CONNOR.

Dos meses después.

Dejo que el agua de la ducha caiga sobre mi cabeza, cierro mis ojos y la sonrisa de Ari es lo que miro en mis recuerdos, aprieto mis manos en puños y recargo mis manos en la pared, la impotencia y el dolor carcome mi alma poco a poco, cuanto más días pasan convirtiéndose en meses desde la última vez que la vi en su graduación me voy convirtiendo en alguien sin sentimientos.

El estar alejado de ella dejo un vacío tan grande en mí que no puede ser llenado. Frunzo mi ceño al sentir unas manos recorrer mi espalda con suavidad, abro mis ojos de golpe y volteo rápidamente, la ira me golpea de inmediato al observar a la pelirroja sonreír ampliamente.

-¿Qué haces aquí?- Gruño entre dientes, cierro la llave y salgo rápidamente, tomo una toalla y la envuelvo en mi cintura cubriéndome.

Sofía se encuentra desnuda, aparto mi mirada e intento controlar la ira que quema en mi interior, un silbido en la puerta de las duchas para hombres del gimnasio llama mi atención, veo a uno de los boxeadores novatos sonreír mientras mira a Sofía, alza sus manos y me mira.

-Lo siento hermano, no sabía que estaba ocupados, me duchare en casa- Dice con diversión, mira por última vez a Sofía y niega sonriendo.

Aprieto mi mandíbula y paso una mano por mi rostro con frustración, escucho pasos, abro mis ojos y observo a Sofía mirarme, se encuentra cerca, ella sonríe y eleva su mano para acariciar mi mejilla, tomo su muleca y la detengo.

-Debes parar Sofía, te he dicho que no quiero estar con nadie- Advierto de forma seria, la molestia no para de aumentar.

-No tienes novia, se eso Connor, se todo sobre ti mi padre ahora es tu entrenador lo recuerda?- Dice con superioridad, la miro unos segundos y aparto mi mirada.

-Sera mejor que dejes cualquier idea que tengas, tengo a alguien que me importa Sofía- Murmuro recordando a Ari con melancolía.

-Puedo hacer que olvides- Susurra acercándose más.

Frunzo mi ceño, coloco mis manos en sus hombros y la separo, su rostro se trasforma en una expresión seria y un poco de enojo nubla su mirada.

-No vuelvas hacer lo que has hecho Sofía, no le diré a tu padre esta vez pero si lo vuelves hacer tenlo por seguro de que se lo diré, conozco al entrenador y sé que no le gustara-

Me alejo un poco tomo otra toalla y la dejo en sus manos, ella me mira enojada, no espero a que diga nada y salgo de las duchas directo a los camerinos, un leve dolor de cabeza se instala en mí, me acerco a el casillero donde tengo mi bolsa de entrenamiento, tomo la ropa y la coloco en mi hombro.

Miro mi móvil, dudo unos segundos, lo tomo y marco al buzón de voz, observo los pocos mensajes de voz enviados por Ari hace un mes, el dolor golpea mi pecho, poco a poco ella debe estar rehaciendo su vida.

Los mensajes aun no escuchados se encuentran en mi móvil, no los he escuchado en ningún momento, porque sé que podría volver y arruinar todo, acaricio la pantalla con mi pulgar.

-Escuchare uno- Susurro, el pulso de mi corazón aumenta de golpe, necesito escuchar su voz una vez más.

Recargo mi cabeza en el casillero y escucho uno de los mensajes de voz, cuando su voz se logra escuchar todo a mi alrededor se detiene, el sonido de su dolor llega a mis oídos.

-Hola...sé que prometí que no te llamaría, pero aquí estoy- Un leve silencio hace que la desesperación me llene poco a poco –Pensé que lo nuestro seria para siempre, pero me equivoque...no solo puedes regresar?...no he dormido bien sabes, creo que me acostumbre a ti, recuerdas como todo era perfecto?, a veces sueño que nada ha cambiado pero luego despierto y tú no estás...-

Cuando el mensaje termina me doy cuenta de que uno no es suficiente. Necesito escuchar por un largo rato su dulce voz y tratar de sanar el dolor que eso provoca en mí.

Mientras escucho el siguiente audio abro mi casillero, tomo una caja y observo la pulsera que se encuentra dentro, unas pequeñas letras que dicen te amo la adornan, la acaricio levemente y la guardo, hoy es su cumpleaños, otra maldita fecha importante en su vida y no estoy con ella.

Recuerdo los planes que habíamos creado juntos para esta fecha.

