🔹ᴀsí ǫᴜᴇ, sóʟᴏ ᴅᴇᴛᴇɴᴛᴇ 🔹
🔹ɴᴏ ᴇsᴘᴇʀᴇs ɴᴀᴅᴀ ᴅᴇ ᴍí, sᴏʟᴏ ᴅᴀ ᴍᴀʀᴄʜᴀ ᴀᴛʀᴀs 🔹

¡Vaya! Parece que serás un estudiante de universidad, veamos quien será tu compañero de clase

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Seo Changbin - Stray Kids

Date prisa, llegarás tarde a clases

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—¿Que pasó entre ustedes? —pregunté curioso dándole otro mordisco a mi rebanada de pizza, estábamos en el comedor escolar, a minutos de volver a clases.

—Lo mandé a la mierda, ese patán pensaba que le iba a estar rogando, ya quisiera —dijo Sinb tranquilamente mientras usaba su celular.

—Ojala yo fuera igual de ruda que tú, tardé semanas en terminar con mi ex —Eunha puso labios de pato, mirando a Sinb.

—Yo te dije que no valía la pena, pero andabas de insistente con que cambiaría —Le recordó Umji a Eunha, quien solo volteó hacia otro lado, ignorando el tema.

—Todos los hombres son iguales, sin ofender T/N —comentó Sinb

—No te preocupes —dije recargando la mejilla en mi mano.

—¿Y que tal te ha ido en el amor? ¿Ya no sucedió nada con Bang Chan? —La pregunta de Umji provocó que las tres me mirarán con curiosidad, esperando mi respuesta.

Uno de los únicos amigos que he logrado hacer este semestre es Bang Chan, desde que hablamos me pareció buen chico.

—Nunca pasó nada, me parece atractivo pero no es mi tipo, lo veo solo como un gran amigo —admito sin más.

—Que lástima, Bang Chan era un buen chico para ti —dijo Eunha, jugando con el popote de su jugo.

—Pero si nunca has hablado con él —Ahora que Umji lo mencionó, ninguna de las tres han hablado con él, solo lo reconocen por mi.

—Desde lejos puedo ver qué es un gran chico —Eunha tenía una leve sonrisa en su rostro al decirlo, nunca he hablado nada malo de él, así que entiendo porque tiene esa percepción de Bang Chan.

—Cuidado que Eunha te lo quita —bromea Sinb con una sonrisa en su rostro.

—¡Oye! Yo nunca le quitaría un chico a un amigo —reclama Eunha ofendida, intercambiamos miradas en silencio con una sonrisa, era divertido bromear con ella.

Estaba por darle otro mordisco a mi pizza cuando mi celular se iluminó levemente; una notificación de WhatsApp.

Mordí ligeramente la pizza, dejando el resto de rebana sostenido por mi boca, y agarre mi celular para revisar el mensaje.

Terminando de enviar el mensaje, una luz repentina captó mi atención, era Sinb, quien había logrado tomarme una foto.

—Oops, no le quite el flash —Sinb con una gran sonrisa bajó su celular, acercándose para ver mejor la foto, era algo habitual en nuestra amistad este tipo de fotografías en momentos al azar.

—¿Que tal salí? —Deje mi celular en la mesa y continúe comiendo de forma normal.

—Yo creo que es tu mejor foto —Sinb me mostró su celular, el ángulo no era malo, pero tener una rebana de pizza en mi boca mientras usaba el teléfono era muy bebé adicto al celular.

—Pues no sales tan mal —opina Umji, quien miraba la foto con atención hasta que Sinb quitó el celular.

—Si tú lo dices

—Y... ya estaría —dice Sinb con una sonrisa.

—¿Que cosa?

—Tu foto está publicada en mi historia de instagram, te etiquete por si la quieres compartir.

—¿Por qué publicaste eso? Salgo horrible —Intente quitarle el celular pero lo guardó en su pantalón con rapidez.

—Te recuerdo que me debes una, ¿Te acuerdas de cuando publicaste una historia donde me caí del escritorio del profesor? —reclama Sinb, provocándome una sonrisa al recordar ese momento.

—Bueno bueno, entonces estamos a mano.

—Sigo sin entender cómo se te ocurrió subirte al escritorio del profesor —dice Eunha.

—Era hora libre y habían puesto música en el salón, estaba ambientada.

Reí al recordar lo sucedido, Sinb subió al escritorio del profesor para perrear, la empecé a grabar mientras cantaba aquella canción tan pegadiza, el escritorio se movía inestable hasta que se fue de lado, llevándose consigo a Sinb.

—Oye T/N, ¿Conoces a Changbin? -preguntó Sinb curiosa, sacándome del recuerdo.

—Si, lo odio, siempre me anda molestando en clases —dije con fastidio, Changbin era un dolor de cabeza cada vez que lo miraba. —¿Por qué?

—Respondió tu historia con un emoji riéndose, ni sabía que me seguía —responde Sinb, quien probablemente ya estaba revisando el perfil del chico.

—Ahh, es ese chico, iba conmigo en una clase de cálculo el semestre pasado, nunca le hablé porque me daba miedo —admite Eunha, quien ahora estaba junto a Sinb, viendo el perfil de Changbin.

—¿Que tanto lo ven? —pregunto confundido.

—¿Por qué? ¿Celoso? —Sinb me miró con una sonrisa en su rostro, esperando mi reacción a aquella pregunta.

—Claro que no, no lo soporto —termino de dar el último bocado a mi pizza, limpiando mi boca con una servilleta.

—Del odio al amor solo hay un paso —dice Umji, uniéndose a Sinb y Eunha para ver el perfil de aquel chico.

—Creo que se necesitarán más pasos para que suceda eso... y ya dejen de verlo —respondo quitándole el celular a Sinb.

