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Anime/manga: SERVAMP -サーヴァンプ-

(Sāvanpu).

Creador: Strike Tanaka

Pareja: Sleepy Ash [Kuro] x Mahiru Shirota. [Kuromahi/Kurohiru]

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Bajó los pequeños escalones de la casa apresurado dirigiéndose al auto. Una vez allí, se detuvo unos segundos para suspirar y recalcarse un par de veces que debería centrase en el camino y dejar de pensar en lo ocurrido. Pero la verdad es que su mente estaba invadida por la imagen del castaño, eso era muy problemático.
Puso en marcha el vehículo despejando su mente, conducir a altas horas de la noche no le atraía en lo más mínimo, pero prefería eso que volver y acostarse en la misma cama que alguien que no conocía y encima había visto semidesnudo por accidente aunque, si era honesto, no había sido desagradable.

Llegó a su destino relajado, mejor dicho, con su pereza característica. Agradecía que puedo tranqulizarse en el camino, unos minutos atrás se sentía al borde del infarto.
Abrió la puerta de vivienda naturalmente, aún conservaba sus llaves depués de todo. No fué muy grata la sorpresa se ver a Lawless y a Tsubaki sentados en el sofá, ¿por qué se supone que estaban despiertos?. Sabía perfectamente que el único propósito de esa acción era molestarlo, así que intentaría hacer lo mismo, de paso podría sacarse algunas dudas. Debía de pensar en algo y rápido, notaba la intención de sus hermanos de preguntar algo y rezaba que no sea respecto a su sonrojo.

- ¿Así que estás enamorado? - . Tsubaki se sorprendió unos segundos, pero luego volvió a tener su expresión avitual.

- Si, el problema es que está en modo perra inalcanzable mírame pero no me toques -. Ese era el momento en el que Kuro refleccionaba de la habilidad que tenía el pelinegro para decir tantas estupideces en tan poco tiempo.

- Yo tengo prueba mañana, así que me iré a dormir -. El menor se levantó lentamente interrumpiéndolo de manera intecional , con una gran mueca de burla en su rostro y esperó estar junto a él para decir el comentario que más temía el mayor - Descuida, pronto iremos a visitarte, ya tengo la dirección -. El Rubio imitó su hermano menor evitando preguntas incómodas en lo que Kuro lanzaba maldiciones por lo bajo, aún no sabía cómo es que sus padres no mandaban al psicólogo a Tsubaki teniendo en cuenta lo controlador que es.

- ¿Qué le sucede? -. Mencionó al ver a su madre sentarse en la mesa de la cocina. No sabía cuanto llevaba escuchando o si recién llegaba, pero esa era una de las características principales de ella.

- No lo sé, yo lo veo más animado últimamente -. Su madre dió una pequeña sonrisa invitando a su hijo a sentarse en lo que le ofrecía una taza de café.

- ¿Animado? Yo lo veo más idiota -.

- Ash... - Su madre hizo un gesto y el solo se recosto en la silla cerrando los ojos. Su progenitor se había sumado a la conversación, no parecía muy feliz de estar ahí .

- Ahora... ¿Podrian explicarme el Teatro que armaron? -. Su padre rodo los ojos, dar explicaciones era muy complicado, y más aún si no había algo sólido lo cual argumentar.

- Verás, el padre del chico tenía una deuda muy grande con la empresa y él murió dejándole la responsabilidad a su hermano e hijo, con tu madre decimos llegar a un "acuerdo" casándolos -. Genial, ahora estaba más confundido que antes. ¿Qué tipo de lógica era esa?.

- ¿No se les ocurrió otra cosa?... -. Preguntó al aire, todo se había tornado extraño.

- Hijo, el chico es Doncel, sabes que no es fácil de por si tener buenas oportunidades laborales y a ti se te evapora el agua... ¿Cuál es el problema? -. Ash la miró incrédulo, sabía que algo tenía que ver las ideas extrañas de su madre.
La mujer se levantó de la mesa como si nada raro sucediera y se marchó a dormir. Si, tal y como suena, se fué de la misma manera en la que apareció en la habitación.
El peliceleste cruzó miradas con su progenitor, tenían una idea compartida de lo que estaba pasando y, mientras al mayor le resultaba gracioso, al contrario le resultaba raro y molesto.

- Tu madre es rara, este es uno de sus sueños, intenta que resulte lo mejor posible. ¿Si? -. El adulto le dió una pequeña palmadita en el hombro para levantarlo del asiento y guiarlo a la salida.

- ¿Estás sacandome de la casa? - . Dijo una vez estando en el marco de la puerta de su anterior hogar.

- Si, tu tienes tu casa depués de todo -. Sonrió a modo de burla. ¿Ser así acaso era de familia? - No tardes, a lo mejor te están esperando - . El contrario le guiñó el ojo con picardía para luego cerrar la puerta en su cara. ¿En serio toda su familia era rara?. La puerta se abrió nuevamente cuando el ya estaba prácticamente subiendo al auto - Y si, se te nota el rubor en la cara -. Gritó para luego ingresar a la casa nuevamente.

Ingresó dando un gran bostezo, y como no, teniendo en cuenta que él acostumbraba a dormir dieciséis horas por día, estar despierto a las dos y media de la madrugada no era nada normal. Sentía como si sus huesos pesaran y subir las escaleras estaba siendo una tortura.
Abrió la puerta despacio, evitando el ruido a toda costa, imaginaba que su "pareja" estaría dormido y despertar a alguien era, según él, el inicio de una enemistad. Lo vió descansando pacíficamente con las sabanas cubriéndolo a medias y abrazando la almohada, admitía que le resultaría tierno de no ser porque estaba ocupando gran parte de la cama y, como no quería molestarlo, tendría que dormir en el sofá y su gran sacrificio para subir la escalera había sido en vano.

Sin duda alguna, este estaba siendo el fin de semana más extraño de su vida. Pero no es como si realmente pudiera quejarse, ahora vivía solo y no tendría que aguantar a su no tan agradable familia. Es verdad que lo habían casado con alguien que nisiquiera conocía, pero almenos tenía la certeza que él no tendría que limpiar nada. Puede que en el futuro tenga peleas por su forma tan despreocupada de vivir y que no podía estar cinco minutos sin dejar migas de papas fritas por todo el suelo .

Ponerse a pensar en lo que pasaría era realmente problemático, dormir es mejor . Se recostó lentamente en sillón largando un suspiro y apoyando las manos detrás de su cabeza. Miró el techo unos segundos y luego extendió su mano hacia el mismo, el anillo no le quedaba tan mal.