Género: UE Universo Entrelazado.

Pareja: Shanks x Sakura.
Sakura Oni.

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Sakura siempre considero su vida normal, tenía un padre que la amaba y una madre que siempre la mimaba. No podía haber nada de malo con su familia ni con el lugar donde vivía. Vivía en Konoha, una isla apartada del mundo, los habitantes del lugar eran un caso muy extraño. Todos los habitantes de Konoha eran criaturas peculiares, habían Demonios zorros, Mitad lobo, Brujas, Vampiros, etc. Pero de entre todas las criaturas ahí habitaban se encontraba una que destacaba. Los Oni eran criaturas de lo más peculiares, destacaban principalmente en su fuerza, aunque también en su apariencia. Sakura y su familia pertenecían a esta especie. Sakura era una Oni de cabello rosa, contaba con cuatro cuernos, dos sobresaliendo de su frente y otros dos por detrás de sus orejas, sus ojos eran de un verde muy hermoso, además su esclerótica era negra y no blanca, como suele ser. Siempre vertía vestidos pomposos con volantes y encaje, muy a la época del siglo XIX.

Siempre pensó que si vida sería así, viviendo en aquella hermosa isla con todos sus coloridos habitantes, o fue así hasta que ocurrió eso. Los humanos habían descubierto su isla, hombre, mujeres, ancianos y niños fueron asesinados, y los pocos que sobrevivían fueron atrapados y vendidos en casas de subastas. Sakura fue una de los pocos sobrevivientes, la última de su especie. Fue vendida al mercado negro, paso de mano en mano hasta que un día, después de haber asesinado a su anterior dueño, unos piratas la llevaron al Archipiélago Shabaody. Ya estaba cansada, tanto mental como físicamente estaba cansada, ¿Así eran los humanos?, entonces que asco. Camino a paso triste al podio, fue presentada al público y vendida, no supo quién la compro, nuevamente su piel sería marcada. Pero antes de ser nuevamente puesta en la jaula en espera de su nuevo dueño algo ocurrió, una explosión sonó en todo el lugar, todos los presos se deshicieron de sus collares al igual que ella, tocó su cuello libre de aquel horrible aparato, respiro profundamente y corrió hacia la salida. Sus ojos picaban por las lágrimas, quería llorar pero primero tenía que ser libre. La luz dio contra su tés blanquecina, miró como enfrente de ella un montón de piratas peleaban contra marinos. La habían tratado como una esclava por cinco años, está vez verían de lo que era capaz, pagarían por haberla encerrado tanto tiempo.

Apretó con fuerza sus puños y el caos comenzó, ese día demostró la fuerza y habilidad que habían sido reprimidas por cinco años, destrozo a casa humano que ahí se encontraba, tanto a marinos como piratas. Sus nudillos estaban llenos de sangre, respiro profundamente y luego exhaló, esa si era una buena forma de tranquilizarse. Ahora la cuestión era: ¿Que haría de ahora en adelante?, Tal vez regresaría a su isla, aunque ya no quedaba nada de ella y los pocos habitantes que quedaban probablemente ya estaban muertos, bueno, lo mejor era irse de aquella isla lo antes posible.

Así fue como Sakura aprendió que no todo era tan fácil, y que una simple acción como irte de una isla podía ser tan difícil. Entonces tuvo que ocultarse, en varios barcos mercantiles, hasta una próxima isla, ahí sabría lo que haría próximamente.

Lo malo fue que todo en el maldito mundo tenía un costo. Así fue como llego a aquel lugar, bailando para poder ganar dinero y solventar sus gastos, lo bueno es que podía golpear a quienes se propasaban. El club en el que trabajaba admitía a chicas de distintas especies, un cóctel variado de muy bellas mujeres, pero Sakura era la que más destacaba, además de se una Oni tenía una belleza angelical. Eso fue la que la llevo a estar en esa situación, ¿Valía la pena arriesgarse por unas cuantas monedas?, Si si eran de oro, ella no era un Duende irlandés pero amaba mucho el dinero. Bailó sensualmente para ese hombre y ocasionalmente lo tocaba o se sentaba en su regazo. Pero el no la veía como los otros hombres, no la veía con lujuria, el la veía con fascinación, principalmente a sus cuernos. La tomo con su única mano de la cintura y la colocó debajo de el en la cama, Sakura se sonrojo al ver cómo ese pelirrojo la tocaba en los cuernos...