Esta vez el miedo es el que se instala en mi pecho, el miedo de que ella se olvide de mi para siempre, sin embargo eso es lo que pasaría aunque no me fuera, ella tarde o temprano se daría cuenta que no valgo la jodida pena.

El ruido de mi móvil la mi atención, lo miro y leo el nombre de mi hermana en la pantalla, frunzo mi ceño, ella está enfadada conmigo, es extraño que llame, deslizo mi dedo en la pantalla y lo llevo a mi oído, antes de poder decir algo su voz temblorosa me interrumpe.

-Trae tu jodido culo devuelta, papá tuvo un paro cardiaco esta en urgencia en el hospital, mamá está hecha un desastre, te necesitamos Connor, más te vale estar lo más rápido posible, toma algún vuelo ya mismo para acá-

Es todo lo que dice para luego cortar la llamada, parpadeo un par de veces y proceso la información.

-Maldición- Gruño y comienzo a vestirme rápidamente, debo volver, no por mi padre, debo estar con mi hermana y mi madre.

...

                                                                                   ARI

Mi hermano me abraza mientras esperamos noticias sobre el padre de Lennox, miro a la madre de Connor sentada en la banca frente a mí, ella luce cansada y con sus ojos rojizos por las lágrimas, Lennox a su lado se encuentra con Maxim en brazos el cual se encuentra dormido, Alex toma la mano de Lennox y le da leves caricias.

-Cariño deberían regresar a casa y descansar, es tarde- Dice Rosie con voz ronca mientras me mira sin ese brillo especial en sus ojos.

-No es necesario, quiero estar con ustedes- Susurro con suavidad, ella sonríe débilmente y sus ojos se cristalizan.

-Gracias- Murmura con la voz quebrada, niego y sonrío ante su tierna mirada.

Me remuevo en el regazo de mi hermano y recargo mi cabeza en su pecho, suspiro y mi hermano aclara su garganta.

-¿Sabes que el vendrá cierto?, escuche que Lennox lo llamo- Dice mi hermano con desconfianza en su tono de voz, mi cuerpo se tensa al saber exactamente a quien se refiere.

-Lo sé- Susurro y guardo silencio – ¿Qué hora es?-

-Son más de la una de la mañana- Avisa Sean luego de mirar la hora en su reloj de mano.

–Nos iremos antes de que el venga, solo necesito saber que su padre está bien, Rosie es una buena mujer, necesita apoyo- Digo segura.

Luego de uno minutos el estómago de mi hermano suena, elevo mi mirada y lo observo, el rueda sus ojos y sonríe.

-Soy un chico grande Ari, como mucha comida y no he comido nada en varias horas- Explica como si fuera obvio, suspiro y me levanto de su regazo.

-Iré a buscar algo de comer y bebidas para todos- Digo sonriendo, el eleva sus hombros y asiente, recarga su cabeza en la paredes y cierra sus ojos.

Doy la vuelta y camino por el pasillo, doblo a la esquina y llego al ascensor, bajo hasta el primer piso, estoy segura de que vi una máquina de dulces, necesito algunos para mantenerme despierta.

Al llegar al primer piso me dirijo rápidamente a la máquina, veo los distintos tipos y termino por elegir unos gomitas de fresa, una vez que los tengo los guardo en mi chaqueta, camino hasta la cafetería del hospital, esta se encuentra siempre abierta por los que hacen guardia nocturna, pido unos cafés para todos, para llevar, espero paciente, cuando entregan en una bandeja pago.

Camino con cuidado, sonrío al observar la bandeja, al llegar nuevamente al ascensor observo como este se va a cerrar, al parecer alguien está dentro.

-Por favor espere un momento, necesito entrar- Digo fuerte con la esperanza de que detengan las puertas del ascensor y estas no se cierren.

Mientras más cerca estoy sonrío porque las puertas se vuelven a abrir, entre abro mis labios para dar gracias pero las palabras mueren en mi boca cuando veo de quien se trata, detengo mis pasos y sin darme cuenta la bandeja se suelta de mis manos, todo parece ir en cámara lenta cuando la bandeja cae al suelo y todo se derrama.

Pero mi mirada no deja a esa tormentosa tan conocida, mi cuerpo se congela sin saber cómo reaccionar.

Esta aquí, frente a mí, Connor se encuentra frente a mí y su mirada parece conmocionada al igual que la mía.

-Ari- Es todo lo que sale de sus labios y es más de lo que soy capaz de hablar en este momento.

