salir a explorar. Lay termino llevándose muy bien con sus amigos, tanto que se unió al bullying que le hacían.

Cuando la noche cayo, LuHan sugirió hacer una fogata y contar historias de terror, siendo apoyado incluso por Lay. El primero fue JongDae, quien conto varias historias de exploraciones urbanas de sus conocidos; después fueron ChanYeol y BaekHyun, quienes eran un poco miedosos pero sabían varias leyendas urbanas de las calles de Busan; LuHan conto historias de fantasmas que invocabas por medio de un ritual y que te seguían para probar que tan valiente eres para aguantar su presencia; SeHun conto su experiencia en el bosque y Lay decidió cederle su turno al mayor de todos.

—Empezare yo, entonces. — MinSeok estaba al centro de todos, meneando su malvavisco. —Mis abuelos vivían en el pueblo cercano a este bosque, el que está a unos minutos de esta cabaña.

Ellos tenían prohibido salir cuando el sol se ocultaba, estaba estrictamente prohibido y era parte de las tres reglas sagradas que aún se siguen obedeciendo sin falta por la mayoría y digo mayoría porque aún hay locos que quieren hacerse los valientes o desafortunados viajeros que se pierden.

El pueblo compartía terrenos con poderosas criaturas sobrenaturales que se alimentaban de los desafortunados que entraban al bosque TWO MOONS sin ofrecerles tributo y la gente les tenía un profundo respeto y un miedo atroz. Nadie los desafiaba si no buscaban morir despedazados. Podían ofrecer protección a quien les ofreciera algo lo bastante bueno como comida, almas u obediencia absoluta. Se creía que esos seres eran lobos enormes que podían tomar forma humana para engañar a la gente y atraerla para fines desconocidos.

Mi abuelo dijo que tuvo un amigo que no creía nada de las historias que nos contaban, que se burlaba de los supuestos lobos y bestias que habitaban en el y que estaba harto de que no les dejaran salir de noche, que cuando anocheció en luna llena, cruzo el lago y blasfemo en contra de todo lo viviente. Él me dijo que jamás olvidara lo mucho que le pidió detenerse y lo horrible que fue escucharlo gritar antes de que desapareciera en el bosque hasta la otra luna llena. Cuando lo encontraron, no dejaba de gritar acerca de lobos oscuros y grises que le habían mordido y lastimado por haberlos ofendido. Los que aún seguían incrédulos, confirmaron que las mandíbulas en su cuerpo pertenecían a bestias de tamaño superior a las conocidas en nuestro lado y eso lo confirmo un médico imparcial a nuestras creencias.

Mi abuela, en cambio, respetaba a las bestias del bosque y cada fin de mes, se ofrecía junto a mi abuelo para dejar la ofrenda al pie de este lado del lago y ambos solían conversar un poco antes de que tuvieran que irse, no sin olvidar desearles buenas noches. Ellos dijeron que el primer día de cada mes, encontraban al pie de su puerta, una pequeña tela con algunas flores de colores y frutas que no había de su lado; creyeron que eran los únicos pero dicho regalo era dejado para cada persona o familia que respetara y ofreciera tributo a las bestias. Para la sorpresa del pueblo, cuando el este sufría de hambre, por animales salvajes o gente malvada, se escuchaban aullidos de lobos y la amenaza desaparecía, aparecían telas con fruta e incluso se le daba muerte a las malvadas personas; las bestias tomaron el pueblo bajo su protección y la gente empezó a adorarlos como protectores.

Con el tiempo, las muertes en el bosque dejaron de ser un problema y la costumbre del tributo perduro hasta que las bestias mandaron un mensaje, anunciando estar llenos y satisfechos, desde ese momento no hubo más tributo o muertes. La gente suele mandar barquitos de madera con flores y frutas al otro lado cada que necesitan un poco de ayuda o guía y las temibles bestias pasaron a ser espíritus protectores y leyendas.

—Wow, eso suena realmente increíble. —los ojos de SeHun brillaban de emoción. —Entonces, el lobo negro que me salvo, ¿Pudo haber sido uno de esos guardianes?

—Tal vez, mis abuelos dicen que los aullidos en TWO MOONS a veces siguen escuchándose y que eso siempre significa buen augurio para una persona creyente. — contesto MinSeok en un bostezo.

—En ese caso tendré que dejar mi agradecimiento antes de irnos. — el rubio miro a Lay, quien sonreía hacia el fuego.

—Puedes hacerlo mañana que haya luna llena. —apoyo LuHan comiendo dos malvaviscos al mismo tiempo.