Cuando por fin decidimos ponerle atención a la hora, ya íbamos tarde para nuestras clases, por lo que nos despedimos y cada uno se dirigió a su salón.

...

Por fin la última hora del lunes, solo tenía que soportar una clase de Química para volver a casa.

Recostado en mi banca, pensaba que haría al volver, si leer algún libro o ver una película en Netflix.

—Buenos días T/N, no te había visto en todo el día —saluda Bang Chan con una leve sonrisa.

Con un conjunto negro, podías pensar que era un chico rudo, hasta que mirabas su cara, donde un rostro amigable y unos lentes redondos mostraban su personalidad real.

—Buenos días Bang Chan, ¿Que tal ha estado tu día? —Levanto mi cabeza y sonrio. Bang Chan se sentó frente a mi, como normalmente lo hacía.

—Un poco cansado la verdad, 2 horas de Historia, me andaba durmiendo —admite quitándose los lentes y rascándose los ojos.

—Ya solo nos queda una clase, aguanta un poco —dije alegre.

—¿Por qué andan tan sonrientes? —pregunta Changbin con una media sonrisa. Bang Chan y Changbin son muy buenos amigos, por lo que se saludan con confianza, en cambio yo solo le muestro una leve sonrisa.

Changbin tiene una sudadera gris un poco holgada y un pantalón negro, suele venir con este tipo de estilo normalmente, algo cómodo y básico.

Sin importar el clima siempre lo miraba con el gorro de la sudadera, posiblemente en algún momento no lo tendría puesto, pero no me ha tocado verlo sin él.

Él sabe que le tengo un tipo de desprecio, pero no le importa y aún así me saluda alegremente como si fuéramos amigos de toda la vida.

—Muestrame una sonrisa más alegre, ándale —pide Changbin, dejando su mochila en el asiento de mi izquierda.

—Si quieres también te doy un beso en el cachete —digo sarcásticamente mientras saco cosas de mi mochila.

—No tienes que tener alguna excusa para besarme, si quieres hacerlo solo dimelo —coqueteó levantando las cejas y mostrando media sonrisa.

Rodé mis ojos y lo ignoré, esperaba que se cambiara de asiento para sentarse junto a Bang Chan, como siempre lo hacía, pero no pasó.

Perfecto, ahora la tiene más fácil para molestarme.

—Muy bien chicos, traigan a revisar su tarea, recuerden que los sellos valen el 40% de su calificación final —avisó la maestra al entrar y sentarse en su silla. Empecé a buscar mi tarea entre las hojas de mi cuaderno.

—¿Hiciste la tarea? A verla —Quitándome mi cuaderno sin permiso, Changbin miraba mi trabajo —Wow, tu tarea tiene muchos colores, a mí se me olvidó hacerla.

Cualquier tarea o trabajo lo decoraba con plumas de colores, me gustaba darle ese brillo para que se vieran lindos.

—Dame mi cuaderno —me acerqué fastidiado para intentar quitárselo.

—Espera espera, aún sigo viendo —dice moviéndose para darme la espalda, evitando que pueda quitarle el cuaderno.

Me estaba empezando a enojar y Bang Chan lo notó, porque su voz apareció en la escena.

—Changbin ya dáselo, recuerda que esta profesora no pone sello si llega tarde a su escritorio —dice tranquilamente, mirándonos a ambos.

—Okay Okay, te regreso tu cuaderno, se ve muy bien tu tarea... —lo agarre y me alejé sin decir nada.

Bang Chan y yo fuimos al escritorio de la maestra, no sin antes tener que hacer fila, ella se dedicaba a verificar que fuera lo que pidió.

—Parece que Changbin hoy quiso estar contigo —dice Bang Chan leyendo su tarea, repasando que todo estuviera en orden.

—Para mi mala suerte sí, no sé cómo lo aguantas —miré hacía Changbin, el chico se encontraba cruzado de brazos mirando su mesa.

—No es tan insoportable, cuando entiendes que esa es su forma de ser le tomas cariño —de igual forma, Bang Chan empezó a mirar a Changbin.

—Pues vaya forma de ser

—Date la oportunidad de conocerlo bien, es un buen chico —para cuando terminó de decir eso, Changbin ya había notado que lo mirábamos.

Changbin me señaló y con las manos preguntó qué hacía mirándolo, a lo cual solo me volteé y avance en la fila.

Con un sello en mi libreta, volví a mi asiento y saqué mi celular para comprobar la hora, aquel fondo de un atardecer rosa me mostraba que faltaban 43 minutos para finalizar la clase.

—¿Un atardecer rosa? Eso es aburrido, deberías poner algo más interesante de fondo —opina Changbin, quien se estiraba lo mayor posible para ver mi celular.

—¿Que me recomiendas? Señor experto en fondos de bloqueo —respondo mirándolo con las cejas levantadas.

—Mira, presta —Antes de que reaccionara, Changbin me había quitado el celular, descubrí que le encantaba agarrar mis cosas sin mi permiso.

Observe como posaba frente a mi cámara y, pocos segundos después, empezó a ver sus fotos.

—Salgo increíble, estas fotos son dignas de estar en tu fondo de bloqueo —dice con una gran sonrisa de orgullo, le quité el celular y miré una de las fotos que había tomado.

La voz de la profesora nos indicaba el inicio de la clase, deje mi celular y le preste atención a su explicación. De igual forma, Changbin dejó de moverse y se concentró en escuchar la clase.

Pero cuando la profesora terminó de hablar y nos dió un trabajo, unas bolitas de papel golpeaban mi cuaderno cada pocos segundos.

—¿Que quieres? —pregunté fastidiado al hartarme.

—Nada, solo quiero tu atención —admite lanzándome otra bolita de papel.

—Changbin por favor, basta —dije serio, el chico estaba apunto de lanzarme otra bolita hasta que notó mi enojo, entonces recostó su cabeza en la mesa en silencio.