Parpadeo un par de veces, bajo mi mirada y observo todo el desastre, la pena vuelve a mí, vergüenza por mostrar mi sorpresa, entre abro mis labios pero no logro decir nada, simplemente doy la vuelta para regresar a la cafetería, conseguir unos cafés nuevos y luego salir lo más pronto posible con Sean de este lugar.

Me estremezco al escuchar sus pasos rápidos detrás de mí, pero un escalofrío mortal me recorre cuando siento su mano en mi hombro deteniéndome.

-Ari- Dice nuevamente, esta vez de forma distinta hay un cambio en su voz.

-Hola Connor- Es lo único que logro decir, me atrevo a mirar sus ojos, este me mira como si quisiera leer mis pensamientos y saber lo que siento en este momento.

-Quiero hablar contigo- Es lo que dice de forma rápida, su mirada cambia a una rota, aprieto mis labios tomo su mano de mi hombro y la retiro.

-Si estoy aquí es por tu madre y Lennox, lamento haber hecho que nos encontráramos, me iré lo más pronto posible- Digo con voz neutra, su ceño se frunce y me parece ver el dolor en ellos, algo que no puede ser posible ya que esto es lo que él quería al dejarme.

-Ari...no quiero que hagas eso, no es por eso que quiero hablar contigo- Añade dolido, en sus ojos brilla el arrepentimiento y tristeza.

Mi corazón palpita con fuerza, aprieto mis manos en puños y esta vez el enfado es lo único que siento.

-No tenemos nada de qué hablar eso lo dejaste claro, me dejaste!- Digo entre dientes sin poder evitar más ese dolor con el que he cargado.

Él baja su mirada, lleva su mano a su cabello y lo despeina, ruedo mis ojos y trato de seguir mi camino pero su mano toma mi brazo y nuevamente me detiene.

-Debía hacerlo- Responde en un susurro.

Aprieto mis manos en puños y lo miro enfadada y triste, dolida por su abandono, lo miro fijamente.

-No! Estábamos bien, tu solo huiste como un cobarde- Me atrevo a decirle –Muchas veces me pediste que no te dejara y al final fuiste tú el que termino lo que había entre nosotros-

-Lo mejor era alejarme- Murmura con melancolía, contengo mis emociones y lucho contra las lágrimas acumuladas en mis ojos.

-Elegiste dejarme, no era una opción Connor, tu tomaste esa decisión y ni siquiera te despediste, no fuese capaz de decirme adiós- Mi voz temblorosa falla en lo último.

-Sabes que no soy bueno para ti- Dice frunciendo su ceño y dando unos pasos hasta quedar unos centímetros de mi rostro.

-Soy capaz de elegir Connor, y te elegí a ti ¿recuerdas?-

-Crees que dejarte no me mato también, me duele Ari, he dejado de ser humano estos últimos meses, solo estoy sobreviviendo, dejaste un vacío grande aquí- Murmura en voz baja mientras señala su pecho –Prácticamente deje de vivir cuando me fui pero lo hice por ti, para protegerte-

-¿protegerme?-

-De mí, es lo único bueno que podía hacer por ti, esto pasaría Ari, lo nuestro terminaría de todos modos en el momento en que te dieras cuanta lo malo que soy para ti-

Mis ojos se llenan de lágrimas, pero estas no salen, simplemente estoy cansada de esto, cansada de luchar contra el dolor, lo miro unos segundos en silencio, sus ojos tormenta me miran con derrota, suspiro dándome por vencía y doy la vuelta para alejarme, Connor camina rápidamente y se atraviesa en mi camino impidiendo que me aleje.

-Espera- Dice apresuradamente, cruzo mis brazos y me niego a mirarlo, se terminó, no puedo seguir con esto.

-Sabes Connor- Murmuro con voz cansada –Nunca estuve disconforme con lo que teníamos, no te pedí que me protegieras, nunca te pedí nada, solo esperaba que me amaras incondicionalmente, solo eso, y ahora me doy cuenta que te has ido por que no puedes hacerlo- Termino de decir débilmente, paso por su lado y me alejo, esta vez no me detiene.

Paso mi mano por mi mejilla y de forma automática quito el rastro de mi lágrima traicionera.

...

                                                                                      CONNOR

Como un completo hijo de puta, así me sentía, la derrota y tristeza en la voz de Ari es lo único que me atormenta, al llegar a la sala Sean es el primero en verme, este se levanta de inmediato y frunce su ceño, puedo ver la alarma en sus ojos, da un vistazo detrás mío y luego se enfoca en mí.

Es cuestión de segundos para que se acerca rápidamente hasta mí, su expresión es de odio y sé que la merezco.

