Alguien va a pelear [Chanbaek]


—Oye, tengo una tarjeta de CINÉPOLIS extra, ¿la quieres? —preguntó Baekhyun trepando una mohosa pared con el fin de llegar al estrecho hoyo formado en ella. —Este mes tiene promoción de palomitas, refrescos y entradas al 2x1.

¿Qué? —Preguntó Chen a través del intercomunicador mientras estaba con su enorme y equipada camioneta cerca del edificio en el que Baek intentaba infiltrarse—. ¿Para qué quiero yo una tarjeta del 2x1 CINÉPOLIS?

—Ay, ¿qué sé yo? Para tener una bonita cita con Suho, un pequeño respiro, tomarse de las manos y unirse como uno mientras pasean por allí juntitos— una vacilante sonrisa se formó debajo de su cubre bocas negro—. Puedes ahorrar mucho dinero, pasar tiempo con tu amado y ampliar tu repertorio cinematográfico. Tres cosas en una.

El hombre no esperó respuesta de su compañero e inició con su misión; puso un par de guantes de cuero en sus manos y comenzó a trabajar en una rejilla de metal, ésta era la protección externa de los ductos de ventilación del edificio que, tanto Chen como él habían estado vigilando desde un tiempo atrás.

Baekhyun amarró un par de hilos alrededor de las esquinas de metal y tiró con sumo cuidado de ellos, logrando sacar la rejilla de la pared. Sonrió con galanura viendo su trabajo rendir frutos y con mucha sigiles se introdujo en el ducto de ventilación.

Baek —repitió Chen a través del intercomunicador, —avanzas de forma recta veinte metros, luego giras a la izquierda.

Su compañero le indicó mientras examinaba en un panel el mapa de los ductos de ventilación del edificio al que si compañero se había infiltrado. Habían visto el mapa cientos de veces, lo conocían de memoria pero era cierto que no se permitiría un error de ubicación solo por dejarlo pasar.

Ahora, volviendo al tema, ¿Por qué me ofreces una tarjeta de un cine al cual no voy a ir, para poder tener una cita la cual no voy a tener?

—Porque te amo, porque quiero que tu relación con tu pareja fluya y no se vuelva monótona, y porque ir al cine todos los días es un gasto horrible, te quiero ayudar —por medio del comunicador se escuchó como es que Baekhyun tronó sus labios, mandando un beso a Chen.

Qué asco me das —Baekhyun no lo miraba, pero podía asegurar que su compañero tenía una cara de asco—. Sé lo suficiente de cine, con el trabajo que tengo mi noviazgo no es monótono y mucho menos me hace falta el dinero, así que no me trago ninguna de tus buenas acciones.

—Chen, Chen. Chen, la gente no puede ser amable porque inmediatamente desconfías.

Baekhyun hablaba con un tono burlesco a su amigo mientras se arrastraba por el ducto de ventilación. Había algo hermoso en ser tan delgado y fino y era que él podía entrar a lugares muy estrechos y pasar como si estuviese lleno de lubricante sobre ellos. Estaba casi bailando de la emoción por llegar a la habitación en la que tenía que bajar pero al girar se encontró con una sorpresa

—Oh, no. Houston tenemos un problema.

¿Qué pasó?

Baekhyun estaba de frente a un enorme ventilador que no dejaba de girar estaba justo en la parte en la que Chen le había dicho que siguiera. Baekhyun era muy intrépido, pero sus habilidades no eran tan amplias como para que su delgado cuerpo pudiera detener pesadas aspas de metal y salir vivo de allí.

—Olvidaste decirme que hay un ventilador del tamaño del sol justo en donde debo girar.

Oh, bebé. No te preocupes, tu papi Chen está aquí para salvarte.

Chen se movió con fluidez sobre el enrome teclado que tenía frente a él y en menos de un parpadeo detuvo el funcionamiento del ventilador.

Ya —exclamó Chen con frescura—. Te dije que no te preocuparas, tu mero papi lo puede todo.

—Por eso te amor nene, ¿no has considerado tenerme entre tu ganado como tu vaca lechera?