Momentos después, miré a Changbin concentrado en su trabajo, sé que el chico es inteligente y aprende rápido, pero le aburren las clases.

Antes de que cualquiera terminara su trabajo, la profesora se puso de pie.

—Muy bien chicos, como probablemente ya les habrá dicho algún otro alumno, me tomaré unos días de descanso, para ser exactos 3, por lo que les dejaré un proyecto —Todos escuchábamos con atención, en especial cuando mencionó un proyecto, los cuales eran el 30% de la calificación.

—Por ser el tema que hemos estado viendo, tendrán que hacer una maqueta de un modelo atómico del elemento que les toque, pero también deberán grabar un vídeo explicandola y diciendo la utilidad de ese elemento en nuestra sociedad. —Muy bien, ahora no tendré tiempo para leer ni para ver una película, gracias química.

—Profesora, ¿Se puede hacer en parejas? —preguntó Chaeyoung, quien siempre se sentaba junto a otra chica llamada Mina, seguramente quiere que ambas puedan hacerlo juntas.

—Justo a eso iba, será un trabajo en parejas, para evitar que se haga un desorden para elegir su pareja y todo lo demás, encontré esta página de internet que ya distribuyó eso al azar. —agarro el control del proyector y presionó un botón, poco a poco una pantalla se hizo más clara; mostrando las parejas elegidas por la página.

Muchos elementos, modelos y nombres estaba siendo mostrados en la pared, buscaba el mío con curiosidad hasta que lo encontré.

Aluminio - Modelo atómico de Bohr - T/N y Changbin

Justo lo que necesitaba.

—No hay cambios de parejas ni excusas, ya están grandes como para saber trabajar con cualquier persona. El vídeo será mandado a mi correo el viernes y la maqueta la traerán el próximo lunes, ¿Entendido?

Todos respondieron un sí, después de tomarle foto a la imagen del proyecto, lo apagó y salió de la clase, despidiéndose con una sonrisa.

—Mira que suerte tengo, me tocó con el listillo del salón —dice Changbin con una sonrisa, caminando hasta ponerse frente a mi.

—Pensé que ese era Bang Chan

—Él también es muy inteligente, pero él no usa una pluma rosa para escribir los títulos —recargo sus manos en la mesa mientras me ve.

—Ya veo —contesto cortante, aún sin verlo directamente.

—¿Que día quieres hacer el proyecto? —pregunta Changbin.

—Cualquier día está bien, estoy libre toda la semana

—¿Te parece el jueves? Yo compro los materias para la cartulina y tú haz la investigación de lo que vamos a decir, creo que te gustaba hacer investigaciones —noto que está rascándose la nuca, me sorprende que sepa eso de mi.

—Si si, me parece bien, ¿A qué hora? —Changbin estaba por responder hasta que un tono de llamada captó nuestra atención. Era mi celular.

—Ahh, espera un momento —contesto la llamada, poniendo el celular en mi oreja. —¿Bueno?

—Ya estamos esperándote en el estacionamiento, ¿Dónde estás? —Escucho la voz de Sinb a través del celular, Umji solía llevarnos a ambos a nuestras casas porque le quedaba de paso.

—Estoy ocupado con algo, en un momento voy.

—Okay, apúrate porque Umji tiene que ir a su retoque de cabello, es en una hora.

—Sisi, ahí nos vemos —digo colgando la llamada.

—Si quieres solo pásame tu número y nos ponemos de acuerdo por mensaje, también sirve que te paso mi ubicacion. —sugiere mientras saca su celular. Le paso mi número y me manda mensaje para verificar que fuera el correcto.

En la parte superior de mi celular llegó una notificación de un número desconocido: Hello, darling 😎

Ya mostrándole que me llegó el mensaje, camino hacia la puerta con rapidez para ir al estacionamiento.

—Adiós, nos vemos el jueves —dice con una leve sonrisa, me despido diciendole bye con la mano y salgo del salón.

Tarde unos pocos minutos para llegar al estacionamiento, donde Umji y Sinb ya estaban dentro del coche.

—¿Tarde mucho? —pregunte abriendo la puerta trasera del auto, Umji manejaba y Sinb era copiloto, por lo que siempre me sentaba atrás.

—La verdad no, ¿Que estabas haciendo? —dice Umji, prendiendo el auto y empezando a salir del lugar.

—La profesora de química faltará 3 días, en parejas tenemos que hacer una maqueta y un vídeo explicandola

—Suena muy divertido, ¿Te toco con alguien interesante? —pregunta Sinb, quien miraba las calles a través de la ventana.

—Changbin.

—No puede ser, ¿Es enserio? —Sinb me miraba con asombro desde su asiento.

—Me alegro de no tener tu suerte, yo creo que lo manifestaste —dice Umji.

—Solo espero que todo salga bien, hoy estuvo un poco castroso en clase, no dejó de molestarme.

—¿No dijiste que siempre hacía eso?

—Si, pero hoy estuvo mucho más molesto, hasta se sentó a mi lado para aventarme bolas de papel —Mientras decía eso, registraba su número, solamente "Changbin".

—Debería tener alguna razón para molestarte específicamente a ti, ¿Estás seguro que solo te molesta a ti? —pregunta Umji nuevamente.

—Creo que si, cuando me estaba aventando las bolitas le pregunté que quería, solo me dijo que quería mi atención —conteste sin importancia, mirando estados de mis contactos en WhatsApp.

Hubo un silencio raro donde Umji y Sinb intercambiaron una mirada sospechosa.

—¿Qué? —pregunto confundido al notar su extraña reacción.

—¿Con que tipo de cosas te molesta? —No sabía que estaban tratando de averiguar a través de esa pregunta, pero sabía que ambas escuchaban con atención.

