—lo siento pero no puedo hacer nada. — KyuHyun torció los labios con pena, mirando al azabache que contenía las lágrimas. —el bastardo de WonHo tiene mucho más poder que yo aquí y siendo hijo del dueño, es intocable.

— ¡Pero no es justo! — exclamo el chico más bajo, apretando su delantal de trabajo. —s-solo porque lo rechace no tiene el derecho de hacerme esto...— más que tristeza, sus lágrimas eran de rabia.

—sabes que es un malnacido pero esto se sale de mis manos, el señor Shin no me escucho. — el alto castaño rodeo el delgado cuerpo con su brazo, intentando consolarlo. —lo siento mucho, YiXing.

El nombrado siguió llorando un poco más, dejándose llevar por la desesperación e impotencia del momento.

Kim YiXing tiene 17 años y está a cargo de sus dos hermanos menores, JongIn y JongDae de 10 y 13 años. Los Kim perdieron a su padre, su única familia, en un accidente cuando Lay, apodo de YiXing, tenía 10 años. Debido a que eran pobres y que el señor Kim los dejo con grandes deudas, YiXing se vio obligado a abandonar la escuela y empezar a trabajar desde esa edad.

De trabajo en trabajo, pagando deudas tras deudas, encargándose de que sus hermanos tuvieran educación y de que en caso de enfermarse, pudiera costearse las medicinas.

JongDae es un chico muy alegre y tiene muchos amigos, ayuda en la casa y cuida de JongIn cuando Lay está trabajando o no puede ir a recogerlo. Su sueño es ser un idol exitoso y ganar mucho dinero para que su adorado hermano unicornio, apodo dado por el mismo a Lay cuando tenía cinco, no trabaje más. Adora hacer bromas y su sonrisa es como la de un gato.

JongIn es un pequeño que ama el baile y cuyo desempeño en la academia de baile le ha ganado una beca completa. Es tranquilo y algo tímido; es muy obediente y admira a su hermano mayor por trabajar tan duro para que él y JongDae tengan educación.

Ambos hermanos entienden el sacrificio que YiXing tuvo que hacer al rechazar la beca que la Universidad de música de Seúl le había ofrecido, porque, ¡Que talento tenía su hermano! Su voz era preciosa, componía canciones y melodías magnificas, sabía tocar el piano y la guitarra, por no decir que era un genio para armonizar. Por lo mismo, se esforzaban para ser muy buenos estudiantes y ser responsables, en un intento de liberar la carga de Lay y hacerlo sentir orgulloso.

Pero aquella tarde, cuando vieron entrar a su hermano más temprano de lo usual, con los ojos rojos y los hombros caídos, entendieron que algo muy malo le había pasado.

— ¡Hyung, bienvenido! — el pequeño JongIn corrió a abrazar de las piernas a su hermano, más que contento de poder verlo en la tarde.

—hey, bro. Llegaste más temprano. — Chen salió de la cocina con una manzana en las manos. No tardo en notar el aspecto de su hyung, borrándole la sonrisa.

—hola, nini, Chen. ¿Han comido? ¿Les fue bien? — el azabache despeino el cabello del mas morenito de la familia y dejo que le ayudara a quitar el abrigo y la bolsa.

—Dae hyung preparo sushi y me saque un 90 en mi prueba. — el más pequeño le enseño el examen y recibió un fuerte abrazo de Lay, haciéndolo reír.

— ¡Eso es maravilloso, nini! — el hermano unicornio siguió mimando al menor un par de segundos más antes de darle palmadas en los hombros. —hyung está muy cansado, me iré a dormir ¿ok?

JongDae salto y se acercó. — ¿No vas a cenar? ¿O quieres beber algo?

Lay solo se quedó de perfil y les sonrió lo más normal que pudo. —no, gracias. Descansen, los amo. — movió su mano débilmente y entro a la habitación más pequeña.

JongIn tomo el brazo de Chen y lo meneo. — ¿hyung se siente mal?

El castaño le sonrió. —no, solo está muy cansado. —anda, termina tu tarea para que cenemos. — tras el brinco que dio el moreno hacia la cocina, JongDae camino hacia la sala para terminar su propia tarea. Ya preguntaría más tarde.

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Un guapo y alto castaño oscuro se encontraba meneando el pie con impaciencia por debajo de la mesa. Su rostro no mostraba ninguna expresión pero estaba más que molesto.

—por eso, cariño. Tu padre y yo estamos seguro de que esta vez es la indicada. — una hermosa y bajita mujer meneaba las cuidadas manos mientras hablaba toda emocionada. —tienes que conocerla, es hermosa y muy educada.

—madre, ya te dije que no voy a casarme con quienes ustedes elijan.

La mujer borro su sonrisa y sus rosados labios se torció en desacuerdo. —SeHun. — el hombre volteo los ojos sabiendo que el sermón empezaría. —nosotros solo nos preocupamos por tu futuro, te queremos ver felizmente casado y siendo un padre joven.