SeHun volvió a asentir, pasándole un malvavisco al ojigris. —Preparare algo digno.

—Bien, mucha charla, es hora de dormir. — MinSeok se levantó, recogiendo algunos trastos. — ¿Qué esperan? A dormir.

—Si, mamá. — BaekHyun levanto a ChanYeol, quien ya estaba dormitando y se adentraron a la cabaña.

—Dulces sueños, corazón. — LuHan le mando un beso volado a Lay y este se sonrojo, riéndose por su atrevimiento.

— ¡A tu cuarto, chino atrevido! — gritoneo SeHun abrazando como koala a Lay.

— ¡Serás tu porque dormirán juntos! —regreso el cobrizo, haciendo que ambos se sonrojaran.

Y si, la cabaña era grande pero no tanto como para que tuvieran una habitación para cada quien. JongDae, MinSeok y LuHan dormirían juntos; ChanYeol y BaekHyun también y la última habitación, que era donde dormían sus padres, seria para SeHun y Lay.

— ¿De qué lado sueles dormir? —pregunto el azabache, una vez que salió del baño.

—Estoy bien con cualquier lado, la verdad. — el rubio estaba sentado de lado derecho, mirando sus zapatos como si fueran lo más interesante del mundo.

—Entonces tomare el izquierdo. —Lay se acomodó y se enrollo cual rollo de sushi. —Dulces sueños, SeHun.

El más alto sonrió tontamente. —Dulces sueños, Lay.

Aquella noche, sus sueños fueron diferentes. El lobo gris lo atacaba, exactamente como paso, pero sus gruñidos eran palabras que podía entender.

—"Este es mi territorio, humano", "Corre, es divertido cazar la cena", "Pobre idiota", "No puedes escapar de un lobo".

Cuando apareció su lobo negro, los gruñidos de este también eran entendibles.

—"¡Este no es tu territorio, Ravi!", "¡Él es mi humano!", "Te matare si vuelves a tocarlo" — que pudiera entenderles no era el problema si no que la voz del lobo oscuro le era conocida.

—Lay...— susurro con la visión nítida, mirando hacia su mano para después levantar la cabeza cuando escucho la misma voz.

—Aiyoo wei, ¿Apenas te das cuenta? — el ojigris le tomo las mejillas, sonriendo dulcemente. —SeHun, no vayas al bosque mañana. Por favor, no quiero que te lastimen.

— ¿Qué?

—No quiero que te lastimen. — el chico le abrazo del cuello, sollozando. —Quiero ser libre para poder amarte sin problema. No quiero ser de él, solo tuyo...

— ¿De qué hablas? —y justo como pasaba cada que soñaba algo importante, despertaba.

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—SeHun, ¿Qué es esto? — JongDae ladeaba la cabeza con el papel en ambas manos. — ¿Es un gato?

— ¿Gato? Yo pensé que era un gallo. — LuHan arqueo una ceja hacia el rubio, quien escribía devotamente en otra hoja.

—Da igual que sea, no es para nosotros. — MinSeok les dio un zape a cada uno, pasándole una pequeña canasta al rubio. — ¿Dónde están los otros dos? — pregunto mirando alrededor.

—Fueron con Lay a buscar un poco de frutas al pueblo. — respondió LuHan desparramado en el sofá.

El mayor de todos asintió, mirando a SeHun acomodar unas cuantas flores en la canasta.

Al cabo de unos minutos más, los tres chicos llegaron entre risas y gruñidos graciosos. El dúo escandaloso se perseguía entre sí, gruñendo y aullando cómicamente.

— ¡Escuchen, escuchen! — empezó BaekHyun, colgado del brazo de Yeol. —Nos dijeron que las bestias del bosque están enojadas.

— ¡Si, si! — apoyo el alto. —Dijeron que hace unas semanas, un tío extraño vino con la intención de poner una de sus casas del otro lado del bosque y como la gente del pueblo no quiso venderle nada, amenazo con traer hombres para que destruyeran los cultivos y la fruta.

—La gente le pidió que se fuera en paz o despertaría la ira de las bestias pero no le importo y trajo a unos hombres que destruyeron varios cultivos y que siguen intimidando a la gente.

— ¡Uno de ellos hasta puso los ojos en nuestro Lay! — exclamo BaekHyun abrazándose al chico que terminaba de poner la fruta en la mesa.

—Es cierto, era un tipejo horrible que no dejo de pedirle su número. —ChanYeol codeo a SeHun, quien tenía al ceño fruncido. —Tuve que interferir porque era demasiado hostigoso aunque Lay ya le había pedido detenerse.