—No sé, me quita mis cosas y no me las quiere dar, también suele hacer ese tipo de comentarios que son coqueteo de broma, le gusta que le ponga atención. -Intercambiando miradas de nuevo, Umji y Sinb se comunicaron sin hablar.

—Si te soy sincera, suena a qué le gustas -dice Sinb a los segundos.

—¿Gustarle? Realmente lo dudo, no tendría sentido que se comportara así de molesto con alguien que le gustara.

—¿Lo dices enserio? Eso suena a lo que cualquier chico haría —al decir eso, Sinb confirmo con la cabeza lo dicho por Umji.

—Yo nunca he hecho eso —dije tratando de demostrar que no era posible gustarle a Changbin.

—Pues porque a ti no te gusta nadie, solo actores famosos y el repartidor de pizza de la otra vez

—En sus fotos se miraba atractivo, ¿No te gusta? —pregunta Umji.

—Es un chico guapo pero su personalidad lo arruina, o más bien el objetivo con el que me molesta —admito pensando en Changbin, no podía negar que era alguien muy atractivo, lastimosamente llegando a ser mi tipo.

—Si el te pidiera ser su novio, ¿Saldrías con él? —La pregunta de Sinb me dejó pensando un rato, ¿Cómo sería Changbin de novio? No lo imagino teniendo comportamientos típicos de enamorado.

—No lo sé, es atractivo pero dudo que sea buen partido, con ese comportamiento seguramente me criticara por cualquier cosa —dije sin más.

En cierta parte me daba risa lo absurdo que era la teoría de que le gustara a Changbin, para mí era claro que ese chico solo buscaba diversión en mi.

—¿Que repartidor de pizza? —recordé al captar lo que había dicho Sinb momentos antes.

—El que nos llevo una pizza el día que Eunha hizo una noche de películas —Sinb provocó que la imagen de un repartidor de sonrisa tierna apareciera en mi mente.

—Tenía una barba atractiva —admito con un leve sonrojo.

Después de eso cambiamos de tema y seguimos conversando como normalmente, un mensaje fue mostrado en mi pantalla, haciéndome dudar si por alguna razón estaba invocando a Changbin cada que hablaba de él.

Changbin
Te parece bien el jueves a las 4 p.m.? Es que saliendo de la escuela voy al gimnasio 🧍🏻‍♂️

Tú
Esta bien

Changbin
👍

Cerré la conversación, notando que nos acercábamos a una calle demasiado familiar, señal que estábamos llegando a mi casa.

—Nos vemos mañana —Umji se orillo en la esquina de la calle y quitó el seguro de las puertas, dejando que saliera del vehículo.

—Adioooos —Se despedía Sinb con una sonrisa y moviendo su mano.

—Byee, graciaaas —dije mientras el auto se alejaba, me di la vuelta y comencé a caminar hacía mi casa.

...

—¿Y como te fue haciendo la tarea con Changbin? —pregunta Eunha, quien estaba concentrada resolviendo unos ejercicios de Cálculo.

—La haremos hoy en la tarde —respondí revisando mi cartera, comprobando cuánto dinero tenía.

Se supone que a esta hora tendría que estar en clase de Química, pero la profesora no está, así que tengo hora libre.

Sinb y Eunha también tienen esta hora libre, su horario tiene esta hora vacía. Umji decidió no entrar a clase, dijo que de todas formas Lengua no es tan importante.

Sentados en una mesa de picnic, cada uno estaba en su mundo sin hacer demasiado.

—¿Y solo harán el proyecto o harán algo más? -—pregunta Umji, quien estaba concentrada leyendo un libro.

—Pues solo el proyecto, ni siquiera nos agradamos como para hacer algo más —guarde mi cartera para levantarme de la mesa.

—¿A dónde vas? —pregunta Sinb, dejando de mirar su celular.

—Voy a la tienda, tengo hambre, ¿Quieren algo?

—No, gracias —contestaron Eunha y Umji al mismo tiempo, ambas se miraron con una leve sonrisa en su rostro.

—Un jugo de naranja, porfavor —pide Sinb.

Caminé hacia la tienda en silencio, no tarde mucho en llegar. Ya en el lugar me quedé pensando que podía comer, tenía hambre pero no un antojo en específico.

Pensando aún, alguien se me acercó con una sonrisa alegre.

—¿Que vas a comprar? —pregunta Bang Chan con una sonrisa.

—No lo sé, ¿Que me recomiendas? —dije analizando las opciones de comida.

—Podrias comprarte una torta de milanesa, para ser de la tienda y no del comedor está muy bien —recomienda Bang Chan.

—Mmm, bueno, ¿Que vas a comprarte tú? —me acerco al mostrador para pedir mis cosas.

—Yo nada, Changbin me pidió que le comprara una agua —explica Bang.

—Ohh... —dije antes de pedir lo que deseaba; una torta de milanesa y dos jugos de naranja en botella.

—¿Hoy irás a su casa para el proyecto, verdad?

—Si, ¿Tú ya hiciste el tuyo?

—Sip, ayer fui a la casa de Nayeon para hacerlo, que bueno que me tocara con ella, somos amigos desde hace años.

—Que suerte tienes

—¿No te gusta estar con Changbin?

—Mayormente, no

—No seas tan malo con él, no es mala persona.

—Sé que no es tan mala persona, pero siento que solo me ve como objeto para molestar y sacarse una risa

—¿Tu crees que lo hace con la pura intención de reírse de ti?

—No veo otra razón

—Te voy a ser sincero, sé que Changbin no lo hace con la intención de burlarse de ti, solo le gusta estar contigo, es su manera de poder hablarte.

—Sé que por alguna razón le gusta estar cerca de mi, pero no entiendo porque le agradaría, nunca hemos hablado de buena forma y solo nos relacionamos cuando hace algo molesto.

—Puedes intentar hablar con él hoy, te prometo que tiene buenas intenciones.

