Skyler

Parpadeo un par de veces mirando a Anson a mi lado, bajo mí mirada por su torso desnudo, infiernos, el jodido matón tiene el mejor cuerpo que haya visto, mi corazón comienza a latir con fuerza al ver su piel brillante por el sudor.

-Te hice una pregunta, niñita, que haces aquí- Frunzo mi ceño al escuchar su voz y el tono molesto en ella.

Eso me hizo despertar, vuelvo mi mirada a su rostro de inmediato, el me mira aténtame con expresión neutra, aclaro mi garganta y cruzo mis brazos.

-Se dice hola, que maleducado eres- Digo elevando mis cejas, sonrío de medio lado al ver el disgusto en su rostro.

-Responde- Su voz esta vez se escucha como si me estuviera dando una orden, aprieto mis labios y lo miro entre mis pestañas de manera fija.

-No tengo que darte explicaciones- Respondo elevando mi barbilla de forma retadora, su mandíbula se marca y voltea su mirada hacia un lado, se mantiene en silencio uno segundos.

-Solo mantente alejada- Murmura sin mirarme para luego dar la vuelta y segur su camino hacia el otro lado del salón.

Aprieto mis labios y hago una mueca de dolor al enterrarme a mí misma mis unas en mis brazos, gruño y me volteo hacia Tess, mi amiga aun mira a Cayden, incluso podría asegurar que no noto mi pequeña charla con el matón, joder ella no tiene límites.

Tomo su brazo y la acerco, ella expande una gran sonrisa maliciosa y me mira, como puede tener un rostro de ángel y ser en realidad un demonio, maldición.

-Que rayos sucede contigo, en serio? El puto gimnasio donde están ellos? Gran idea Tess- Digo con sarcasmo molesta, ella rueda sus ojos y la sonrisa de su rostro no se borra.

-Relaje cariño, deberías agradecerme tenemos excelentes vistas...es la mejor idea que he tenido en años- Dice con voz cantarina, y suspirando satisfecha de sí misma, muerdo el interior de mi mejilla y niego.

-Estas segura de que esto tiene que ver con Cayden?- Recrimino entrecerrando mis ojos de manera acusatoria en su dirección.

Mi mejor amiga abre sus ojos y me observa, parpadea un par de veces y frunzo mi ceño al ver un pequeño rubor en sus mejillas, maldición no es posible, Tess se ha sonrojado.

-Creo que lo de mi hermano le afecto, así que le demostrare que puedo defenderme de ese bastardo en cualquier momento- Arruga su pequeña nariz mientras explica, aparta su mirada y la enfoca en Cayden quien aún no nota nuestra presencia.

-Como conseguiste entrar a este gimnasio, aquí solo estrellas del boxeo hay- Murmuro mirando a mis alrededores.

La sala está llena de chicos jóvenes, los únicos hombres con más edad son los entrenadores, algunos de los chicos en la sala realizan su rutina y prestan atención tanto a Tessa como a mí con interés, me imagino que no muchas chicas entran a este gimnasio, y al juzgar por la mirada de algunos se nota que disfrutan el tenernos aquí.

Me enfoco en un chico rubio con algunas pecas en su rostro, este salta la cuerda, muerde su labio inferior y me guiña su ojo, aparto mi mirada de inmediato y de manera inconsciente el poso en Anson, mi cuerpo se tensa al notar su mirada intensa puesta en mí.

Intento mostrar que su atención no me afecta y dejo su mirada para mirar a mi amiga de manera interrogante, como hizo para que nos aceptaran en un jodido gimnasio llenas de estrellas, la respuesta es obvia tuvo que mover influencias y seguramente utilizo la tarjeta que su padre le obsequio, ellos piensan que el dinero es un buen remplazo de su presencia, demonios.

-Esto le costara a mi padre una gran cantidad de dinero- Dice elevando sus hombros con simpleza, elevo mi ceja, ella sonríe burlista pero esa tristeza que tanto conozco no deja su rostro –Apuesto que compraría el maldito gimnasio con tal de que no haga algunas de mis rebeldías, como lo llaman ellos- Gruñe moviendo sus manos en el aire y agregando con sus dedos las comillas en la palabra rebeldías.

Suspiro y vuelvo mi mirada al salón, analizando el lugar, mi mirada sin aceptar las ordenes de mi cerebro se posa nuevamente en Anson, esta vez se encuentra levantando pesas, los músculos de sus brazos se flexionan cada vez que las levanta, eso debe pesar mucho, sus músculos se tensan sin embargo la expresión de su rostro es neutra.

Infiernos, estoy perdida.