— ¿Los amenazo o algo así? —MinSeok los miro preocupado.

— ¿Te lastimo? —pregunto SeHun tomando de la mano al azabache.

—No, solo se detuvo cuando vio que ChanYeol era más alto. —respondió con una sonrisa.

—Menos mal. — el mayor de todos regreso al sillón, separando a LuHan y JongDae en su pelea por el control remoto.

Cuando la tarde cayo, los chicos caminaban hacia el lago, provistos de una pequeña manta y canastas de comida y jugo. SeHun estaba molesto por el incidente de la mañana, mas consigo mismo por no haber estado ahí para cuidar de Lay aunque este pudiera hacerlo por sí mismo. El ojigris pareció notar su humor pues desde la mitad del camino no había soltado su mano.

LuHan fue el primero en arrojar su camisa para correr a nadar en el lago, seguido por JongDae y los otros dos escandalosos; MinSeok prefirió quedarse a probar algunos bocadillos junto a SeHun y Lay. El rubio seguía con su ceño fruncido a pesar de que su ofrenda estaba más que lista y que el chico que le gustaba seguía tomando su mano.

Durante su molestia, volvió a recordar su sueño y lo que había pasado en el junto con la aparición de Lay y su extraña petición. Con la canasta en sus piernas y su mano siendo sostenida por un aparentemente distraído Lay, se planteó con fuerza lo que el azabache de su sueño le dijo.

—"¿Quiero ser libre?" — susurro subiendo su mirada hacia Lay, quien dejo de jugar con su mano para mirarlo con lo que cree, fue un deje de miedo.

— ¿Qué dices?

—Nada, perdón, estaba pensando. —se disculpó rascando su mejilla. —Lamento no haber podido estar contigo cuando ese imbécil te molesto. — tomo la mano que estaba entrelazada con la suya y la masajeo con sus pulgares.

—No pasa nada, descuida. — el chico volvió a sonreírle, recargado su cabeza en su hombro. —Pero puedes recompensarlo, quedándote conmigo todo el día.

MinSeok se hizo el loco, desviando la mirada y mordiéndose los labios para evitar reírse al ver las rojas mejillas de ambos. Era lindo ver cuando se tomaban de las manos o hacían comentarios inocentes y se sonrojaban por ello. Conocía a SeHun desde pequeños y sabía que el chico, que también era agradable y lindo, le gustaba enserio y que también era correspondido. Solo esperaba que todo marchara bien para ambos.

Llegadas las 7 de la tarde era momento de irse, empezaba a hacer frio y ninguno quería enfermarse. Apresuraron a SeHun a dejar su canasta y aunque este recordó el pedido del Lay de su sueño, dejo la ofrenda al inicio del lago y regreso a tomar la mano del Lay real.

Caminaron súper lento, parloteando acerca de comidas y los chistes malos del hermano mayor de ChanYeol. Se distrajeron tanto que la noche termino de caer mientras caminaban y necesitaron usar las lámparas, importándoles poco que faltara cierto tramo para llegar a la cabaña.

SeHun caminaba junto a Lay, siguiéndoles las bromas a la Beagle line, ignorando que el azabache miraba a varios lados constantemente. LuHan reparo en el otro chino, preocupándole que parecía asustado.

—Lay, ¿Te sientes bien? — pregunto a su oído, tomándolo del codo.

—Sí, solo que el bosque de noche me da nervios. — respondió aceptando ir tomado de su brazo.

—Descuida, falta muy poco y— se calló abruptamente cuando escucharon el sonido de ramas crujiendo y un gruñido atemorizante. —Joder...

MinSeok llevo su mano hacia la pistola teaser en su cadera, buscando más de un lobo. —Tranquilos, tal vez si solo le arrojamos la carne que llevamos nos deje en paz.

ChanYeol protegió a BaekHyun con su cuerpo, asintiendo mientras JongDae sacaba la carne sobrante. SeHun de inmediato se paralizo, buscando la mano de Lay inconscientemente.

—Es el mismo lobo que me ataco hace meses...—jadeo mirando los ojos amarillos.

—Maldita sea, SeHun. Debió gustarle mucho tu sabor. —JongDae trago grueso, mirando de reojo a MinSeok en espera de la señal.

— ¿Listos? —el de mejillas rellenas se movió con cautela, quitándole la carne a JongDae para colocarse frente a todos. —Solo es uno así que en caso de que la carne falle, podre darle una descargar que nos dejara llegar hasta la cabaña.

—No te sueltes de mí, Lay. —SeHun apretó al azabache contra su cuerpo, tomando valor cuando sintió el temblor en el cuerpo del más bajo. —Te protegeré, descuida.