—Pues lo intentaré... Nos vemos —ya con las cosas en mis manos, agarre el cambio y me fui de la tienda.

Caminando de regreso seguía pensando en lo que me dijo Bang Chan, puede que no quiera dejar mal a su amigo... o simplemente estoy exagerando las cosas.

Al mirar a las chicas un recuerdo apareció en mi mente, la plática que tuve con Umji y Sinb hace días en su carro.

Me senté en silencio y dejé mis cosas sobre la mesa, pensando todavía en Changbin.

Changbin, ese chico y su nombre no ha dejado de aparecer en cada conversación que tengo recientemente, creo que ni siquiera de mi cabeza.

—¿Pasó algo? —La voz preocupada de Sinb me sacó de mis pensamientos; sacudí mi cabeza, tratando de esfumar esos pensamientos.

—No, nada, me quedé un poco pensativo jeje —dije apenado.

—¿Cuánto fue por el jugo? —Sinb se relajó al notar que no era nada grave.

—Nada, te lo regalo —le di el jugo con una leve sonrisa.

—Bueno, te debo uno entonces —abrió su jugo y le dió un leve sorbo.

Eunha ya estaba terminando de hacer su tarea y Umji había completado su media hora de lectura diaria, así que platicamos con normalidad.

Quité el envoltorio de mi torta, listo para probarla y verificar que Bang Chan no tuviera mal gusto, pero mi celular empezó a sonar.

Llamada
Changbin

Contestar / Colgar

Dudé durante unos leves segundos si contestar, ya que era muy repentina esta llamada, pero era mucho más raro porque acababa de hablar con Bang Chan sobre él.

Ya me estaba dando miedo este tipo de invocación que Changbin tenía cada que mencionaba su nombre.

Aún sin estar seguro, presione contestar y coloqué el celular en mi oreja.

—Hola, ya tengo todos los materiales para la maqueta, ¿Ya tienes la investigación? —Su voz sonaba alegre y energética, muy característica de él.

—Si, anoté en fichas bibliográficas lo que va a decir cada uno, no es tan extenso así que es sencillo de aprender —conteste dándole un sorbo a mi jugo.

—Muy bien, ¿Quieres que pida una pizza o algo para que comamos? ¿O prefieres otra cosa? —Ni siquiera había pensado en comer algo durante mi estancia en su casa.

—No es necesario, no creo que tardemos mucho en el proyecto

—No de verdad, no quiero que tengas hambre, aparte en la maqueta tenemos que pintar unas cosas, van a tardar en secarse.

—Bueno, pide lo que quieras

—¿Una pizza de pepperoni está bien? -

—Si, está bien

—Okay, nos vemos en la tarde, ¿Quieres que pase por ti?

—No, gracias, solo pásame tu ubicación, yo voy.

—¿Estás seguro? Yo puedo pasar por ti al regresar del gym

—Si, no te preocupes.

—Bueno... Adiós

—Byee —Me despedí cortando la llamada y dejando mi celular en la mesa.

Ahora sí, mordí mi torta y me sorprendió el sabor de esta, no estaba nada mal.

—¿Por qué andabas tan cortante? ¿Quién te llamó? —preguntó Umji.

—Changbin, quería preguntarme sobre el proyecto.

—Pues ese "Pide lo que quieras" y "Solo pásame tu ubicación" sonó a qué tienen otros planes más importantes ehh —menciona Sinb con tono de burla.

—Me preguntó sobre que quería comer y si quería que él me llevara a su casa.

—¿Y aceptaste que te llevara? —Pregunta Eunha.

—Claro que no

—¿Por qué no? No tienes carro para ir con él —Me recuerda Umji.

—Me pido un taxi o algo, no hay problema.

—Con el dinero que te gastarás en el taxi podías haberte comprado otra torta y otro jugo.

—Bueno, entonces ya me arrepentí de no aceptar su invitación —dije bromeando y dándole otro mordisco a mi torta.

...

Al pagarle al taxi y bajar de él, me encontré con un edificio de departamentos bastante lindo, 3 pisos con una buena cantidad de espacio en cada uno.

A lado del departamento había un lugar exclusivo para estacionamiento, parecía un lugar bastante cómodo para vivir.

Pasé por un camino de piedra que me llevaba a la entrada del lugar, saqué mi celular y le mandé un mensaje a Changbin, avisándole que ya me encontraba en la entrada.

A los pocos segundos veo como el chico baja por las escaleras con rapidez, totalmente de negro, pero con algo diferente en él.

Ahí fue cuando noté lo diferente que se veía Changbin sin sudadera, ya que una camisa negra de manga corta hacía lucir sus brazos musculosos.

—Hola, ¿Listo para hacer el proyecto? —sonrió

—Claro —dije devolviéndole la sonrisa.

Siguendolo, subimos al segundo piso y entramos a la puerta del lado derecho.

El color blanco y azul predominaba el lugar, creando un ambiente bastante elegante, me sorprende que Changbin viva en un lugar así, ya que es muy diferente a la percepción que tengo sobre él.

—¿Te gusta mi departamento? —Changbin notó que observaba con asombro su casa, tal vez estaba acostumbrado a que los demás no esperarán este tipo de ambientación en su departamento.

—La verdad me encanta —realmente me fascinaba el diseño que tenía su hogar. Una sonrisa nerviosa y un leve sonrojo apareció en su cara, pude verlo antes de que volteara a otro lado. No debe estar acostumbrado a los halagos.

—Iré a ordenar la pizza, en la mesa de la sala puse todos los materiales de la maqueta, para que veas que todo está en orden —dice sacando su celular del bolsillo y llamando a una pizzería.

—Okay —me dirigí a la sala, sentándome en un gran sillón azul y revisé los materiales de la maqueta, no faltaba nada, todo estaba correcto, empecé a pensar que Changbin si era una buena pareja de proyecto.