-¿Ella te ha visto?- Pregunta directamente, mi cuerpo se tensa y asiento, observo como Sean maldice y de inmediato pasa empujándome por mi lado, ira donde ella.

Suspiro y me acerco a pasos lento hasta mi madre y mi hermana, Alex asiente al verme y sonríe levemente, Lennox abre sus ojos y me miran de forma curiosa, mi madre se levanta y de forma inesperada me envuelve en un abrazo.

-Hijo, tu padre estará feliz de verte cuando se recupere- Murmura mi madre con voz temblorosa, cierro mis ojos y correspondo a su abrazo.

-Estoy aquí por ti mamá, no pienso entrar a verlo- Aseguro con voz suave.

Mi madre se elija un poco, eleva su mano y acaricia mi mejilla pero es inevitable no sentir tristeza al ver su mirada cansada y llena de dolor.

-Estoy contenta con el hecho de que hayas venido- Dice con sinceridad en su voz, sonrío levemente.

Me acerco a Lennox y acaricio el cabello del pequeño Maxim dormido, miro a mi hermana esta parece que aún se encuentra enfadada, me siento en una de las bancas a esperar noticias, luego de algunos minutos los pasos en el pasillo llaman mi atención, esta vez es Sean quien se acerca con la bandeja con bebidas, miro a sus espaldas pero no encuentro a nadie.

Ella no volverá, Sean le dice algo a mi madre en voz baja, esta sonríe levemente y asiente, Sean se retira, miro a mi madre, esta me mira con algo de tristeza.

Recargo mis codos en mis rodillas y suspiro, el verla solo hizo más grande el dolor, salgo de mis pensamientos de golpe cuando mi madre se sienta a mi lado y toma una de mis manos dando leves caricias.

-Ve por ella- Murmura.

Frunzo mi ceño y mantengo mi mirada en su delicada mano, sonrío levemente sin humor y niego.

-Ella merece algo mejor mamá- Susurro, el silencio se hace presente por unos segundos, su mano da un ligero apretón a mi mano.

-Ella te merece a ti, ¿sabes porque?- Pregunta de forma maternal, me mantengo en silencio –Porque tú la amas más que nadie- Responde segura.

....

Una semana después.

Salgo a el balcón y miro mi móvil, le con detenimiento el mensaje en la pantalla, el mismo que mi hermana ha estado reenviando desde que volví.

Papá se está recuperando, deberías venir y verlo, él quiere hablar contigo. L.

Como todos los días ignoro el mensaje, me siento en la silla y observo las luces de los edificios, el ruido de la ciudad es lo único que escucho, mi móvil vibra emitiendo el peculiar sonido que indica una llamada entrante, elevo mi ceja al ver el nombre de mi hermana.

-¿Qué pasa?- Contento sin interés, escucho como ella maldice, ruedo mis ojos y espero.

-Escúchame estúpido, no sé porque te estoy diciendo esto, no lo mereces ni un poco-

-Ve al punto Lennox- Interrumpo cansado, ella bufa y aclara su garganta.

-Ari esta en New York- Dice con simpleza, frunzo mi ceño y me acomodo en la silla ahora confundido -¿Recuerdas que su madre se casaba?, habían pospuesto la boda, es mañana- Escucho como gruñe y se detiene algunos segundos.

-¿Qué sucede?- Pregunto un poco preocupado.

-No debería decirte esto pero, maldición eres mí jodido hermano y quiero que seas feliz- Dice con un poco de enfado, ruedo mis ojos -¿Sabes porque Ari dejo de vivir con su mamá?-

-No- Respondo confundido.

-Escucha, esto es realmente jodido, su padrastro intento abusar de ella- En cuanto escucho las palabras de Lennox me tenso y me levanto –Ella esta con Sean en un hotel porque no confían en ese bastardo, pero mañana que lo vea en la boda será un momento incómodo para ella- Explica con tristeza –Ella confió en mi Connor, ella esta realmente asustada de volverlo a ver, ella te necesita en ese momento- Añada con sinceridad, pienso unos segundos.

-Debo colgar Lennox- Murmuro entre dientes.

-¿Iras con ella cierto?- Pregunta dudosa.

-He luchado mucho contra lo que quiero Le, creo que es momento de dejar de luchas e ir por ella- Digo decidido.

Ari me necesita, debo estar con ella, es absurdo hacernos daños.

                                                                                 ARI.

Mis manos tiemblan levemente al ver de nuevo a ese hombre, mi madre sonríe elevando su barbilla con altanería, Sean se encuentra lejos, mi madre lo envió por una de sus amigas así que debió salir.