Lay miraba a lobo con una mueca de miedo y molestia, aferrándose más a SeHun.

— ¡Corran! —exclamo XiuMin arrojando el trozo de carne hacia el costado del lobo.

Todos empezaron a correr, volteando de vez en cuando para asegurarse de que el animal no los siguiera. SeHun quedo más que atemorizado cuando el lobo se quedó en el mismo lugar después de oler la carne y sentarse, mirándolos escapar. La actitud de la bestia era tan parecida a la ocasión cuando le ataco y las burlas del lobo de su sueño, lo empeoro más.

Cuando llegaron a la cabaña, MinSeok no tardo nada en tomar el teléfono y notificar al policía del pueblo sobre la aparición del animal salvaje. Los chicos se quedaron en la sala, consolándose entre sí para que el miedo y la tensión del momento pasaran. La atención fue más para SeHun gracias a que era el mismo lobo que lo ataco, porque solo a sus amigos les había contado la verdad del ataque y estos no lo querían ver asustado de nuevo.

SeHun estaba tranquilo y le preocupaba más el estado de Lay, quien no soltaba su mano ni despegaba su frente de su hombro. Una parte de él le recordó lo que le dijo en su sueño y cada reacción ajena se volvió una extraña conexión, como si hubiera sido real.

Aquella noche, Lay durmió abrazado a su pecho, susurrando palabras tranquilizadoras que aunque eran para él, sintió que en parte se las decía a sí mismo.

Aquella noche, el Lay de su sueño lo jalaba hasta cruzarlo por el camino de la cabaña mientras le gritaba varias cosas entre lágrimas; eso no lo asusto tanto como ver al lobo gris, porque estaba seguro que esa cosa mucho más grande y con un extraño aspecto humano era el lobo, se lanzaba hacia Lay y lo pescaba del cuello, arrastrándolo hacia la oscuridad del bosque.

Despertó con el terror impregnado en cada poro de su cuerpo, asustando al chico que seguía aferrado a su cuerpo, al que no tardo en inspeccionar hasta asegurarse de que no estaba herido.

—Tuve tanto miedo....mucho miedo de que te hubiera hecho daño. —susurro entre hipidos, abrazando fuertemente a Lay.

El azabache le correspondió el abrazo al cabo de un rato, calmándolo hasta que dejo de llorar y pudo volver a dormirse. —Está bien, estoy aquí contigo. — repitió entre caricias.

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Pasados dos días de su estancia, ninguno se atrevió a acercarse demasiado al lago aunque el guardabosque ya lo había revisado en busca del lobo, proclamando el bosque como nuevamente seguro. SeHun volvió a portarse como siempre junto a todos a excepción de Lay, quien parecía aun nervioso con lo sucedido.

LuHan continuamente le daba abrazos para calmarlo, JongDae le atoraba flores en el pelo mientras el ChanBaek le hacía coronas y MinSeok le cocinaba sopas y dulces. El chino menor les había dicho que tenía una cierta fobia a los lobos por cierto accidente, cosa que SeHun uso para admirarlo aún más; lo salvo aun con ese miedo a los lobos.

Más tarde, con un mejor ánimo, bajaron al pueblo para comprar algunos dulces, siendo sorprendidos por una fuerte y fría lluvia que los empapo enteros.

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Al tercer día de su estancia, SeHun despertó con tos y un poco de fiebre gracias a la lluvia. Como necesitaban medicina y verduras, los chicos a excepción de Lay, fueron al pueblo.

El rubio fue envuelto en mantas calientitas y obligado a descansar hasta que los chicos regresaran, Lay fue muy estricto con eso y le hizo terminarse la sopa de pollo. SeHun estaba rojo de la cara y con los ojos vidriosos pero eso no impidió que sonriera como idiota cada que el chino se acercaba a tocar su frente o apartarle los mechones de su frente. Su estado lo volvió más desvergonzado, haciéndole decirle a Lay cuántos cumplidos adorables se le ocurrieron.

—Tus ojos grises son tan hermosos como la luna.

—Tu hoyuelo me encanta, quiero morderlo.

—Tus ojitos dormilones son tan lindos.

—Lay, abrázame~

—Lay, vamos a casarnos y tener muchos bebés que amen la música y los bubble tea.

—Tus labios se ven tan rositas y besables, ¿Puedo robarte un beso? O mejor muchos. — entre otras cosas que solo hacían reír al ojigris. El rubio estaba adormilado después de que la fiebre le bajara y aprovechando su mejora temporal, se quedó dormido.