Saqué las fichas de información sobre lo que teníamos que decir y espere a que Changbin regresara.

—La pizza llegará en 20 minutos, podemos ir empezando mientras esperamos —dice sentándose cerca de mi.

—Si, aquí están las fichas, léela para comprobar que esten bien —agarrando las fichas empezó a leer con rapidez, luego las dejó en la mesa.

—Esta perfecto, aparte lo decoraste con colores, quedó bien —dice con una sonrisa.

Me alegre levemente al saber que le parecía perfecta la investigación, lo miré durante unos pocos segundos y note que su cabello estaba despeinado.

Aún se me hacía extraño verlo sin sudadera, ya que normalmente tenía el gorro puesto, tapando su cabello.

—Ahh, perdón por tener mi cabello tan despeinado, me bañé y estaba esperando a que se secara —dice con una leve sonrisa, me miró de reojo y agarró de nuevo una de las fichas con información.

Desvié la mirada a los materiales mientras seguía pensando en el aspecto de Changbin, ¿Por qué tenía que lucir tan bien?

Se veía mucho mejor sin sudadera.

—Bueno, empecemos con la maqueta —dije para dejar de lado mis pensamientos.

...

Durante la elaboración de la maqueta no hablamos demasiado, solo nos quedamos en un silencio incómodo hasta que alguno de los dos decidía preguntar o decir algo sobre el proyecto.

Estábamos concentrados pintando las bolas de unicel hasta que el celular de Changbin empezó a sonar, el chico estaba por contestar, pero recordó que tenía las manos llenas de pintura sin secar.

—La pizza ya debe estar afuera —informa mientras se dirige a su baño para lavarse las manos.

—Si quieres salgo yo —ofrecí dejando de lado lo que pintaba.

—Por favor, mi cartera está en la mesa —dice en voz alta, se escucha el sonido del agua saliendo por el lavamanos.

Ignoro la cartera de Changbin y salgo del departamento para dirigirme al primer piso.

Al bajar las escaleras me percaté rápidamente que aquel repartidor era alguien que ya había visto.

Cómo parece que en esta ciudad no hay otras pizzerías, aquel repartidor era el mismo chico de barba atractiva que nos llevó una pizza a la casa de Eunha.

—Hola, buenos días, ¿El pedido de Changbin? —pregunta el repartidor con una sonrisa alegre, en sus manos se encontraba una caja de pizza.

—Sii, es para mí —digo devolviéndole la sonrisa.

—Tome, aquí está su pizza —agarro la pizza y la colocó en una de mis manos.

—Gracias, ¿Cuánto sería? —pregunto mientras sentía el calor de la pizza, por suerte no era muy alto.

Me dijo la cantidad y saqué mi cartera para pagarle lo debido. Después de darme el cambio, estaba por irme cuando me habló de nuevo.

—Por cierto, ¿Ya me había tocado entregarte una pizza en otro lugar? —pregunta el repartidor.

—Ahh si, hace unas semanas en la calle Apple.

—Con razón, sabía que había visto tu cara en otro lado —dice con una sonrisa, me sorprendió que, por alguna razón, me recordara.

—Vaya, sinceramente me asombró toparme contigo de nuevo.

—Supongo que es el destino, si nos volvemos a topar en otro lado es señal que debemos hacernos amigos

—O tal vez sea señal que la pizzería es la favorita de esta ciudad —conteste con una sonrisa en mi rostro, el chico río ligeramente.

—Prefiero pensar que es la primera, nos vemos amigo —dice despidiéndose con una sonrisa y corriendo hacia su moto, tendrá que hacer más pedidos.

Me dí la vuelta para subir las escaleras y me asuste al ver a Changbin viéndome desde la cima de estás.

—¿Por qué no pagaste con mi cartera? —pregunta cuando noto su presencia.

—No quería agarrar tu cartera y sacarte dinero —admití subiendo las escaleras

—Entiendo... ¿Conoces al repartidor? —pregunta al entrar al departamento.

—Como tal no, solo ya me había tocado verlo en casa de una amiga.

—¿Enserio? Parecía que llevarán tiempo conociéndose, se estaban riendo mucho —dice como si estuviera celoso, pero después sonrió, demostrando que solo estaba bromeando

—Solo hablamos un rato —deje la pizza en la mesa de la sala, por suerte había suficiente espacio para la maqueta y la caja de pizza.

—¿Te gustó el repartidor verdad?

—Claro que no, solo estaba siendo amable.

—¿Te gustan con barba? Tiene una buena barba

—Si tiene una barba atractiva pero eso no tiene nada que ver

—¿Si yo tuviera barba te gustaría?

—Creo que necesitarías más que una barba bonita para gustarme

—¿Cómo que? ¿Que debería tener para salir con alguien de tu calibre? —cuestiona en tono burlón.

—Probablemente una mejor personalidad.

—Ahh entiendo, a ti te gustan que sean más rudos, que gruñan —hace un sonido de gruñido y después empieza a reírse.

Lo ignoré y me senté frente la maqueta, listo para continuar pintando.

—Deja ahí la maqueta, ven a comer y después seguimos con ella

—La verdad no tengo hambre

—Pensé que te encantaba la pizza, la otra vez miré que te tomaron una foto comiendo una rebanada —dice sonriente.

Ohh vaya, se me había olvidado que Changbin había visto aquella foto que publicó Sinb.

Antes de que pudiera contestar, Changbin ya estaba riéndose.

—Te veías como un obsesionado con el celular —dice entre risas.

Continúe pintando mientras trataba de ignorar la risa de Changbin, quien estaba recostado en el sillón mientras se reía.

Antes de que me diera cuenta, una rebana de pizza se acercaba a mi boca lentamente.

—Anda, come un poco —ofrece acercando la rebanada hacía mi.

