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SeHun subió una ceja al ver entrar a su padre con un espeso aroma a ceniza, signo de agresión en un alfa. Estaba muy curioso sobre el motivo pero lo dejo estar al recordar cuando vio pasar a lo lejos a Jung JoKyung, con la mano en el hombro de ChulSam. 

Fueron discretos, claro, pero sí que lo hizo fruncir más el ceño. Detrás de ellos vio a Yunho, YiFan y un alfa de gesto ceñudo que se parecía al omega. Quiso seguirlos pero ChanYeol le apretó el brazo tan fuerte que le hizo enseñarle los colmillos.

—Eso duele, cabrón, ¿Qué te pasa? —dándole un manotazo, miró con enojo a su amigo notando que este también estaba raro. El aroma de ChanYeol se llenó de ceniza y sus ojos brillaron. —Hey, van a notarlo.

El otro alfa salió de su trance y miro su amigo. — ¿Qué hace el omega Wu con los Jung?
—No tengo idea. —y de verdad que no. —Hey, por cierto, ¿Dónde está SeWan?

Yeol arrugo la nariz al verlo. —Es tu padre.

— ¿Dónde está? —pregunto evadiendo la reprimenda de su amigo.

—No lo sé, solo se alejó para ir al servicio pero ya se llevó un tiempo.

SeHun sintió un mal presentimiento.

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—Hyung, ¿Qué quiso decir ese hombre? — pregunto ChulSam en cuanto regresaron a sus habitaciones, aprovechando que BaekHyun no estaba. Después del enfrentamiento, el chino mayor estaba con la mirada perdida y parecía tan cansado y pálido que ChulSam lo ayudo a recostarse, temiendo que se desmayara. —Todo... todo lo que dijo... ¿es cierto?

—Chul... ¿puedes abrazarme hasta que me duerma?

ChulSam se mordió los labios para no llorar, porque YiXing parecía no poder hacerlo. Se recostó a su lado y, dada la diferencia de estaturas, lo abrazo por la espalda y pego su mejilla a la altura del su corazón. Ojala pudiera, de la manera que fuera, proteger a su hyung.

Supo el momento en el que YiXing se durmió pero él no pudo hacerlo, no con las palabras que aquel alfa había soltado y que resultaron peores que un golpe.
Siendo ciertas, los padres de su hyung y aquel alfa, habían cometido más de un crimen contra YiXing.

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BaekHyun casi soltó un quejido de ternura al ver a KyungSoo rehuir su mirada de nuevo cuando le sonrió. El alfa le había llevado una crepa dulce de Nutella después de la reunión y le pidió dar una vuelta por los terrenos en lo que la reunión terminaba.

—Te... pareces mucho a tu padre pero eres más guapo. —KyungSoo se maldijo en dos idiomas por no saber elegir un mejor tema para romper el hielo. Estaba muy, muy nervioso y BaekHyun no le ayudaba en nada al lucir tan guapo y hermoso. —Olvida eso.

—Tu madre también se parece más a ti, pero ella es linda y tu guapo. —el omega sonrió al recordar que la bella mujer incluso le regalo uno de los biscochos que llevo para su hijo, todo mientras le decía que era un chico precioso. Mamá Do era un encanto rosado. —Dijo que te encanta cocinar con ella cuando estas en casa.

Las mejillas del alfa se encendieron. —No... ¿te dijo eso?

BaekHyun le pellizco una mejilla, sonriendo con dulzura. —Un día cocina algo dulce para mi, ¿si?

KyungSoo tomo la mano del omega y dejo un beso en sus nudillos, aspirando el aroma a canela que lo hacía sentirse tan bien y tranquilo. —Cocinare todo lo que quieras cuando me lo pidas, Baek. Mi otra tarea en la vida es hacerte feliz.

— ¿Otra? ¿Qué hay de la primera?

—Amarte.

El omega sintió un golpe en su corazón que le lleno los ojos de lágrimas. No hubo ni una vacilación en la voz del alfa y sus ojos lo miraron con el cariño que soñó tener desde pequeño.

— ¿Te parece si tomamos un café antes de volver? —recuperando su confianza, el alfa lo tomo de la mano y se lo llevo hacia uno de los pequeños quioscos del campus que ofrecía bebidas.