Asco tu propuesta amigo —Chen intentó hacer un horrible sonido fresa que solo causó que Baekhyun rodara sus ojos en dirección al cielo, rogando a todo lo divino tener paciencia para su antipático amigo.

—Por eso nade te quiere.

Ahí te equivocas, a diferencia de ti en mi casa hay alguien esperando por mí— contra atacó Chen.

Un silencio incómodo invadió su línea de comunicación.

Baekhyun no pudo evitar soltar un sonido hueco que nació desde el fondo de su estómago cuando escuchó lo que su amigo había dicho.

Aunque fuera una broma de Chen, no era más que la verdad porque a él nadie lo esperaba en casa; nadie preguntaría por él en sus días de ausencia, nadie rezaría una plegaria al cielo en caso de necesitarla y si fuera el caso nadie lloraría en su tumba porque él no tenía a nadie.

Casi por un instante temió por su vida, temió por su presente y su futuro.

Odiaba la estereotipada idea de tener a alguien para complementarse eternamente, odiaba la frágil línea entre la libertad y la soledad, odiaba ceder ante la idea de "una vida completa", pero sobre todo odiaba no poder tener a la persona indicada para él.

Aprovechó el milagroso silencio y pasó debajo de las astas de metal que estaban estáticas frente a él. Arrastró su delgado cuerpo sobre el metal monitoreando el ambiente en busca de algún indicio que le indicara que su misión estaba en peligro.

Volvió al presente cuando la voz de Chen sonó en su oreja.

Oye, respecto a eso quizás deberías olvidarlo.

—Déjalo, así está bien, de todas formas tienes razón al menos alguien te espera en casa a diferencia de mí.

Vamos no puede ser tan malo, ¿Y Jongin? Quizás o te espera diario pero al menos lo hace unas dos veces a la semana.

— ¿Jongin? – Incluso el mismo Baekhyun había olvidado a Jongin—. Bueno, creo que él no puede contar ni para dos días.

¿Por qué dices eso?

—El hombre es una mariposa entera, no soportó una pequeña broma que le hice y se fue.

¿Estás jodiendo? Nadie se va por una pequeña broma tuya. Tus chistes son tan sosos que dan pena ajena.

—Bueno, al parecer él no piensa lo mismo.

¿Qué tan grande puede ser una broma para dejar al mismísimo Byun Baekhyun?

—Una joda. Chen realmente fue solo una joda.

Baekhyun alzó la voz para enfatizar su enojo.

—Estábamos en casa, ajá, entonces yo llegue, ajá, y le dije ten, y él dijo "¿Qué?" y yo dije "Sí, ten" ajá entonces él dijo" ¿Qué cosa?" y yo le dije" esta cosa" y él dijo ajá, él dijo" ¿Por qué me das eso?" y yo, o sea yo le dije, le dije" es para ti, para nosotros" entonces él tomó la cosa y aja, la vio casi con asco, ajá con asco ¿por qué la iba a ver con asco?

Pasó saliva por su garganta.

—Entonces me la aventó. Chen ¿Puedes creerlo? ¡Él me lo aventó! Ajá y después de eso él solo, aja él solo tomó sus cosas que de hecho ajá, no tomó todas sus cosas ¿Bien? La tarjeta de CINÉPOLIS es de él y aun así él y se fue, ajá ¡Se fue! No me dijo nada ¿Ok? Sólo se fue, ajá, entonces me dejó a mí y a mi regalo ¿Por qué me va a dejar a mí al igual que esa maldita tarjeta de cine? Entonces ajá, bueno el tipo se fue y pues ya, ajá, él solo se fue y por eso es que ya no estamos juntos.

La línea nuevamente volvió a quedar en silencio cuando Baekhyun terminó su muy peculiar relato.

— ¿Qué? – fue lo único que logró salir de la boca de Chen.

—Lo que escuchaste.

Pero es que no entendí nada, ¿qué verga le diste y porqué demonios me ofreces la tarjeta de CINÉPOLIS de Kai?

—Eish, parece que no escuchaste nada ¡dejó la tarjeta! Qué quieres que haga ¿qué me la quede? Ni loco, yo no quiero nada de él.

¡Es que no dijiste nada! – exclamó Chen con frustración.