—yo sabré cuando casarme y tener hijos, gracias.

—ya tienes 23 y ninguna novia. —la mujer acomodo los inexistentes mechones sueltos de su chongo y miro a su hijo. —y ni me menciones a los donceles, de esos no me fio.

—que lastima. — SeHun suspiro para contener su lengua.

—no estaré feliz hasta verte casado y con hijos, solo eso te falta para ser un hombre exitoso. — la elegante mujer saco unas hojas de su bolso y se las deslizo a su hijo. —por eso me tome la libertad de buscar a las solteras de mejor familia y contactar con una.

— ¿Qué hiciste qué? — SeHun dejo de recargar su mejilla en el dorso de su mano y se tensó de nuevo.

—Lalisa es una preciosa chica y viene de una familia de doctores, será buena esposa. — la mujer le paso una foto de una rubia de bonita sonrisa y se volvió a sentar con elegancia.

—no iré a ninguna cita, con un carajo.

—cuida esa lengua. — la mujer alzo su índice y le apunto el pecho. —si no te casas en este año, tu padre te quitara la empresa y deberás trabajar por tu cuenta.

—debes estar bromeando. — el ceño del joven le deformo el rostro.

—no es ninguna broma, JungSoo y yo estamos siendo muy serios. — la mujer se levantó y se colgó el costoso bolso al hombro. —tienes este año o serás un desempleado más y perderás el privilegiado apellido Oh. — le dio un beso en la mejilla aprovechando que SeHun seguía sentado y se marchó con toda elegancia.

— ¡Mierda! —grito dándole un golpe a la mesa.

No era justo, había trabajado y estudiado tanto para tomar el cargo de su padre, el adinerado y famoso Oh JungSoo y ahora venían con eso de que debía casarse y tener hijos. ¿Qué acaso seguían en la edad media?

Él no amaba a nadie, ni siquiera le gustaban las mujeres y ahora hasta le organizaban citas para encontrar esposa. Era un total asco.

Chasqueo la lengua mientras sacaba su móvil del bolsillo y tecleaba. —dragón, ¿estas libre?

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— ¡Es un bastardo imbécil! — exclamo un castaño dando un manotazo a la mesa. — ¿Cómo pudo hacer algo tan bajo?

—perdí mi trabajo por su culpa y se acerca la renta. —YiXing suspiro con su bubble tea en las manos aun sin tomar. —no sé qué hacer, Chan.

—no te preocupes, cariño. ¡Para eso esta I.M! — el castaño se señaló a sí mismo y le acaricio el cabello. —donde trabaja MinHyuk están solicitando ayuda y ya que es mi amigo, puedo hablarle de ti y ayudarte.

— ¿enserio? — a Lay le brillaron los ojos.

— ¿Qué no recuerdas que te jure que te cuidaría desde que me diste de esos panques que hiciste? — el otro muchacho, de la misma estatura, lo recibió en un abrazo. —ahora vamos para que lo conozcas.

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—entonces, ¿Pronto te veré decir "si acepto" y "mocoso, respeta a tu padre"? —estallo en carcajadas un alto rubio.

—cállate, imbécil. —SeHun le arrojo su servilleta y le dio otro sorbo a su bubble tea. —no quiero perder la empresa y para eso debo buscar un doncel que finja ser mi esposo y tenga a mis hijos.

—mmm pues no creo que sea difícil, desde críos que tienes a mujeres y hombres babeando tu camino y aparte tienes dinero.

—no quiero un interesado, debe ser perfecto.

— ¿Qué es perfecto para ti? — el rubio mordisqueo la magdalena pareciendo bulldog, nada que ver con el exitoso médico que era.

—delgado, de ojos y sonrisa bonita, piel blanca e inteligente y que me obedezca. —SeHun le dio un manotazo a YiFan al ver que iba a reírse de nuevo. — ¿Algún problema?

—pides imposible, eres insoportable. —el más alto tomo una servilleta y se limpió los bigotes de crema.

—pero soy guapo, habrá alguien que caiga por eso.

—asqueroso egocéntrico. — YiFan se rio y volvió a morder la magdalena.

SeHun sonrió de lado y levanto la mano, agitándola. —disculpa. —llamo al mesero que estaba de perfil.

— ¿si, que se le ofrece? — el muchacho era precioso, ambos hombres se le quedaron mirando dado que su sonrisa marcaba un adorable hoyuelo.

—q-quiero otro bubble tea de chocolate y una magdalena de fresa. —pidió sonriéndole como solía hacer cuando coqueteaba.

—enseguida. — Lay inclino su cabeza y ando hacia la barra.

—mira nada más que piernas. —YiFan silbo, ganándose un puntapié de SeHun.

—es una muy buena opción, si no tiene compromiso. —el castaño se burló del gesto de dolor del mayor y siguió disfrutando de su comida.