Todo estaba calmado; SeHun estaba mucho mejor, el ambiente era cálido y Lay estaba por quedarse dormido a su lado... hasta que cierto sonido lo hizo abrir los ojos de golpe.

Los aullidos de un lobo rompieron el ambiente, erizando a Lay.

De levanto con velocidad, caminando hasta la ventana para asomarse con cautela, apretando las cortinas en cuanto vio unos ojos amarillos sobresalir de los arbustos del bosque. Giro con preocupación hacia SeHun, temiendo que los aullidos del lobo lo despertaran.

—SeHun, eres el sol que no puedo admirar. —susurro acercándose para besar los labios del rubio, acariciando con delicadeza sus facciones. Las lágrimas se asomaron por sus ojos, dándose la vuelta antes de que se arrepintiera y se quedara a su lado.

Una vez afuera, el lobo gris espero sentado hasta que Lay se acercó hasta el y entonces se levantó, acercándose a olfatearlo.

—Si voy contigo, los dejaras en paz ¿Verdad? —pregunto mirando al lobo rodearle, este gruño bajo en respuesta. Lay asintió, siendo empujado de los muslos por la cabeza del animal. Dio una última mirada a la cabaña, despidiéndose silenciosamente de todos y todo.

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Cuando SeHun despertó, se sentó de golpe, estirando su brazo hacia la ventana. No tardo en levantarse y empezar a llamar a gritos a Lay. El sueño de esa ocasión había sido aterrador: en el veía al azabache siendo atacado por un lobo gris que a ratos desaparecía para dar paso a un hombre de cabello oscuro que le tomaba del cuello con burla, ignorando sus gritos. Tras unas palabras de Lay que no pudo escuchar, despertó sudado y pálido.

Los chicos llegaron al cabo de unos minutos, justo a tiempo para detenerlo de ir al bosque en pijama.

— ¡Suéltenme! ¡Se llevó a Lay! — gritaba siendo arrastrado hasta el interior de la casa.

— ¡SeHun, cálmate! —MinSeok le tomo de los hombros, tomándole de las mejillas para que lo mirara. — ¿Qué paso?

—El lobo gris no es normal, se llevó a Lay y le va a hacer daño ¡Debemos ir tras ellos! — exclamo intentando levantarse de nuevo, siendo regresado por la gran fuerza del mayor.

— ¿De que estas hablando? —LuHan enarco una ceja, mirando a varios lados. — ¿Dónde está Lay?

— ¡Les digo que se lo llevaron! —SeHun sacudió los brazos, totalmente alterado. —Deben creerme, ese lobo no es normal...

—SeHun, trata de calmarte ¿Ok? Buscaremos a Lay, seguro deliras de la fiebre. —XiuMin le acaricio las mejillas entre sonrisas, ahora seguro de que la fiebre había desaparecido.

— ¡No! Si no quieren ayudarme entonces lo hare solo—aparto a su hyung y camino hasta la cocina, tomando el cuchillo más grande y un bate.

— ¿Estás loco? —JongDae corrió detrás de él, viendo como tomaba una camisa que había dejado en el sillón y se la ponía, dejándose el pantalón de chándal con el que había dormido.

— ¡No puedes ir solo al bosque! —BaekHyun lo retuvo del brazo justo cuando ChanYeol bajaba rápidamente.

—No está por ningún lado. —informo mirando a todos. —Lay no está.

— ¡SeHun, espera! —LuHan tomo al rubio del otro brazo, mirando a los demás. —No sé ustedes pero iré con él por Lay, no podemos dejarlo solo. — y salió a paso veloz junto a SeHun, tomando la pequeña hacha del garaje.

— ¡Hyung! —exclamaron los tres restantes.

MinSeok se mordió los labios, agitando la cabeza. — ¡Bien! Iremos pero no todos. JongDae, tu iras al pueblo y notificaras a la policía.

— ¡Si, señor! —el de sonrisa felina hizo una seña de soldado y salió corriendo hacia el pueblo.

—Ustedes, tomen algún bate o spray pimienta y síganme. — el mayor corrió a la cocina, tomando los otros dos bates que usaban para jugar.

— ¡Si, señor! —exclamo la pareja.

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Ya llevaban caminando un rato, con el mismo sol a punto de ocultarse. LuHan empuñaba el cuchillo largo mientras SeHun apretaba el bate en sus manos y miraba a todos lados, esperando encontrar al chico de ojos grises. LuHan le había pedido que le contara su sueño, llevándose varias sorpresas al enterarse de muchas cosas que todos ignoraban sobre ambos, incluyendo el hecho de que fue Lay quien lo salvo del lobo que ahora se lo había llevado.