— ¡Pero si te lo acabo de decir! —la voz de Baekhyun sonó golpeada—. Te dije que estábamos en casa, ajá, entonces yo llegue, ajá, y le dije...

¿Estás idiota o solo eres una broma? Por su puesto que te escuché pero no entendí nada de lo que me dijiste.

—El idiota eres tú por no prestar atención.

Pero si el idiota eres tú ¡Maldita sea! Solo dijes "ajá" y ya ¡Ninguna historia que se respete está llena de "ajá"! a demás jamás mencionaste que le diste.

— Un collar ¿sí? me pareció gracioso darle un collar como los que se utilizan en las relaciones Sub-dom. Creí que lo tomaría como una buena broma, incluso pensé que lo podríamos utilizar como juego esa noche pero no pasó ¡él simplemente no lo entendió y se fue! Solo tomó las cosas que cupieron en la primera maleta que vio y se fue.

Es muy probable decir que él no amaba a Jongin, quizás ni siquiera lo quería pero el hombre le gustaba y lo hacía mucho. Así que para él había sido fácil compartir un poco de su retorcido humor y decidió comprar un hermoso collar de cuero que estaba seguro que combinaba con la piel del brillante moreno que lo acompañaba a la cama todas las noches.

Grande fue la sorpresa al ver que el hombre no solo se ofendió sino que incluso fue capaz de tomar sus cosas y largarse para siempre de allí. Al momento del calor Baekhyun hizo cosas que jamás haría, como ir en silencio detrás de él, salir a la calle para visualizar una escena de película viendo a un hombre alto salir a la calle, tomar un taxi con quién sabe qué dirección y huir de él sin siquiera voltear atrás.

Fue la hora en la que sucedió, el asombro que lo atacó o el pequeño sentimiento de decepción que se sintió en su estómago lo que hizo que se quedara por horas fuera de su puerta de noche con un notable clima frío azotando su cuerpo mientras sentía sus ánimos desfallecer.

Vaya, sí que él chico era todo un dramático.

—Sí bueno, ¿qué puedo hacer yo? Si no es capaz de soportar una pequeña broma entonces era algo lógico saber que las cosas entre él y yo no iban a funcionar.

Bueno, ¿cómo te sientes respecto a eso? — preguntó Chen con un tono calmado.

— ¿Cómo me siento? ¿Realmente me preguntas cómo me siento mientras estoy de infiltrado en los ductos de ventilación de un edificio al cual me metí ilegalmente para conseguir no sé qué cosas que nuestro jefe nos pidió?

Chen soltó una enorme carcajada cuando escuchó las palabras de su amigo. Sí, en definitiva su amigo estaba bien.

De acuerdo, de acuerdo. Yo solo quería ser buena amigo, tú eres el único que no se quiere abrir lo suficiente para poder llegar a un nivel más profundo de la amistad.

—Yixing me dijo lo mismo y terminamos encamados.

Oh por favor, detente de una vez, ¿me recuerdas por favor por qué demonios seguimos juntos?

—Porque soy tu complemento, porque no puedo vivir la vida sin ti y sobre todo porque eres la única persona que trabaja con Yongguk que aún no me ha ahorcado durante las misiones.

Y en parte tenía razón.

En su pasado Baekhyun desarrolló un enorme instinto de supervivencia callejera; su delgado y ágil cuerpo le ayudaba cada que su boca lo metía en problemas con otras personas.

Él sobrevivió un tiempo bajo de la ley de la calle: le gustaba participar en peleas callejeras para poder ganar algo de dinero, de vez en cuando robaba alguna casa que estuviera vacía o simplemente vagaba por las calles en busca de adrenalina para su cuerpo.

Todo eso hasta que un día un elegante hombre de traje negro, rostro serio y voz profunda se acercó a él en el callejón húmedo que había adoptad como refugio temporal en lo que trataba de desvanecer las manchas de sangre de su ropa que había conseguido gracias a una pequeña pelea que había tenido minutos antes.

El hombre en cuestión le sonrió y tendió un pañuelo blanco y junto con éste una generosa propuesta.

