CAPÍTULO 38.

                                              BLYTHE.

Camine hasta quedar a unos cuantos metros de la entrada principal, las personas caminaban por mi lado con prisa, al ritmo de la ciudad el cual había estado acostumbrada, me coloque los auriculares, decidí soltar mi cabello para ocultarlos, abrí la mochila que Lee me dio, lo primero que vi fue una gorra negra, buena idea, eso evitaría exponer mi rostro de mas a las cámaras de seguridad, me la puse sin dudar, acomode mi cabello y trate de que los auriculares no se vieran.

Lee y los demás iban a subir hasta el tejado de la corporación, probablemente por las escaleras de emergencia, Lee necesitaba estar lo mas cerca posible de la corporación y sin ser visto, esa era el mejor lugar que podrían tener para poder hackear su sistema, es decir, en cuanto supieran que alguien ingreso a su sistema ellos buscarían la ubicación del intruso, como resultado tendrían la ubicación del edificio, pensaría que la persona que hackeo el sistema estaba dentro del edificio, pero en realidad, ellos estarían sobre el edificio, en el tejado, Lee simplemente era brillante, y por eso el seria mis ojos en esta ocasión, necesitaba que Lee me dijera cuando había podido intervenir en el sistema de seguridad de cámaras para que así me guiara.

Sabia que solo habían dos resultados, uno o seriamos unos putos genios que burlaron a un montón de científicos, o dos, seriamos unos putos estúpidos que serian atrapados y envueltos en graves consecuencias, en fin, esto era lo mejor que podíamos hacer para saber que planeaba la corporación con los experimentos, y saber mas sobre mi padre, estaba segura que ellos sabían mas sobre mi padre y de donde podría estar.

Mis pensamientos viajaron a hace unos años atrás, donde mi madre estaba con vida, ella siempre trataba de sonreír cuando yo estaba cerca, pero cuando yo la veía sin que ella supiera ella no tenia esa dulce sonrisa, muchas veces me pregunte porque, la respuesta era clara para ella y mi padre, ella moriría, tenia cáncer, y solo le dieron un par de meses de vida, mi padre cambio, su aspecto cambio, el pasaba mas tiempo encerrado en su laboratorio, en un inicio pensé que era su forma de refugiarse al dolor.

—Blythe, ¿Me escuchas?—

Parpadeo volviendo a la realidad al escuchar la voz de Lee a través del auricular, una media sonrisa incrédula sale de mis labios.

—Te escucho fuerte y claro— Respondo ampliando mi sonrisa, era estúpido, pero ahora que lo escuchaba no me sentía tan sola, sentía que estaba acompañada para entrar a ese lugar.

—Se que si, y eso me alivia, pero trata de no parecer que hablas con alguien, sera sospechoso, puedes hablar bajo y aun así escuchare bien—

—Oh si, tienes razón- Digo de inmediato sintiendo un poco la paranoia de que alguien ya me descubrió -¿Están ya en el tejado?—

—No, vamos a mitad de camino subiendo— Murmura, y es cuando noto la agitacion donde va subiendo las escaleras 

—¿Esta Aiden y Brett tranquilos?—

—Si, afortunadamente—

Guardo silencio, los pensamientos vuelven a mi mientras espero, el rostro de mi madre volviéndose cada día más pálido, más débil, frunzo mi ceño, no recuerdo mucho de sus últimos días de vida, y ahora que trataba de recordar me daba cuenta de que no tenía casi ningún recuerdo de sus últimos días, frunzo mi ceño, sabía que había sido muy doloroso para mi y para mi padre cuando mamá cayó en cama, tal vez por esa razón mi mente bloqueo todo recuerdo de esos días. 

—Hemos llegado, voy a intentar entrar rápido al sistema de seguridad y conseguir acceso a las cámaras— Explica Lee, y casi puedo imaginarlo buscando un lugar para sentarse y abrir su lapto tomando una expresión concentrada. 

—Tu puedes hacerlo— Susurro tratado de animarlo.