LuHan era listo, no solía creer en cualquier cosa e investigaba por su cuenta para hallar una respuesta y aunque la historia de SeHun le resultaba intrigante y fantasiosa, encontraba muchas respuestas a sus suposiciones. Desde la llegada de Lay, había notado que no era un chico común y corriente pero no podía explicarse porque y aunque se había pegado a él en más de una ocasión, Lay pareció entender que buscaba y no dejaba cabos sueltos.

Empezando por sus ojos, de un tono brillante de gris y plata, ojos que no había visto o encontrado. Pasando por su aura, tan llamativa y misteriosa que no todos parecían percibir, sin contar con lo poco que hablaba de su procedencia. Lo que más le llamo la atención fue la mirada que tenía cada que pisaba el bosque, el lago y sobre todo, el reconocimiento hacia el lobo gris, porque LuHan estaba seguro de que Lay reconoció al lobo y de ahí su inquietud.

Todo le sonaba como esas historias donde las personas podían cambiar de forma en bestias y coexistir con los humanos aunque en ocasiones estos los cazaban y terminaban en un ciclo de cazador- cazado- presa- cazador.

Si Lay resultaba ser una de esas criaturas y el lobo gris otra, ¿Estarían a salvo?

— ¡Es por allá! — exclamo SeHun agachado en el suelo. —Esta es su camisa y esta desgarrada...

—Joder...— LuHan se agacho a su lado, mirando como la prenda estaba rota y con manchas de sangre. —Parece como si se la hubieran roto por un zarpazo...— murmuro mirando como SeHun parecía aún más preocupado. —Lo encontraremos, vamos.

Corrieron hasta detenerse en el lago, buscando el bote para cruzar aun cuando necesitaban las luces de la linterna para guiarse entre la oscuridad. El mayor de los dos fue el que remo, temiendo que el estado de SeHun fuera más perjudicante que de ayuda en esa búsqueda.

Cuando llegaron al otro lado, encontraron el resto de la ropa de Lay en un peor estado que la camisa. LuHan empuño el hacha con fuerza, sorprendiéndose de que SeHun ya no temblara de miedo y que su mirada cambiara a una llena de fiereza.

—Encontrare a ese maldito y lo matare. — incluso su voz era más grave e intimidante.

— ¿Enserio? ¿Debería ponerme a llorar entonces? — se escuchó de parte de un hombre muy alto de cabello platinado y ojos amarillos, este estaba saliendo de entre los árboles. —Creí que los humanos habían entendido que no podían cruzar el lago.

— ¿Quién diablos eres? —pregunto LuHan mirando consternado al desnudo chico frente a ellos, quien le daba una muy mala espina.

— ¿Dónde está Lay? —gruño SeHun apretando el bate en sus manos.

El más alto sonrió tétricamente, levantando su muñeca y haciendo que ambos se pasmaran al ver la pulsera que JongDae le había dado a Lay la noche donde asaron malvaviscos.

—Los traidores merecen ser castigados ¿No? — respondió meneando la muñeca. —YiXing prefirió irse con seres tan débiles como ustedes y rechazarme, eso no se perdona. —el rostro del desconocido se descompuso, dejando ver colmillos anormales junto con un brillo intenso en sus ojos amarillos.

—Bastardo, ¿Qué le has hecho? —el rubio intentaba calmar su ira y desesperación, ignorando que Lay se había presentado con otro nombre.

—Nada nuevo, solo le deje en claro que es mío y que no puede dejarme. —el de ojos amarillos se encogió de hombros, mirando por encima de su hombro. —Quizás aún este respirando.

— ¡Maldito! —SeHun se arrojó hacia el hombre, intentando golpearlo con el bate, fallando en todos sus intentos.

El más alto solo se burlaba de los intentos de los chicos por herirlo, arrojándolos con una fuerza mayor hacia el suelo. LuHan, teniendo conocimientos básicos de artes marciales, era fácilmente reducido sin mucho esfuerzo mientras SeHun seguía intentando golpearlo con el hacha. El bate había sido roto con la mano del desconocido desde el inicio.

Ambos estaban agotados, heridos y asustados. No podían con aquel hombre y sus cuerpos ya no podían más.

SeHun seguía intentando aun cuando sus brazos y piernas estaban morados y su vista se borraba con mucha frecuencia. El hacha resulto demasiado pesada para él mas no se detuvo, haciendo un mayor esfuerzo por poder sostenerla.

—Por eso no lo entiendo, son tan débiles. —bufo el más alto, pateando a SeHun hasta hacerlo chocar con un árbol. —De todos modos, creen que si le llevo su cabeza, ¿Sera suficiente castigo?