Gruño en mi interior, cierro mis ojos unos segundos y abro mis ojos obligándome a no mirarlo, en su lugar puedo notar como Tessa tiene razón, en su mayoría los chicos de este lugar son atractivos, muerdo mi labio inferior-

Un golpe a mi costado me sobresalta y llama mi atención, es mi amiga señalando a un hombre que camina hasta nosotras. El hombre parece rondar los cuarenta años, a pesar de eso su cuerpo está construido con músculos, este se detiene frente a nosotras y sonríe cruzando sus brazos.

-Bien, ustedes deben ser Tessa y Skyler, soy el entrenador Charls y estaré a cargo de ustedes dos- Explica rápidamente y con seguridad, Tessa y yo compartimos una mirada rápida y asentimos en su dirección, el aplaude una vez y asiente -Entonces, están lista para aprender a patear traseros?- Pregunta mirándonos, Tess asiente energéticamente y aplaude.

Fue arrastrada a esto, grito en mi interior. El entrenador me mira esperando una respuesta, suspiro y asiento más en derrota que entusiasmada como mi extrovertida amiga a mi lado.

***

-Necesito un puto descanso- Grita mi amiga cayendo sentada, sus mejillas sonrojadas y acaloradas, el sudor en su cuerpo me hace reír entre dientes.

El entrenador explicó que antes de comenzar a fondo con el entrenamiento de defensa personal era preferible si mejorábamos nuestra condición física, así que ahora debemos comenzar con lo difícil.

-Y así es como se tornó, la mejor idea que has tenido en tu vida- Gruño imitando el sonido entusiasmado de su voz hace un par de horas, 

Ella entrecierra sus ojos, me muestra su dedo del medio y toma la botella de agua y bebe la mitad restante.

-Doy asco, maldición de esta manera los chicos no me verán atractiva, soy un puto desastre- Murmura con frustración, ruedo mis ojos y continúo corriendo en la caminadora.

Hago una mueca ante el dolor en mi tobillo, paro la máquina y me bajo de ella sentándome en la plataforma, busco la botella en mi bolso pero no lo encuentro, frunzo mi ceño.

-Tess, olvidaste mi botella de agua- Comento revisando nuevamente mi bolso de entrenamiento, ella abre sus ojos y sonríe con una mueca de disculpa, suspiro cansada.

-Ten, esta sellada, es de la máquina, pareces en apuros- Observo la botella de agua frente a mí, humedezco mis labios y elevo mi mirada.

La decepción corre atreves de mí y me regaño mentalmente, es el chico rubio que saltaba la cuerda antes, este sonríe mostrando su perfecta sonrisa, sus ojos verde agua esperan a que tome la botella, suspiro y la tomo.

Que rayos esperabas? Que fuera el matón el que te diera la botella? Eso es jodido, me reprimo en mi interior.

Sacudo mis pensamientos y le sonrío al chico rubio, este amplía su sonrisa y pasa una mano por su cabello pareciendo nervioso, es atractivo, él aclara su garganta y humedece sus labios.

-Me llamo Caleb, si necesitas algo te ayudare con gusto- Dice mirando mi rostro fijamente, sonríe de medio lado, sonríe y asiento.

-Es bueno saberlo- Murmuro, muerdo mi labio inferior y sus ojos de inmediato se clavan en ellos -Mi nombre es Skyler- Añado, el asiente y pasa una mano por su cabello.

-Lindo nombre- Dice con voz coqueta, río un poco y miro a mi amiga quien mantiene su mirada divertida y picara.

-Oye amigo, ten más cuidado- Dejo mi mirada de Tessa para enfocar al chico rubio y buscar el motivo de su cambio de voz.

Elevo mis cejas y toda mi atención se centra en la amplia y musculosa espalda de Anson, el se aleja de nosotros y camina hacia lo que parece ser los camerinos, frunzo mi ceño al ver sus manos en puños y su cuerpo tenso.

-Qué sucedió?- Pregunto confundida al chico rubio llamado Caleb, este mantiene su expresión molesta fija en Anson, me mira y niega.

-Alguien debería hacer algo para cambiar su puto humor- Gruñe.

Muerdo el interior de mi mejilla al escucharlo hablar del matón, este aclara su garganta y me mira, sonríe y guiña su ojo para dar la vuelta y caminar hasta las pesas.

-Santo infierno, ese chico está caliente, tienes una follada asegurada en este lugar- Chilla Tessa emocionada, ruedo mis ojos y me coloco de pie, miro la hora en la pared cercana y tomo mi bolso de entrenamiento.

-Nuestro entrenamiento termino, voy a ducharme- Digo, miro a mi amiga y ella asiente buscando su bolso de entrenamiento.