Un par de minutos y sólo escuchaba el teclado de Lee, a medida que tenia que esperar más nervios tenía, ¿Y si nos atrapaban?, esperaba que no. 

—Okey... Tres, dos, uno, listo, tengo acceso a las cámaras del primer piso— 

—¿Entro ya?— Pregunto sin poder ocultar mi nerviosismo. 

—No, quiero tener la vista de todas las cámaras—

—Tienes razón— Es lo único que digo.

Me preguntaba que había dentro de la corporación, nunca antes había entrado, a pesar de que mi padre había trabajo por mucho tiempo ahí, elevo mi mano y veo la hora, habíamos decidido hacer esto a mitad del día, por que sabíamos que la noche era mucho mas peligrosa ahora que los mutantes estaban libres. Por mi mente paso esa cosa a la que nos enfrentamos en el viejo edificio, un escalofrío me recorre, era horroroso, sabia que había sido una persona, pero por alguna extraña consecuencia del ser sometido a experimentación, su rostro se habia deformado, lo peor de todo era lo peligroso que eran, devoraban humanos, la sangre y sus dientes afilados lo demostraban, de pronto las nauseas y los nervios no eran una buena combinación. 

—Perfecto, tengo acceso a todas las cámaras de seguridad del edificio— Dice Lee trayéndome a la realidad por tercera vez, me enfoco en la actualidad, en el aquí y ahora, no era momento para que el miedo me bloqueara y saboteara todos nuestros planes. —Es tu turno Blythe, puedes entrar— 

Tomo una respiración y me dirijo a la entrada, llevo mi mano hasta mi gorra y la bajo un poco, miro de reojo a un grupo de estudiantes, bingo, parecía que la suerte estaría de nuestro lado, apresuro mi paso, quedando detrás del grupo, sabia que habían universidades que realizaban giras a la corporación, estudiantes de carreras donde el objetivo de todos era trabajar en esta corporación donde tenia prestigio nacional en el area de la ingeniería biomedica y mucha mas.

Los guardas de seguridad de la entrada dio una mirada rápida al grupo de estudiantes, trate de no mirarlos y pasar desapercibida junto con ellos, choque con una chica, esta me miro frunciendo su ceño y haciendo un claro gesto de ¿y tu quien demonios eres?.

—Lo siento— Susurro bajo, la chica simplemente voltea sus ojos de forma antipatica y continua caminando.

—Buena idea entrar junto con ellos, ¿en que pensábamos?, ¿como era que pretendíamos pasar?— Pregunta Lee en mi oído con un tono burlísta ante nuestro estúpido y arriesgado plan mal ingeniado, una risa se forma en mis labios —Aquí es donde entramos en problemas, esos chicos van hacia el camino opuesto del que debes tomar, ¿ves esas personas como cruzan por las barras?- 

—Las veo— Murmuro mirando a varas personas que entran y salen por unas barras, noto de inmediato que son trabajadores de la corporación porque pasan una tarjeta por un monitor para que las puertas logren abrirse.

—Tienes la tarjeta de tu padre, ¿Cierto?— Pregunta.

Comprendí rápidamente, debía ir ahí y pasar la tarjeta de ingreso de mi padre, la había traído porque sabia que seria últil de alguna forma, entendí que a el grupo de estudiantes le daban un recorrido superficial, y no entraban donde verdaderamente estaba el equipo de científicos trabajando, y solo Dios sabe que mas cosas había ahi dentro.

—Iré, ¿alguien me esta viendo?— Debia asegurarme de que nadie me estaba mirando.

—Los guardas de seguridad no estan mirando, hay uno de los estudiantes con una cámara y eso parece tenerlos tensos, tienes el camino libre, cerrare el acceso a las cámaras de seguridad en las que estas saliendo, asi en la sala de control nadie te vera—

—Bien— Murmuro, dirigiéndome hacia el lugar, confiaba plenamente en Lee, sus habilidades eran extraordinarias, y me daba rabia que estuviera en una carrera solo para complacer a su padre, Lee amaba la tecnología, la informatica, se nota a en su rostro. 