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—por favor, solo espéreme un poco más. —Lay junto sus manos a la señora Jung, quien le exigía que le pagara la renta atrasada.

—ya lo he esperado mucho tiempo, joven Kim, debe pagarme o deberá irse. — la dueña estaba cruzada de brazos, mirándolo con molestia.

—por favor, se lo ruego, espéreme un poco más. — se inclina casi hasta la mitad de su cuerpo, esperando que se apiadara.

—tiene una semana para pagarme TODO o se ira. — la señora Jung se dio la vuelta y bajo por las escaleras.

YiXing se dejó caer con nuevas lágrimas. —aiyoo wei, ¿Qué hare ahora?

Lay debía tres meses de renta debido a que JongDae y JongIn necesitaban tenis nuevos y ropa. Él podía aguantar con la misma ropa otro año pero quería que sus hermanos lucieran ropa decente. Si no pagaba los iban a desalojar y ni siquiera tenía la mitad del dinero, la arpía no lo iba a esperar.

Su paga como mesero era buena pero apenas alcanzaba para la comida, algunos gustos para sus hermanos y materiales para sus escuelas. Estaba en problemas y no quería pedirle dinero a ChangKyun, su mejor amigo.

No encontraría solución lamentándose, debía salir a la calle y buscar otro trabajo.

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Camino por las calles de Gangnam buscando cualquier anuncio que pudiera ayudarle con sus deudas. Conforme llego a la zona donde estaba su antiguo trabajo, arrugo la cara al ver a cierto peliblanco con rayos azules.

—mira nada más quien está aquí. — WonHo se relamió los labios y se le acerco con toda su chulería. — ¿vienes a disculparte por rechazarme y a pedirme ser mío?

YiXing gruño haciendo una mueca de desagrado. —jamás aceptaría ser tuyo.

El chico de labios carnosos sonrió de lado. —yo podría ayudarte con tus deudas.

El menor levanto la mirada sorprendido. — ¿C-Como lo sabes?

—se mucho del chico que me gusta. — acaricio una de las mejillas de Lay, acercando su rostro. —puedo pagar todas tus deudas, solo tienes que decir que serás mío.

El azabache se mordió los labios. Shin HoSeok era hijo de un rico empresario y nadaba en dinero gracias a sus padres. Era cierto que podía pagarles todo pero sabía bien que HoSeok no estaba enamorado de él, solo quería su cuerpo.

Pero, realmente necesitaba el dinero. No quería que JongDae y JongIn sufrieran el hambre que a veces tenía que aguantarse para que ellos dos comieran, la pena por vestir ropa vieja o fingir que su celular se había roto para no decir que no tenía uno, mucho menos quería que dejaran lo que amaban por no tener dinero... igual que él.

—yo...

— ¡Por fin te encuentro! — exclamo un alto castaño que vestía como todo empresario exitoso. —cielo, no me espantes así. — el desconocido separo a WonHo con el hombro y tomo la cintura de YiXing. — ¿sucede algo, tesoro?

— ¿Quién carajo eres tú? — bufo WonHo frunciendo el ceño.

—su novio, ¿Y tú eres el idiota que lo está molestando? — respondió el castaño con chulería.

El peliblanco abrió la boca con sorpresa, alternando su mirada del desconocido a YiXing. — ¿es cierto? — El azabache dejo de mirar al recién llegado para asentir. WonHo se marchó dando una maldición en chino.

—joder, que tipo tan molesto. ¿Cómo lo soportas? — el castaño lo llevo al interior del local de la esquina y se arregló la corbata. Pidió dos bubble tea, llamando la atención de Lay ya que era una bebida que tomaban más los niños y chicos de su edad.

—p-perdón pero... ¿Quién eres? —YiXing apenas y salía de la impresión. —digo, muchas gracias por la ayuda pero ¿Quién eres y porque me ayudaste?

El más alto le sonrió, haciéndolo sonrojar por su atractivo. —me llamo Oh SeHun y tengo una prepuesta especial para ti.

— ¿Propuesta? — de inmediato lo miro con duda, ¿Acaso era otro WonHo?

—quiero que finjas ser mi novio, prometido y que tengas a mi hijo. — soltó mientras bebía del bubble tea.

— ¿eh?

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Añio! Me reporto desde la comodidad de una mantita calientita y el calor de mi adorado gato.

Esta vez les traigo un fic medianamente largo que tenía planeado pero que no subía por no saber cómo hacer la portada (soy un asco haciendo portadas </3) y ahora que estoy por concluir dos historias más, no me resistí a subirlo.

Tendrá m-preg como pudieron leer, espero les guste como lo desarrolle.

Decidí incluir a mis niños de Monsta X porque si (enserio no tengo razón fija) es uno de mis grupos favoritos después de EXO y BTS.

Espero apoyen este proyecto <3 se ganaran el cielo.

¡Tengan buena noche y buen inicio de semana!

¡Fighting!