Bang Yongguk era un hombre que tenía pequeños negocios de comercio esparcido por diferentes puntos de la cuidad, pero también tenía un cierto gusto por las cosas caras, por cosas brillantes y sobre todo por cosas ajenas.

Yongguk tenía tiempo vigilándolo, había observado en silencio las habilidades de Baekhyun desde hacía tiempo atrás y ése día, cuando vio al chico derribar a alguien por lo menos diez kilogramos más pesado que él por simple diversión entre camaradas, había sido el empujón que necesitaba para acercarse a él y pedirle trabajar con él.

No pasó mucho tiempo para que Baekhyun tomara la invitación del hombre y se uniera a él. El chico trabajó en varios pedidos del Jefe Yongguk pero lamentablemente jamás podía conservar por mucho tiempo a un compañero debido a que nadie soportaba su peculiar forma de ser.

No fue hasta que tiempo después Yongguk cansado de la inquietante actitud del pequeño Baek decidió darle un compañero con el mismo nivel de energía que él. Chen llegó con fuerza a su vida, el hombre tenía un vasto conocimiento del mundo de las tecnologías lo que lo hacía un gran complemento para él. Al principio pensó que sería como todas las demás personas con las que había trabajado; pensó que solo lo escucharían hablar e inmediatamente iría con Yongguk a quejarse de él.

Grata fue la sorpresa que se llevó cuando vio que Chen parecía ser la única persona que comprendía su extraño sentido del humor y de vez en cuando compartía bromas de pésimo gusto con él.

Sin darse cuenta había pasado más de 7 años trabajando con Yongguk y tres de ellos con Chen como su compañero. Sus trabajos no siempre salieron con éxito, pero la gran mayoría de ellos sí, por lo que Yongguk les había encargado algo de suma importancia para él: Robar una extraña especie de flor genéticamente modificada que había entrado en secreto al país.

El rumor se esparció por todos los barrios bajos: un extraño tipo de flor que podía ser procesada y convertida una droga potente. Tal flor no podía ser detectada como nociva, por lo que la hacía sumamente valiosa. Cuando esta información llegó a oídos de Yongguk, encargó inmediatamente a Chen y Baek ir por el único espécimen que había llegado al país.

Lo que nos trae de regreso al punto en el presente: Baekhyun dentro de un ducto de ventilación con Jongdae revisando mapas, alarmas y cámaras de seguridad para mayor éxito. El plan era sencillo: entrar, tomar la flor y salir de allí como si nada hubiera pasado.

La cosa iba tal cual el plan, Baekhyun estaba a punto de llegar a la rejilla por la cual debía de bajar hasta que la voz de Chen lo detuvo.

Mierda.

— ¿Y ahora qué? —Baekhyun bufó con cansancio.

Olvidé revisar las cámaras de seguridad. Baek, alguien ha entrado antes que tú.

— ¿Qué? ¡¿Cómo es posible que hayas olvidado vigilar algo tan importante?!

¡Lo siento! Solo me saqué un moco ¿sí? no fue tanto, fue solo un minuto y aprovecharon para entrar.

—De verdad que un día de estos te voy a...

No hay tiempo de relatar la forma en la que me vas a matar –Chen detuvo Baekhyun de forma abrupta—. Están a punto de entrar. Baekhyun —al fondo de podía escuchar como Chen movía cientos de teclas al mismo tiempo.

Tendrás que hacerlo a la antigua. Usa esa fuerza que tienes y embóscalos. Por lo que puedo ver son dos como nosotros, uno vigila la entrada , un tipo pequeño de complexión parecida a la tuya mientras que la otra persona, es quizás unos 10 kilos más pesado y 20 centímetros más alto que tú es el que va por la flor.

— ¿Por qué siempre me toca el hombre más grande?

Porque mis brazos son más pequeños, mi cuerpo es torpe y tú eres el único de los dos que tiene experiencia peleando.

—Pediré un aumento.

Si sales vivo de esto, esperemos que sí.

Baekhyun tuvo que respirar profundamente para no gritar por el error de su amigo. Tenía una simple tarea, una sola: vigilar y ni eso pudo hacer bien. Al parecer le tocaba a Baekhyun arreglar el asunto.

