Sus manos son pequeñas. Están tirando de mi corbata. No entiendo qué quiere, miro hacia abajo y veo esas manos, otra vez, deshaciendo el nudo de mi corbata. Tienen manchas rojas y azules pero no consigo distinguir bien qué son porque todo está pasando muy rápido.

De repente su ropa ya no está. Me pregunto si ha llevado ropa en algún momento, o si ha estado desnuda todo este tiempo y acabo de darme cuenta. Miro hacia abajo y yo también estoy desnudo. Me estoy moviendo y ella está gimiendo. Se muerde el labio, grita. Mi mano acaricia su cabello rubio y empiezo a notar algo. Placer, mucho placer. Como si todo mi sistema nervioso se estuviera concentrando en mi miembro. Sigo moviéndome, no puedo parar, el placer sigue aumentando hasta que, de repente, estalla.

Abro los ojos de golpe y siento como si el placer muriera de golpe. Lo primero que noto es que estoy húmedo, húmedo en mi espalda por el sudor, pero hay más...

Levanto las sábanas pero no veo nada. Aún es de noche, todo está oscuro. Toco, y las sábanas están húmedas. Enciendo la lamparilla y veo una mancha en ellas, justo en la parte que estaba tapando mi entrepierna. Mis pantalones están igual de húmedos.

He eyaculado mientras dormía. Mientras soñaba. Y no estaba soñando con Beatrice, lo estaba haciendo con Alex.

Mierda, mierda, mierda.

¿Qué me está pasando? ¿Cuándo me he convertido en un animal que solo piensa en sexo?

Siento que mi cabeza va a estallar en cualquier momento, así que me levanto de la cama. Saco las sábanas y me quito los pantalones y los calzoncillos. Me meto en mi cuarto de baño e intento limpiarlo todo. Primero me limpio a mí y luego limpio todo lo que he manchado. Me siento avergonzado, no quiero que nadie vea esto, así que limpio y froto hasta que parece que ya no queda nada. Lo cuelgo del borde de la bañera para que se seque y pueda ponerlo a lavar sin levantar sospechas, y me siento en la cama.

Esto se me está yendo de las manos. Si no le hubiera hecho caso a Jude y no hubiera ido a esa estúpida fiesta ahora no me pasaría nada, estaría durmiendo tan tranquilo, sin nada de qué preocuparme. Sin pensar en Alex. Sin haber estado a punto de cometer la estupidez de besarla.

Beatrice no merece esto, y mis padres tampoco. Lo tengo todo, tengo una prometida y una buena familia, soy una persona respetable, tengo dinero y un futuro prometedor, y he estado a punto de mandarlo todo al traste solo por una tentación momentánea.

Me pongo unos calzoncillos limpios junto con los pantalones de mi otro pijama y me siento en la silla del escritorio. No creo que pueda volver a dormirme. Normalmente lo que me relaja es estudiar, pero al haber terminado el curso y estar esperando las notas ya no tengo nada que estudiar.

Son las cuatro de la madrugada, en cinco horas he quedado para desayunar con Beatrice y no sé cómo la voy a mirar a la cara.

Estoy preocupado, siento que este no soy yo, aunque confío en tenerlo todo controlado pronto. Solo necesito no volver a salir de fiesta con Jude y evitar a toda costa a esa Alex. Ni siquiera entiendo qué tiene ella de especial para que mi subconsciente haya querido incluirla en mis sueños.

Saco las revistas de medicina que guardo en en cajón de mi escritorio y me pongo a releer una de ellas, intentando distraerme y hacer que me vuelva el sueño.

Me despierto a las ocho sintiéndome cansado. Al final he conseguido volver a dormirme, pero el haber tenido un sueño interrumpido me siento cansado.

Lo primero que hago es poner las sábanas y los pantalones que se estaban secando en el cuarto de baño en el cesto de la ropa sucia. Luego me doy una ducha rápida para terminar de despertarme y me visto. Arreglo mi pelo con un poco de cera y examino mi barba. Ya sería hora de afeitarme, pero ahora mismo no tengo tiempo para eso.

Salgo de mi habitación y bajo al comedor. Lucille está preparando tostadas con huevo y queso, algo que puedo deducir por el olor. En el comedor están mis padres empezando sus días. Hoy es viernes, lo que significa que mi padre entra a trabajar un poco más tarde. Yo no tengo universidad porque ya he terminado los exámenes, esta noche salen las notas y estoy algo nervioso. Probablemente se deba a eso el sueño raro que he tenido, puros nervios.

—Buenos días —saludo a mis padres.

Mi madre me sonríe y mi padre levanta la mirada del periódico. Y me siento examinado. Como si supieran lo que pasó anoche. Como si supieran que casi beso a una chica que no era Beatrice y que pocas horas después he tenido un sueño erótico con ella.

Me tenso un poco.

—Buenos días —contestan al unísono, y cuando mi padre vuelve su atención al periódico me relajo un poco.

De todos modos, ¿cómo iban a saberlo? Son paranoias mías. Estoy enloqueciendo.

—¿No ibas a dormir a casa de Jude? —pregunta mi madre—. Has llegado bastante temprano.

—No me encontraba demasiado bien —miento.

—¿Tomaste drogas? —pregunta, analizándome con la mirada.

—No, madre —contesto—. Simplemente no era mi ambiente, no me sentía a gusto.

—Te ha llevado a una de esas fiestas con la música a mil y drogas por doquier, ¿verdad? Este Julian...

—No, no fue así —niego.

—Está bien —cede—. Recuerda que el domingo, después de ir a la iglesia, nos vamos a la casa de verano. ¿Lo tienes todo preparado?

—Sí —asiento.

Desde que nací, todos los veranos hemos ido a la casa de verano cerca de Cardiff, en Gales. Este año mi padre no podrá venir porque tiene trabajo, pero Danielle y su marido sí se unen. También vendrá Beatrice, y ahora mismo creo que es lo mejor que puedo hacer: pasar dos semanas lejos de Londres con mi familia y mi prometida para recordar quién soy, a quién amo y a quién le debo fidelidad y respeto.

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Helloooooooooo

He vuelto

Con la primera experiencia sexual de Axel JAJAJA pobre

Sé que ha quedado bastante corto, pero no voy a alargar más el capítulo para rellenarlo, tiene que ser así. Además, el próximo capítulo será largo, larguito. Coincidirá con un suceso que aparece en Esperando a Louis, ¿cuál creéis que será?

Aviso: para las que leéis See you at six, llevo bastante sin subir, pero no subiré nada hasta que la haya terminado. Porque prefiero subirlos todos bastante juntos que no uno cada mil semanas.

Aviso 2: La publicación en físico de Conociendo a Noah se ha pospuesto porque no tengo tiempo ni para respirar y porque tengo que hacerlo todo sola xd ya avisaré, aunque no se pospondrá demasiado, tranquilas.