BaekHyun no se dio cuenta, pero tanto su padre y hermano como los padres de KyungSoo, sonrieron al ver que ambos iban casi abrazados en su propio mundo. Con los brazos unidos, la cabeza del omega unida a la del alfa y el alfa guiando y cuidando de Baek. Un alfa de RW, de una fraternidad tan elitista y prepotente, caminaba de la mano sin pena con un omega que iba saltando de un lado a otro mientras lo jalaba de la unión de sus manos. Para los más conservadores, era inaudito y ridículo que un orgulloso alfa se dejara guiar por un omega cuando estaban acostumbrados a que este último caminara dos pasos atrás del alfa, con la cabeza gacha y siempre atento a las órdenes que se le dieran.

—Va a cuidarlo bien, ¿verdad? — pregunto Byun BaeHyuk, mirándolos desaparecer por una de las esquinas. —Él y YeDam son lo único que me importa.

— Lo hará. KyungSoo aparenta odiar a los demás, ser tan indiferente y rudo pero desde que aprendió a hablar, lo único que pedía en su cumpleaños era ser un alfa fuerte para proteger a su destinado. —respondió la madre de KyungSoo, con el rostro lleno de alegría. —Y KyungSoo también es lo más valioso que mi destinado y yo tenemos.

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ChulSam agito la leche en cajita que compro para YiXing, intentando dejar de pensar en todas las horribles cosas que el señor Oh dijo sobre su hyung.

Claro que explicaba muchas cosas. Como el tenue aroma a alfa que desprendía en ocasiones, el incremento de fuerza que superaba a JungKook y Jaejoong, los gruñidos graves cada que se enojaba, el instinto que despertaba en él para obedecerlo y el dorado que a veces brillaba en sus ojos.

También explicaba el miedo a los doctores, las agujas y esa amarga sensibilidad que tenía con respecto a ser llamado defecto o a hablar de sus padres.

—Sabes que esas pastillas pueden matarte, ¿verdad? — la voz de ChanYeol lo hizo saltar, casi tirando el frasco. El alfa miraba, con algo de amargura, las pastillas.

ChulSam solo giro la cabeza, guardo su frasco y se dio la vuelta con la intención de marcharse. Park le tomo del brazo, girándolo con un solo movimiento. —Suelta eso.

—No me toques, no tienes derecho a meterte en mi vida.

—Vas a morirte si no dejas de tomar eso. Esa marca es la peor, te va a dar anemia y después morirás. Todo por dejar de ser gordo sin hacer ejercicio. —supo que no fue la manera correcta de expresarse cuando el rostro del omega paso de molestia a dolor, mirándolo con sus ojos miel llenos de un sentimiento de frustración y desesperanza conocido.

— ¿Qué sabes tú? — soltó con evidente hostilidad. —Tu; alfa. Perfecto en todo, con un cuerpo fuerte, atlético y delgado. No necesitas hacer dietas porque tu cuerpo quema lo excedente solo por tu raza, a diferencia del mío que esta encadenado a adoptar un cuerpo apto para la fertilidad y por eso mis caderas son anchas. —ChulSam le dio un puñetazo en el pecho, separándolos. — ¿Qué vas a saber de necesitar purgantes? A ti no te enseñaron a verte bonito y delgado para que un alfa fuerte se fije en ti y no sienta vergüenza. No te llenaron de doctores y burlas porque eras gordo. ¡¿Qué sabes tú?! — de un último empujón, salió corriendo.

ChanYeol se quedó con el frasco en las manos y una acidez que le subía por la boca del estómago. En un intento de consolarse, metió la mano en el bolsillo de su sudadera y abrazo con ella el peluche de tigre que le traía seguridad a pesar de ignorar su motivo.

Al menos el frasco se iría a la basura esa misma noche.

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Aaah, soy un desastre pero traeré algo antes de fin de año que se ha vuelto mi proyecto de despedida especial. Ojo, es una despedida a algo personal, nada de qué preocuparse *inserte pulgar arriba*

De nuevo di algunas pistas en este cap fragmentado, atentos.

pd: He intentado buscarle un rostro a ChulSam pero no me he decidido, así que busque uno al que me gustaría que se pareciera.