—Ya te dije que no tengo hambre —contesto mientras me hago hacía atrás, alejarme de la rebanada.

—Vamoos, el avioncito está volando, abre la boca —empieza a mover la rebanada de un lado a otro, como si me tratara de un bebé.

Giré mi cuerpo para darle la espalda y continúe pintando.

Sentí como su mano agarraba mi muñeca, evitando que pudiera seguir moviendo el pincel.

—Solo una mordidita —dice acercándome de nuevo la pizza.

Intente liberarme de su agarre pero su fuerza era mayor, no tuve más remedio que abrir la boca para darle una mordida a la pizza.

—Buen chico —Changbin tenía una gran sonrisa, no pude evitar enojarme por como me estaba tratando.

Me comí esa rebanada, para evitar que me hiciera algo más, y permanecimos en silencio durante un gran rato, incluso todas las bolas de unicel ya se habían secado.

Empezamos a armar la estructura del modelo atómico, comenzando a pegar las bolas de unicel en la maqueta, solo hablando para preguntar o verificar que estuviéramos haciendo las cosas bien.

Mientras pegaba unos electrones sentí como Changbin se acercaba a mi lado y se sentaba junto a mi.

No dije nada y continúe concentrado en la maqueta.

Unos golpecitos en mi hombro hicieron que volteara a ver de qué se trataba, era Changbin golpeándome con un pincel.

Lo ignoré y seguí colocando aquellas esferas pintadas por alrededor de la maqueta.

—¿Puedo hacerte una pregunta? —pregunta dejando de dar los golpecitos.

—Ya estás haciendo una —conteste sin dejar de trabajar en la maqueta.

—Bang Chan me contó que no estabas muy feliz de ser mi equipo, ¿Por qué?

Dejé de trabajar en la maqueta del asombro por la pregunta, realmente no me esperaba que me cuestionara sobre eso de manera directa.

—Siendo sincero, es solo que no creo que nuestras personalidades sean compatibles —digo como verdad a medias, no iba a decirle a Changbin que lo odiaba en este momento, volvería el ambiente más incómodo de lo que ya está.

—¿Por qué lo dices? Yo creo que solo debemos conocernos más para volvernos amigos —dice Changbin mirando sus manos, estuve unos segundos sin responder porque ni siquiera había pensado en qué algún día podríamos ser amigos.

—Tal vez... —continuo trabajando en la maqueta, pensando en lo que Changbin me dijo, algo que dudaba que pasara.

...

Con la maqueta terminada, solo nos quedaba grabar el vídeo, por lo que le dí unos minutos a Changbin para que se aprendiera su parte.

Cuando me dijo que estaba preparado, ordenamos todo, acomodé mi celular y comenzamos a grabar.

Antes de que pudiera empezar, Changbin ya estaba riéndose. Esperaba que solo fueran los nervios iniciales pero cada toma estaba siendo interrumpida por él.

Se equivocaba, se le olvidaba o simplemente no podía aguantarse la risa cuando hablaba, en cada toma tenía que ir a parar la grabación y tener que reiniciarla.

Muchos intentos tuvieron que suceder hasta que salió un vídeo decente, donde posiblemente se notaba mi cara de enfado.

Presione la pantalla y la cámara dejó de grabar, por fin, después de tanto, tenemos un vídeo completo para la clase.

Me senté en el sillón y miré al techo, tratando de eliminar el estrés que me había ocasionado el comportamiento de Changbin.

Cerré los ojos pensando en cualquier otra cosa, si no me relajaba explotaría de enojo en este momento.

Ya terminó el proyecto, ya me puedo ir a mi casa y hacer algo más divertido que soportar a este chico.

—Pues ni tan mal salió —dijo Changbin, sentí como se sentó a mi lado y recargo su cuerpo hacia atrás.

—No podía salir peor después de 20 intentos

—No fue para tanto

—¿Cómo que no fue para tanto? Tardamos casi una hora porque no te lo tomabas enserio.

—Si me lo tomé enserio

—Claro que no, ni siquiera intentabas hacerlo bien

—Solo fueron algunos errores, pero ya salió una toma bien, ya puedes relajarte.

Sin decir nada más, agarre mi mochila y estaba por caminar a la puerta.

—¿Ya te vas? —pregunta al ver que agarro mis cosas.

—Si, tengo mejores cosas que hacer

—¿Cómo que? ¿Ligarte al repartidor? —pregunta Changbin con tono burlesco. Después de estar tanto tiempo aguantando a aquel joven ya no podía seguir soportando otras de sus bromas.

—Changbin, ¿Podrías simplemente detenerte?

—¿Sobre que?

—¡Sobre todo! Estoy harto de ti, eres un chico inmaduro que busca hacerse el gracioso molestandome —dije en voz alta, sabía que había explotado y mis emociones empezaron a dominarme.

—T/N calma- —notaba que estaba sorprendido al verme de esta manera, pero fue interrumpido por mis impulsos.

—No Changbin, tengo que aguantarte todos los días como para que también se te ocurra estar molestandome a la hora de hacer el proyecto. —digo con enojo. Changbin me miraba sin decir nada, aún con asombro en su rostro.

—Es la misma historia de siempre, ya ni siquiera es divertido. Odio que me molestes pero porque tu intención simplemente es burlarte de mi. Cada que tienes la oportunidad haces algo para sacarte una risa —continue diciéndole al chico, quien ahora miraba al suelo sin moverse.

—No es eso, solo que- —quiso decir algo pero volví a interrumpirlo, no tenía humor de escucharlo hablar.

—No me interesa en lo absoluto saber lo que tienes que decir, cualquier excusa que tengas ya me da igual. —me di la vuelta y agarre la perilla para abrir la puerta.

—Sé que soy un idiota y me comportó como un tonto, pero es que... —dice levantándose del sillón y mirándome con ojos brillosos.

