CAPÍTULO 17.

                                                     DARREN. 

No podía dejar de hacerlo, tenía una gran sonrisa estúpida en el rostro, le doy vuelta al panqueque en el sartén, me había levantado temprano, para ir a una farmacia cercana y para preparar el desayuno de Daniela, apago la cocina y sirvo en un plato los panqueques, tomo la miel de maplee y rocío un poco, agrego la fruta picada, escucho como alguien entra. 

Me giro y mi sonrisa se expande al mirar a Daniela, ella se encuentra vestida y con su cabello húmedo, sus grandes ojos lindos me miran curiosa y en silencio. 

-Pensé que te habías ido- Susurra, ella cruza sus brazos y baja su mirada -No estabas en la cama cuando desperté- Añade con voz baja, parpadeo y mi sonrisa se desvanece, sabía que estaba triste por eso, quizás alguna idea equivocada cruzaba su mente, frunzo mi ceño, dejo el plato en la mesa y me acerco a ella. 

-Queria prepararte el desayuno- Digo colocando mis manos en sus brazos y dando una ligera caricia, ella eleva su mirada a la mía, parpadea y su mirada se dirige al desayuno, una sonrisa se dibuja en sus labios rosas, sus mejillas toman un poco de color, no puedo evitarlo, me inclino y beso sus labios lentamente. 

-No sabía que el agente Darren podía ser encantador- Murmura cuando nos separamos, sonrío y guiño mi ojo haciendo que ella sonría. 

-También conseguí esto- Digo extendiendo hacia ella la pildora, ella humedece sus labios, sonríe levemente y la toma. 

-La beberé ya mismo- Dice caminando hasta tomar un vaso de cristal y llenarlo con agua, en ese momento el agente Grey entra en la cocina, dirijo mi mirada hasta la de él, este le sonríe a Daniela. 

-¿Que ocurre?, ¿Te encuentras bien?- Pregunta de inmediato al ver que ella toma la pildora, cruzo mis brazos y me recargo en la pared cercana, todo mi buen humor se fue a la basura al ver al idiota de Grey acercarse a Daniela y mirarla preocupado, Daniela deja el vaso y le sonríe un poco nerviosa. 

-Estoy bien, solo me dolía un poco la cabeza- Responde con voz suave, reprimo una sonrisa al saber la verdadera razón, mi mirada no deja los movimientos de Daniela, ella siente mi mirada y da una mirada, sus mejillas se tornan rojizas, quizás recordando lo nuestro, humedezco mis labios y reprimo mi diversión. 

Mi móvil suena, frunzo mi ceño y lo busco, me enderezco al ver que es una llamada de Trey el esposo de mi hermana, contestó de inmediato con preocupación. 

-¿Está todo bien?- Pregunto rápido. 

-Será mejor que pongas tu trasero en el auto ya mismo, Hannah acaba de entrar en labor de parto- Dice Trey con voz agitada, mi cuerpo se congela de inmediato, nunca había entrado en shock hasta el día de hoy, solo podía imaginar a mi pequeña hermana asustada en la sala de emergencia -¡Maldición!, ¡Por un demonio Darren!, si te llame es porque necesito que alguien me calme a mi, no para que los dos entremos en panico al mismo tiempo- Eleva su voz alarmado, parpadeo y llevo mi mano a mi cabello. 

-Voy para allá- Es lo único que puedo decir en un susurro tembloroso. 

-¿Estas bien?- Pregunta la suave voz de Daniela acercándose a mi con evidente preocupación, trago con dificultad tomo una respiración profunda e intento calmarme. 

-Estoy bien, debo irme mi sobrina esta por nacer y yo debo estar allá- Murmuro aun aturdido, Daniela abre sus ojos, le doy una mirada al agente Grey, este me da una sonrisa de labios cerrados. 

-¿Necesitas que te lleve?, pareces asustado- Murmura sin poder ocultar su diversión, tenso mi mandíbula y lo ignoro, miro a Daniela. 

-Ve rápido, tu hermana te necesita- Dice sonriendo, no puedo evitar sonreír y asiento, trago con dificultad deseando que el agente Grey no estuviera presente para poder besarla, humedezco mis labios y sonrío levemente. 

Tomo una respiración profunda y me dirijo hacia la salida, frunzo levemente mi ceño al escuchar las palabras del agente Grey. 

-¿Acaso el te sonrío?- Pregunto confundido, intento no rodar mis ojos, escucho la dulce y suave risa de Daniela. 

...... 