Cuando voy a pasar por las barras saco la tarjeta y la coloco en el monitor, se escucha un sonido como de aprobación y las puertas de cristales frente a mi se abren dandome acceso, el alivio me recorre pero trato de mantené mi rostro con una expresión neutra, las personas que trabajan en este lugar continuaban en lo suyo, es como si tuvieran un disco y se limitarán a hacer su trabajo. 

—Estoy dentro— Digo bajo, escucho el suspiro de Lee al otro lado. 

—Bien, si fijas la mirada a la derecha puedes encontrar un pasillo, al final de ese pasillo hay un camerino, por el rótulo que hay en la puerta, creo que es de los conserjes, creo que podrías movilizarte por el lugar, más segura si logras encontrar un traje y hacer que crean que perteneces al equipo de limpieza— Explica, frunzo mi ceño sin comprender. 

—¿Quieres que busque el camerino y me haga pasar como alguien de la limpieza?— Pregunto deteniendo mis pasos. 

—Sí, de esa manera puedes ir por los pasillos de forma tranquila—

Tenía razón, era una buena forma de poder ir a los lugares y evitar levantar sospecha. 

—Blythe, camina rápido, y no mires hacia atrás, uno de los hombres de seguridad te está mirando— Instruye Lee, me paralizo por unos segundos y luego reaccionó, comienzo a caminar hacia el pasillo que Lee me había dicho. 

Una vez que estuve fuera del campo de visión de las demás personas apresure aún más el paso, mire las puertas y cuando vi el que Lee me había dicho abrí de inmediato la puerta, mire el interior y mi tensión se alivio un poco al ver vacío el lugar, cerré la puerta a mis espaldas y comencé a mirar el lugar, mi mirada se centro en un estante con ropa doblada, me acerque y la mire, sonríe al ver que eran uniformes de limpieza limpios, busque el que se acercara a mi talla, todos eran un poco grandes, tome el más pequeño, el nombre se encontraba bordado, de mujer, solo esperaba no encontrarme con ella, no lo pensé más, y me comence a cambiar. 

Una vez que estuve lista, busque un casillero e introduje mi mochila ahí, solo me deje la gorra puesta y tome el dispositivo USB, cerré el casillero tomé una respiración profunda y me anime a salir del camerino. 

—Estoy lista, solo dime a donde debo ir— Digo caminado con seriedad por el pasillo. 

—Ve al elevador, el quinto piso—

—¿Ese no es el último piso?— Pregunto extrañada. 

—Hay algo extraño, en ese lugar, hay un sistema de red distinta que la de todo el edificio, por lo tanto, necesito que el dispositivo USB lo conectes a algún dispositivo que esté conectada a esa red— Explica Lee con claridad. 

No pregunto más, me dirijo al elevador, camino bando mi mirada, no quería que las personas me pudieran reconocer de algún lugar, si algo ocurria no quería ser señalada como la sospechosa, lo era, pero no era la idea ser descubierta, entre al elevador, más personas entraron, y no tuve la necesidad de marcar el número cinco, uno de ellos lo hizo, un hombre con bata de doctor, me mantuve al margen, tratando de no llamar la atención, las personas fueron bajando en los demás pisos, hasta que la última vez que las puertas se abrieron fue en el piso cinco, el tipo que parecía medio o lo que fuera salió primero, ni siquiera me miro, vaya golpe de suerte. 

Salí y espere que el tomará su carmíno, mire a lo largo del pasillo, diferentes puertas y más pasillos tanto a la izquierda como derecha, no sabía para donde tomar.  Camine por el pasillo e intente mirar por la ventana habían personas, me asuste y continúe caminado. 

—¿Que hay dentro?— Pregunto en un susurro. 

—Son laboratorios, en la última puerta, hay computadoras, no hay personas dentro, aprovechemos esa oportunidad— 

Actue rápido, al llegar a la última puerta noto que esta no tiene ventana como las otras, tomo el pomo y esta frio, trago con dificultad y entro, estaba vacío, tal como Lee lo había dicho, los nervios hicieron que las palmas de mis manos se humedecieran. 