—¿¡Es que qué!?

—¡Me gustas! Me comporto como idiota porque me gustas, nunca te he hecho o dicho algo con el objetivo de reírme de ti, no sabía cómo hablarte y solo podía acercarme a ti desde que empecé a hacerte bromas...

Me quedé en shock al escuchar aquello, ninguna parte de mi cuerpo podía ejecutar un movimiento, miraba como Changbin sacaba lágrimas en silencio.

¿Esto era otra de sus bromas? Era imposible, aquel rostro triste y lleno de lágrimas me demostraba que no podía estar mintiéndome.

—Perdón por ser tan pesado contigo, me comporto como tonto porque me da nervios estar a tu lado... me gustas desde hace meses, desde antes que nos tocara en la misma clase, quería hablarte pero siempre terminaba con una broma estúpida

Mi cerebro no podía analizar lo que me estaba diciendo, no era posible que este chico, el que estuve pensando que me usaba como objeto de burla, realmente le gustaba.

Me aleje de la puerta y me senté en su sillón en silencio, sentía la mirada de Changbin sobre mí, posiblemente aún llorando.

Nos quedamos en silencio durante unos segundos eternos, respiraba lentamente, pensando en toda esta situación que acababa de suceder.

—Siempre te odie porque creí que te burlabas de mi, cada broma o chiste que decías era para acercarte a mi... —levanté la mirada, aquel rostro con los ojos llorosos me dolía verlo.

Él chico que siempre estaba lleno de energía y felicidad ahora se me acercaba con tristeza, sentándose a mi lado.

—Dejame comenzar de nuevo, por favor, dejaré de molestarte y seré más tranquilo —Changbin seguía soltando lágrimas al hablar, verlo en esta posición me hacía sentir muy mal, dispuesto a cambiar su personalidad para seguir hablando conmigo.

—Changbin, cálmate, no quiero que cambies tu personalidad, tú eres tú gracias a ella —le limpié las lágrimas que caían de sus ojos, ambos nos mirábamos directamente con mucho sentimiento.

—Pero dijiste que me odiabas por mis bromas —dice mirándome, el brillo de sus ojos me ocasionaba un dolor en el corazón.

—Las odiaba porque pensaba que tenías otra razón al hacerlas, pero no las hiciste con una mala intención. Me intentaron demostrar lo contrario pero los ignoré, era obvio pero no me parecía creíble que te gustara.

—Me gustas mucho... desde que me enteré que íbamos a estar en la misma clase me alegre mucho, incluso cuando anunciaron las parejas de química me emocione, Bang Chan estaba harto de que le hablara de ti -admite avergonzado.

No pude evitar soltar una pequeña risa por lo tierno que me pareció Changbin en ese momento, saber que sus comportamientos nunca tuvieron una razón negativa detrás me provocaba felicidad.

Aún estaba confundido con mis sentimientos hacia Changbin, era demasiado pronto para pensar que me gustaba también, pero sabía que le tenía cariño a este chico.

Lo abracé y sentí como me envolvió en sus brazos.

...

Abrí los ojos lentamente aún con sueño, no sé si noté primero que no era mi casa o que unos brazos rodeaban mi cuerpo, pero despertar en el sillon de Changbin era algo que aún estaba procesando.

Intente moverme pero esos brazos me apretaron, impidiendo que me moviera. Podía sentir el cuerpo de Changbin abrazando el mío por detrás.

—Chang... Changbin, despierta —toqué el brazo de Changbin para tratar de despertarlo tranquilamente.

—¡Mmh! —Un quejido fuerte me hizo entender que no tenía muchas ganas de despertar, pero de igual forma aquellos brazos dejaron de rodearme y permitieron levantarme del sillón.

Saqué mi celular y revise la hora: 5:30 de la mañana. Ambos nos quedamos dormidos en el sillón.

—¿Por qué te despiertas tan temprano? Espera a que suene mi alarma —Se queja Changbin tratando de abrir los ojos, algo que el sueño no sé lo dejaba fácil.

Con Changbin recostado en el sillón y unas ganas gigantes de seguir durmiendo, no pude evitar recostarme en su pecho para dormir otro rato, volviendo a sentir como sus brazos me rodeaban.

...

—¡TIN TIN TIN! —Un sonido innecesariamente fuerte de alarma provocó que ambos despertamos con rapidez.

—¿Por qué tu alarma es tan ruidosa? —me queje intentando levantarme del sillón, pero el pecho de Changbin y su comodidad era más llamativo que nada.

—Es para despertar rápido, la alarma no se quitara hasta que me levante por mi celular —avisa dándome palmaditas en la espalda. Sin más remedio, tuve que ponerme de pie para dejarlo agarrar su celular.

A los segundos aquel sonido parecido a una alarma sísmica dejo de sonar.

Changbin se quedó unos segundos inmóvil hasta que noté un sonrojo y sonrisa en su rostro.

—¿Que pasó? —pregunté confundido.

—Dormimos juntos, dormimos abrazados durante toda la noche... —dice con asombro y felicidad en su rostro, no pude evitar sonreír de ternura al ver su comportamiento.

Me levanté del sillón y me acerqué a Changbin, el chico me miraba sonrojado con una leve sonrisa, agarré su rostro y lo acerqué al mío para besarlo.

Odiaba admitir que quería hacer esto desde hace tiempo, ahí me di cuenta que parte del odio a Changbin era porque detestaba que siendo tan atractivo me tratara así.

Al terminar el beso aún seguía sin creerme lo que acababa de pasar, no solo el beso, si no todo lo sucedido ayer.

Con una sonrisa alegre en su rostro, Changbin me agarró de las caderas para darme otro beso más largo.

No quería que nada de esto terminara, no quería que se detuviera.

Inspirado en Pull Up de Viviz