—Eres una Oni..

—¡Y tu eres un manco de cabello rojo, ahora apartarte!.. –Sakura se sonrojo y aparto al hombre con su fuerza sobrehumana–

—Oe no te enojes.. –dijo risueño mostrándole un doblón de oro, los ojos de Sakura brillaron y se sentó en el regazo del hombre–

—¿Que quieres?, ¿Es un fetiche extraño lo que buscas?.. –dijo con las mejillas infladas, luego guardo el oro en su sostén. El pelirrojo negó con diversión–

Sakura estaba muy confundida, realmente confundida. Por lo general los hombres solo la buscaban para satisfacer sus necesidades y se iban, ninguno jugaba con ella o tocaba sus cuernos...

—Únete a mi tripulación..

Y fue en ese instante cuando todo el sistema de Sakura se desenchufo, ese humano si que era extraño.

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Más de medio año, había pasado más de medio año de haber subido a aquella embarcación, ahora era una tripulante del Yonkou Akagami no Shanks. La verdad es que nunca se planteo ser una pirata, aunque tenía el talento necesario, era muy fuerte aún sin usar Haki, sus instintos de guerrera nunca se habían esfumado, es más, le encantaba tener una que otra batalla amistosa con su capitán. Además ya no se sentía como una esclava, podía ser libre en el mar, aquellos cinco años que fue prisionera se esfumaron en aquellos pocos meses con sus nuevos Nakama. Los chicos eran divertidos y nunca la trataron distinto por ser una mujer o por ser un Oni. Entonces cuando ya estuvo muy unida a sus Nakama y su capitán, tuvo que ser valiente y contarles las cosas que le habían sucedido antes de estar en aquel burdel. Fue paciente y muy directa, les contó cómo habían asesinado a sus amigos y a sus padres, como la vendieron en el mercado negro y como paso de mano en mano siendo lastimada, violada y humillada. Cinco años de maltratos no se iban de la noche a la mañana, pero con sus Nakama fue muy fácil, ellos le dieron todo su apoyo. Aquella noche lloro en el pecho de su capitán y al lado de todos sus nakama. Shanks quería ir y asesinar a esas personas que lastimaron a su preciada Sakura, pensó lo mismo que todos sus subordinados, esto no se quedaría así sin que no hubiera justicia. Y la justicia fue muy placentera, al menos para el capitán pues sentía un aprecio extremo por su subordinada.

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—Sakura.. –dijo risueño su capitán abrazándola por la espalda. Sakura río con cariño, siempre era muy lindo sentir el afecto que sus nakama's le daban–

Pero lo que ella no sabía era que aquel "cariño" que le daba su capitán no era el tipo de cariño que se le da a un amigo o a un familiar. No, el cariño que le daba su capitán era más íntimo, pero al parecer ella no entendía sus indirectas. Aquello le frustraba mucho a Shanks, siempre la abrazaba, la acariciaba y hasta se atrevía a dejar pequeños besos en su cuello o en sus mejillas, pero ella no entendía nada...

—M-Me hace cosquillas capitán.. –dijo entre risas la pelirrosa. A lo lejos el resto de la tripulación suspiraron, ¿Cómo era posible que no entendía las indirectas bien directas del pelirrojo?, En fin, prefirieron continuar con sus cosas y dejar a esos dos en paz– ..jajaja..

Y del abrazo paso a dejar pequeños besitos sobre su cuello, aquel que quería morder para dejar en claro que Sakura era su mujer, pero no podía, o al menos no por ahora...

—Sha-Shanks para.. –se volteó de frente a el y lo sostuvo de los hombros para que parara– ..m-me voy a hacer p-pipi si sigues así jajaja..