El lugar era grande, y dividía por sesiones, separadas por paredes y puertas de vidrio, en la que estaba había varias computadoras, como una especie de sala de investigación, pude ver a través del cristal que lo siguiente era un laboratorio.

—Me encargue de desactivar el acceso a las cámaras, nadie sabrá que estuviste ahí— Avisa Lee. 

De inmediato corro una silla y me siento, me acerco a la computadora y la enciendo, los latidos en mi pecho comenzaban a acelerarse con miedo, de saber que en cualquier momento podría ser descubierta. La computadora se encendió. 

—Esta encendida, ¿Solo conecto el dispositivo?— Pregunto sin comprender. 

—Si, solo conectalo y me encargo del resto— 

Lo hice, y hasta el momento no fue complicado, Lee comenzó a ser su magia, mientras tanto me levante y mi mirada curiosa fue al laboratorio, la temperatura sumamente baja me estremeció, me pare frente a la puerta de vidrio y esta se abrió, di una mirada por el gran laboratorio, similar a los anteriores que vi, había de todo, la mayor tecnología e instrumentos inimaginables, esto parecía ciencia ficción. 

Mi mirada viajo a una puerta al fondo del laboratorio, camine hasta ella, llevándome un par de minutos llegar, el recuerdo de Aiden en el laboratorio de mi padre llegó a mi mente, frunzo mi ceño. 

—Lee, ¿Que hay detrás de esta puerta?— Me atrevo a preguntar, era posible que hubieran cámaras, Lee podría tener acceso a ellas. 

—¿Que?, No comprendo. ¿donde estas?, ¿Por qué no te veo?— Pregunta confundido y con algo de tensión. 

Eso me asusto, busque con mi mirada las cámaras dentro de este lugar y me di cuenta de que esta puerta, este lugar donde estaba frente a esta puerta era un punto ciego para las cámaras, Lee no me estaba viendo. 

—Estoy despues del laboratorio, en una de las esquinas, hay una puerta, pero es un punto ciego para las cámaras de seguridad— Explicó, escucho el teclado de Lee. 

—No logro verte. Y no hay cámaras al otro lado de esa puerta, será mejor que no entres— Advierte, su voz tensa. 

Guarde silencio insegura, quería saber lo que había, porque esto podría ser lo que nos diría que ocurria, tal vez sabríamos más, sobre este lugar y lo que hacían, más sobre mi padre y donde estaría, ¿Y si mi padre estaba al otro lado. 

Eso me dejó quieta, no, no podría ser, y sin pensar abrí la puerta, oscuridad, eso era lo que había. 

—Blythe, necesito que vuelvas a donde epueda verte— Demanda Lee. 

El miedo me recorrió ante la oscuridad frente a mi, hasta que di el primer paso, las luces parpadearon y se encendieron, dándome a entender que era automático y se activaban cuando alguien entraba, me cegó un poco y luego observe mejor. 

Mire a los lados, y mi cuerpo se congeló, ante el largo pasillo podría decir que eran varios metros y a los lados, habían unas especies de habitaciones de vidrio, di otro paso, un jadeo salió de mis labios al ver personas en todas ellas, enfoque mi mirada en la más cercana, estaba en cuclillas y de espalda, me acerque un poco a este aturdida. 

Este pareció escuchar el ruido de mis pasos, espere ver a una persona desesperada por ayuda, pero cuando se giro y su rostro horroroso me mira de forma vacía y demente solo pude retroceder torpe y caer, eso llamó la atención de todos los demás. 

Lo siente fue lo peor, esa cosa soltó un gruñido o chillido extraño, vi sus dientes salir y sus garras, sus ojos se volvieron por completo negros, lleve mis manos a mi rostro y grite, eran muchos, muchos mutantes de primera generación encerrados aquí. 

La cosa pareció olfatear y enloquecer, retrocedió y choco control la pared de vidrio, esta no cedió, parecía un vidrio resistente, estaba paralizada, la cosa retrocedió nuevamente y volcio a chocar, el vidrio se le hizo una grieta. 

Y eso me indicó que el vidrio cedería. 


                                        ...... 

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