¡Mierda la consulta! Los pies no reaccionan como quisiera pero peor es nada, me quito el birrete y toga lanzándolas a algún sitio del lugar, saliendo después al pasillo las luces están apagadas, mi hermano debe de estar en su cuarto o eso espero, entro a su cuarto tengo al razón verlo dormido.

--Lárgate de mi habitación—le escucho decir

--Solo venía a avisar...--

--No me importa a donde vayas, solo hazlo—el odio de sus palabras me hiere. Salgo de aquella casa y subo al auto ¿Por qué tengo que ser una basura? ¿Por qué me toca vivir esto a mí? ¿Por qué aun no me muero?... simplemente no entiendo el concepto de la vida o al menos no de la mía, admito que el morir por mi propio puño es tentador, algo honrado para deshacerme de la carga en la que me convertiré, visualizo aquel centro médico elegí que estuviera un tanto apartado de mi hogar por dos simples razones:

1.- No quiero que Shaun sepa dónde estoy atendiéndome
2.- Conducir me relaja.

Cruzo las puertas de vidrio, la secretaria me observa fijamente la conozco desde que murieron mis padres, no es necesario las presentaciones o palabras, solo señala al cuarto del doctor y entro sin esperar más indicaciones.

--¿Cómo te has sentido últimamente?—dice el doctor en cuanto cierro la puerta detrás de mí, está sentado en su habitual escritorio como en todas las consultas ¿no se aburrirá o cansara de estar siempre así?

--Más abrumado que de costumbre doc. ¿A quién engaño viniendo? No me curare—las palabras últimamente salen de mi boca desde lo más profundo de mi pecho, en el reflejo de la ventana puedo apreciarme mi cabello es un desastre color caramelo, mis ojos cafés con grandes ojeras denotan que no he dormido más allá de 2 horas al día, la piel blanca denota claramente mi falta de sol la complexión de mi cuerpo delgado no ayuda mucho a un simple diagnóstico de persona sana.

Sí, porque yo no soy un idiota sentimental—interviene Patrick

--Michael, muchacho el medicamento no estaba haciendo el efecto que debería por lo que he pedido otro, es más fuerte pero mantendrá a raya a la otra personalidad—extiende el papel de la receta, el típico color naranja de la nota me enferma la vista.

--Estoy harto de las pastillas—musito, esto no puede continuar así detesto cada maldita píldora

--Podemos probar si quieres vacunas, duran más tiempo pero son dos veces por semana—no suena mala idea, asiento sonriendo y escucho los pasos del doctor rebuscando entre su escritorio y posteriormente en su estante de libros, levanta la manga del suéter marrón, siento el pinchazo de la aguja, esto es lo más cercano a sentirme que sigo por aquí.

--¿no tiene efectos secundarios?—exclamo al ver al doctor, creo que soy su conejillo de indias en esta situación

--Para nada, esta patentado por una empresa que...---todo se ha vuelto tan oscuro...

Las palabras del doctor son solo ahora sonidos sin sentido ante el frio de la nada, encerrado dentro de mi cabeza logro distinguir un espejo al estar frente a este mi reflejo sonreía de una manera tan escalofriante

--¿temer o no temer? Esa es tu cuestión—habla esa alucinación, no puedo responder; la garganta se me ha cerrado, lo veo salir del cristal de una manera tan escalofriante y distorsionada ¡esto debe ser una pesadilla! No veo otra alternativa.

--no te quedara nada, me asegurare de eso—exclamo a un par de centímetros de donde me encontraba, sonidos se hacen presentes, un latido y estática de un viejo aparato electrónico...

Una luz fácil de reconocer me da la bienvenida al mundo real.

--Muchacho, seguiremos con las pastillas—escucho decir al doctor, está sentado a mi lado del sofá del consultorio con una libreta en manos

--De acuerdo—miro a la ventana con la tela de seda, el sol me indica que son las 6pm apenas está oscureciendo.

--He estado analizando la idea sobre hace un tratamiento nuevo... algo más creativo; un video diario. Esto no solo ayudara, sino que te hará más extrovertido. —sonríe ante mi expresión de duda, no parece mala idea si es que...

-- Lo subirás a un canal de YouTube—

--No puede pedirme esto, ni siquiera mi mejor amiga sabe de mi estúpida situación—alego con un nudo en mi tráquea el aire me falta lucho por no volver al abismo de las pesadillas del cual temo no volver

--Realmente si no estás dispuesto a probar ¿Cómo piensas ganar?, Michael es necesario. —contesta sin remordimiento alguno, sus facciones de hombre mayor se notan más cuando sonríe plenamente.

--Supongo que tiene razón—murmuro levantándome—mañana volveré para el resto de la información, será mejor que me vaya, ha sido un día completo de emociones doctor—

Odio esperar respuestas sobre todo con este estado de animo de mierda, cierro detrás de mí sin dar una última mirada a la secretaria que aunque es linda no es mi tipo de mujer quizás para pasar el rato y no sentirme solo pero me niego a quedarme con alguien que sea tan superficial, el sonido de mi estómago sí que es fastidioso, lo primero que haré al llegar a casa será comer algo caliente.

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No pude resistirme a publicar este capitulo XD