—¿Por qué me torturas así?.. –la abrazo y ocultó su cabeza en la curva de su cuello. Sakura además de sentir la picazón de su barba sintió el calor que el emanaba, era muy cálido–

—¿A qué te refieres?.. –preguntó confundida. Shanks sopló sobre su cuello, causando así que Sakura se estremeciera–

—A nada.. vamos, pronto será la hora de cenar.. –dijo sonriente apartándose de la pelirrosa y retirándose del lugar–

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Miró por décima ver su reflejo en el espejo, peino sus mechones rosados y luego colocó un poco de crema para el cabello. En si Sakura era muy linda, era un poco baja, tenía una cintura pequeña y unas caderas anchas, su busto era pequeño pero eso no le importaba, como Oni tener algo grande que te dificulte a la hora de combatir era una desventaja muy grande, tal vez sus ojos eran su defecto más grande, o al menos así lo sentía ella, ese color negro que rodeaba su iris era poco atrayente para machos humanos. Pensó en su capitán y algunos de su tripulación, rápido deshizo su idea, no podía interesarse en ninguno de sus nakama's. Aunque últimamente Shanks se comportaba más cariñoso y posesivo con ella, Sakura no entendía los rituales de cortejo de los humanos por eso no le hacía mucho caso al pelirrojo, si fuera un Oni entonces tendría combates con ella o le llevaría trofeos de caza, o ya en casos más extremos la arrastraría a su casa. En fin, ya con la cabeza más despejada salió de su habitación y camino afuera para disfrutar una deliciosa carne asada.

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Ya no se les hacía extraño ver a su capitán con la pelirrosa sobre su regazo, ya era tan natural como verlo acariciarla y besando su cuello, era asquerosamente tierno.

Todos disfrutaron de la cena y cayeron inconcientes por el sake. Todos a excepción del capitán y la pelirrosa, uno porque era un bebedor experto y la otra porque el alcohol no me hacía efecto. Ambos se encontraban en la popa del barco viendo las olas pasar y las estrellas tintinear en el cielo. Shanks estaba abrazándola por la espalda y dejaba pequeños besos sobre su piel lechosa, Sakura reía al sentir sus caricias, ella también quería acariciarlo pero sentía que no estaba bien...

—Pa-Para jajaja por favor, para Shanks.. –dijo entre risas volteandose de frente. El pelirrojo la tomo de la cintura y beso más su cuello, guió sus manos un poco más hacia abajo y la tomo de sus muslos para después sentarla en la barandilla–

—Me dejas probar tus labios..

—¿Probar?.. –dijo confundida–

Shanks no resistió más y por fin la beso, Haaa~ sus labios eran tan dulces, tenían un toque de bálsamo sabor cereza y a ese sake que tanto adoraba. Sakura no sabía muy bien como corresponderle, ese era su primer beso, o al menos así lo sentía ella...

—¿Por qué?.. –preguntó confundida. Shanks colocó su cabeza sobre su cuello–

—Por qué me gustas.. –admitió dejando un pequeño beso sobre su piel–

—¿Que es "gustas"?.. –Shanks la miró como si le hubiera salido otra cabeza–

—No sabes que es gustarse??

—No, quieres aparearte conmigo??.. los Oni no entendemos esas cosas, o al menos unos pocos.. papá y mamá se querían pero nunca entendí que era eso llamado "amor"..

—Entonces quiero cortejarte..

—¿Cortejarme?.. entonces.. ¿Quieres preñarme? ¿Quieres tener crías conmigo?.. –dijo con la boca abierta impresionada–

—¡¿Que?!.. ¡No! Bueno, tal vez luego.. no entiendo tus costumbres.. –dijo decaído sobre su cuello. Sakura río y acarició su melena roja–

—Jajaja Me encantaría que me preñaras.. –dijo feliz acariciando más su cabello–

—¡Pero no lo digas así!

—¿Por qué?.. –dijo tierna, Shanks gruñó– ..los Oni no entendemos el amor, solo sabemos combatir.. cuando tenemos relaciones sexuales solo lo hacemos para desahogarnos, pero nada relacionado con el amor.. y cuando tenemos crías solo lo hacemos para continuar con el linaje..

—Pero tus padres..

—Mis padres se amaban.. no entiendo que es eso pero cada vez que los veía siempre estaban juntos;como tú y yo, siempre se acariciaban como tú cuando estás conmigo y se besaban.. así.. –lo tomo de la camisa y lo atrajo a sus labios, nuevamente se besaron, está vez un poco más con confianza– ..¿Esto es amor?..

—Humm un poco.. pero vamos por el camino correcto..

Sakura lo abrazo y colocó su cabeza sobre sus pechos. Ella no entendía muchas cosas pues era una Oni, el era humano y quería intentar que ella lo amara.

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Espero que les haya gustado 🌸