Sabía que tenía casi el tiempo contado, por lo que su plan fue sencillo: esperar a que el otro hombre entrara, cuando estuviera debajo de él, saltaría encima de él y lo tomaría desprevenido. Era difícil poder vencer a alguien más grande que él, pero no imposible.

Cerró los ojos un momento cuando escuchó la puerta abrirse. Era él, no había duda de ello. Tomó un profundo respiro y observó por la rejilla.

Su boca se quedó seca.

Un enorme hombre de lo que podía calcular 1.86 metros de altura, de hermoso cabello castaño que caía suavemente por sus ojos oscuros como el universo se presentó ante él.

Parecía casi imposible que alguien tan atractivo como él estuviera metido en los mismos sucios negocios que él.

Hey Baek, el tipo acaba de entrar.

—Lo sé ¿recuerdas a Jongin?

Acabamos de hablar de él, claro que me acuerdo.

—Pues yo ya lo olvidé.

¿Qué? —Chen chilló en la oreja de Baek.

—Creo que me he enamorado. Chen, es hermoso.

— ¿Quién es hermoso?

—El hombre con el que me voy a casar.

Espera ¿Qué? ¿Estás hablando del tipo que está a punto de robar nuestro trabajo? Baek, mente en el juego, guapo o no ése no es mi asunto, esto es trabajo no el show de casa de Baek.

—Pero Chen ¿cómo me pides que me concentre si en cuanto lo vi sentí como se empezaba a dilatar mi ano?

Por dios no seas asqueroso ¡No necesitaba saber eso!

Chen y Baekhyun se enfrascaron en una ridícula pelea a través de sus comunicadores que no se dieron cuenta ninguno de los dos que el extraño hombre que había entrado había escuchado su discusión, por lo tanto los había descubierto.

—Hey allá arriba ¿quién eres? —sonó la voz gruesa del hombre alto.

— ¿Lo ves? —Chilló de la emoción Baekhyun—. Hasta su voz es hermosa.

Idiota, ¡Nos descubrió!

Baekhyun ignoró los chillidos de estrés de Chen y decidió bajar con toda la gracia que su ser tenía para poder mostrarse majestuoso frente al hombre de sus sueños.

Y no fue eufemismo cuando dijo hombre de sus sueños, porque realmente lo era. El hombre alto le sonrió con chulería cuando lo vio bajar del ducto de ventilación. Fue casi mágico ver una fila de perfectos dientes blancos asomarse detrás de sus delgados y carnosos labios.

—Una lástima que nos encontremos en esta situación —dijo el hombre alto.

—O-oh, ¿lo es? Creo que esto es interesante —Baekhyun intentó coquetear con él.

—Lo es, vaya que lo es porque resulta que te veo y quisiera hacerte muchas cosas —el hombre se acercó seductoramente hasta llegar frente a Baekhyun.

Aprovechó la notable atracción que hubo entre ellos y tomó entre sus largos dedos el Rostro de Baekhyun. Quizás fue para divertirse un rato, pero el hombre que estaba debajo de él en verdad que era impresionante.

Su cabello castaño caía a los costados se su frente, sus pequeños ojos avellana lo miraban con un brillo intenso mientras que sus rosados y esponjados labios permanecían semi abiertos, la expresión en la cara del hombre era fascinación pura.

—Y ¿qué te impide hacerlas? —la rosada lengua de Baekhyun mojó sus esponjados labios, causando el hombre más alto se mareara con la vista.

—Bueno, resulta que tengo que llevarme una cosa y tengo que hacerlo rápido porque si no, una persona mala lo tomará por mí y se lo llevará y no queremos eso ¿verdad? —el hombre besó suavemente el pequeño lunar que había sobre la boca de Baekhyun.

—Por supuesto que no —la respuesta salió en forma de jadeo.

— ¡Sí! ¡Sí importa maldita sea! —Se escuchó la chillona voz de Chen a través del auricular de Baekhyun.

—Dile a tu amiguito que después se arregle contigo —sonrió con galanura y se separó de Baekhyun, dejándolo anonadado con la caricia que había sentido su piel.