LuHan se helo, intentando arrastrarse para evitar que ese hombre se acercara más a SeHun pero su cuerpo estaba tan herido que le dolía horrores moverse tan siquiera unos cuantos centímetros.

—S-SeHun... SeHun, despierta...— jadeaba desesperado. ¿Acaso iban a morir así?

El ojiamarillo alzo su brazo, mirando aterradoramente el cuello de SeHun, dispuesto a rompérselo con sus propias manos. LuHan estaba por gritar y justo cuando SeHun abría los ojos, un cuerpo más delgado y bajo se arrojó contra el más alto, tumbándolo con rudeza.

— ¡Te dije que te mataría si tocabas a mi SeHun! — gruño Lay, enterrando sus colmillos en el hombro del desconocido.

Ambos rodaron por el suelo, golpeándose y gruñéndose como animales mientras LuHan aprovecho para ir con SeHun y ayudarlo a sentarse, mirando con el corazón en la boca. YiXing estaba herido pero enfrentaba con fiereza al otro, alejándolo de ellos cada que quería acercarse.

— ¡No mereces nuestra sangre, traidor! — bramo el hombre de cabello plata, tirándose al suelo para transformarse en aquel lobo gris.

— ¡Tú eres el traidor! —YiXing también se tiro en cuatro, transformándose en el lobo negro.

SeHun se quedó pasmado al ver al chico que le gustaba, volverse en el lobo que lo había salvado. Ahora todo encajaba: el lobo siempre fue YiXing y este lo había salvado del hombre al que le estaba mordiendo la garganta con fuerza.

El lobo gris gimió adolorido cuando Lay se alejó de él, manteniéndolo abajo hasta que termino de desangrarse, muriendo al finalizar su transformación a hombre.

YiXing aulló, lamiendo un poco la mejilla del alto antes de acercarse con cautela hacia SeHun y LuHan.

El cobrizo fue el primero en tensarse, encogiéndose por instinto antes de que SeHun gateara hasta el lobo oscuro.

—YiXing, mira nada mas como estas...— sollozo abrazando por el cuello al lobo, acariciando el suave pelaje. —Tonto, ¡Siempre fuiste tú!

LuHan respiro más calmado, levantando la mirada para ver a sus amigos del otro lado, gritando y agitando las manos. Por lo mientras descansaría en lo que los tortolos se abrazaban y lloraban.

Cuando cruzaron el lago, SeHun camino con YiXing en brazos a pesar de sus propias heridas. XiuMin pego un grito agudo, revoloteando alrededor de los tres, inspeccionando sus heridas como toda una madre. ChanYeol y BaekHyun ayudaron a LuHan aunque este estaba en mucho mejor estado que los otros dos; SeHun temblaba pero podía caminar sin problemas mientras YiXing estaba inconsciente y con el cuerpo lleno de tierra y rasguños. Ver al rubio llevar a Lay era increíble dado que hasta hace nada estaba tan débil que no podía ni moverse pero había sacado fuerza para sostener al azabache y dejarlo hasta la cama.

El médico del pueblo llego poco después junto a JongDae y un policía, poniéndose al corriente con la historia a excepción del hecho de que se habían topado con hombres lobo. El medico reviso a SeHun primero a pedido de YiXing aunque el rubio pidió que fuera Lay quien recibiera atención primero; el azabache se veía mucho mejor a como lo encontraron y a la vista de los demás, solo estaba lleno de tierra y con una torcedura en el tobillo. LuHan solo presento un esguince en su muñeca y unos buenos rasguños en su cara.

SeHun cayó rendido después de que curaran sus heridas y de que YiXing se recostara junto a él después de ser revisado. Para cuando fueron a revisar al bosque, solo encontraron los rastros de la pelea.

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—Estaba pensando... ¿Puedes sacar solo tus orejas y tu cola?

YiXing giro con el tenedor en la mano. — ¿Por qué preguntas eso?

—Te verías adorable. — SeHun se encogió de hombros, sonriendo. —Además, me gustaría acariciarte.

—Eso sonó tan mal. —Lay siguió cocinando, riéndose bajito.

—Como si no estuvieras acostumbrado a que lo diga. —el rubio se levantó, abrazándolo de la cadera. —Hey, ¿Cuándo vendrá Tao?

—Dijo que mañana, aún estaban lidiando con el asunto de Kris.

SeHun torció los labios, pegándose más a Lay. —Ese maldito, mira que hacerte daño solo porque lo rechazaste.