Mathew, se acerca y sonríe con arrogancia, lleva su ropa impecable, el lugar se encuentra perfectamente decorado, aprieto los lados de la falda de mi vestido y me tenso al ver como se acerca hasta mí.

-¿No me vas a felicitar?- Pregunta con una sonrisa fingida, aprieto mis labios, su mirada me recorre, siento la repulsión y como las náuseas de apoderan de mí, volteo mi mirada evitándolo –No me gusta que me ignoren, maldita arrogante- Su mano toma mi babilla, y sorprendida doy unos pasos hacia atrás y lo observo asustada, busco a mi madre con la mirada, ella se encuentra de espaldas hablando con otras personas.

-Aléjate de mí- Digo entre dientes, observo como su sonrisa se amplia y eleva sus cejas.

-Eres una pequeña mocosa, sabes que cumpliré con lo que prometí, solo es cuestión de tiempo- Amenaza en voz baja, me estremezco y mi corazón golpea con fuerza.

Doy un salto cuando un brazo envuelve mi cintura, busco al dueño y abro mis ojos sorprendida al ver de quien se trata.

-Connor- Susurro, él mira de forma fija a el futuro esposo de mi madre noto la ira y desprecio en su mirada.

Mathew aprieta sus manos en puños mira a Connor y luego su mirada baja a su brazo en mi cintura, tensa su mandíbula y se gira para alejarse de nosotros.

-¿Estas bien?, ¿Él te hizo algo?- Pregunta rápidamente, frunzo mi ceño y me alejo de él.

-¿Qué haces aquí?- Es lo único que logro preguntar.

-Te amo, Ari no quiero estar sin ti- Dice un poco alterado, parpadeo y miro su traje, su corbata un poco torcida, elevo mis cejas, el pasa su mano despeinando su cabello.

-No sé qué sucede contigo, ¿Qué haces aquí Connor?- Vuelvo a preguntar sintiendo como mi corazón aumenta su ritmo.

-Ven conmigo, vámonos de este lugar, sé que no quieres estar aquí, hablemos en otro lugar- Pide extendiendo su mano hacia mí, parpadeo conmocionada y lo miro.

-¿Aun me amas?- Pregunta con una expresión dolorosa, trago con dificultad y siento mis ojos picar y el nudo instalarse en mi garganta.

Miro su mano extendida, humedezco mis labios y después de unos segundos tomo su mano, el suspira aliviado y sonríe, es cuestión de segundos para que me lleve fuera del lugar rápidamente.

Cuando llega hasta su motocicleta se detiene, entre abro mis labios sorprendida y cruzo mis brazos, Connor me mira agitado y se acerca hasta mí, toma mi rostro en sus manos y une nuestros labios, un beso que inicia suave se vuelve desesperado, tantas noches y días deseando que esto volviera a suceder, mis lágrimas caen en mis mejillas y esta vez de felicidad.

-Te amo- Murmura con voz ronca contra mis labios –No tienes idea el infierno que viví, te extrañe Ari-

-Te amo Connor, me hiciste mucho daño- Susurro con voz temblorosa, el dolor cruza su mirada y asiente.

-Lo sé, y lo compensare cada jodido día- Asegura, sus ojos se encuentran cristalizados, observo como humedece sus labios -¿Vienes conmigo?- Pregunta rápidamente, miro su mano, dudo un momento pero asiento.

-Quiero estar contigo- Digo suavemente, una sonrisa se curva en sus labios provocando una en mi rostro también.

–No sabes lo jodidamente feliz que me haces pequeña- Dice y sin esperar más me envuelve en sus brazos, cierro mis ojos y disfruto de su calor, el miedo de que esto sea un sueño me invade pero cuando escucho a mi madre gritar mi nombre en la puerta del lugar sé que esto es real.

Me separo de Connor, el entrelaza mi mano con la suya y me guía hasta su motocicleta.

-Nunca había escapado de mi madre- Digo nerviosa, escucho su ronca risa.

-Siempre hay una primera vez pequeña y me alegra que sea conmigo- Dice de forma picara, reprimo mi sonrisa y golpeo levemente su brazo.

Él sigue siendo mi Connor Smith, no ha cambiado.

  ❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤❤  

Bueno amores, este es el fin, Dios estoy llorando, aun falta el epilogo esperenlo, pronto estara disponible, habra capitulos especiales asi que nos vemos pronto.

INSTAGRAM: KEITHKATT96     por este medio informare cuando estará el epilogo y los capítulos especiales, aun hay asuntos sin resolver en la novela, ¿quieren saber sobre Lennox y alex? o Sean y Kelsey?