El hombre caminó despacio hacia la flor que yacía en una esquina cercana a una pared de la habitación, la tomó entre sus manos y procedió a retirarse. Antes de poder llegar a la puerta, volteó todo su cuerpo en dirección al hombre castaño que estaba quieto en el otro extremo de la habitación.

—Dime botón de cerezo, si de casualidad sueño con tu boca sobre la mía ¿qué nombre debería gemir?

Baekhyun salió del trance y comenzó a ponerse rojo por las palabras tan atrevidas del hombre alto.

Idiota, eso debes de decir.

—Baekhyun, mi nombre, si mi nombre es Baekhyun, pero para ti, el amor de tu vida.

El contrario sonrió a causa de lo que dijo el muchacho y se dedicó a observarlo durante un rato.

—Muy bien Baekhyun, tu nombre saldrá como poesía de estos labios. Por el momento creo que debo irme, una lástima si me lo preguntas. No creo que nos volvamos a ver pero si lo preguntas —el hombre besó sus dedos y lanzó al aire un beso para Baekhyun como despedida– Mi nombre es Chanyeol.

Se dio media vuelta y salió de allí. Dejando a Baekhyun con una sonrisa en el rostro.



○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○



Baekhyun...— Chen habló a través del intercomunicador con su compañero.

— ¿Qué pasa ahora? —preguntó Baekhyun mientras caminaba por las tuberías subterráneas de su nueva misión.

Utilicé la tarjeta que me diste.

—Oh, ¿De verdad?

Sí, Suho y yo fuimos a ver la última de Dragon Ball Z.

—Dragon Ball Z, también fui a verla. Dios, Broly debería ser real, me encantaría encamarlo y hacerle...

Eres un asqueroso— Chen lo interrumpió.

—Si ese hombre existiera y te pidiera que le lamas las axilas lo harías.

— Qué asco, jamás haría eso.

— Lo hiciste con Suho una vez ¡Doble moralista!

— Fue por la anécdota ¡Y prometiste no volver a mencionarlo, maldita sea!

—No te vuelvas a meter con dios griego de Broly.

— ¿Por qué defender tanto a un simple personaje eclipsado? Creí que tu último flechazo fue aquel hombre que nos estropeó todo el trabajo y casi hace que nos corran.

—Y lo fue —aceptó Baekhyun mientras recordaba a aquel espectacular espécimen llamado Chanyeol—. Pero es más probable que vea en vida real a Broly que a aquel hermoso hombre de chocolate blanco.

— ¿Entonces dejaste que se llevaran nuestro trabajo delante de tus narices por un hombre al que no ibas a volver a ver en tu vida?

—No solo era un hombre, era ÉL HOMBRE.

Detente, de solo recordarlo hace que me den agruras. Mira, delante de ti hay algo que te pueda interesar. Si avanzas 30 metros y justo arriba de ti encontrarás un orificio que te llevará al primer piso, según mis cálculos solo romperás un poco de papel decorativo, no harás mucho escándalo.

Chen dio las instrucciones a Baekhyun.

¿Serías capaz de decirle las cosas que a mí me dijiste si lo tuvieras frente a ti?

—Primero dime ¿Por qué no somos mercenarios normales y entramos por la puerta? Esto de entrar desde la parte de abajo o superior de cada edificio al que vamos comienza a molestarme. Chanyeol entró por la puerta y pasó nada.

Porque son unos novatos y tú eres casi un profesional.

—Casi me doy asco por ser tan bueno en esto. Chen, soy bueno en todo menos en expresar mis homosexuales deseos eróticos a aquel monumento tallado por Miguel Ángel.

Baekhyun hizo al pie de la letra las indicaciones que Jongdae le dio y efectivamente, se podía ver un hueco en el que era seguro que cabía sin problemas.

Después de haber pasado meses luego de la "gracia" que hizo Baekhyun, Su jefe Yongguk les había prohibido hacer cualquier trabajo hasta que la sonrisa de adolescente enamorado de Baekhyun desapareciera de su rostro. Afortunadamente Chen había logrado avisar a Yongguk lo que había sucedido y acudieron al lugar con prisa.