Kris era el nombre de aquel lobo gris de ojos amarillos, mismo que había estado detrás de YiXing desde niños y que al recibir continuos rechazos por su parte, debido a que el azabache ya conocía de la existencia de su otra mitad, termino cazando a SeHun cuando tuvo oportunidad. El lobo gris no tolero que el mismo Lay se interpusiera en su intento de asesinar a SeHun y lo había amenazado con atacar a todos los chicos, incluyendo a SeHun, si no accedía a regresar con él al bosque.

El bosque; el TWO MOONS resulto ser el hogar de una manada de cambiaformas que vivían en paz junto a los humanos y que también tenían hogar en las grandes ciudades. YiXing había nacido en el bosque por la época en la que los padres de SeHun nacieron, viviendo tranquilamente, aprendiendo a coexistir con los humanos e intercambiando su protección por comida y agradecimientos en forma de regalos.

Desde pequeños se les decía que ellos podían enlazarse con su alma gemela independientemente si esta era de su misma naturaleza o fuera un humano. YiXing encontró su mitad junto a SeHun cuando este piso el otro lado del bosque por primera vez; en ese entonces, Lay tenía la apariencia de unos 15 años mientras SeHun 1. El lobo había estado mirándolo a la distancia desde entonces, demasiado inseguro como para mostrarse ante él aun cuando ya era mayor. Cuando Kris lo ataco, violando las reglas de su manada, Lay no dudo en ir a defenderlo y curarlo. Tao, el actual líder de la manada, se ofreció a encargarse de todo el asunto y no tomar represalias con ninguno con respecto a la muerte de Kris.

Tan pronto como se recuperaron, decidieron volver a la ciudad, ocultando el hecho de que vivieron una experiencia tipo Crepúsculo, Inframundo y quien sabe que más cosas. Los chicos tuvieron que enterarse de la verdad, medio desmayándose, bueno... solo ChanYeol se desmayó. YiXing fue aceptado y tratado de igual manera con las variantes de algunas bromas con respecto a su naturaleza.

SeHun, completamente decidido a declararse, fue sorprendido con un apasionado beso por parte del azabache y su posterior confesión. Hubiera sido una escena totalmente romántica de no ser por LuHan y JongDae, quienes irrumpieron con una cubeta de pollo y el flash de una cámara.

Ahora, unas dos semanas después, SeHun se había mudado con YiXing a su departamento. No fue muy difícil convencer a ChangKyun, quien también era un lobo, mientras JongIn, quien era humano, revoloteo alrededor de ambos durante minutos. La familia del rubio pego el grito en el cielo cuando su hijo mayor les presento a su novio, sin decir su verdadera naturaleza y tomo sus cosas para irse con su Lay.

Eran felices a su manera, aun cuando Lay restregaba su cara en su cuello cuando se ponía mimoso o quería impregnar su olor, cosa adorable si le preguntan a SeHun. Ambos adoraban dormir abrazados o con el rostro enterrado en el pecho del otro.

—Te vas a quedar conmigo toda la vida, ¿Verdad? —susurro YiXing sobre su pecho, la noche antes de la llegada de Tao.

—Pues claro, tenemos que ser dignos de que nos escriban un libro, nos hagan una novela gráfica, una película y muchos fanfic. — SeHun sonrió estrechándolo en sus brazos, completamente feliz.

—No te olvides de una canción. —Lay elevo su rostro para dejar un beso en la línea de su mandíbula antes de regresar a su lugar.

Aquella noche fue el inicio de muchas más donde solo debieron preocuparse porque Lay aprendiera el nombre de las calles, de que SeHun no quemara el agua y de que JongDae no los envenenara con sus creaciones culinarias. Puede que aun fueran al bosque y que aprovecharan su tranquilidad para pasear sin interrupciones.

Un lobo y un humano, que terminaron enlazándose en el eclipse lunar, viviendo y amándose contra toda adversidad.

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¡Muchas gracias por los 1k de seguidores! <3 me siento muy feliz y agradecido por todo su apoyo. No creí que llegaría tan lejos uwu espero seguir mejorando con el tiempo.

Como sabrán, el SeXing no fue mi primer pareja con la que inicie en wattpad o con la que enlace a YiXing (la primera fue SeBaek y el ChanLay) pero SeHun junto a Lay como pareja me llamo muchísimo la atención y termine amándolos <3 claro que escribo CB, KS, KX, KrAy, SB, CL y ChenLay pero el SX es mi verdadera pasión.

Espero les sigan gustando mis historias y me sigan apoyando. Lxs adoro <3

¡Que satansoo me lxs acompañe! Kkaebsong~