Tres pasillos más tarde la puerta del sobrino del doctor se empezaba a dibujar en la vista. Hacía mucho tiempo que no pasaba por allí, pero recordaba perfectamente donde estaba cada lugar.

Cuando llegó, una voz masculina lo instó a entrar para verse envuelto en un abrazo de oso.

-Yo también te he echado de menos Raúl- afirmó sonriendo Manuel- pero si me sueltas, quizás consiga recuperar un poco de aire para mis pulmones

-Lo lamento- dijo el menor de los hombres soltando a su tío.

Raúl era el hijo de la hermana mayor del doctor. Esta había fallecido hacía pocos meses y eso había propiciado un acercamiento entre ambos.
Toda la familia se había dedicado a la medicina, en cualquiera de sus ramas, y Raúl no pensaba ser la excepción. Nada mas acabar el Bachillerato decidió estudiar Medicina y cinco años después se graduó con matrícula de honor. Se pasó muchas horas estudiando y en sus ratos libres se desestresaba haciendo ejercicio. Por eso, a sus 30 años, podía presumir de que tenía un físico muy bien trabajado.

Sus amigos le tenían envidia pues, por mucho que lo intentaban, nunca conseguían tener un torso tan tonificado como el suyo; las mujeres, jóvenes o mayores, se quedaban embobadas mirando lo que ellas denominaban "El ángel que nos alegra la vista"
Quizás era a conscuencia de ello que, cada vez que daba un abrazo, solía dejar en un estado cercano a la asfixia al afortunado que recibiese su muestra de afecto. No solía tener en cuenta ese hecho pues era muy cariñoso e impulsivo pero, una vez que lo hacía, se sentía muy culpable por no haberlo tenido en cuenta.
Raúl era de estas personas que vivía para hacer el bien a los demás y que no entendía la maldad que se escondía en las entrañas de la humanidad; ese fue principalmente el motivo de su vocación.

-Hace mucho que no te veo pero toma asiento tío- le dijo haciéndole un ademán y sentándose en su escritorio- Qué es lo que te trae por aquí?

-Pues verás, te acuerdas de Blas?- pregunto temeroso Manuel.

-Claro, es uno de los pocos casos en los que un paciente comatoso permanece en ese estado más de  cinco años- dijo haciendo memoria- Que pasó con el?

-Ha despertado hace unos días- respondió atropelladamente

-Wow! Eso si que no me lo esperaba. Creo que todo el mundo había perdido la esperanza de que algún día volviese a ver la luz del sol... Y como está?- quiso saber curioso él

Manuel no tuvo tiempo para contestar pues, antes de poder articular palabra, se abrió la puerta de la consulta dejando paso a la secretaria del centro con una bandeja de cafés.

-Disculpe la interrupción doctor pero me tome la libertad de traerles un par de cafés. Espero que no les moleste- informo mostrando su mejor sonrisa.

-¡Por supuesto que no Naomy! Sospecho que la reunión se alargara un poco así que hiciste bien en traerlos- contesto Raúl mientras se levantaba de su silla para recoger los cafés de las manos de la secretaria.

-Les recuerdo que si necesitan cualquier cosa no duden en avisarme- sonrió y se despidió con un guiño antes de marcharse.

-Lo tendremos en cuenta Naomy- sonrió servicial Raúl; sonrisa que mantuvo hasta que oyó cerrarse la puerta. Fue en ese momento, cuando dejó escapar el aliento que retenían sus pulmones haciendo reír a su tío.

-Esa muchacha sigue interesada en ti, ¿verdad?

-Si- contesto suspirando el menor de los médicos

-¿No le has explicado tus sentimientos hacia ella?- inquirió Manuel

-Más de una vez lo he hecho tío, pero no hay manera de convencerla de que mis sentimientos hacia ella no podrán pasar nunca de una simple amistad. Aun guarda la esperanza de que algún día me fije en ella...

-Pero, no hay ni la mas remota posibilidad de se eso ocurra, ¿verdad?

-No, ya sabes que mi corazón esta ocupado tío.

-Lo se hijo, pero muchas veces los hombres hacemos tonterías de las que después nos arrepentimos. Créeme cuando te diga que cambiar a Vanessa por Naomy sería una de ellas- le dijo

-Lo se tío. Además, yo no siento nada por Naomy. Nada comparado con lo que Vane me hace sentir, se sobreentiende.

-Bueno, me alegro de que pienses así. Vanessa es una chica muy buena y se ve a leguas que corresponde a tus sentimientos. No se merece que le hagas daño- avisó el mayor

-Te aseguro que no es mi intención. Es más, esta noche tengo pensado proponerle matrimonio- confirmo Raúl creyendo que así su tío se quedaría tranquilo.

-Me parece una buena idea por tu parte, pero no creas que por ponerle un aro de plata en el dedo lo tienes todo solucionado. El matrimonio es mucho mas que la propia ceremonia. Tienes que demostrarle día a día que la amas y que darías tu vida por ella de ser necesario...

-Lo sé tío lo sé- lo cortó el

Y ese era el problema para Manuel: que su sobrino parecía saberlo todo. Tenía muchas virtudes sin duda, pero ese defecto eclipsaba muchas de ellas y precisamente por eso llegaría a crear conflictos importantes en un futuro...

Holiii! Que tal están mis lectores bellxs? Que os parece Raúl, creéis que será una buena persona?

Aprovecho para avisaros de que tardare en subir el siguiente capitulo porque las palabras se me atascan. Lo sientoo😞😞

Espero que nos veamos pronto😊
Att:Vane💕