Quizás había sido solo un juego o cosas de principiantes pero los empleados de Yongguk encontraron la dichosa planta abandonada a dos cuadras del edificio de donde fue robada. Por eso mismo las consecuencias para Chen y Baekhyun no fueron tan graves como se supone debieron ser.

Poco importó las consecuencias físicas que tuvo Baekhyun por sus imprudentes actos, luego de ésa fallido trabajo se le había visto con mucho mejor ánimo y actitud. Lo único que si cambió es que de vez en cuando se podía ver cuando Baekhyun tocaba de manera insistente el lunar en su labio, pero fuera de allí, todo marchó en orden.

Ahora, tenían como trabajo recuperar una caja fuerte que había sido hurtada del estudio de Yongguk. El hombre era tan controlador que había puesto rastreadores a cada cosa suya con valor, incluyendo a su pareja Choi Junhong.

—¿Lograste entrar?

—Claro que sí ¿con quién crees que hablas? Puedo entrar donde sea cuando sea —respondió Baekhyun levándose del suelo. Echó un vistazo general a la habitación pero no consiguió ver la caja fuerte de su jefe.

— ¿Así como entras, también puedes salir?


Una profunda voz sonó a su espalda, causando que un escalofrío atravesara todo su cuerpo.

Sorprendido Baekhyun redó su cuerpo en dirección a la melodiosa voz que sonó detrás de él, encontrándose con la perfecta imagen del hombre moreno cerca << muy cerca>> de él.

—O-oh — abrió los ojos cuando pudo ver de cerca el precioso rostro de Chanyeol. —. Eres tú—tartamudeó.

—Sí, soy yo –Chanyeol se acercó peligrosamente al cuerpo de Baekhyun.

Caminó sigilosamente frente a él y comenzó a empujarlo hasta poder encerrar a Baekhyun entre una pared y su cuerpo.

—Creo que la última vez dejamos algo pendiente, Baekhyun— susurró muy cerca de su rostro.

Baekhyun sintió su cuerpo temblar, había soñado con un momento así de intimo muchas veces.

—Ah, ¿lo hay? — Sintió ahogarse con su propia saliva—. ¿Qué quedó pendiente? Te di lo que querías.

— ¿De verdad creíste que eso sería todo? —Chanyeol colocó ambos brazos a los costados de la cabeza de Baekhyun y observó su rostro con detenimiento—. Creo que jamás será suficiente. Necesitan pelear.

—Oh — Baekhyun sintió todas sus piernas temblar. Era el olor de su piel, lo penetrante de su mirada, el aliento que chocaba justo en su boca y esos labios, esos malditos labios que había soñado alrededor de su lengua infinidad de veces. Fue demasiado para él — ¿Quién van a pelear?

De entre todas las cosas que Baekhyun quería hacerle a Chanyeol, pelear era la menos adecuada o no al menos como estaba acostumbrado a hacerlo. Quería tomarlo, besarlo insaciablemente hasta romper sus labios, quería enterrar sus dedos en ése desastroso cabello, quería hacer de todo, menos pelear.

Chanyeol bajó una de sus manos y tomó de la cintura a Baekhyun y acomodó su rostro de lado justo para tener a la vista el precioso filo de la quijada del más bajo y se acercó lentamente a la boca de Baekhyun.

—Sí, peleará mi lengua con tu paladar.

Al otro lado del intercomunicador se encontraba Chen, golpeando su cabeza contra su nuevo teclado porque sí, Baekhyun lo había vuelto a hacer y esta vez el jefe no los perdonaría.

Decir que esta fue la última vez que se encontraron es una total mentira.

Decir que Chanyeol no intervino el servicio del Chen para saber que trabajos le tocaban sería otra mentira.

Decir que Baekhyun no sufrió de los regaños de Chen y las represalias de Bang también sería otra mentira.

Pero vamos, por un hombre como ése si valía la pena.



○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○ • ○

Un aplauso aquí, un aplauso allá: Perdón por no estar aquí ya (? 

¿Acaso eso rimó? Perdón si no está betado pero tengo que subir algo a la cuenta, no puedo tenerla tan abandonada. Así que bueno, besitos besitos chao chao ♥

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