-¿No es preciosa?- Pregunta Trey con adoración, ambos mirando a la pequeña bebé al otro lado del cristal, el parto se había complicado un poco, la bebé necesito oxígeno por lo tanto la enviaron a la sala de neonatología, estaría al menos dos días ahí, y ahora por el momento solo la podíamos ver a través del cristal. 

-Es hermosa, perfecta- Susurro mirando a la pequeña bebé, suspiro, la imagen de un bebé de Daniela y mío cruza mi mente, sonrío levemente. 

-Yo la hice- Murmura Trey con arrogancia arruinando el momento, elevo mi ceja y lo miro, el sonríe de medio lado y me mira -¿Que?, es la verdad-

-Mejor cierra la boca, si la bebé es hermosa es porque su madre es Hannah- Digo con burla, el cruza sus brazos y frunce su ceño, ruedo mis ojos y aparto mi mirada al ver su rostro arrogante. 

....... 

Miro la hora en mi reloj de mano, faltaban un par de horas para el amanecer, entro a la casa segura tratando de no hacer ruido, con cansancio me dirijo a la habitación de Daniela, tomo el pomo de la puerta y la giro, entro con cuidado en la oscura habitación, solo la pequeña luz de la lámpara iluminaba un poco, mi mirada se centra en Daniela en la cama, ella dormia abrazando un almohadón, su pequeño rostro relajado, sonrío. 

Quito el reloj de mi muñeca y lo coloco en la mesa cercana, me inclino y quito mis botas tratando de ser silencioso, los dejo a un lado y luego continuó con la camisa que llevo, observó con atención como Daniela se remueve dormida, ella frunce su ceño levemente y hace un ruido bajo como un quijido, quito mi pantalón quedando solo con ropa interior, me acerco hasta la cama y subo con cuidado, me acerco a Daniela y dejo un beso en su hombro desnudo, luego su cuello, mi mano se introduce en su blusa de dormir y acaricio su cintura. 

-Más vale que seas tu Darren, o voy a patearte el trasero- Murmura, sonrío, ella se gira y abre sus ojos, esos lindos ojos me miran de forma adormilada. 

-¿Quién más podría estar en tu habitación?- Pregunto elevando mi ceja, ella sonríe levemente, eleva su mano y da un aligera caricia cálida en mi mejilla. 

-Pensé que no vendrías- Susurra, ella se reincorpora y me mira atenta -¿Todo salio bien?- Pregunta ahora un poco más despierta, sonríe y asiento, ella se relaja. 

La observo unos segundos, Daniela era preciosa, y no solo su físico, toda ella era especial y había entendido eso, había entendido que no quería dejarla, que la quería conmigo, me inclino y uno mis labios con los suyos em un beso hambriento. 

-Oye, tengo sueño- Murmura con una sonrisa divertida bailando en sus labios, elevo mi ceño, la beso nuevamente y ella se acuesta lentamente, me coloco sobre, bajo mis besos por su cuello y un suspiro sale de sus labios, bajo hasta el inicio de sus pechos.

-¿Quieres dormir?- Pregunto elevando mi mirada hacia ella, ella sonríe y niega, sonrío con diversión, esta era una buena forma de comenzar un nuevo día. 

...... 

Todo había mejorado entre Daniela y yo, llevo la taza de café a mis labios y doy un sorbo, comparto una mirada cómplice con Daniela, el agente Grey ageno a lo que ocurre entre nosotros, ahora me sentía más confiado con lo que tenia con Daniela, había quedado claro que el agente Grey era solo un buen amigo. 

Mi sonrisa se borra al escuchar un fuerte estruendo en la puerta principal, todos nos levantamos de inmediato, tanto el agente Grey como yo tomamos nuestras armas y nos colocamos en posición de defensa, miro de inmediato a Daniela. 

-Mantente atrás de nosotros- Ordeno, ella me mira asustada, trago con dificultad, con cuidado me acerco a la puerta de la cocina. 

Varios hombres con trajes negros y mascaras irrumpen, los apunto con mi arma, pero ellos son más y todos apuntan hacia nosotros. 

-¡Bajen las armas ahora mismo!- Grita uno de ellos, trago con dificultad y me mantengo firme apuntando, uno de ellos camina hasta Daniela con confianza, observo como el agente Grey interviene y sin que ninguno lo espere uno de los hombres le dispara. 

El tiempo parece ir en cámara lenta, la bala impacta en el abdomen del agente Grey, este jadea y abre sus ojos, lo miro alarmado, Daniela grita, el gente Grey cae de rodillas colocando sus manos sobre la herida la cual comienza a brotar sangre, demasiada, el eleva su mirada sus ojos muestran miedo, parpadeo aún en shock, el agente Grey tose y sangre sale de su boca. 


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Nuevo capítulo 

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