-Debemos utilizar las mismas duchas que ellos?- Pregunto alarmada, miro a mi amiga y ella eleva sus cejas, mordisquea su labio inferior y sonríe nerviosa.

-Tessa- Una voz profunda pronuncia el nombre de mi mejor amiga.

Ella se detiene y sus ojos se amplían, me mira unos segundos, elevo mis cejas y volteo mi mirada, es Cayden, Tessa voltea y cruza sus brazos mirando a Cayden, una sonrisa de medio lado maliciosa adorna su rastro, mientras que Cayden la observa con expresión neutra.

-Debemos hablar- Murmura el cruzando sus musculosos brazos sobre su pecho, su mandíbula se marca mientras observa a Tessa.

Miro de reojo a mi amiga, ella eleva una de sus delgadas cejas y suspira.

-No lo creo- Murmura ella con burla en su voz, el frunce su ceño y da pasos hasta quedar frente a ella, aclaro mi garganta.

-Iré a los camerinos- Digo confundida, elevo mis cejas cuando mi amiga se centra en la mirada de Cayden y parece no escucharme, suspiro y niego para luego dar la vuelta y caminar confundida hasta los camerinos.

Empujo la puerta de los camerinos, detengo mi paso antes de entrar, puede haber algún chico vistiéndose.

-Hay alguien aquí?- Pregunto en voz alta antes de entrar, al no escuchar ninguna respuesta elevo mis hombros y entro.

Miro el lugar con detenimiento, es amplio, hay varias duchas en un lado, miro las puertas y mi cuerpo se tensa al escuchar el agua caer de una de ellas, miro curiosa la puerta cerrada.

Suspiro y mi mirada cae en los casilleros en el otro lado, camino hasta ellos, abro uno, coloco mi bolso de entrenamiento, saco mi toalla y ropa limpia, cierro el casillero y camino hasta una de las duchas.

***

Suspiro aliviada saliendo de la ducha, el agua logro aliviar, sonrío, cierro la puerta a mis espaldas, doy la vuelta y detengo mis movimientos de golpe al ver a Anson de brazos cruzados recargado en los casilleros.

Trago con dificultad y mi cuerpo se tensa, mi boca se seca al ver que se encuentra sin camisa, solo con su pantalón, su cabello humedo y sus ojos tormenta puestos con una mirada molesta en mi.

Humedezco mis labios, y camino hasta el casillero donde deje mi bolso de entrenamiento, abro bajo su atenta mirada, coloco la tira de mi bolso en mi hombro y paso por su lado parasalir.

Cierro mis ojos y jadeo cuando su gran mano envielve mi brazo tira de el y mi espalda golpea contra los casilleros.

-Que te sucede- Exclamo nerviosa, elevo mi mirada hasta la suya, el me mira fijamente, su labio se curva en una sonrisa maliciosa.

-No es lo que querías?- Gruñe con voz ronca, abro mis ojos y lo miro confundia.

 El acerca su cuerpo más al mío, ahora su pecho contruido presiona mis senos, y sus brazos encierran mi cuerpo, me encuentro atrapada entre su cuerpo y el casillero.

-Para esto viniste a este lugar no?- Gruñe nuevamente arrastrando sus palabras, su aliento mentolado choca contra mi cuello.

Mi pulso comienza a acelerarce, pero sus palabras hace que todo pensamiento nublado se aclare, aprieto mis labios, coloco mis manos en su pecho y lo intento empujar.

El toma mis muñecas con una de las suyas, entre abro mis labios y lo miro enfadada.

-No vine aquí por ti- Gruño luchando con su agarre, él eleva sus cejas.

-Así?- Pregunta con amargura, detengo mis movimientos y se inclina mas mirando mis labios -Entonces por quién?...por ese jodido rubio de allá afuera?- Frunzo mis ceño, el aprieta su agarre en mis muñecas y un jadeo se escapa de mis labios.

A caso el matón esta celoso?.

Su respiración se hace más rapida, esta furioso puedo verlo, parece luchar contra algo, trago con dificultad y humedezco mis labios.

Su mandibula se tensa ante mi acción, el se inclina y rosa sus labios con los mios, sus manos dejan mi muñecas, y las coloca de manera firme en mi cintura, observo en silencio.

-Sky?- La voz de mi mejor amiga hace que agarre del matón se tense.

El me suelta, me mira unos segundos, parpadeo un par de veces mirando la tormenta desatada en sus ojos, tensa su mandibula y da la vuelta pasando al lado de mi amiga y saliendo del lugar.

Dejo caer mis hombros, suelto mi respiración detenida y maldigo mentalmente, que rayos sucede con ese jodido matón.

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Capítulo nuevo 

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